DS(P) nº 2/11 del 11/4/2022









Orden del Día:




1. Debate de Investidura del Candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.


Sumario:






 ** Se inicia la sesión a las doce horas.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, abre la sesión y da lectura al único punto del orden dl día.

 ** Primer punto del orden del día. SI/000001.

 ** El secretario, Sr. Moreno Castrillo, da lectura a la propuesta de candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** Intervención del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León, para exponer su Programa de Gobierno.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, suspende la sesión.

 ** Se suspende la sesión a las trece horas cinco minutos y se reanuda a las dieciséis horas.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, reanuda la sesión, anuncia el momento de la votación de investidura y abre un turno de intervenciones.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Socialista, interviene el procurador Sr. Tudanca Fernández.

 ** Contestación del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En turno de réplica, interviene el procurador Sr. Tudanca Fernández.

 ** En turno de dúplica, interviene el Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En representación del Grupo Parlamentario UPL-Soria ¡Ya!, interviene el procurador Sr. Santos Reyero.

 ** En representación del Grupo Parlamentario UPL-Soria ¡Ya!, interviene el procurador Sr. Ceña Tutor.

 ** Contestación del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En turno de réplica, interviene el procurador Sr. Santos Reyero.

 ** En turno de réplica, interviene el procurador Sr. Ceña Tutor.

 ** En turno de dúplica, interviene el Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Mixto, interviene el procurador Sr. Fernández Santos.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Mixto, interviene el procurador Sr. Igea Arisqueta.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Mixto, interviene el procurador Sr. Pascual Muñoz.

 ** Contestación del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En turno de réplica, interviene el procurador Sr. Fernández Santos.

 ** En turno de réplica, interviene el Sr. Igea Arisqueta.

 ** En turno de réplica, interviene el procurador Sr. Pascual Muñoz.

 ** En turno de dúplica, interviene el Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Vox, interviene el Sr. García-Gallardo Frings.

 ** Contestación del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Popular, interviene el procurador Sr. De la Hoz Quintano.

 ** Contestación del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** Votación SI/000001.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, somete a votación la investidura del candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, comunica el resultado de la votación. Queda otorgada la confianza de la Cámara al candidato Sr. Fernández Mañueco por mayoría absoluta de los votos emitidos.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, levanta la sesión.

 ** Se levanta la sesión a las veintiuna horas treinta y cinco minutos.




Texto:

[Se inicia la sesión a las doce horas].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Se abre la sesión.

SI/000001

Punto único del orden del día: Debate de Investidura del Candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

Ruego al señor secretario proceda a la lectura de la propuesta de candidato formulada por esta Presidencia a la Cámara.


EL SECRETARIO (SEÑOR MORENO CASTRILLO):

"Esta Presidencia, de conformidad con lo establecido en el Artículo 26 del Estatuto de Autonomía de Castilla y León y en el Artículo 135 del Reglamento de la Cámara, tras las preceptivas consultas con los partidos, grupos políticos y coaliciones electorales con representación parlamentaria, tiene el honor de proponer en el Pleno de las Cortes de Castilla y León como candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León al excelentísimo señor procurador don Alfonso Fernández Mañueco. De conformidad con el Artículo 64 del Reglamento, se ordena su publicación en el Boletín Oficial de las Cortes de Castilla y León. En la sede de las Cortes de Castilla y León, a dieciocho de marzo de dos mil veintidós. El presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán Fernández".


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Tiene la palabra don Alfonso Fernández Mañueco para exponer el Programa de Gobierno que pretende formar y solicitar la confianza de las Cortes de Castilla y León. [Aplausos].


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Señor presidente de las Cortes de Castilla y León, señoras y señores procuradores del Partido Socialista Obrero Español, de Vox, de la Unión del Pueblo Leonés, de Soria ¡Ya!, de Unidas Podemos, de Ciudadanos, Por Ávila y Partido Popular de Castilla y León. Autoridades que hoy nos acompañan, querida familia, queridos amigos, leoneses y castellanos, castellanos y leoneses que nos siguen a través de los medios de comunicación y de las redes sociales.

Comparezco ante estas Cortes para presentar el Programa de Gobierno que pretendo impulsar en esta undécima legislatura y solicitar mi investidura como presidente de la Junta de Castilla y León.

La voluntad expresada por las personas de Castilla y León en las elecciones autonómicas del pasado trece de febrero ha conformado una Cámara muy renovada, la más plural de nuestra historia, con representación de hasta ocho formaciones políticas.

Como candidato del partido más votado, asumí el mandato de las urnas y la responsabilidad de alcanzar un acuerdo de Gobierno.

Inicié los contactos con las formaciones representadas en esta Cámara, pensando siempre en el interés de las personas de Castilla y León y con unas referencias esenciales que paso a relatar:

Primero, reflejar la voluntad de los castellanos y leoneses que expresaron democráticamente en las urnas; en segundo lugar, buscar la estabilidad para toda la legislatura, excluyendo cualquier posibilidad de una repetición electoral; en tercer lugar, garantizar, como siempre, los principios de la Constitución Española y del Estatuto de Autonomía de Castilla y León; en cuarto lugar, asumir el programa de mi partido, en cuanto fue la opción más votada, como base de la legislatura; en quinto lugar, hablar de proyectos y actuaciones, no de cuotas de poder o repartos de sillones; en sexto lugar, actuar con transparencia, dando cumplida cuenta de los pasos realizados; y en séptimo lugar, asegurar un gobierno fuerte, sólido y eficaz para los cuatro próximos años. [Aplausos].

Algunos se autoexcluyeron de inmediato -lo que lamento profundamente-; otros plantearon exigencias difíciles de aceptar desde una visión de Comunidad -aunque agradezco su predisposición al acuerdo-, estoy seguro de que alcanzaremos muchos acuerdos a lo largo de la legislatura.

Finalmente, como es sabido, esta voluntad de diálogo cristalizó el pasado diez de marzo en un acuerdo de legislatura suscrito entre el Partido Popular y el partido VOX, un acuerdo del que dimos cuenta de forma inmediata en cuanto se alcanzó con absoluta transparencia. Quiero por tanto expresar a este partido, personalizado en Juan García-Gallardo, mi reconocimiento por llegar a ese acuerdo viable, su voluntad de llegar a un acuerdo viable y firme para toda la legislatura.

Somos dos partidos distintos, cada uno tiene legítimas posiciones, y además las personas de Castilla y León conocen sobradamente cuál son nuestras posiciones; pero hemos sabido dar un ejemplo de generosidad, de responsabilidad y de capacidad de acuerdo: hablando, negociando, buscando puntos de acuerdo cuando era preciso para alcanzar los consensos necesarios.

Todos debemos felicitarnos por el resultado, porque es un acuerdo... [aplausos] ... es un acuerdo que respeta plenamente los principios que asumí al comenzar este proceso de diálogo y de negociación que antes les expuse. También es un acuerdo que refleja la voluntad ampliamente mayoritaria expresada por los castellanos y leoneses en su última cita electoral. Es un acuerdo que plasma la única alternativa viable para evitar una repetición electoral que nadie quería. Es un acuerdo que garantiza cuatro años de estabilidad. Es un acuerdo beneficioso para mejorar nuestra calidad democrática. Y es, en definitiva, un acuerdo necesario para mejorar el futuro de nuestra tierra.

Servirá para que al próximo gobierno de Castilla y León, si esta Cámara me otorga su confianza, se le juzgue por sus hechos y por sus resultados. Tenemos mucho que construir y ser valorado por los actos con justicia, sin prejuicios y sin ataques preconcebidos.

El acuerdo traza el camino para gestionar de forma eficaz los intereses de las personas de Castilla y León porque va a impulsar el futuro de Castilla y León con igualdad; porque apuesta por una importante mejora de nuestros servicios públicos como pilar esencial de la cohesión social y también de la vertebración territorial; porque va a impulsar el crecimiento económico y la creación de empleo, la industrialización, el desarrollo rural, el apoyo a la actividad agrícola y ganadera y el aprovechamiento de nuestros recursos naturales; porque apuesta por avanzar en la recuperación con impuestos bajos, con buena y transparente gestión de los fondos europeos y también con la modernización de las infraestructuras de comunicación y de transporte; y porque quiere desarrollar una Administración eficaz, cercana, transparente, con reducción de trámites en la relación con las empresas y con los ciudadanos, y también racionalizar el gasto burocrático, la transparencia y la rendición de cuentas serán denominador común de nuestra acción de gobierno; porque quieren intensificar la colaboración este acuerdo con la Administración del Estado, pero también, a la vez, con los municipios y las provincias; y porque va a reforzar el papel de Castilla y León en España y hacernos crecer en la Unión Europea. Porque, en suma, busca el progreso y el desarrollo social, cultural y económico de Castilla y León.

Señorías, asumo con plena responsabilidad el encargo de cumplir todos estos contenidos que adelantaré más adelante. Con un gobierno fuerte, con un gobierno solvente, con personas experimentadas, de composición plural, sí, pero también con voz única que trabaje como una piña al servicio de esta tierra. Un gobierno con las ideas claras y también un gobierno sin complejos, que sepa dónde estamos y dónde queremos llegar, que sepa y que asuma con decisión el futuro y los retos que tendremos que afrontar.

El Gobierno, como recoge el Acuerdo de Legislatura, tendrá, además del presidente, un vicepresidente y diez Consejerías. Se mantendrán la mayoría de las Consejerías; la de Transparencia se incorporará a la Consejería de Presidencia y la de Fomento y Medio Ambiente se divide en dos, por un lado, Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, y, por otro lado, Movilidad y Transformación Digital.

Es un Gobierno, señorías, que pretendo dirigir ejerciendo una serie de principios que han inspirado toda mi vida pública y, por supuesto, principios a los que voy a seguir siendo fiel. [Aplausos].

Por un lado... Por un lado, ante todo está la ilusión de trabajar sin descanso por mi tierra, de aprender de mis aciertos y de mis errores, para seguir construyendo entre todos este gran proyecto de vida en común que es Castilla y León. Para mí, Castilla y León es lo primero, por encima de todo, por encima de todos. Castilla y León es la pasión que me alienta cada día, lo que hace que dé lo mejor de mí, y también lo que nos exige lo mejor a todos los que aquí estamos.

Ilusión con humildad también, asumiendo que nadie puede conseguirlo todo sin el apoyo ni el concurso de los demás. Y eso exige también realismo, tanto para asumir los grandes retos a los que se enfrenta Castilla y León -que son muchos- como también para reconocer todas sus fortalezas y, por supuesto, las capacidades -que son innumerables-.

Los problemas de todos y cada uno de los castellanos y leoneses son y serán también mis problemas y los problemas de mi Gobierno. Sería utópico y pretencioso creer que podemos solucionarlos todos; pero garantizo que no faltará cercanía ni voluntad realista para hacerlo.

Y el realismo lleva al rigor, para escuchar, para conocer, para estudiar, para responder a cada reto o problema, sin improvisar o frivolizar con las soluciones; algo que se consigue mejor desde la integración, para sumar o, mejor, multiplicar antes que restar o dividir.

Y como instrumento para ello, el diálogo. Diálogo como forma básica para entender la política, como un rasgo propio de Castilla y León que se viene reflejando de manera repetida, con un diálogo político en las grandes cuestiones de Comunidad, que hemos culminado con éxito en muchas ocasiones. Deseo impulsarlo, deseo mantenerlo en esta legislatura, apelando a la responsabilidad de todos los procuradores que la integramos, pues, como señala nuestro Estatuto de Autonomía, todos y cada uno de los que aquí estamos representamos a la totalidad del pueblo de Castilla y León y, por tanto, a cada uno de nosotros nos concierne su futuro.

También está el diálogo social con empresarios y sindicatos, que es una de las señas de identidad más características y envidiadas de Castilla y León, y es mi firme voluntad que siga siéndolo: seguiré trabajando para alcanzar nuevos acuerdos, porque creo en el diálogo social como fórmula para avanzar con estabilidad y con confianza en el ámbito económico, social y laboral. [Aplausos].

También... también continuaremos con el diálogo con los sectores productivos, con las organizaciones agrarias, con los autónomos, los representantes de actividades como las forestales, de transporte, comercio, cultura o turismo, entre otras; el dialogo... el diálogo civil con todo el tejido asociativo y el tercer sector; y con el voluntariado y, por supuesto, los representantes de los servicios públicos; y el diálogo territorial con nuestras entidades locales, con otras Comunidades Autónomas, buscando mejorar el bienestar de las personas con servicios de más calidad.

Avanzaremos en la renovación de los convenios de colaboración con las Comunidades vecinas, como el ya negociado del País Vasco, o los que se están negociando de Galicia y Madrid, con los trabajos en marcha. Y sin olvidar, por supuesto, el diálogo institucional con el Estado y sus instituciones por encima de las ideologías, siempre para beneficio de Castilla y León y de España.

Señorías, quiero asumir este nuevo tiempo desde la ambición para Castilla y León. Creo firmemente en Castilla y León; una Comunidad madura, una Comunidad viva, dinámica, cada vez más abierta y emprendedora. Creo que las enormes posibilidades de esta tierra y la gran capacidad que tiene para avanzar desde la sólida base de nuestra cultura, nuestro talento y también nuestra historia. Por ello ambiciono la mejor Castilla y León. Les garantizo a todos ustedes que lo mejor está por llegar, y llegará de la mano de mi Gobierno. [Aplausos].

Una Comunidad... Una Comunidad al servicio de las personas que viven aquí, con más oportunidades, más bienestar, más igualdad, más solidaridad y más calidad de vida para todos. Una Comunidad también rica en valores, tolerante, construida desde la prudencia y el rigor -lo que nos caracteriza-; pero también sin renunciar nunca a la ambición, a la capacidad de transformación, afirmando por ello, de manera rotunda, que la España actual no se puede entender sin Castilla y León, sin toda la aportación histórica, cultural, humana y social de nuestra tierra. Así, el orgullo de ser quienes somos, el honor de ser de esta tierra tiene que ser impulso y motor de nuestro crecimiento social y económico. De una gran marca de calidad que refuerce nuestro protagonismo en España y en Europa. Y es que, desde luego, tampoco podemos entender a Castilla y León sin ambas. No podemos entender a Castilla y León sin España como referente. [Aplausos].

Nuestra nación, única y varias veces centenaria, nos convoca a todos y agrupa desde su rica diversidad y pluralidad, y a la que tanto hemos contribuido. Somos castellanos y leoneses, que es nuestra forma de ser españoles; y también estamos profundamente orgullosos de ello. Por eso, cualquiera que atente contra España, contra su integridad, contra su futuro, también atenta contra Castilla y León. [Aplausos]. Como siempre... como siempre, estaremos dispuestos a defender a España en todos sus ámbitos y dimensiones. También, por eso, queremos ser parte muy activa de nuestra nación, ocupando el papel que merecemos por nuestra historia, pero también por el protagonismo actual, con todo lo que ello implica, ni más ni menos.

Y, desde España, integrados de forma activa en una Europa a la que históricamente pertenecemos y a la que tanto hemos aportado. La Europa de la que recibimos recursos, solidaridad y garantías, como vemos lo que ocurre con las vacunas contra la COVID o los fondos para la recuperación; la que ha mostrado también su solidaridad y su unidad ante la guerra de Ucrania; la que recibe mayoritariamente nuestros productos; la que posibilita una política agraria común que protege y ayuda a nuestros agricultores y garantiza la seguridad alimentaria. Por ello, Europa es y seguirá siendo nuestro espacio de convivencia, de progreso y de entendimiento. [Aplausos].

Señor presidente... señor presidente, señoras y señores procuradores, en este marco nos vamos a tener que enfrentar a los retos que se nos presentan en esta undécima legislatura. Vivimos momentos, desgraciadamente, históricos, con cambios e incertidumbres globales que afectan de lleno a nuestra tierra. Estamos consiguiendo superar entre todos y con mucho esfuerzo una cruel pandemia, que comenzó ahora hace dos años, que ha causado mucho dolor personal, sobre todo por los fallecidos, por los que ya no están con nosotros. A ellos les enviamos nuestra emocionado recuerdo y toda nuestra solidaridad y afecto para sus familias. Como también mandamos nuestra solidaridad y todo nuestro apoyo a todos los que han sufrido esta pandemia, trabajando, en su salud, en sus trabajos, en sus negocios, en sus proyectos de vida.

Como es sabido, la lucha sanitaria, social y económica contra la COVID-19 centró gran parte de los esfuerzos más importantes del Gobierno de Castilla y León durante la pasada legislatura; con nuestros aciertos, y también con nuestros errores, actuamos ante esta emergencia sanitaria tomando decisiones urgentes, complejas y a veces muy duras, pero siempre pensando en el interés general. Acaba de... acabar de superar sus consecuencias es una de las encomiendas principales que le espera al nuevo Gobierno de la Comunidad. Porque la pandemia ha evidenciado carencias que nos muestran caminos a seguir, como la de contar con más y mejores servicios públicos, con nuevos modelos de gestión y con más medios para sostenerlo; sin duda, un complejo reto.

La Unión Europea nos está proporcionando importantes recursos para ello. Defender hasta el último euro que corresponda a Castilla y León y utilizarlo como efectivo motor de cambio es otra tarea que nos espera. Ya empezamos... [aplausos] ... ya empezamos a ver resultados esperanzadores en el ámbito económico. Marzo acabó con una cifra de parados que se había reducido en un 24 % con respecto al mes del año dos mil veintiuno, siendo la más baja de los últimos 14 años, y con un paro juvenil situado por primera vez por debajo de las 10.000 personas, alcanzando la cifra más baja de jóvenes desempleados de toda la serie histórica.

Asimismo, nuestra economía creció un 5,5 % en el dos mil veintiuno, tras la caída del 7,9 registrada en el dos mil veinte; lo que supone recuperar en apenas un año el 65 % de los niveles que tenía nuestra economía antes de la pandemia.

Sin embargo, Castilla y León, como España y el resto de Europa, afrontan unas perspectivas económicas muy preocupantes. Los costes energéticos disparados desde hace meses afectan a todos los sectores económicos, a una inflación elevadísima, que no conocíamos desde hacía décadas. Y a ello se añaden cuestiones como la falta de suministros de algunos productos esenciales en el ámbito agrario, minerales también, y determinados elementos básicos para la producción industrial vinculada a la construcción, a la mejora de infraestructuras y al sector de la automoción, por poner tan solo algunos ejemplos.

Esta situación se ha agravado con la injustificable invasión de Ucrania por parte de un tirano criminal que nos plantea un escenario, desde luego, inesperado y altamente incierto. Desde aquí enviamos al pueblo ucraniano una... abrazo fraternal y toda nuestra solidaridad, la de toda Castilla y León. [Aplausos]. [Aplausos del orador].

Como resultado de todo ello, aumentan los costes para los sectores económicos, para los sectores productivos, se reduce el poder adquisitivo de las personas y de las familias. La inflación, como saben, es ese impuesto silencioso hacia las personas más vulnerables, así como hacia las clases medias y trabajadoras. El Gobierno de Castilla y León viene adoptando medidas desde hace tiempo: hemos hecho reformas estructurales y una política energética orientada a reducir la dependencia del exterior; somos líderes en renovables, con un 89 % de la electricidad producida de origen verde; hemos hecho una política de apoyo a particulares, empresas, entidades y Administraciones, con 38 millones de euros en incentivos para fomentar el autoconsumo y también el almacenamiento de la energía.

Y hemos hecho una política social con medidas contra la pobreza energética: en primer lugar, con la ayuda extraordinaria de 130 euros para 45.000 familias vulnerables; en segundo lugar, incrementamos las ayudas de emergencia social a través de las entidades locales: 4.000.000 el año pasado, 4.000.000 este año; en tercer lugar, reforzamos los convenios con las empresas suministradoras para evitar cortes por impagos a familias con dificultades; y, en cuarto lugar, también hemos incrementado las prestaciones económicas a las personas dependientes.

Y dentro de nuestras competencias, llegaremos más lejos: vamos a aprobar un documento de iniciativas de respuesta ante el agravamiento de la situación económica con una batería de medidas por importe de más de 400 millones de euros.

Entre otras: medidas de competitividad energética para aligerar la factura de familias y de empresas; en segundo lugar, actuaciones de financiación para las empresas directamente afectadas por el conflicto de Ucrania; en tercer lugar, medidas para agricultores y ganaderos, incluyendo ayudas directas, por un lado, a los ganaderos, para aliviar el incremento de sus costes. También iniciativas para el sector del transporte para mejorar la financiación de las empresas y abaratar las tarifas de los viajeros; actuaciones de eficiencia y ahorro energético en la Administración autonómica; ayudas a las familias más vulnerables, incluyendo más financiación para las ayudas de emergencia antes citadas y la agilización del bono térmico a sus 83.000 beneficiarios; aumento de las ayudas a los pacientes que tienen que desplazarse, de las indemnizaciones por razón del servicio de los empleados públicos; iniciativas para compensar el incremento de los costes en los contratos del sector público. Y todo ello se acompañará con actuaciones en la reprogramación y el refuerzo de los fondos europeos para orientarlos a las prioridades actuales.

Y también queremos hacer peticiones de calado al Gobierno de España: creación de un fondo de ayuda a los sectores más afectados con los remanentes de las ayudas empresariales con motivo de la pandemia; y creación de un fondo extraordinario para los servicios públicos para sufragar la atención de los refugiados ucranianos, que en principio debería costear la Unión Europea; y en tercer lugar, la reducción de impuestos. Un IVA superreducido para electricidad y gas, y una reducción excepcional del IVA de los combustibles; y no aplicación de la subida fiscal prevista por el Gobierno. A esta medida también contribuiríamos las Autonomías, pues hay que recordar que gran parte de la recaudación corresponde a los territorios.

Estaremos pendientes de la aplicación y de los resultados de las medidas aprobadas por el Gobierno de España. Nos hubiese gustado que se hubiese incluido una bajada de impuestos, como se acordó en la Conferencia de Presidentes Autonómicos de La Palma. Mi Gobierno sí dará el paso: la bajada prevista del impuesto de la renta de las personas físicas para esta legislatura la vamos a efectuar este año. [Aplausos]. Iniciaremos... iniciaremos inmediatamente los trámites del proyecto de ley para rebajar el IRPF a todos los contribuyentes en el primer tramo del impuesto.

Señorías, afrontar un escenario tan complejo para empresas y trabajadores nos exige, por un lado, ideas claras y, por otro lado, determinación. Y les garantizo que el Gobierno que lideraré, si ustedes me otorgan su confianza, tomará medidas contundentes y sin complejos para mejorar la vida de los ciudadanos en Castilla y León. Les garantizo una auténtica revolución fiscal: la mayor bajada de impuestos de la historia de Castilla y León tendrá lugar esta legislatura, especialmente en el mundo rural.

Les garantizo también avances de vanguardia en la protección social, con servicios sociales más personalizados, especialmente para las personas mayores y las personas con discapacidad.

Les garantizo también una inversión sin precedentes en políticas de familia y de natalidad, para que todas las personas puedan desarrollar su proyecto de vida en nuestra Comunidad, luchar contra la despoblación y afrontar el reto demográfico.

Les garantizo un apoyo decidido a nuestro mundo rural, del que estamos especialmente orgullosos. También de nuestros agricultores y ganaderos, que trabajan de sol a sol para que todos podamos disfrutar de una alimentación de calidad. Estamos... [Aplausos]. Estamos en un momento decisivo en la transformación de nuestro medio rural y mi Gobierno siempre estará pendiente a las reclamaciones justas que demandan nuestros agricultores y ganaderos.

No pretendo ni quiero hacer o escribir la historia, antes al contrario: quiero que sean los castellanos y leoneses los que lo hagan, como siempre lo han hecho, levantando esta Comunidad con sus manos para orgullo de todos los que nos encontramos hoy aquí.

Tenemos grandes retos por delante que debemos abordar, siendo también conscientes de nuestros propios recursos y capacidades. Somos, por ejemplo, la Comunidad que cuenta con el mayor patrimonio cultural y natural de toda España, que nos define por un lado como pueblo, y también son claros instrumentos de futuro; que ofrece a quienes viven en ella la mejor educación de toda España, a los servicios públicos de mayor calidad, todos ellos reconocidos de manera objetiva.

Somos una Comunidad que protege, que atiende a las personas que más lo necesitan, y que siempre tiene presentes a las personas mayores, a las personas con discapacidad y a los colectivos más vulnerables.

Somos... [Aplausos]. Somos también una Comunidad más industrializada que la media, hay que recordarlo. A la cabeza de España en sectores como la automoción como distintas producciones agropecuarias o en energías renovables, por poner algunos ejemplos. Contamos en otras muchas industrias punteras: en ciberseguridad, biotecnología, sector aeronáutico, sector farmacéutico y químico, y también en la industria de agroalimentación. Ofrecemos un mercado laboral dinámico y la Formación Profesional es de calidad, que permite al 80 % de sus estudiantes encontrar trabajo, incluso antes de concluir sus estudios.

Somos también líderes en turismo rural y somos referentes en turismo interior y de calidad.

Hemos conseguido un elevado nivel de paz y diálogo social y económico, hasta constituirlo en una seña de identidad de nuestra tierra.

El objetivo esencial de mi Gobierno, si cuento con su confianza, será orientar todos estos activos para poder conseguir que estos recursos permitan la transformación de nuestra tierra y garantizar nuestro futuro, siguiendo para ello dos grandes ejes de actuación: la modernización, por un lado, y la cohesión, por otro.

La modernización para llevar a Castilla y León hacia ese futuro que acabo de describir, avanzando en un proceso que ya emprendimos en la legislatura anterior y que comprende todos nuestros sectores económicos y sociales, poniendo lo mejor de la tecnología al servicio de las personas; utilizándolo, por ejemplo, en la teleasistencia avanzada para nuestros mayores y para las personas dependientes, utilizándolo también para el transporte a la demanda en el medio rural.

También la tecnología más avanzada de Europa al servicio del campo, y con importantes labores de investigación, innovación y agrotecnología para hacer de nuestros productos una referencia en el ámbito nacional e internacional. Impulsaremos un plan de la agroindustria de Castilla y León con nuevas líneas de ayudas para su crecimiento y modernización. Promoveremos una declaración conjunta en el marco estable con todos los representantes de la cadena alimentaria para mejorar el equilibrio entre los distintos eslabones. Aprobaremos una ley de desarrollo y competitividad rural, con medidas de apoyo a la actividad productiva, que mejore el acceso a internet y, también, algo esencial, que garantice los servicios públicos a las personas que viven en el medio rural.

Trabajaremos para conseguir una agricultura moderna y avanzada, que aproveche al máximo las ayudas de la nueva Política Agraria Común: hemos luchado de la mano de las organizaciones agrarias y las cooperativas agrarias para conseguir la mejor Política Agraria Común para Castilla y León y seguiremos haciéndolo. Facilitaremos la gestión de las ayudas de la PAC con el compromiso de pagar en el año, como mínimo, el 90 %. También defenderemos una flexibilización para responder a una nueva situación de los mercados por la invasión rusa de Ucrania.

De manera particular, instaremos al Gobierno de la Nación a recuperar el equilibrio entre la ganadería y la protección del lobo. [Aplausos]. Que apruebe también planes hidrológicos con dimensión nacional desde el máximo consenso. En todo... en todo caso, le solicitaremos al Gobierno de España que facilite el aumento de la superficie de regadío de manera inmediata.

Por nuestra parte, nosotros vamos a actuar en la modernización o nuevo regadío de 30.000 hectáreas. Vamos a facilitar la incorporación de mujeres y jóvenes y vamos a crear un programa específico de sucesión de explotaciones.

Vamos a dirigirnos a otros sectores también, impulsando la modernización, el crecimiento de todo nuestro tejido económico, incidiendo especialmente en nuestros emprendedores, pymes, autónomos, empresas familiares. Esa es nuestra intención, porque tenemos abiertas las puertas a todas las empresas que quieran crecer, que quieran innovar, que quieran instalarse en Castilla y León para crear empleo: con ayudas directas, por un lado; con financiación, por otro; con suelo a bajo precio y también con apoyo a la internacionalización. Queremos favorecer el retorno del talento a nuestra Comunidad, y será otro de los instrumentos que queremos utilizar para ello.

Por su evidente importancia estratégica, queremos seguir impulsando la reindustrialización de nuestra tierra, desde la competitividad, la innovación, la digitalización, una financiación accesible y una fiscalidad favorable. Impulsaremos nuevos planes industriales y desarrollaremos los que ya están en marcha.

Prestaremos atención especial a sectores estratégicos, como el de la automoción, que seguirá teniendo el apoyo decidido para superar las dificultades actuales y para afrontar proyectos generadores de empleo. Saben ustedes los proyectos de empresas ya instaladas aquí, o que se van a instalar, que van a impulsar este sector y que va a crear muchos puestos de trabajo.

Del mismo modo, y buscando corregir las inexplicables carencias que hemos visto, apoyaremos las explotaciones mineras aún existentes y los nuevos proyectos de minería. [Aplausos]. Exigiremos del Gobierno... exigiremos al Gobierno de la Nación revertir la política energética que existe para que sea eficaz y, sobre todo, que permita una verdadera transición justa, para no perjudicar ni a las familias ni a las empresas, y que no se reduzca la competitividad de las mismas.

Vamos a apostar también por el futuro de sectores y actividades vinculadas al comercio, al turismo, al deporte, a la hostelería y, por supuesto, al transporte.

También recordar que nuestra riqueza natural y cultural representa, como antes avancé, unos recursos endógenos de enorme potencialidad. Por ello, defenderemos el patrimonio natural y forestal de Castilla y León, impulsando todas las actividades y oportunidades que se deriven del aprovechamiento para las personas que vivan en su entorno.

Apostaremos por la adaptación necesaria del modelo energético, orientando nuestra competitividad, orientando esa transición hacia la competitividad y la creación de empleo de calidad. Aprobaremos una normativa autonómica sobre el agua, bajo la perspectiva de ahorro y protección del recurso, así como su aprovechamiento óptimo como factor de desarrollo. Modificaremos la Ley de Montes para regular los derechos de absorción del CO2 y mejorar los aprovechamientos forestales. Aprobaremos también la ley autonómica de vías pecuarias e infraestructura verde e implantaremos un nuevo modelo de gestión para el dominio público pecuario.

Asimismo, consolidaremos a Castilla y León como referente cultural básico en España, protegiendo nuestro patrimonio cultural, nuestras tradiciones y la riqueza de nuestro idioma, la riqueza del español. [Aplausos]. Aprobaremos un nuevo marco normativo en materia del patrimonio cultural y de las bibliotecas.

Señorías, vamos a poner todo nuestro empeño en conseguir unas reglas justas de competencia para Castilla y León. Por eso instaremos, reclamaremos, al Gobierno de la Nación y a las instituciones europeas que protejan el producto de nuestro campo y de nuestra industria ante la competencia desleal de productos extracomunitarios con menores requisitos de calidad. Crear empleo... [aplausos]... crear empleo es un objetivo esencial de todas estas medidas de modernización. Por ello, priorizaremos la creación de empleo estable y de calidad, que es, a la postre, la mejor política social.

Y seguiremos apoyando a los trabajadores, con ayudas a la contratación, con medidas de prevención de riesgos laborales y también con la formación; una formación y una recualificación en la que tiene un gran protagonismo la Formación Profesional, que tiene que estar adaptada a las demandas de los nuevos tiempos, apostando por el talento, por un lado, y por la innovación, por otro lado.

Señorías, como dije antes, otro gran eje de actuación será la cohesión social y territorial. Cohesión que debe empezar por lo más básico: la igualdad de las personas. Por eso, una labor primordial de mi Gobierno será vigilar y defender la igualdad ante la ley de todos los castellanos y leoneses. Garantizo la igualdad social, laboral, de oportunidades y la igualdad entre hombres y mujeres. Y de manera especial... [aplausos] ... de manera especial, quisiera resaltar aquí que tendremos siempre presentes a las víctimas del terrorismo, trabajando por su dignidad, memoria, justicia y protección. [Aplausos].

Con la igualdad personal defenderemos la igualdad territorial. Por ello, mi Gobierno trabajará para promover la solidaridad entre todas las Comunidades de España, fortaleciendo el papel de provincias y municipios y defendiendo también nuestros intereses en la Unión Europea. Un camino apropiado para ello es reivindicar nuestra historia común y entenderla como un elemento integrador para la reconciliación. Por eso, vamos a comenzar la tramitación entes del treinta de julio de una normativa en materia de concordia que integrará toda la regulación en la materia como elemento de reconciliación y evitando la utilización de la historia para dividir a los españoles. [Aplausos].

Junto a la igualdad, el equilibrio y la integración son otros pilares de la cohesión. Considero una condición indispensable de progreso que todos los territorios de Castilla y León tengan las mismas oportunidades, recursos similares, servicios equiparables. Que cada persona pueda desarrollar su proyecto de vida en Castilla y León en cualquiera de los rincones, sin que su calidad de vida se vea menoscabada. Por ello, mi Gobierno promoverá el equilibrio territorial entre todas las provincias a través de planes de inversión, de fomento y de desarrollo. Especialmente queremos mejorar la conectividad de Castilla y León, fortaleciendo, por un lado, las infraestructuras de comunicación y de transporte. Modernizaremos nuestra red de carreteras. Exigiremos al Gobierno de España también la culminación de las autovías y ferrocarriles pendientes, además del Corredor Atlántico. Mejoraremos la movilidad y el transporte de las personas y su acceso a los servicios públicos.

Ampliaremos el transporte gratuito a la demanda a todas las localidades, todos los días y con mayor frecuencia. Vamos a crear el "Bono Joven Rural" de transporte interurbano gratuito para los jóvenes que viven en el medio rural. Y el "Bono veinte", con tarifa plana de 20 euros, para el transporte metropolitano. Y también culminaremos la extensión de internet: vamos a llegar al cien por cien de la Comunidad con 30 megas en el dos mil veintitrés y con 100 megas en el dos mil veinticinco. Y abordaremos, de forma intensa también, la capacitación digital de la ciudadanía de Castilla y León.

En este camino de equilibrio, de integración, desde luego, nuestro mundo local requiere un papel protagonista e indispensable. Por ello, apostaremos firmemente por la colaboración con las Administraciones locales y el papel protagonista en el que desempeñan en el territorio los municipios y las provincias. Los mecanismos de cooperación local impulsarán la ejecución de inversiones sostenibles, llegando a todos los municipios de Castilla y León. Y crearemos un nuevo fondo de cohesión para ayuntamientos y diputaciones de 20 millones de euros para inversiones que creen empleo y que fijen población.

Unos servicios públicos de calidad en el territorio, distribuidos de manera ejemplar por todo el territorio, es claramente otro ejercicio, otro ejemplo esencial de nuestra cohesión. Por eso garantizaremos nuestra sanidad de calidad en todo el territorio. Tenemos uno de los mejores sistemas sanitarios de España y seguiremos mejorando. Y lo haremos desde el diálogo con los profesionales, con las entidades locales y también con las fuerzas políticas que quieran sumarse a este proceso. Y presentaremos, una vez más, el presupuesto para sanidad más alto de la historia.

Avanzaremos en una sanidad cercana y moderna, con más medios humanos, con más medios tecnológicos, con un plan de infraestructuras sanitarias, incluidas las unidades satélite de radioterapia comprometidas, que son irrenunciables. Reforzaremos... [aplausos] ... reforzaremos la Atención Primaria para consolidar un sistema sanitario cercano, gratuito e innovador. Los consultorios seguirán abiertos, y vamos a blindar por ley -como ya anuncié antes- la atención sanitaria en nuestros pueblos. [Aplausos].

Aplicaremos un plan de choque para reducir las listas de espera hospitalarias tras el impacto de la COVID, como ya hemos hecho en las listas de espera de la Atención Primaria. Asimismo, desarrollaremos unas políticas sociales para proteger a los ciudadanos que más lo necesitan, luchando contra la pobreza y contra la exclusión social.

Somos la Comunidad que mejor protege a las personas, con servicios de última generación para nuestros mayores, como la teleasistencia avanzada gratuita. Aprobaremos una ley de derechos de las personas mayores, con ampliación de derechos de dependencia, que facilite el acceso a prestaciones de aquellas personas mayores que vivan solas. También una ley de atención residencial en el ámbito de los cuidados de larga duración a las personas que lo necesiten, y una ley de apoyo al proyecto de vida a las personas con algún tipo de discapacidad.

Mi compromiso es proteger a las personas, a las más vulnerables, así ha sido siempre y así va a seguir siendo. Por eso reitero mi compromiso irrenunciable con la lucha contra la violencia de género, la violencia contra las mujeres, ya que esta no se produce solo en el ámbito familiar. Y lo digo alto y claro para que todo el mundo lo entienda: vamos a mantener la ley de lucha contra la violencia de género. No vamos a dar un paso atrás en los derechos reconocidos, ni mucho menos.

Por otra parte... [aplausos] ... por otra parte, vamos a elevar a rango de ley el actual Plan de Prevención de Violencia en el Ámbito Familiar, elaborando y aprobando una nueva ley de lucha contra la violencia intrafamiliar para generar nuevos derechos y proteger a las víctimas, a todas las víctimas. La tramitación de esta norma se iniciará antes del treinta y uno de julio del presente año. Porque existen situaciones que han de abordarse, generando nuevas prestaciones para la... para las víctimas, como la violencia de los hijos contra los padres o contra las personas con discapacidad en el entorno familiar. No creo que nadie pueda estar en contra de esto. Son necesarias campañas de sensibilización y de detección, como lo es la garantía de las alternativas habitacionales y de medios de subsistencia en las situaciones que se producen víctimas en estas circunstancias.

Las dos normas son necesarias, las dos normas son compatibles y las dos normas son complementarias. Mejorar la... [aplausos] ... mejorar la detección, la prevención, ampliar y reforzar la protección de las víctimas y garantizar la mejor atención inmediata e integral es un compromiso irrenunciable.

Otro de nuestros objetivos fundamentales será impulsar una potente política de apoyo a las familias, como institución básica de la sociedad y pilar del estado del bienestar. Ampliaremos la protección social, jurídica y económica a las familias, elevando al máximo rango las políticas de apoyo para que estén a la altura de las mejores de toda España, facilitando el acceso a la vivienda con ayudas al alquiler, a la compra o a la rehabilitación, especialmente a los jóvenes y en el medio rural; y lanzando una línea de avales para facilitar la compra de viviendas a más de 12.000 jóvenes para que puedan emanciparse.

Aprobaremos una reforma de la Ley del Derecho a la Vivienda en Castilla y León, con una mejor regulación del parque público de viviendas, al que se incorporarán 1.500 viviendas más.

Por otro lado, combatiremos el fenómeno delictivo de la ocupación de viviendas con asesoramiento gratuito a las víctimas de este hecho. [Aplausos]. Apoyaremos con decisión la natalidad, con un cheque bebé y con incentivos fiscales progresivos. Avanzaremos también en la conciliación y la corresponsabilidad, con la ampliación del Bono Concilia y con la gratuación... gratuidad -perdón- del Programa Crecemos, entre otros. Además, garantizaremos la gratuidad de la enseñanza de cero a tres años; ya desde el próximo curso será una realidad para los niños de dos a tres años. [Aplausos].

La educación es uno de nuestros mayores éxitos como Comunidad. Estamos a la vanguardia mundial, con una educación pública de excelencia, con calidad y equidad, en centros públicos y concertados, en el mundo urbano y en el mundo rural. Somos ambiciosos, queremos ser todavía mejores y vamos a llegar más lejos. Vamos a consolidar un modelo educativo de excelencia basado en el mérito, en el esfuerzo, la solidaridad y en el apoyo a los que más lo necesitan. Implantaremos también nuevas medidas de éxito educativo y reforzaremos la innovación pedagógica, para ayudar a los alumnos a que puedan superar las dificultades por su propio esfuerzo.

Apostamos por un modelo educativo que genere oportunidades reales y esté libre de todo adoctrinamiento ideológico. En esta Comunidad no hay adoctrinamiento ni lo va a haber por parte de nadie. Y garantizaremos la libre elección de centros y el derecho inalienable de los padres a decidir la educación de sus hijos. [Aplausos].

Potenciaremos la Formación Profesional, que es un itinerario de éxito orientado al empleo, flexible, ajustado a las necesidades del mercado laboral. Y seguiremos exigiendo una EBAU única en todo el territorio nacional, para garantizar la igualdad de oportunidades de nuestros estudiantes. [Aplausos]. Queremos fortalecer la Universidad, aumentando la financiación y los fondos para investigación como factor de impulso de la excelencia. Y también facilitaremos el acceso a la universidad ampliando el número de becas y también bajando progresivamente las tasas universitarias.

Señorías, realizar este conjunto de iniciativas quiere... requiere contar con los medios adecuados. A este fin, seguiremos luchando por una financiación autonómica justa, que sea solidaria y sobre todo acorde con el coste efectivo de la prestación de los servicios públicos para acabar con la infrafinanciación de Castilla y León. [Aplausos]. Asimismo... asimismo, y como antes avancé, aprovecharemos los nuevos fondos europeos y garantizaremos que lleguen con transparencia, y con rapidez y eficacia, a todos los rincones de nuestra Comunidad Autónoma.

Vamos a continuar impulsando en Castilla y León una política fiscal inteligente, capaz de atraer y retener tejido productivo. Como también les indiqué con anterioridad, a lo largo de esta legislatura tendremos la fiscalidad más baja de nuestra historia, especialmente en el medio rural, señorías. Y pedimos al Gobierno de España que aplique también una fiscalidad diferenciada que contribuya a luchar contra la despoblación. [Aplausos]. Bajamos impuestos porque es bueno para las familias y las empresas. Rebajaremos el tramo autonómico del IRPF a todos los contribuyentes este mismo año, como anuncié con anterioridad. Aplicaremos nuevas deducciones por residir en zonas de riesgo en despoblación y por trasladar... por trasladarse a trabajar a esas zonas. Y ampliaremos también los beneficios fiscales de acceso a la vivienda; reduciremos el impuesto de transmisiones para las empresas que se instalen en el medio rural, bonificaremos la compra y el alquiler de explotaciones agrarias prioritarias y de fincas rústicas; y bonificaremos el 95 % de las tasas generales de pesca, caza y también la específica de galgos.

Aseguraremos también una Administración cercana, eficaz, austera y transparente, a la vez que reduciremos las cargas administrativas de ciudadanos y empresas, ámbito en el que queremos consolidar una Función Pública moderna, que promueva el talento y la profesionalización.

Señorías, las actuaciones de modernización y cohesión de Castilla y León que acabo de exponer están orientadas a un fin estratégico para nosotros: hacer de nuestra tierra un lugar atractivo para vivir y superar así esos retos demográficos que tanto nos preocupan hoy.

Consideramos el problema de la despoblación y las políticas de demografía una cuestión nacional prioritaria que debe ser abordada en coordinación con otras Administraciones públicas. Políticas que deben promover -y así lo apoyaremos- una inmigración ordenada, que desde la integración cultural, económica y social, y en contra de las mafias ilegales, contribuya al futuro de España y de Castilla y León.

Castilla y León somos tierra de acogida: de quienes se marcharon y quieren volver, de quienes quieren regresar; y también de quienes llegan buscando una nueva oportunidad. [Aplausos]. Creemos... creemos enriquecedor y necesario incorporar dentro de nuestra sociedad a todas las personas que quieran venir desde todos los rincones de mundo, siempre de forma legal, ordenada, con clara vocación de incorporarse al mercado laboral y que busquen la plena integración a través del respeto a las leyes, los valores y las libertades europeas de la sociedad que las integra.

A las personas que lo necesiten vamos a seguir atendiéndolas a través del sistema de servicios sociales que tenemos. En este punto, quiero referirme especialmente a la acogida de refugiados ucranianos por la cruel e injusta invasión rusa. Estamos a su lado, como dije antes. Tienen nuestra solidaridad, de todo el pueblo de Castilla y León. Tenemos en marcha el protocolo de atención a estas personas para cubrir sus necesidades básicas y... y conseguir su integración laboral y también social.

El protocolo, que tiene que financiar Europa, contempla quince medidas de apoyo a las familias en el ámbito de sanidad, de educación, de vivienda, de economía y de empleo. Lo hacemos en coordinación con el Gobierno de España y el resto de Administraciones, así como las entidades que trabajan también con las personas desplazadas.

Señorías, este conjunto de actuaciones las vamos a desarrollar dentro de los instrumentos que nuestro Estado autonómico y constitucional nos proporciona. Llevamos treinta y nueve años de progreso económico y de avances sociales impulsado por nuestro modelo autonómico, que acerca el poder político al territorio, que nos permite conocer de primera mano sus necesidades y aportar también las soluciones apropiadas para ello, que muestra su eficacia para promover el bienestar de los castellanos y leoneses.

Por ello, defiendo con firmeza consolidar el Estado de las Autonomías, pero que sea moderno y eficiente al servicio de las personas, que sirva para unir más a España, expresando su riqueza pero a la vez su diversidad dentro de nuestra patria común. Por ello, quiero seguir demostrando todos los beneficios que el Estado Autonómico ofrece en esta nueva etapa política que ahora comienza. [Aplausos].

Señor presidente, señorías, he querido exponer mi Programa de Gobierno a todos los castellanos y leoneses, a quienes nos debemos y ante quienes debemos de responder. Me dirijo a ellos desde esta tribuna con el orgullo del que conoce y ama a esta tierra y a sus paisanos por encima de todo. He dedicado gran parte de mi vida a recorrer Castilla y León, a encontrarme con la gente cara a cara, con su realidad, y a comprender el legado de una Comunidad que solo ansía prosperidad y futuro. Porque, si algo define el carácter de los castellanos y de los leoneses, es sin duda ese espíritu de superación constante, una ambición repleta de responsabilidad, reconociendo la realidad de las cosas y agradeciendo la franqueza por encima de todo.

Mi propósito para esta nueva etapa es estar a disposición de ellos una vez más y tenderles la mano una vez más, mirarlos de frente para asumir que los tiempos que nos esperan no van a ser fáciles, que nos aguardan retos complejos, pero con la convicción de que los afrontaremos juntos. Somos un pueblo leal y sobrio, pero a la vez dinámico y enérgico: cuando se trata de seguir adelante, estamos los primeros ante cualquier adversidad.

Castilla y León está en el lado correcto de la historia y, por ello, debe ocupar el lugar que legítimamente le corresponde, que no es otro que el de abrir el camino de la recuperación y la transformación de España. Esa es la fuerza que nos impulsa y es la fuerza que impulsará a una gran Nación, a España. Quiero liderar ese camino, porque sé hacia dónde dirigir nuestros pasos.

Quiero comprometerme hoy con las personas de Castilla y León para continuar con un cambio imparable en el que ellos son los únicos protagonistas y recordarles que vivimos en el mejor lugar del mundo. A ellos les ofrezco voluntad, firmeza, pasión, determinación y una férrea lealtad ligada a los intereses de nuestra tierra.

Hoy, en esta Cámara, ante la mirada atenta de la historia y como legítimos representantes de nuestro pueblo, pido su confianza a todos para seguir construyendo juntos el futuro de una Comunidad única, el futuro de Castilla y León y el futuro de España. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco. Señorías, de acuerdo con el Artículo 135.4 del Reglamento de esta Cámara, esta Presidencia decreta una interrupción de la sesión para que, a su reanudación, puedan intervenir los representantes de los grupos parlamentarios. El debate se reanudará a las dieciséis horas de esta tarde. Se interrumpe la sesión.

[Se suspende la sesión a las trece horas cinco minutos y se reanuda a las dieciséis horas].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Se reanuda la sesión. Esta Presidencia anuncia que la votación de investidura tendrá lugar en el momento inmediatamente posterior a la terminación del debate.

En representación del Grupo Parlamentario Socialista, tiene la palabra don Luis Tudanca Fernández, por un tiempo máximo de treinta minutos. [Aplausos].


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

Muchas gracias, señor presidente. Muy buenas tardes a todos y a todas. Quizá la historia sí se repite, quizá debamos volver a enfrentarnos una y otra vez a los mismos retos, a los mismos problemas, al mismo viejo adversario con diferente disfraz. Quizá las sociedades, efectivamente, estén condenadas a repetir la historia, y su único movimiento sea, inevitablemente, un péndulo. Pero de lo que nadie duda es que han llegado a esta tierra milenaria tiempos oscuros.

Esta mañana, usted, señor Mañueco, solemne, ha terminado su discurso afirmando estar en el lado correcto de la historia. No, señor Mañueco, usted no está en el lado correcto de la historia... [aplausos] ... todo lo contrario. Pero es que, cuando lo ha dicho, he pensado a qué me recordaba a mí esa frase; y, efectivamente, a mí me recordó a quien en realidad es la gurú ideológica del Partido Popular, la señora Ayuso. Hace unos meses, en un programa de televisión, afirmó literalmente, con la misma solemnidad que usted: "Si te llaman fascista, estás en el lado correcto de la historia". Pues ustedes sabrán... [aplausos] ... nosotros estamos en el otro lado: en el lado de los demócratas, en el lado de una Europa que usted quiere ser referente, y nos mira hoy avergonzada de forma completa.

Ayer, precisamente ayer, veíamos en Francia el avance de una extrema derecha a la que todos llaman por su nombre, todos. Allí, al instante, todos los partidos, a la izquierda y a la derecha, renunciaban a aliarse con ella; todos los partidos ponían en marcha un cordón sanitario que impida su acceso al poder. Precisamente, la francesa Simone de Beauvoir nos advertía, hace más de setenta años, que no olvidáramos nunca que bastaría una crisis política, económica o religiosa para que los derechos de las mujeres volvieran a ser cuestionados. "Esos derechos -nos decía- nunca se dan por adquiridos. Debéis permanecer vigilantes toda vuestra vida". Y ese momento ha llegado, ese momento es ahora.

El siglo XX abrió la puerta a aquellas ideologías que negaban al otro, que negaban incluso la mera humanidad de aquellos a los que se consideraba ideológicamente ajenos. Hoy, el Partido Popular, apenas un día después de ver lo que ha sucedido en Francia, de comprobar como también su partido hermano en Francia renegaba de ella, ha sido usted, señor Mañueco, quien ha abierto de nuevo las puertas de la extrema derecha... [aplausos] ... ha abierto las puertas de Castilla y León y de su Gobierno a quienes quieren cuestionar los derechos de las mujeres; y pasará a la historia por ello, pagará ante la historia por ello, señor Mañueco.

Y ahora bien, le advierto, les advierto que nosotros somos los que estábamos vigilantes, que seguimos vigilantes y que estamos en pie para defender la igualdad y proteger los derechos de las mujeres. Que no cederemos, no nos rendiremos, que vamos a dar la lucha hasta el último aliento para proteger todo lo logrado, todos los avances conseguidos durante estos años. Nos tendrán enfrente, con la fuerza y la convicción de los hombres y las mujeres feministas, que no estamos dispuestos a que ustedes negocien sus derechos a cambio de su poder, señor Mañueco. [Aplausos].

Pero uno se pregunta cómo hemos llegado hasta aquí, por qué hemos llegado hasta aquí, por qué, precisamente, en Castilla y León, una tierra siempre moderada, siempre templada, vaya a ser la primera Comunidad Autónoma de España y una de las primeras regiones de Europa en tener un Gobierno en el que participa la extrema derecha. Y la respuesta es usted, señor Mañueco: en apenas tres años ha convertido al Partido Popular de Castilla y León, antaño moderado, en el caballo de Troya de la extrema derecha en España, señor Mañueco, usted. [Aplausos].

No vamos a olvidar tampoco cómo hemos llegado hasta aquí. El pasado veinte de diciembre, el rey, el presidente del Gobierno y el presidente de la Xunta de Galicia -fíjese cómo son las cosas- coincidían en Zamora en un acto muy trascendente para la vertebración territorial en España: la puesta en servicio de la línea de alta velocidad que, a través de Castilla y León, une Madrid con Galicia. Y minutos antes de ese evento, señor Mañueco... el señor Mañueco decidió bajar a Castilla y León de ese tren. Decidió que la ciudadanía de esta tierra no estuviera representada en ese acto, decidió dar plantón al Jefe del Estado y al resto de representantes institucionales; decidió en base a intereses que nada tenían que ver con la gente de Castilla y León.

A las órdenes de Pablo Casado -qué tiempos aquellos, ¿verdad?- y al albur de unas encuestas que le auguraban una mayoría gloriosa, como en los tiempos pasados, usted sacrificaba a Castilla y León al altar de sus intereses partidistas, fruto de su terror a tener que enfrentarse a los casos de corrupción que tenía por delante en los tribunales.

El pacto de dos mil diecinueve con el señor Igea y con Ciudadanos lo decidieron otros; y esta convocatoria electoral también, dejando a esta tierra sin presupuestos y sin Gobierno en la etapa más decisiva de nuestra historia reciente. Y este es el primer reproche: hace tres años, el Gobierno de Castilla y León lo decidió el señor Ribera y hoy lo ha decidido el señor Abascal, ambos en un despacho de Madrid, ambos obviando nuestra Autonomía. [Aplausos].

Y así... y así las cosas, ¡ay!, hoy se enfrenta a esta investidura en el mundo real. Se ha encontrado con que no vive dentro de unas encuestas de esas de encargo, que le pintaban un mundo ideal. Hoy llega aquí después de más de tres meses sin Gobierno, tras semanas de un bloqueo institucional sin precedentes; y llega humillado y rehén de una extrema derecha sin complejos, que pretende, con su complicidad, llevar al boletín oficial aquellas cosas que su portavoz decía en Twitter... que su vicepresidente -perdón-; lamentablemente, su vicepresidente.

Señor Mañueco, hoy pide la investidura a esta Cámara para conformar un Gobierno contra las mujeres, contra los trabajadores y trabajadoras, contra los sindicatos, contra el diálogo social, contra este Parlamento; y el Grupo Parlamentario Socialista votará no... [aplausos] ... con toda nuestra convicción y con todo el amor que le tenemos a esta tierra, que se queda en las peores manos posibles en el peor momento posible.

Decía... decía Amélie Nothomb que la realidad siempre se apresura a demostrarnos hasta qué punto carecemos de imaginación. Y, desde luego, en Castilla y León así lo parece; no imaginábamos esto. Usted convocó elecciones para conseguir un Gobierno fuerte y en solitario; y llega aquí con un Gobierno que, antes de empezar, ya todo el mundo da por fallido en unos pocos meses, y llega con muy mala compañía.

Usted convocó elecciones para darle a Castilla y León estabilidad, y ha provocado la mayor crisis institucional de nuestra historia, logrando que, en mitad de una pandemia y en una terrible crisis económica y social, estuviéramos sin Gobierno, sin Parlamento, y no se tomase ninguna medida, ninguna. Ni la pandemia, ni la crisis derivada de la guerra de Putin y la invasión de Ucrania son culpa de este Gobierno ni de ninguno en nuestro país, pero sí tenía la responsabilidad de tomar medidas para paliar las consecuencias de ellas ante los ciudadanos, especialmente los más vulnerables.

Aquí volvemos a su famosa perversión del lenguaje. Al principio fue la palabra, ¿verdad? Pues parece que las palabras en boca del señor Mañueco no significan lo mismo que para el resto de los mortales, porque más de 40 días después del inicio de la guerra, 28 días después de constituirse estas Cortes, usted anunció que tomaría medidas inmediatas para hacer frente a la crisis derivada de la guerra de Ucrania; inmediatas. ¿Cómo se queda? Pero que las tomará cuando conforme Gobierno, que ya lo deja para después de las vacaciones de Semana Santa. Definitivamente, usted no habla el mismo idioma que el resto de los mortales, señor Mañueco.

Es que esta mañana ha dicho que Castilla y León va muy bien porque está más industrializada que la media de España. Impresionante. Y que casi todos nuestros jóvenes encuentran trabajo. Hombre, será fuera de Castilla y León, como lleva pasando más de treinta años, que no hace más que expulsarles por cientos de miles. [Aplausos]. Yo no sé en qué mundo vive, señor Mañueco, pero mire, es que la gente no puede esperar, es que hace prácticamente un mes ya le propuse una serie de medidas para hacer frente en esta tierra a las consecuencias de la crisis, y ya hemos registrado en esta Cámara una iniciativa para poner en marcha un plan de respuesta a la crisis por la invasión de Ucrania. Y hoy se lo reitero, un plan de choque con un volumen de ayudas, por más de 357 millones de euros, que contemple, al menos, las siguientes medidas:

En primer lugar, la convocatoria del fondo de 163 millones en ayudas directas para empresas y autónomos, que ya se ha aprobado en este Parlamento; en segundo lugar, una bonificación extra al combustible de al menos 10 céntimos, que se sume a la aprobada por el Estado; en tercer lugar, garantizar el adelanto del 90 % de la PAC sin cargas administrativas ni financieras, señor Mañueco; en cuarto lugar, revisar temporalmente las tasas a los sectores más afectados por la crisis; la creación de una ayuda extraordinaria directa contra la pobreza energética por el mismo importe del bono social térmico y eléctrico, que podría alcanzar los 260 euros por familia; incrementar las ayudas de emergencia social en al menos 5.000.000 de euros; aumentar la dotación de la convocatoria de ayudas al alquiler y la cuantía de las mismas; bonificar en un 10 % los billetes de transporte de viajeros y establecer una ayuda a las entidades locales para bonificar el precio del transporte público. Y, de acuerdo con el diálogo social -del que usted solo se acuerda en los discursos-, que se establezca una ayuda complementaria a los trabajadores y trabajadores en ERTE de al menos 3.000.000 de euros; ayudas para la diversificación internacional de las empresas y para la solvencia de empresas exportadores afectadas por la crisis; y la puesta en marcha de un nuevo fondo de ayudas extraordinarias para empresas y autónomos.

Esta fue nuestra propuesta, esta es nuestra propuesta, esta es la respuesta que necesita la ciudadanía de Castilla y León en un momento de extraordinaria dificultad. Una respuesta inmediata hubiera sido adoptar estas medidas hace semanas; hoy ya es tarde. Hoy por fin ha anunciado un plan sin terminar de concretar. Pero más vale tarde que nunca. Yo espero que su Gobierno esta vez no dé la espalda a la gente de esta tierra antes, incluso, de formarse, señor Mañueco.

De nosotros, la gente de esta tierra, puede seguir esperando esto. A pesar de las dificultades, o precisamente por ello, vamos a seguir trabajando por Castilla y León, vamos a seguir haciendo política útil y propuestas que hagan mejor la vida de la gente, señor Mañueco. [Aplausos].

Mire, estos años han sido muy duros, nunca nos imaginamos algo así: apenas recuperándonos de una crisis financiera terrible nos golpeó una pandemia que no imaginábamos más que en nuestras peores pesadillas, llegó también un volcán a nuestro país, una guerra en Europa con consecuencias que aún no podemos prever del todo; y todo ello ha provocado un enorme daño a millones de familias. Al drama en forma de desempleo, de exclusión, de familiares perdidos, se suma la incertidumbre, se suma el miedo al futuro; y, como en cada momento de crisis, hay quien trata de salvar lo mejor de nosotros mismos, quien contribuye a que nadie se quede por el camino y quien aliente el caos para tratar de pescar en río revuelto.

No esperen de mí, no esperen de nosotros jugar a eso: nunca. Hoy, precisamente hoy, quiero reivindicar la esperanza. La esperanza de que otra Castilla y León es posible, una tierra con enormes oportunidades, con un gran talento que por fin pueda darle un futuro mejor a nuestros hijos y a nuestras hijas; una tierra que sea conocida por su patrimonio y su cultura, por sus emprendedores y su industria, por sus universidades y la capacidad de innovar.

La esperanza también en otra manera de hacer política, una en la que el fin nunca justifica los medios; en la que llegar al poder a cualquier precio no es un objetivo legítimo; en la que la palabra tiene valor y se cumple; en la que se puedan tener a la vez los barcos y la honra a pesar de luchar contra los elementos. Porque, a pesar de todo lo que está pasando, a pesar de todo lo que están haciendo, no oirán de mí nunca un insulto ni un ataque personal. Se lo dije hace tres años; entonces fue investido tras perder las elecciones y pactando con quienes prometían cambio y regeneración. Hoy será investido gracias a los votos de la extrema derecha.

No le votaré, señor Mañueco; pero también será mi presidente, porque lo será de todos los castellanos y los leoneses. Nosotros nunca pondremos en duda su legitimidad nosotros nunca apostaremos por desestabilizar y debilitar unas instituciones que están siempre por encima de quienes las ocupamos; nosotros nunca contribuiremos, nunca, a la antipolítica, a aumentar la brecha de desconfianza que existe entre los ciudadanos y sus representantes. Hoy, más que nunca, no queremos ser como ustedes. Nunca seremos como ustedes. [Aplausos]. Tampoco en esto.

Porque los socialistas sabemos muy bien, muy bien, lo que costó conseguir y consolidar la democracia en nuestro país; y por eso, precisamente por eso, a pesar de la desazón que sé que hay en buena parte de la sociedad, de la gente de nuestra tierra, hoy les pido que no se rindan. Nosotros no lo haremos; nosotros seguiremos en pie, defendiendo los derechos y las libertades, defendiendo siempre lo mejor para Castilla y León. Siempre. [Aplausos]. Porque, de la misma manera que respetaremos las instituciones y haremos cuanto sea posible para defenderlas, vamos a enfrentarnos hasta el último aliento, hasta el último aliento, contra un Gobierno que viene a acabar con la verdad y con la memoria, y que se ha declarado enemigo de los trabajadores y de las mujeres.

Porque, como decía mi admirado Zweig, hablando de la trágica deriva de Europa, su querida Europa, en los años previos a la Segunda Guerra Mundial, los culpables eran aquellos que con sus palabras instigaban la guerra, pero también lo éramos nosotros si no dirigíamos contra ellos las nuestras. No puede ser más actual su alegato contra la indiferencia. Desde luego, aquí, en mi tierra, yo no seré cómplice, tampoco por omisión, de la extrema derecha. Los socialistas alzaremos la voz contra los que instigan el odio. [Aplausos].

Porque, aparte de las soflamas de sus socios, señor Mañueco, ¿qué objetivo tiene su Gobierno? El problema es que ya le conocemos todos demasiado bien. Hace tres años ya nos contó aquí un supuesto programa de investidura, pero durante aquellas semanas -¿se acuerdan?- dijo aquella famosa frase de "yo, lo que diga Ciudadanos". Y así fue: durante tres años el presidente ha sido el señor Igea, el ciudadano Igea, en singular, porque su partido -como pronosticó su antiguo portavoz- ha muerto y en paz descanse. Y ahora se repite el guion: usted ha pasado de "lo que diga Ciudadanos" a "lo que diga Vox". Pero el salto ético y moral es abismal. Abismal. [Aplausos]. Como ya le conocemos, señor Mañueco, hoy sabemos que el verdadero presidente de la Junta será el señor García-Gallardo. Se le verá menos, seguro; trabajará menos, también; tendrá Vicepresidencia, pero no competencias. Cosas de la España que madruga (para volverse a la cama, supongo). [Aplausos].

Por cierto, que, en su afán de regenerar y... y recortar gasto público, esta mañana nos hemos enterado de refilón, nos ha contado que va a crear una Consejería más. Había que cuadrar los sillones, ¿verdad, señor Mañueco? Ahora Vox... ahora Vox mandará, claro que mandará, ya lo hemos visto estas semanas. Usted ha entregado la Vicepresidencia... la Presidencia, perdón, de esta Cámara a la extrema derecha. Aún resuenan por los pasillos de esta Cámara los vítores de los procuradores de Vox cuando usted y el señor Feijóo, en palabra del jefe de los Populares europeos, Donald Tusk, capituló ante la extrema derecha. Porque ustedes han capitulado. Porque toda apariencia de derecha moderada que les quedara ha sido disuelta en este acuerdo de poder. Porque por fin el Partido Popular ha llegado a su destino después de su interminable viaje al centro, y están más a la derecha que nunca, más a la derecha que nunca. [Aplausos].

Hoy... hoy, al menos, el señor Feijóo debió venir a dar la cara, por lo menos a dar la cara. En la vida se deben asumir las decisiones que uno toma, y hoy el Partido Popular del señor Feijóo se esconde, y nos deja a los castellanos y a los leoneses con un Gobierno con la extrema derecha. Pero no lo vamos a olvidar, señor Feijóo; no lo vamos a olvidar.

El drama es que hace tres años todo tenían... todos teníamos claro que, después de lo que había hecho, Ciudadanos desaparecería. Y hoy, lamentablemente, lo que no tenemos claro es si quien será absorbido será el Partido Popular.

El nuevo Partido Popular -es el nuevo Partido Popular- solo ha cambiado de presidente, después de que al último se le ocurriera denunciar la corrupción de algún dirigente de su propio partido. ¡Un sacrilegio! ¿Pero nadie le advirtió al señor Casado de la omertà dentro del Partido Popular? ¿Nadie le avisó? [Aplausos].

Pero hoy... hoy entendemos las prisas, hoy sabemos que había más, mucho más, que en el Partido Popular los hermanos, los primos y sus amigos hacen negocios con nuestro dolor en los momentos más duros de la pandemia; que, cuando hablan de meritocracia, en realidad hablan de familia, de su familia, y que dejarían de criticar lo que llaman despectivamente "subvenciones o paguitas" si lo llamáramos "comisiones", y dieran no para llegar a fin de mes a las familias vulnerables, sino para guardar un Ferrari o un Jaguar en su garaje. Entonces ya no les parecería tan mal. [Aplausos].

Son las mismas prisas que le hicieron privatizar, señor Mañueco, los test de antígenos a principios de año a dos empresas de ex altos cargos del PP; las mismas prisas que le hicieron convocar, señor Mañueco, estas elecciones para que no llegaran a tiempo los juicios de la "perla negra", de la trama eólica, de las primarias de su partido. Solo en la trama eólica hay una petición de penas de 138 años de cárcel, más 848 millones de euros en multas, a ex altos cargos del Partido Popular en la Junta de Castilla y León.

Toda esa corrupción que les ha hecho ya confesar que hicieron trampas en sus primarias para elegirle. Hoy leemos también en los medios de comunicación que lo que hicieron en Salamanca durante sus primarias también lo hicieron en León, extendiendo la mancha. Toda esa corrupción que han traído los 35 años de Gobierno del PP. Esa corrupción cuya mera mención le hace al señor Mañueco levantarse de una reunión con el PSOE a los quince minutos -¡a los quince minutos!-, mientras aguanta durante semanas la humillación de la extrema derecha, para terminar cediendo en todo, en todo. [Aplausos].

Toda esa corrupción, toda esa corrupción que incluye en Castilla y León a un empresario condenado hace tres días por cinco delitos en la trama Gürtel de financiación ilegal del Partido Popular. El mismo empresario propiedad... propietario de la mitad de la televisión de esta tierra, que luego publica en su periódico, tras recibir decenas y decenas de millones de euros de dinero público, que el mayor chiringuito son las Cortes de Castilla y León. Sí, este Parlamento, la representación democrática de los ciudadanos y las ciudadanas. [Aplausos]. ¡Pero cómo se atreve! El problema no es la Administración paralela, ni la corrupción, ni la caja b; su problema es la democracia. Pareciera que algunos no quieren que haya control al Gobierno, pareciera que quieren volver a los tiempos donde solo uno mandaba, ¿verdad? ¡Y no se lo vamos a permitir! [Aplausos].

Fíjense, fíjense si es trascendente esto que las dos últimas semanas la investidura ha estado paralizada tan solo por ver quién controlaba en el Gobierno el dinero de la publicidad institucional, ¿verdad? Es casi de lo poco que sabemos de este Gobierno, a pesar de su discurso de esta mañana, señor Mañueco. Porque, aunque hace mucho que Castilla y León no tiene Gobierno, la parálisis ahora es crítica. Ya le dije que no ha tomado ninguna medida frente a esta última crisis. Pero es que de su pacto en realidad no sabemos nada. No se ha propuesto ni una medida concreta para luchar contra la despoblación, ni una medida para hacer frente a los desequilibrios territoriales, nada para mejorar la sanidad y el estado del bienestar, ni una medida para ayudar a nuestro desarrollo económico, ni una propuesta real para nuestro campo.

El control de la comunicación y la inmigración ordenada. Estas han sido dos de sus preocupaciones. Otro eufemismo para hablar simple y llanamente de racismo. Eso es lo que ustedes en realidad quieren decir. [Aplausos]. Lo siguiente fue... lo siguiente fue acabar con el adoctrinamiento en las aulas. Un adoctrinamiento que usted, señor Mañueco, explicó entre balbuceos que no existe, pero que precisamente por eso hay que insistir. Me lo explique.

Es que usted hoy lo único que ha concretado son las medidas que le exige Vox. El resto son las mismas promesas que llevan haciendo más de 30 años: las unidades de radioterapia, prometidas desde dos mil siete; los consultorios médicos, que duran abiertos lo que duran sus discursos. Y así todo. Ese es su Programa de Gobierno hoy, la nada más absoluta.

La digitalización, la política de vivienda y la educación 0 a 3 años se le ha pasado decir, por lo que sea, que se va a poner en marcha por fin gracias a los fondos del Gobierno de España y a los fondos europeos. Se le ha pasado. [Aplausos].

La siguiente preocupación de este Gobierno... la siguiente preocupación de este Gobierno ha sido acabar con los sindicatos y darle la puntilla al diálogo social. Así es, porque aquí ya llueve sobre mojado. Usted puede decir cuantas veces quiera que cree en el diálogo social, señor Mañueco; pero si después de haber permitido los ataques de su anterior socio, por primera vez en la historia haber incumplido los acuerdos del diálogo social, le entrega la Consejería de Empleo y el control del diálogo social a la extrema derecha, que insulta y amenaza a los representantes de los trabajadores y trabajadoras, será usted el único responsable, señor Mañueco, el único. [Aplausos].

Yo quiero hoy volver a reivindicar el papel decisivo del diálogo social en nuestra tierra, que ha logrado avances en materia de protección social y de desarrollo económico. Esta Comunidad Autónoma sería mucho peor sin el trabajo incansable por el consenso y la paz social que han hecho los sindicatos y la patronal, como lo están haciendo a nivel nacional de nuevo. En esta crisis todo el mundo está contribuyendo, salvo ustedes.

Eso sí, de momento lo único que tiene fecha de caducidad en Castilla y León son la lucha contra la violencia de género y la memoria histórica. Y aquí me van a permitir detenerme un momento.

Miren, la pasada semana, en apenas cuarenta y ocho horas, tres mujeres fueron asesinadas. A una joven de diecisiete años le dieron una paliza. Un niño de once años fue asesinado por su padre solo con el fin de provocar un dolor inenarrable a su madre. Han sido ya 1.136 mujeres las asesinadas desde que hay registros. La violencia de género existe, claro que existe. Ha costado mucho visibilizar, sacar del ámbito familiar y doméstico una violencia que se ejerce contra las mujeres en una sociedad machista a la que le queda mucho por hacer. Y yo no soy más que un hombre que ha tenido la suerte de aprender y trabajar durante muchos años con muchas feministas. Un hombre consciente de que nos queda tanto por hacer que no podemos permitirnos retroceder ni un solo milímetro. [Aplausos].

Por eso hoy le pido, señor Mañueco, hoy le pido, hoy le suplico que no mercadee con la igualdad y con los derechos de las mujeres; que no dilapide todo lo que hemos conseguido; que no dilapide el Pacto de Estado contra la Violencia de Género. Le pido que tramite de forma inmediata el proyecto... el anteproyecto de ley autonómica de atención integral a las víctimas de violencia de género que estaba pendiente en Castilla y León, señor Mañueco, se lo pido. [Aplausos]. No puede... no puede hacernos retroceder. Y no puede hacernos trampas, porque usted sabe que no tramitar esa ley que ya estaba acordada es un retroceso. Es un proyecto elaborado desde el consenso, es una ley que cuenta con el apoyo del diálogo social y de numerosos colectivos, es una ley de todos y de todas. No podemos permitir que la extrema derecha se imponga a los derechos de las mujeres, señor Mañueco, no podemos. [Aplausos].

Y, fíjese, también en lo que respecta a la memoria histórica, en Castilla y León llegamos a cierto consenso. Es que acordamos una normativa, que era limitada, claro, pero que sacó de la confrontación buena parte del debate. Eso fue antes de que usted llegara, por supuesto, y antes de la llegada de Vox. Este Parlamento logró un importante acuerdo para desarrollar una normativa específica en Castilla y León y para poner en marcha el Consejo Asesor de Memoria Histórica. Este Parlamento ha vivido un homenaje y reconocimiento a las víctimas de la Guerra Civil y de la dictadura franquista en la figura de Mercedes Abril, que luchó durante décadas para darle una digna sepultura a su padre. Y se trata de eso, solo de eso, justamente de eso, de reparación, de verdad, de memoria democrática.

Mire, señor Mañueco, esto es una cita literal: "Una democracia no se puede permitir tener muertos en las cunetas desde hace ochenta años". [Aplausos]. No es mía. Esto es lo que le decía a esta Cámara el anterior vicepresidente de la Junta de Castilla y León del Partido Popular. ¡No puede traicionar la memoria, no puede traicionar el legado del propio Partido Popular, señor Mañueco!

Fíjense, tres años después usted se presenta aquí sin haber cumplido el Pacto de Gobierno con Ciudadanos. Es que no ha cumplido ni una línea. No ha cumplido tampoco el Pacto por la Reconstrucción al que llegamos todas las fuerzas políticas, no ha cumplido los acuerdos con el diálogo social ni los que firmó con los empleados públicos como el de las 35 horas. Por cierto, creo que esta mañana ni una sola mención a los empleados públicos, ni una sola mención, con lo importantes que han sido en esta pandemia y para sostener el estado de bienestar. A ver si va a resultar que va a tener palabra ahora, que va a empezar a tener palabra cumpliendo el acuerdo con la extrema derecha. Mire, es que es la primera vez que veo en mi mayor crítica hacia usted su mayor virtud. Le animo, señor Mañueco, a que sea usted mismo, solo eso, que incumpla el pacto con Vox. Solo tiene que hacer lo mismo de siempre. [Aplausos].

Aunque lamentablemente... aunque lamentablemente espero todo lo contrario; lo terrible es que usted, que ha incumplido todos los acuerdos a los que ha llegado con todo el mundo, quizá empiece a cumplir su palabra con el pacto más infame que haya firmado nunca. Y a pesar de ello, o precisamente por ello, el Grupo Parlamentario Socialista seguirá trayendo propuestas siempre.

Ya le anuncio aquí que, además del plan de choque para hacer frente a las consecuencias de la guerra de Ucrania, que ya les he relatado, presentaremos en esta Cámara iniciativas para garantizar la implantación de la educación de 0 a 3 años gratuita -y pública, que se le olvida, y pública- [aplausos]; la puesta en marcha de una red de centros comarcales de Formación Profesional; el incremento de la financiación de las universidades públicas; la creación otra vez de una comisión de investigación sobre lo sucedido en las residencias durante la pandemia -la convocatoria precipitada de elecciones disolvió también esta Comisión, que no acabó sus trabajos-, y que es indispensable para saber qué pasó y cambiar el modelo de atención para proteger por fin de forma adecuada a nuestros mayores.

Vamos a traer iniciativas, sí, para suprimir la administración paralela, esos chiringuitos que les gustan tanto y que en tres años no tuvieron tiempo -¿verdad, señor Igea?- de suprimir; la puesta en marcha de bonificaciones fiscales para luchar contra la despoblación; medidas contra la exclusión financiera; el refuerzo de la inversión en sanidad y la reapertura -sí, de nuevo- de toda la red de Atención Primaria; la gratuidad de los libros de texto y el material escolar; el cambio en el modelo de atención residencial y el aumento de las plazas públicas; el impulso de una ley para hacer frente al reto demográfico para impulsar la cohesión territorial y para luchar contra la despoblación, para avanzar en la descentralización económica y administrativa de nuestra Comunidad y reducir los desequilibrios; para luchar contra el cambio climático y defender la Agenda 2030, en contra de lo que piensan sus socios.

Y los fondos europeos. Señoras y señores procuradores, no podemos perder más tiempo: somos la única Comunidad autónoma que tiene paralizada la gestión de los fondos europeos, seguramente la única Comunidad autónoma que no puede permitírselo. Porque, sin una gestión adecuada, eficaz y ambiciosa de estos fondos, Castilla y León puede perder el último tren para hacer frente al reto demográfico, para revertir la sangría, los desequilibrios territoriales, para cambiar el modelo económico y productivo, para retener el talento joven, que se ve obligado a emigrar desde hace generaciones. Ya sabemos que estamos en tiempos de enormes dificultades, pero también podemos aprovechar la llegada de estos fondos europeos por parte del Gobierno y de Europa.

Los proyectos estratégicos para la recuperación y la transformación económica parece que han sido diseñados para nosotros: vehículo eléctrico, salud de vanguardia, energías renovables e hidrógeno, cadena agroalimentaria, economía de la lengua, economía circular, la economía de los cuidados... En cada uno de esos campos, Castilla y León puede y debe ser protagonista. Y, sin embargo, llevamos meses y meses viendo pasar el tiempo sin ambición, sin transparencia. Y el futuro de nuestra tierra para las próximas décadas depende de hacer esto bien. No hagan que tengamos que arrepentirnos dentro de unos años.

Señoras y señores procuradores, hoy, de este Parlamento, saldrá elegido el presidente de Castilla y León. Señor Mañueco, usted no será mi enemigo, ningún parlamentario de esta Cámara lo será. A pesar de todo lo que hemos visto estos años, yo sigo creyendo en la política, sigo creyendo en el servicio público, en el interés general. Sigo pensando que la política es un noble arte que debe buscar el acuerdo entre los que pensamos diferente. Sigo pensando que en la política no hay enemigos, quizá adversarios, que compartimos más cosas de las que nos separan. Y, sin embargo, sí combato ideas, con todas mis fuerzas. No creo que todos seamos iguales, en ningún partido, y defiendo con convicción los ideales en los que creo. Y creo en la igualdad, en la solidaridad y en la justicia social. Creo que la libertad individual solo está garantizada si hay igualdad de oportunidades. Y me declaro feminista. Sí, feminista. [Aplausos].

Por eso, por eso, sí combatiré a los que no creen en la igualdad de mujeres y hombres, a quienes atacan a las minorías, a quienes creen que hay refugiados de primera y de segunda, a quienes quieren volver a meter en el armario a los que tanto han luchado por los derechos de los colectivos LGTBI.

Y, por eso, me rebelo hoy contra la equidistancia y contra la indiferencia. Ya escribió Hannah Arendt que el mal, en su encarnación más terrible, se banalizaba. Hoy, de forma impune, vemos en España cómo, en horario de máxima audiencia, se compara en Guernica a los que bombardeaban con los que eran bombardeados. Esa es la deshumanización del adversario, las que le hablaba al inicio de mi intervención: derrotar al que piensa diferente lo justifica todo. Y no es verdad.

Así que no, hoy me niego a blanquear lo que está haciendo el Partido Popular, y consintiendo: que Castilla y León inicie una de sus páginas más negras.

Pero la esperanza sigue viva. Hemos superado enormes dificultades...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señor Tudanca, tiene que ir terminando.


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

(Termino ya, señor presidente). ... La esperanza sigue viva, hemos superado enormes dificultades y superaremos esta también. Esta tierra volverá a ser un lugar de oportunidades, volverá a tener futuro, volverá a ser un ejemplo de diálogo y acuerdos. Esta tierra, a la que hoy muchos miran con temor, será también la que devuelva el aliento y la esperanza de que la rabia se convierta en rebeldía. Así que, en Castilla y León, cuando parece todo perdido, como decía Miguel Hernández en su Canción última: dejadnos la esperanza. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Tudanca. Para contestar, tiene la palabra el candidato, el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Muy buenas tardes. Gracias, señor presidente. Señor Tudanca, nos ha sorprendido: está alcanzando usted las más altas cotas de la moderación, la tolerancia, la cortesía parlamentaria y la convivencia democrática. Solo una frustración galopante, personal y política podría haberle hecho caer a usted en su discurso, un discurso sin altura de miras.

Tenía un reto importante esta tarde, encontrar adjetivos para llevar más lejos su escalada de descalificaciones que a lo largo de los tres últimos años nos ha destinado. Un reto, la verdad, difícil de superar; y ha triunfado, señor Tudanca. En todo lo demás ha sufrido una derrota, pero en eso de los insultos ha triunfado de verdad. Enhorabuena, porque, hasta que no suba al estrado el señor Fernández, está usted en la élite de la descalificación y en lo más granado del insulto. [Aplausos].

Por desgracia para usted, señor Tudanca, no es eso lo que quieren las personas de Castilla y León. Mire, su estilo, su proyecto, vacío de contenido, basado en el enfrentamiento, no convence en Castilla y León. En la noche electoral usted mismo lo reconocía, cuando le tentó esa idea de dimitir, usted lo dijo: otros vendrán y harán que el cambio llegue a esta tierra.

Precisamente, el cambio que usted habla, el que quiere de verdad la Comunidad, el proyecto de transformación y de modernización que quiere esta tierra es el que representa mi candidatura. De lo que no se ha enterado, señor Tudanca, es que la mayoría piensa que usted representa un cambio, sí, pero un cambio a peor. Acéptelo porque es así, es un hecho: usted lo que representa es un cambio a peor. [Aplausos].

Señor Tudanca... señor Tudanca, no deja de sorprenderme lo mucho que le cuesta a usted aceptar los resultados de la democracia. Para usted la democracia solo vale cuando le permite al Partido Socialista gobernar, y no vale en el resto de los casos. Lo que usted ha oído de mi boca esta mañana es lo que ha salido de una mayoría de las urnas el trece de febrero. Esa es la realidad. Las personas de Castilla y León con su voto decidieron eso el trece de febrero; en libertad, en una jornada tranquila, de participación democrática, para elegir a los representantes en las instituciones de nuestra Comunidad. Unas instituciones, por cierto, que merecen un respeto, porque ¿qué es un Parlamento? Parece mentira que tenga que hacerme yo esta pregunta. ¿Qué es un Parlamento? Un Parlamento... un Parlamento es un sitio al que se viene a hablar con aquellos con los que no estamos de acuerdo, o con los que estamos en desacuerdo, a... a confrontar ideas, a mostrar niveles de conocimiento, de trabajo y de respeto por las gentes a las que representamos.

Mire, solo en los regímenes autoritarios los parlamentos sirven para coincidir en todo, para reflejar un pensamiento único. Quien no entiende esto, quien empieza por negar el saludo al que tiene otra forma de pensar, ha suspendido en primero de democracia... [aplausos] ... han suspendido en primero de democracia, y no nos pueden dar lecciones a nadie. Ustedes no pueden dar lecciones a nadie. ¿Lo han entendido? A nadie, señor Tudanca.

Usted... [aplausos] ... señor Tudanca, usted, rasgándose las vestiduras sanchistas, decía que había otro camino -le hemos escuchado aquí-, había otro camino, y lo dice usted que hace tan solo unos meses nos obligó a toda Castilla y León a atravesar por un lodazal.

Mire, como ya le he dicho muchas veces: usted es sobre todo un político dócil y sumiso al interés de Sánchez. Cumpliendo las órdenes de Sánchez usted embarcó a Castilla y León en una vergonzosa moción de censura apoyada en tránsfugas. ¿Quién puede fiarse de usted, señor Tudanca? [Aplausos]. Ya ha demostrado que la estabilidad de Castilla y León no le importa nada de nada. Solo le importa la voz de su amo. Usted no ha querido dialogar. Se ha tachado a sí mismo como portavoz de los que votaron socialismo en febrero. Se ha autoexcluido de aportar algo para las personas de esta tierra. Ha preferido quedarse en la grada chillando; chillando como un aficionado exaltado, en vez de participar de forma responsable en el terreno de juego político, porque nunca, nunca tuvo el más mínimo interés de aportar ideas a Castilla y León. Ya sabemos cómo son sus ofertas: son de postureo, son ofertas que nunca son reales ni sinceras. A usted no le interesa garantizar la estabilidad de esta tierra. Usted lo que quiere es romper la estabilidad de Castilla y León, alimentar una confusión donde no sea posible construir nada.

Mire, señor Tudanca, su Gobierno, su comportamiento desde la moción de censura le inhabilita para dar lecciones políticas, y mucho menos lecciones morales a nadie. No, señor Tudanca, ni de usted ni del señor Sánchez aceptamos lecciones, sermones, imposiciones ni inquisiciones. [Aplausos].

Habla usted de pactos, y Sánchez también habla de pactos. Oiga, aquí no hay pactos con separatistas que consideran inferiores a los niños que hablan castellano. Aquí no hay pactos con los que organizan homenajes para recibir como héroes a los terroristas asesinos de ETA. [Aplausos]. Aquí no hay pactos con los golpistas que cuestionan la democracia de España. Aquí no hay pactos con los que alientan la violencia en las calles o con los que aplauden la ocupación de las viviendas. Y por eso lo suyo, señor Tudanca, y lo del señor Sánchez, es un ejercicio de hipocresía, de cinismo político en grado sumo. Aquí defendemos principios en los que cree la inmensa mayoría de las personas de Castilla y León.

Se los voy a recordar: la unidad de España, la igualdad de todos los españoles...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Por favor, guarden...


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

... la defensa del Estatuto y de la Constitución del setenta y ocho...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señor... señor Fernández Mañueco, señor Mañueco. Por favor, guarden silencio. [Murmullos].


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

... la defensa del Estatuto, de la Constitución del setenta y ocho y la aplicación de la ley. ¿Recuerda, señor Tudanca? Porque estos son los valores que yo defendí en el año dos mil diecinueve, los mismos; los mismos defiendo hoy aquí, porque la coherencia siempre es importante, pero en política mucho más. Hoy puedo venir aquí a defender el mandato de los castellanos y leoneses con un proyecto reconocible y previsible, porque yo ofrezco certidumbre y seguridad. Yo sigo en mi sitio, el Partido Popular sigue en su sitio. Es este Partido Socialista el que ya no se reconoce a sí mismo. [Aplausos].

Señor Tudanca, frente a sus intrigas de estos meses yo me presento en estas Cortes con un Acuerdo de Gobierno que está a la vista de todos, accesible para los miembros de esta Cámara y de toda la sociedad de Castilla y León. Un acuerdo transparente, claro, con luz y taquígrafos. Constituye un Programa de Gobierno que he desgranado en la mañana de hoy solicitando la confianza de esta Cámara; un acuerdo que nace de la responsabilidad, del respeto y también de la lealtad a esta tierra, a la Constitución y al Estatuto, que son nuestras normas máximas.

Aunque usted, señor Tudanca, nunca lo vaya a reconocer, este es un pacto que expresa el sentir mayoritario de las personas de Castilla y León, un pacto del que estoy orgulloso, y miles y miles de personas de esta Comunidad también lo están, y serán muchos más cuando la lean, dejando a un lado ideas preconcebidas y prejuicios. Cualquiera que lea objetivamente el pacto entenderá que se trata de un punto de equilibrio aceptado y asumido por las personas.

Mire, señor Tudanca, una de las columnas principales de este pacto, de este acuerdo que hemos suscrito con Vox es el principio de igualdad. Por su actitud, está claro que usted cree que la igualdad solo puede defenderse con ideas preconcebidas y con prejuicios. Yo creo que la igualdad se debe defender con hechos y con valores arraigados.

Ustedes se quejan muchas veces -y además lo hacen con vehemencia y con muchas alharacas- de los 35 años del Gobierno del Partido Popular. Yo estoy orgulloso de esos 35 años de Gobierno del Partido Popular; o, mejor dicho, estoy muy orgulloso de esos 35 años. Si las personas de Castilla y León nos dan su respaldo, por algo será. Entre otras cosas, porque tenemos una trayectoria política, tenemos una trayectoria política, somos un ejemplo en defensa de la igualdad, mientras usted solo tiene palabrería sobreactuada y ofendida.

Mire, hay un dato que usted, que nadie debe olvidar jamás: que miles y miles de mujeres han votado para que ustedes sigan en la Oposición y nosotros seamos Gobierno. [Aplausos]. Porque ustedes pueden cerrar los ojos a ese hecho, pero esa es así. Hoy le exijo... hoy le exijo que respeten ustedes a esos miles y miles de mujeres, que son adultas, que son mayores de edad, que saben lo que quieren, que no necesitan tutelas, y menos de una izquierda fracasada y trasnochada, y que no son de peor condición que absolutamente nadie; son iguales, orgullosamente iguales. Pero es que a ustedes se les ve el plumero: dicen defender un valor o a un colectivo, pero a la hora de la verdad solo defienden a los suyos, a sus propias ideas, a su propia posibilidad de llegar al poder o de mantenerse en él. Pues se lo digo alto y claro: las mujeres de Castilla y León le van a dar a usted y al señor Sánchez una lección de independencia, de autosuficiencia, de no dejarse manipular ni adoctrinar por ustedes. [Aplausos]. Ellas lo van a ver: un Gobierno que trabaja por sus intereses, por una igualdad efectiva. Y tendrán ustedes que pedir disculpas por todas las barbaridades que han dicho.

Lo he señalado en muchos foros y lo repito hoy aquí: yo no voy a dar ni un paso atrás en la lucha contra la violencia, ni un paso atrás en la garantía de protección de cualquier mujer contra una agresión machista, ni un paso atrás en la plena vigencia de la Ley de Violencia de Género, ni un paso atrás en la violencia contra nuestros menores, mayores, discapacitados, en el entorno familiar. También hay que combatir la violencia en el ámbito familiar. Y compromiso, sí, con una nueva ley de violencia intrafamiliar, que -como he explicado reiterar... reiteradamente- supondrá ampliar, elevar a rango de ley el vigente Plan de Prevención de Violencia en el Ámbito Familiar; y que solo va a servir... solo servirá para mejorar la atención a todas las víctimas: mujeres, menores, mayores, personas con discapacidad, personas vulnerables. ¿Qué problema puede tener usted o nadie con esto? Dejen de generar confusión y, sobre todo, dejen de mentir. ¿Qué problema hay en intentar prevenir que un hijo agreda física o psicológicamente a su padre?

Algo similar ocurre en relación con las personas inmigrantes. El pacto que hemos suscrito considera la inmigración legal y ordenada como una fuente de oportunidades. Pero es que, si no tuviéramos esos problemas de despoblación en Castilla y León... No, nuestra tierra es una tierra abierta, una tierra de acogida, como estamos demostrándole al pueblo de Ucrania. ¿Acaso están ustedes en contra del principio de legalidad, del Estado de Derecho? Porque es lo único que... que apunta el pacto en este tema, que promoveremos una inmigración legal y ordenada, como defiende... o, mejor dicho, como tiene que hacer cumplir el Gobierno de España: luchar contra las mafias, defender nuestras fronteras y también ayudar a los países en origen, para que todas aquellas personas que, cumpliendo las normas vigentes, quieran vivir, trabajar, contribuir al futuro de Castilla y León, integrarse en nuestra sociedad, en nuestra economía y en nuestra cultura, esa integración. Y vamos a trabajar por la integración (como dice, por cierto, nada más y nada menos que el Estatuto de Autonomía de Castilla y León).

Oiga, yo creo en el diálogo social, y voy a trabajar con el máximo empeño y con la máxima voluntad de acuerdo para que podamos llegar a esos acuerdos con el diálogo social. Recuerda usted la legislatura pasada; es curioso, en las peores circunstancias, en menos tiempo conseguimos el mayor número posible de acuerdos respecto el diálogo social. Mire, respecto a este asunto, yo... como dice el refrán, "cuando uno no quiere, dos no barajan". Lo que sí le puedo decir es que la Junta de Castilla y León está en disposición de dar lo mejor de sí para llegar a otros acuerdos.

Respecto del trabajo del Gobierno en funciones, lo que tengo que decir es que no es verdad lo que dice usted. Ha habido un Gobierno en plenitud de funciones. Mire, desde el veinte de diciembre, hemos aprobado más de trescientos expedientes y se han movilizado 2.500 millones de euros -que se dice bien y pronto-, aproximadamente, el 25 % del presupuesto de la Junta de Castilla y León. Hemos aprobado iniciativas tan importantes como el Plan Director de Promoción Industrial, el Plan Estratégico de Igualdad, el Decreto de Conciertos Sociales... Bueno, yo entiendo que esto a ustedes no les importa mucho. Hemos incrementado el 6 % la cuantía de las prestaciones de dependencia, que benefician a 77.000 personas; hemos coordinado con el Gobierno de España la labor que tenemos que hacer para ayudar a los refugiados ucranianos; ayudas complementarias para los ganaderos en la política agraria común; hemos convocado 1.200 plazas de maestros; ayudas a las universidades públicas para que contraten investigadores. En fin, colaboración con las entidades locales, dotación de infraestructuras... Podría seguir hablando.

Si usted analiza desde el día que se convoca las elecciones hasta que va a estar en plenitud el Gobierno, eche cuentas, estamos hablando de doce, catorce días; teniendo en cuenta que entre medias han estado las Navidades y la Semana Santa, me parece que estamos dentro de algo absolutamente homologable.

Respecto de la memoria histórica, le tengo que decir algo especialmente importante: la normativa en materia de la concordia lo que buscamos es un elemento de reconciliación de verdad, evitando la utilización de la historia para dividir a los españoles. Estamos hablando de un tema muy sensible en el plano personal y muy delicado en el plano histórico, y por eso hay que tratarlo con mucho cuidado. Más allá de las obligaciones legales, hay una elemental un... humanidad que nos lleva, desde luego, a dar todo el apoyo a aquellas personas, a aquellos dramas personales causados por la guerra civil y la posterior dictadura. Así lo hemos hecho, y así lo seguiremos haciendo. En ningún caso se va a dejar de ayudar a las personas que quieran recuperar los restos de sus seres queridos; pero seguiremos rechazando que esto se quiera utilizar como instrumento de confrontación política o para reescribir la historia desde una única visión. Hay que superar esta situación; y nuestro objetivo es ese.

Mire, respecto de otras cuestiones, vamos a garantizar, después de esos 35 años de Gobierno en nuestra Comunidad, en Castilla y León, vamos a seguir garantizando la educación y la sanidad. Es algo que me parece importante. Pero creo que hay algo que hay que tener en cuenta en estos momentos. Mire, yo represento la estabilidad en Castilla y León; y usted representa la incertidumbre política, la búsqueda de tránsfugas y la añoranza de un gobierno Frankenstein en Castilla y León. No era eso lo que querían las personas de esta tierra... [aplausos] ... en consecuencia, han votado, señor Tudanca; y usted lo tiene que asumir.

También tiene que asumir que yo represento hoy la defensa de los intereses de Castilla y León, mientras usted solo representa la defensa de los intereses, el sometimiento a Sánchez. Siempre ha sido así. Siempre ha defendido las políticas de Sánchez -me refiero-, incluso cuando atentaban más claramente contra nuestros sectores estratégicos y contra nuestros intereses. Podría hablar del campo, del azúcar, de la remolacha, la carne, la automoción, las minas, las térmicas... hasta Navacerrada, señor Tudanca. O cuando nos discriminan sin ningún pudor en el reparto de fondos o en los presupuestos generales del Estado. No era eso lo que querían las personas de Castilla y León, y, en consecuencia, han votado; y usted lo tiene que asumir, señor Tudanca.

Yo hoy represento aquí un proyecto útil para las personas, mientras que usted simplemente representa un modelo fracasado, señor Tudanca, y eso que emergía reforzado después de su fracasada moción de censura. Usted perdió la moción, perdió el rumbo y también perdió el norte. Sí, así es, señor Tudanca.

Yo vengo aquí con el aval de los estudios e informes independientes que dice que, en Castilla y León, tanto en sanidad como educación, como en dependencia, como en servicios sociales, gestionamos muy bien en esta tierra. Usted viene aquí con palabras gruesas y con cualquier pancarta a la que agarrarse que crea que así desgasta a la Junta. No era eso lo que querían las personas de Castilla y León y, en consecuencia, han votado; y usted lo tiene que asumir, señor Tudanca.

Y sigo. Yo represento hoy políticas de crecimiento económico y generación de empleo, políticas de impuestos bajos; y usted encarna una política fiscal de asfixia a las personas, a las familias y a las empresas. Y eso solo conduce a una menor calidad de vida. [Aplausos]. Usted siempre quiere copiar los sablazos fiscales de Sánchez. No sé por qué, pero no era eso lo que querían las personas de Castilla y León y, en consecuencia, han votado; y usted, señor Tudanca, lo tiene que asumir.

Yo represento el diálogo, el acuerdo, la unión; usted, el enfrentamiento y la convulsión. Yo represento un proyecto de futuro para esta tierra; y usted alguien que quiso ser alternativa y que ha fracasado, señor Tudanca. Algún día usted lo tendrá que asumir: Castilla y León no quiere ser una muesca más en la cartuchera del señor Sánchez. [Aplausos].

Estoy orgulloso de las actuaciones que hemos impulsado estos últimos años para proteger a las personas de Castilla y León y para modernizar nuestra tierra; y también estoy muy orgulloso del programa que me propongo cumplir, con responsabilidad, con ilusión, de la mano del señor García-Gallardo, y también con el máximo esfuerzo y empeño, para ofrecer a las personas servicios públicos de primer nivel, mayor prioridad para nuestra sanidad pública, para que Castilla y León siga siendo la locomotora en educación de España, para proteger y apoyar a las familias y también apostar por la natalidad, para poner las cosas más fáciles a las pymes y a los autónomos, para reforzar y modernizar infraestructuras y servicios. La solución de nuestros problemas demográficos tiene que pasar por alinear todas las políticas: las de crecimiento económico, las de modernización de infraestructuras, las de garantía de los servicios públicos, para así poder afrontar el futuro.

Y por... para demostrar a quienes solo saben hablar mal de esta tierra que Castilla y León merece la pena y es atractiva. Que tenemos recursos, que somos una potencia en muchos sectores, y que también podemos crecer en otros muchos. Y por eso aquí viene más gente de la que se va, aunque a ustedes no les... no les guste, porque eso les descuadra... (sí, ya oigo, oigo) les descuadra los argumentarios de siempre.

Señor Tudanca, después de lo que sabemos de usted y de su intervención de hoy, dudo que haga una Oposición constructiva en los próximos años, una Oposición en positivo -como siempre nos promete, pero nunca cumple-, con propuestas e ideas, y que se siente a dialogar. Espero al menos tener un cauce de diálogo, al menos, para contar con usted en las reivindicaciones justas que hagamos al Gobierno de España en defensa de los intereses de Castilla y León.

Le voy a poner algunos ejemplos: fondos COVID, infraestructuras, trato adecuado a nuestro campo, a nuestros sectores estratégicos, y no discriminación frente a otras Comunidades Autónomas.

Voy concluyendo. Señor Tudanca, súmese a ese cambio imparable tantas veces ha demandado para Castilla y León, porque ese cambio está aquí, es real, es más grande que usted y que yo. Elija esta tierra, elija el lado correcto de la historia para Castilla y León, porque tiene que renegar de aquellos que quieren ningunearla. Póngase del lado correcto de la historia, porque es lo mínimo que merecemos las personas de Castilla y León. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Fernández Mañueco. Para un turno de réplica, tiene la palabra el señor Tudanca Fernández, por un tiempo de diez minutos.


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

Muchas gracias, señor presidente. Empezaba el señor Mañueco su réplica diciendo que no le he sorprendido (porque, sí, no recuerdo muy bien). Usted sí que no me ha sorprendido: llevamos aquí tres años y es capaz todavía de sacarme diez folios con la réplica escrita. [Aplausos]. Claro, esto de traer la réplica escrita quiere decir que usted ha venido a reprocharme que yo hable de cambio, cuando no he hablado de cambio en toda mi intervención, porque aquí lo que se ha producido es el mayor...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías, por favor.


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

... retroceso en términos históricos de la historia de Castilla y León. Eso es lo que están haciendo ustedes con la extrema derecha, señor Mañueco. [Aplausos].

Es que escuchándole uno se preguntaba... yo no sé qué va a decir luego el señor portavoz de Vox. Pero si usted ha ejercido hoy de portavoz de la extrema derecha. Es que lo que da verdadero pavor es que el Partido Popular en Castilla y León y en España es irreconocible. El problema no es que usted esté orgulloso de los 35 años de Gobiernos del PP aquí; el problema es que los que vinieron antes que usted aquí en el Partido Popular no se reconocen en el PP que usted ha hecho, no se reconocen. [Aplausos]. Es que... es que habla de modernización. Acaba de pactar con la extrema derecha el mayor recorte de libertades y de derechos de nuestra historia y habla de modernizar nuestra Comunidad, y habla...

Mire, señor Mañueco, se lo he dicho muchas veces: no intento darle lecciones éticas ni morales. La política no está para eso, el Parlamento no está para eso. Allá usted con su conciencia, allá usted. Ahora bien, que usted venga aquí a dar lecciones de parlamentarismo y que compare... que compare no saludar con pactar con la extrema derecha el fin de los derechos de las mujeres, de los trabajadores, del colectivo LGTBI... ¡hombre, por favor, pero cómo es posible! [Aplausos].

Es que ustedes... es que ustedes han dicho del Gobierno de España que es ilegítimo, que es ilegal, han llamado al presidente del Gobierno asesino. Pero que a mí no me tiene usted que decir que no dude de su legitimidad, que se lo he dicho: que no, que yo creo profundamente en la democracia y en el parlamentarismo, y en los acuerdos. Ahora, lo que he criticado siempre es que usted llegara a acuerdos con quienes dijeron que venían a cambiar y a regenerar habiendo perdido las elecciones, y ahora pacte, además, con la extrema derecha. Hombre, que sí, si yo ya sé cuáles han sido los resultados electorales. También los suyos: los dos peores resultados de la historia del Partido Popular en Castilla y León. Los dos peores. Los dos peores. [Aplausos].

Mire, impuestos, impuestos. Usted ha prometido una revolución fiscal -que en la misma frase, señor Mañueco, y revolución, me ha parecido fuerte-. Pero, mire, para hablarle de impuestos. Claro que nosotros queremos hablar de impuestos. Y claro que yo defiendo que subir o bajar impuestos no es de izquierdas o de derechas, depende a quién se los subas y depende a quién se los bajes. Nosotros queremos subir los impuestos a los que más tienen para darle más a quien más necesitan, y para tener un buen estado de bienestar.

¿Sabe usted que en Castilla y León 780.000 castellanos y leoneses no pagan ya IRPF? Y que, por tanto, cualquier bajada que usted haga no les va a beneficiar: los que más lo necesitan. Porque ustedes solo bajan impuestos a los que más tienen. Eso es lo que quieren hacer. [Aplausos].

Es que que den ustedes lecciones de revolución fiscal ahora que estamos hablando de crisis energética y de crisis de los combustibles. ¿Pero se acuerdan del centimazo sanitario? ¿Se acuerdan que ustedes subieron 5 céntimos la gasolina y que un Gobierno socialista lo ha bajado 20? ¿Se acuerdan? ¿Se acuerdan? [Aplausos]. Lo subieron ustedes, los combustibles, lo subieron ustedes, y votaron en contra de bajar el IVA de la energía. Es que ustedes han sido los que, cuando llegaron al poder en dos mil once, subieron el IRPF cinco veces, dos el impuesto de sociedades, dos el IVA, dos el IBI, mantuvieron el impuesto de patrimonio, crearon 12 nuevos impuestos. Que le pusieron un impuesto al sol, señor Mañueco. Que no nos dan lecciones a nosotros de política fiscal. No, no nos la dan.

Y luego, miren, fíjense, fíjense que yo no quería...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías, por favor.


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

... no quería hablar de esto en mi intervención, porque para empezar todavía no está nombrado el Gobierno, pero ya en su intervención hizo un amago, hizo un amago, y ya la ha rematado en la réplica, claro. Usted se ha puesto a hablar de víctimas del terrorismo, se ha puesto a intentar darnos lecciones. Bueno, a mí... me gustaría -que no se me olvide- que me dijera un solo insulto que yo le haya dedicado. Uno, solo uno, en todos estos años, no hoy, en todos estos años.

Mire, usted ha tenido la desfachatez de hablar de víctimas del terrorismo cuando va a nombrar consejero de Cultura al señor Santonja. [El orador muestra una imagen]. Imagínense... [aplausos] ... imagínense qué estarían diciendo en este país, qué estarían diciendo ustedes, qué estaría diciendo la extrema derecha si alguien que iba a mítines de Herri Batasuna en los años del plomo fuera nombrado consejero de esta Comunidad Autónoma, qué estarían diciendo. [Aplausos]. Ochenta víctimas, ochenta asesinatos de ETA el año que escribía un artículo defendiendo a un fundador de la banda terrorista, señor García-Gallardo. Eso es lo que ustedes son. Y usted viene aquí y nos habla de reconciliación, de reconciliación. Claro, ya se podrían haber apuntado ustedes antes, después de todas las cosas que hemos tenido que aguantar los socialistas, que fuimos, junto con muchos otros -también ustedes- quienes sufrimos los peores años en el País Vasco y quienes logramos que en este país hace más de diez años que una banda terrorista no asesina. Y estamos muy orgullosos. Pero, por favor... [aplausos] ... no vuelvan a utilizar el nombre de las víctimas del terrorismo, no se atrevan. Que aquí el único... el único en esta Cámara que ha llegado a acuerdos con Bildu es el señor Maroto, que sigue... sigue empadronado en Sotosalvo... [aplausos] ... veremos cuánto tiempo le dura, veremos cuánto tiempo, veremos cuánto tiempo.

Y, hombre, el señor Feijoo el otro día va y nos dice que el Partido Popular escribió la Constitución. Hombre, para empezar podría existir, pero es que no existía entonces el Partido Popular. Es que entonces era Alianza Popular, y 8 diputados de Alianza Popular votaron a favor, pero es que hubo 5 que votaron en contra y 3 se abstuvieron. Es que Alianza Popular, sus antecesores, hicieron campaña por la abstención en la Constitución. Así que no es suya. Afortunadamente es de todos los españoles. No, no, no es usted el que tiene... [aplausos] ... la exclusiva de la derecha constitucional.

Mire, usted habla de pactos sin prejuicios y sin complejos. Y tanto. Si usted no tiene complejos en venir a defender hoy un pacto con la extrema derecha. Bueno, habló de los independentistas. ¡Pero si en campaña electoral estaba llamando independentistas a Soria ¡Ya! y a la Unión del Pueblo Leonés! ¡Pero cómo corrieron luego a ver si le daba la Presidencia de la Cámara! Cómo corrían por los pasillos para ver si esos satánicos independentistas castellanos y leoneses les daban la independencia y les daban la Presidencia de la Cámara. ¿Pero de verdad es posible que usted sea capaz de decir esas cosas en esta Cámara?

Y mire, usted... usted no puede hoy venir a hacer como que no pasaba nada, como que no ha sucedido nada, como que esto es un acuerdo más, como que esto es únicamente un acuerdo de Gobierno que pasa sin pena ni gloria. No, no lo es. Usted no puede escudarse con lo que sucede en otros sitios para justificar un pacto con la extrema derecha porque lo que ha sucedido aquí no sucede en ningún otro sitio de España ni de Europa.

Usted ahora trata de envolverse en la bandera de la oposición al Gobierno de España -para variar-, olvidando, por ejemplo, que este Gobierno ha recibido ya 42 millones de euros para la restauración de las minas en León desde el mes de noviembre, y están sin ejecutar porque usted ha paralizado la actividad de este Gobierno. [Aplausos]. Usted no puede negar que ha recibido en fondos COVID nada más y nada menos que 1.584 millones de euros y que tiene sin utilizar, ha dejado sin utilizar, 245 millones de euros de esos fondos. Usted no puede negar que ha recibido ya fondos europeos por encima de los 800 millones de euros, y que no sabemos dónde están, que si uno repasa todas las convocatorias del Boletín Oficial de las Cortes de Castilla y León en la plataforma del plan de recuperación no llegan a 250 millones de euros las convocatorias que han sacado, y ustedes tienen la jeta de decir que el dinero de los fondos europeos no llega a los bolsillos de las familias. No, lo tienen ustedes porque han estado pactando el poder con la extrema derecha... [Aplausos]. Eso es lo que ha sucedido en esta Comunidad Autónoma.

Así que no, señor Mañueco, no, no, no: usted no puede hacer como que no pasa nada, usted no puede justificar este pacto como uno más. Señor Mañueco, se lo he dicho antes: nos vamos a oponer con todas nuestras fuerzas a todos los intentos que ustedes hagan con la extrema derecha de blanquear el acuerdo, de limitar los derechos de los castellanos y los leoneses.

Vamos a defender con uñas y dientes el diálogo social, con los que sí ha podido firmar el mayor número de acuerdos de la historia. Ya solo faltaba que los hubiera cumplido ¿verdad?, porque los acuerdos se pueden firmar pero si uno no les cumple es que no cree en el diálogo social ni defiende a los trabajadores y trabajadoras.

Y usted ha tenido la desfachatez de hablar de concordia. Mire, es que no, es que me niego a que ustedes pongan en el mismo lugar a los golpistas y a los republicanos... [aplausos] ... a los que fueron masacrados después de la Guerra Civil sin que hubiera guerra, solo por acabar con el que pensaba diferente, los que todavía no han podido enterrar de forma digna a sus familiares, los que no le han podido poner su nombre en una lápida a su familia. No les pueden poner en el mismo lugar que a los asesinos. Y eso no es no creer en la concordia; no, eso es creer en la verdad y en la reparación, eso es creer en la memoria histórica, en la que su partido, en la que el Gobierno del Partido Popular de esta tierra antes de que usted llegara también creía. Así que (termino ya, señor presidente) ya me gustaría... ya me gustaría que el Partido Popular que queda fuera el que hubo.

Somos los mejores en esta Comunidad Autónoma. Tenemos la mejor Comunidad Autónoma, pero no podemos ser los mejores: no podemos tener los mejores servicios públicos, no podemos tener el mejor empleo, la mejor industria, si llevamos siendo 30 años los que más población perdemos, si todos se quieren marchar de aquí porque no hay oportunidades; y eso es responsabilidad suya.

Hay otra Castilla y León posible, y yo no me voy a rendir. Haga lo que haga, digan lo que digan, no tendrán la suerte de ver a un socialista rindiéndose en la batalla por Castilla y León y contra la extrema derecha, no van a tener esa suerte, señor Mañueco. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Tudanca Fernández. Para un turno de dúplica, tiene la palabra el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Muchas gracias, señor presidente y miembros de la Mesa. "Hay que saber perdonar, hay que reconocer a las víctimas y perdonar a los verdugos". Eso lo dijo el señor Briones, que está sentado justo detrás de usted. [Aplausos]. ¡No puede venir nadie a darnos lecciones de eso! ¡La vergüenza es que siga ahí sentado todavía el señor Briones! No nos va a dar lecciones. No. Ni usted, ni usted, señor Briones.

Y, hombre, que diga usted que no ha abusado del insulto, de la descalificación ni hoy ni en estos tres años es, cuando menos, chocante. Alguna vez le he dicho en esta Cámara que usted tenía que madurar, señor Tudanca. Hoy creo que ha madurado. Es más, tengo la sensación de que está usted un poco pasado, diría que superado por la tarea a la que se le encomendó y que sabe que no está a la altura. Usted ya lo dio a entender la noche del trece de febrero.

Le propongo una ocupación para usted, que se le da fenomenal: negar la mayoría que eligen las urnas de Castilla y León. ¿Cuál es su función? Pues uno acude al proceso electoral; cuando este se resuelve, ataca a la mayoría parlamentaria que surge de las urnas. Eso es lo que hizo usted en el año dos mil diecinueve: criticar la mayoría parlamentaria en esta Cámara, con una pataleta infantil que todavía le dura. [Murmullos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías, señorías, por favor...


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Es lo que hizo usted en el año... Pataleta infantil que todavía le dura. Es lo que hizo usted también el año pasado, en el dos mil veintiuno: atacar la mayoría asentada en el Gobierno de la Comunidad con una moción de censura que tenía el transfuguismo de aliado. Y es lo que hace nuevamente hoy, señor Tudanca, negar la nueva mayoría surgida de las últimas elecciones. Y es lo que va a seguir haciendo porque es lo que mejor se le da: negar que alguien que no sea usted pueda gobernar.

Se equivoca, señor Tudanca. Supongo que esto tiene su complicación y que, desde luego, hace falta una maestría que exige, por un lado, mucho cinismo, también pocos escrúpulos y, por qué no decirlo, un talento innato. Se autoconvence a sí mismo, pensando que es la mayoría la que está equivocada y que solo usted tiene razón, señor Tudanca.

Presumió usted muchas veces de ser la Oposición útil. Lo dijo aquí, en esta Cámara, en muchas ocasiones. Y la ciudadanía de Castilla y León le ha recompensado: quieren que siga ahí, en la Oposición. [Aplausos].

Hablaba también, señor Tudanca, de que usted tiene la sensación de que Castilla y León ha perdido un tren, cuando, en realidad, el único que ha perdido el tren ha sido usted. Porque usted, señor Tudanca, carece de credibilidad. Fíjese, mientras el Gobierno estaba preocupado por buscar profesionales sanitarios, por buscar material, mientras la Junta hacía ese trabajo, usted se dedicaba a buscar otro tipo de cosas, buscaba tránsfugas, señor Tudanca: usted traicionó a Castilla y León, usted pasó de firmar el Pacto para la Recuperación a embarcarse en una nauseabunde... nauseabunda búsqueda de tránsfugas, hasta debajo de las piedras (y mejor ahorrarnos los sórdidos detalles).

Las elecciones se han producido por usted. Bueno, y algún otro. Porque su prioridad en la pasada legislatura nunca fueron los servicios públicos, ni la igualdad, ni la recuperación económica. No, nada de eso le importaba. ¿Cuál era su prioridad? La búsqueda del poder a cualquier precio, mediante intrigas palaciegas y sin preocuparse en absoluto de Castilla y León. Y volvió a demostrarlo usted cuando nos reunimos después de las elecciones. Acuérdese, usted y yo, y algunos compañeros suyos y míos, usted fue el representante del Partido Socialista en la primera reunión a la que yo acudí. ¿Lo recuerda usted, se acordará? ¿Cuál fue su actitud en esa reunión, señor Tudanca? Yo lo voy a explicar hoy aquí, esta tarde.

Le planteé crear un grupo de trabajo para hablar de un programa de legislatura; lo rechazó. Propuse un esquema de colaboración con el Gobierno de España en la lucha contra la despoblación; lo rechazó. También sugerí la posibilidad de elaborar un calendario, comprensivo, para las infraestructuras pendientes que el Gobierno de España tiene que ejecutar en nuestra Comunidad Autónoma; también lo rechazó, estaba presionado por Sánchez. Hablé de la defensa del medio rural; y su contestación, en ese caso, fue el silencio. Saqué el tema de los acuerdos esenciales para la Comunidad; de nuevo, me encontré con el silencio. Saqué el tema del diálogo social -usted, el paladín, el defensor del diálogo social-; ahí, simplemente evasivas. Planteé la necesidad de apostar por la estabilidad de tener un gobierno en Castilla y León; y, otra vez, evasivas.

Eso es lo que ocurrió, señor Tudanca. Es más, dijo que usted no era el culpable de la inestabilidad. Y yo digo que sí, que era el culpable de la inestabilidad. Usted y algún otro, no vamos a dejarle solo a usted. Y, después de quince minutos de reunión, de chocar contra ese muro de negativas y subterfugios, el remate de la fiesta es el insulto y la falta de respeto por su parte. Ante esa situación, di por terminada la reunión.

Señor Tudanca, a usted se le llenó la boca con la palabra corrupción. A usted le encantan los procedimientos inquisitoriales, los juicios paralelos, erigirse en juez y parte, y, si le dejaran, también sería verdugo. Deje trabajar a la Justicia, señor Tudanca. Lleva usted cinco años acusando con su dedo, cebando la injusta "pena del telediario". ¿Y qué hay? Nada de nada, señor Tudanca. Usted contra... usted cabalga en la contradicción. Fíjese, reclama justicia para los suyos, pero condena a los demás con ligereza. Respete la presunción de inocencia, respete los procedimientos judiciales, respete a los tribunales de justicia, señor Tudanca, es lo único que le pido, porque usted, cabalgando en esa contradicción, alguna vez le va a acabar derribando.

Mire, señor Tudanca, ¿sabe lo que nos diferencia a usted y a mí? Que es a quién servimos. Yo sirvo a Castilla y León; usted, a Sánchez. Y nos diferencia también lo que hemos demostrado. [Aplausos]. Y nos diferencia también lo que hemos demostrado. Y la confianza que nos han otorgado las personas de Castilla y León: yo, a gobernar; usted, sencillamente a esperar a que otros vengan a sustituirle. Yo no aspiro a encontrar en usted en una Oposición constructiva, lo ha demostrado esta tarde. Usted no es más que el representante de Sánchez en Castilla y León.

Bien, se vio en los debates electorales. ¿Lo recuerda usted, señor Tudanca, cuando yo le hablaba del coste de la luz, el precio de la gasolina, la cesta de la compra? Preocupaban y mucho a las personas de Castilla y León, y usted se revolvía y decía que no, que eso no interesaba, que eso no era hablar de las preocupaciones de Castilla y León. Está usted muy alejado de las necesidades de la gente y del sentir de esta tierra. ¿Sería capaz de repetirlo hoy aquí, con el coste de la vida disparado, mientras la economía nos machaca a todos?

Por eso le reitero que ojalá usted esté del lado de Castilla y León, no del mío ni del de nuestro Gobierno, del lado de Castilla y León, para aquellas reivindicaciones justas ante este Gobierno o cualquier otro Gobierno que venga. Que sienta usted, por favor, señor Tudanca, los colores de Castilla y León, porque hasta ahora lo único que ha demostrado es que siente los colores de Sánchez.

Mire, yo voy a trabajar por Castilla y León, y creo que la economía es algo muy importante: dinamizar la economía, apoyar los emprendedores, a nuestros autónomos, a los trabajadores, claro que sí, ¿quién ha dicho nada contra los trabajadores? Todo lo contrario. Hemos hablado de esforzarnos, de apoyar a las empresas, de apoyar a los trabajadores, a darles más y mejor formación, de ayudar a los agricultores y ganaderos y al medio rural, porque están viviendo una de las etapas más complicadas de su vida. También apostar por la industria, la de la automoción, la de la agroalimentación y otras tan importantes como la farmacéutica o la ciberseguridad. Apostar a las... por las entidades locales, apostar por aquellas personas que quieren innovar en nuestra tierra, al lado del tejido social y del tercer sector.

Mire, señor Tudanca, usted me habla de un plan anticrisis para afrontar su situación, con ayudas que algunas ya se pusieron en marcha y otras no aplica ninguna Comunidad Autónoma, especialmente las gobernadas por el Partido Socialista. Fíjese, en el mes de noviembre, en los premios de CEOE Castilla y León, el diez de noviembre exactamente, ya advertí -y se me tildó de todo por su parte- que se... que había nubarrones que complicaban la recuperación, entre ellos la subida de la energía y de la inflación. Hasta el mes de marzo -casi seis meses- el Gobierno de España presentó un plan. ¿Y qué ha tenido que ocurrir para que el Gobierno de España haya tenido que actuar? Más subida de la luz, el combustible a precio de oro, más inflación, huelga de transportes, desabastecimiento en los supermercados, una guerra, y es un plan que simplemente pone parches, pero no adopta medidas estructurales. Ni racionalización de gastos ni también de rediseño de los fondos europeos, ni cumple con el compromiso... el compromiso...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Perdón, señor... señor Fernández Mañueco. Rogaría a los diputados y senadores que se encuentran en la sala guarden silencio, por favor.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Decía que ese plan no cumple el compromiso que asumió con los presidentes de las Comunidades Autónomas. La Declaración de La Palma lo dice muy claro, literal, se abre comillas: "Rebajas fiscales para amortiguar el impacto de los precios de la energía en los recibos que pagan familias y empresas". Han incumplido desde el Gobierno de España. Y hay que atajar la subida del precio de la energía y de la inflación. Hay que bajar los impuestos porque eso va a ayudar a las familias a llegar a fin de mes y a las empresas a cuadrar las cuentas y ganar competitividad. Así incentivaremos el consumo, tendrán liquidez las empresas, se reactivará la economía y el empleo.

¿Y qué es lo que pedimos? Un IVA superreducido del gas, de la electricidad y de los hidrocarburos, y si el Gobierno de España toma esta decisión no estamos hablando de una decisión que se asuma simplemente a las espaldas del presupuesto del Gobierno. No, no. Porque es que gran parte de la recaudación van a las Comunidades Autónomas. Solo en Castilla y León estamos hablando de unos 260 millones de euros, que van a estar mucho mejor en manos de las familias y de las empresas de Castilla y León y de toda España.

¿Y nosotros qué es lo que vamos a hacer? No nos quedamos cruzados de brazos: vamos a bajar el tramo autonómico del impuesto de la renta de las personas físicas; ya eliminamos el impuesto de sucesiones y donaciones entre cónyuges y de padres a hijos; y apostamos por tener la fiscalidad más baja de la historia.

Mire, también hemos anunciado esta mañana, o más... mejor dicho, hemos recordado qué es lo que... qué es lo que hicimos para luchar contra la pobreza energética -no lo voy a recordar, porque parece que usted no lo escuchó, aunque se lo podría recordar-, pero lo que está claro es que el Gobierno de Sánchez no sirve para reflotar España. Mire, en Castilla y León tenemos una política económica que funciona. El producto interior bruto y el empleo soportaron la pandemia mejor que la media de España -esto es un hecho, es un dato-, y ahora nuestro producto interior bruto ha crecido mejor, más que la media de España, y estamos tres puntos por encima de la media de nuestro país. Sus recetas son claras: paro y crisis; la nuestra: crecimiento y empleo.

Es posible -lo hemos demostrado-, hemos demostrado que bajando los impuestos gestionamos y damos unos mejores servicios públicos. Es verdad que después de cuarenta años de democracia, bueno, pues a eso que se llama gestión, a eso que se llama eficacia, a eso que se llama cumplir con la palabra dada, yo no espero que los... después de cuarenta años de democracia, los españoles piensen que eso es compatible con el sanchismo.

Y para ir concluyendo, voy a trabajar por servicios públicos de calidad -lo he dicho hasta la saciedad-, voy a estar con el medio rural, con las grandes ciudades y también con los municipios intermedios.

Quiero recordar que, por darles una... algunos pequeños detalles. Mire, hablaba usted de gestión de fondos europeos, de gestión de las ayudas de los fondos para las empresas que nos dio el Gobierno de España. Efectivamente, perdimos 245 millones de euros, perdimos todos, por la inflexibilidad de los criterios estrictos que puso el Gobierno de Sánchez. Hemos reclamado; y esta mañana he vuelto a reiterar, que nos repongan ese dinero, que lo volveremos a dar a las empresas... [aplausos] ... a repartir a las empresas, a aquellas que los criterios estrictos del Gobierno de Sánchez impidieron aceptar.

Decir que hoy ha salido una noticia... -tiene usted mala suerte- ha salido una noticia: Castilla y León está entre las cinco Comunidades Autónomas que mejor gestiona los fondos europeos. Ya lo siento, señor Tudanca, estropearle hoy... [aplausos] ... el discurso.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías, por favor. Por favor.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Y mire, cuando hablaba, en mi primera... en mi primer turno ante usted de ponerse del lado de los intereses de Castilla y León, se me olvidó hablar del IVA. El IVA, le ganamos al Gobierno de Sánchez, en el Tribunal Supremo, 195 millones de euros. Ya me hubiera gustado contar con su apoyo, señor Tudanca. Pero, bueno, esos 195 millones de euros irán destinados a los colectivos que más lo necesitan.

Mire, para concluir esta intervención. Voy a liderar un Gobierno sólido y fuerte, basado en el acuerdo, orientado a los intereses generales de todas las personas de Castilla y León. Y usted lo tiene que asumir, señor Tudanca, las personas de esta tierra han votado, las urnas han dictado sentencia: usted en la Oposición; nosotros a gobernar. Pierde Sánchez; gana Castilla y León y gana España. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Fernández Mañueco. A continuación, en representación del Grupo Parlamentario UPL-Soria ¡Ya!, tiene la palabra don Luis Mariano Santos Reyero, por un tiempo de quince minutos.


EL SEÑOR SANTOS REYERO:

Sí, gracias, señor presidente. Señorías. Antes de nada, queremos sumarnos al apoyo al pueblo ucraniano, también al pueblo saharaui y a todos aquellos que tienen conflictos bélicos o soportan la opresión sobre sus territorios.

Dicho esto, señor Mañueco, dos cuestiones preliminares. La primera es que, como ya le dije hace hoy tres años, entendemos perfectamente que en el plano político es indispensable conseguir el mayor número de apoyos, construir una opción que permita constituir una mayoría capaz de gobernar una Comunidad Autónoma o cualquier Administración. La verdad es que la elección para usted no era fácil: gobernar con sus actuales socios o gobernar en minoría. Los ciudadanos, al fin y al cabo, juzgarán sus cesiones.

No sé si, en verdad, ustedes han elegido la opción más o menos difícil, porque, aunque repiten y repiten hasta la saciedad las bondades de este acuerdo, en la intimidad confiesan la dura realidad que les va a tocar vivir en esta legislatura. Sinceramente, no sé qué pensar; al fin y al cabo, son ustedes socios hermanos, porque quien hoy ocupa las sillas de la extrema derecha estaban ayer, seguramente, engordando las filas de los afiliados del Partido Popular.

La segunda cuestión, señor Mañueco, es que, igual que uno acepta ese juego matemático, lo que no parece de recibo es que, durante todo el tiempo en el que ustedes han negociado, solo hemos asistido a un vulgar reparto de sillones y de Consejerías; eso, mientras el país y la Autonomía se desangra con una inflación galopante o con un incremento energético que pone en solfa muchas actividades económicas. Y mire que me recuerda esto a lo acontecido hace tres años; es más, sus actuales socios no se han cortado: querían la misma parte del pastel que había conseguido Ciudadanos. Era difícil hablar de ejes programáticos, porque algunos acudieron a estas elecciones sin ni siquiera compartir con todos nosotros cuál era su programa. La verdad es que quizás haya sido mejor así; ahora nadie podrá acusarles de no cumplirlo. Difícil incumplir lo que no tienes.

Y ahí nos encontramos, señor Mañueco, con una fuerza destructiva en un lado diciendo que no creo en las Comunidades Autónomas, pero quiero la Presidencia de las Cortes y tres Consejerías; y un discurso de un candidato que, encantado de conocerse, cree que puede pedir el apoyo a su investidura esgrimiendo una línea continuista que sigue agravando las enormes diferencias territoriales de una Comunidad Autónoma sin identidad, que no responde a ninguno de los desafíos de la gente.

Pues no, señor Mañueco, en esta corta legislatura que hoy empezamos, no va a contar con el... con el voto... el voto de UPL. Y no lo va a tener, como a usted no se le escapa, porque, como la mayoría de las fuerzas de esta Cámara, sigue negando la mayor. Porque, a pesar de que... de que la mayoría del pueblo leonés le dice que no se encuentra a gusto aquí, ustedes siguen obcecados en ni siquiera abrir una línea de diálogo. Da lo mismo que solo dos de cada diez leoneses quieran estar en Castilla y León, que seis de cada diez quieran la autonomía de la región leonesa; ustedes están más en no escuchar el grito de un pueblo que todos los días se despierta en un lugar territorial que ni quiere ni desea, ni responde a sus expectativas. Y que hoy encuentra aquí un Gobierno formado por quien durante 35 años sigue sin querer hablar del tema, un Gobierno, señor Mañueco, donde la otra parte agarra la bandera del leonesismo para defender el conocimiento de la historia de una tierra, sin saber que esa bandera que agarran significa esa ruptura territorial, y que hoy enfrentarán para garantizarse el nuevo estatus adquirido, y que, como sus anteriores socios, venían a luchar contra el eje del mal, que eran ustedes; pero eso era antes.

Y mira que se lo han puesto ustedes fácil, han estado practicando durante años el adoctrinamiento histórico, y lo han hecho tan bien que han permitido que el incipiente presidente de las Cortes desmonte el artificio de quien sostiene que Castilla y León es la cuna del parlamentarismo. Esa falta de cultura provocada por el ejercicio de un adoctrinamiento generado pone en evidencia solo... no solo el desprecio de algunos con la historia de León, sino el terrible efecto del adoctrinamiento que esta Comunidad ha generado. En ese nivel de este modelo de éxito nos encontramos.

Pero no es esa la única razón, señor Mañueco, para que hoy nosotros digamos no a su investidura, surgen para nosotros muchísimas dudas, que estoy seguro usted no va a responder, porque si por algo se ha caracterizado su Gobierno con sus anteriores socios de Ciudadanos es por ser usted el presidente que mejor se ha escondido: se escondió detrás de la verborrea y el afán de protagonismo del otrora vicepresidente de la Junta; se escondió usted en plena pandemia, ejerciendo de colaborador innecesario dimitió usted de dar solución a los graves problemas de esta tierra con ninguna actuación importante en casi tres años de Gobierno. Y ahora nos dice, cuando busca apoyos, que de lo territorial ni hablamos, y que de invertir el efecto... el exceso de centralismo tampoco.

Así las cosas, señor Mañueco, no teníamos mucho más de lo que hablar para preparar la cita de hoy. Ustedes, como otros, siguen con su soberbia, intentando discernir cuál es la estrategia contra el leonesismo, cómo combaten sus malos resultados electorales, siguen pensando que perder tres de las cuatro ciudades leonesas es fruto de la moda; y, en ese camino autodestructivo, en el que han descubierto como sus propios concejales apuestan por ese debate territorial, ustedes siguen abrazando la farola -que seguro, con el tiempo, dejará de dar luz-.

Pero, fíjese, hasta con ese gesto displicente y soberbio en el que ustedes nos llaman a negociar, a sentarnos en la mesa, y a pesar de intentar convencernos y exigir de qué tema se habla o no se habla, hasta con eso, yo le adelanto hoy aquí que no vamos a levantarnos de una mesa si en ella están los temas esenciales que nos preocupan a nosotros.

Nosotros no somos como ustedes, sabemos lo que significa la política; y eso quiere decir que hablaremos de los problemas sanitarios que tiene esta mancomunidad de provincias. Porque sabemos que no se puede dejar en manos de quienes destrozaron un servicio esencial el futuro sanitario de los diferentes territorios de esta Comunidad.

No vamos a permitir más pruebas piloto, vamos a luchar por que nuestros pueblos sigan teniendo un servicio decente, por que se abran todos los consultorios, por que tengamos el número apropiado de profesionales, por que León tenga su facultad de medicina, por que nuestros profesionales tengan unas condiciones laborales dignas, unas condiciones que no les haga plantearse abandonar este territorio. Una sanidad que debe enfrentar una lista de espera inaguantable, una Asistencia Primaria debilitada y un déficit de profesiones clave en un entorno caracterizado por la dispersión geográfica y las altas tasas de envejecimiento poblacional. Una sanidad que no puede vivir de promesas vacías, sino de realidades; que no está dispuesta a aguantar las promesas políticas durante cada campaña electoral, mientras pasan los años sin cumplirlas; que quiere ver que, por ejemplo, radioterapia en el Bierzo es una realidad, o que no quiere que para que la plantilla de médicos en Villablino sea acorde con las necesidades tengan que salir a la calle todos los ciudadanos de Laciana.

Queremos y vamos a luchar por que en esta mancomunidad todas las provincias tengan una ratio de profesionales adecuado, por que no exista diferencias a la hora de atender las necesidades de los ciudadanos; y lo que es más importante, que el servicio de atención no sea diferente dependiendo del lugar donde se reside.

Garantizar la calidad de un servicio esencial sanitario es una de las grandes claves, condición sine qua non para enfrentar el grave problema de la despoblación. Y ahí nos fijamos también, señor Mañueco: nada esperamos de quienes se han convertido en los líderes de la pérdida de población; nada de quienes permiten, sin ruborizarse, que León pierda 5.000 habitantes al año, con una sangría continua; nada de quien despacha el tema con una frase -ya lapidaria- "este es un problema mundial, europeo y global".

Detrás de esa cruel mentira se esconden los más de 9.000 habitantes que pierden León, Zamora y Salamanca todos los años. Detrás de esas cifras se esconden latrocinios como con los fondos europeos destinados a territorios fronterizos y vinculados a inversiones en La Raya fronteriza de Zamora y Salamanca acaben destinándose a otros territorios. Y después dirá usted que ustedes están entre las cinco Comunidades que mejor reparten los fondos. Pero ¿para quién?, señor Mañueco. Detrás están el esfuerzo de otras Comunidades Autónomas por revitalizar infraestructuras como la Vía de la Plata, mientras ustedes duermen el sueño de los justos; y detrás está, sin duda, una configuración autonómica centralizada, donde los diferentes esfuerzos económicos discurren con una fuerza centrípeta, en vez de lo recomendable y justo, que lo... que sería que lo hicieran de forma centrífuga.

Y no, no es verdad que todos los territorios sufran por igual. No es lo mismo perder 150.000 habitantes en 35 años que ganar 1.000 o 30.000. Sí puede ser que algunos pueblos, dentro del movimiento migratorio de lo rural a lo urbano, puedan manifestarse en todos los pueblos de esta mancomunidad de provincias, pero no es verdad que todos sufran ese ritmo de despoblación, algunos porque ya no pueden desangrarse más, como es Zamora, otros, porque van camino de ello, el caso de León y Salamanca, mientras todos sus esfuerzos, señor Mañueco, sus esfuerzos del Partido Popular, durante estos 35 años, se destinan a concentrar poder y ni siquiera a hablar de descentralización o de configuración territorial, no sea que el chollo se acabe para muchos.

Y no, señor Mañueco, tampoco le podemos apoyar porque ni siquiera ha mostrado usted interés en buscar un modelo industrial que discrimine positivamente a aquellos territorios que más lo necesitan. Es usted rehén de una gran empresa a la que, ni más ni menos, los anteriores presidentes autonómicos han sido capaces de regalar más de 225 millones de euros desde mil novecientos noventa y tres. A una empresa, una multinacional francesa. Y han sido incapaces de llevar a cabo un verdadero plan industrial en aquellos territorios menos industrializados. Eso sí, usted ha sido capaz también de presupuestar 100.000 euros y gastar 50.000 en campañas de publicidad institucional para decirle a los ciudadanos que la inversión va a ser de 14 millones de euros en el Parque Tecnológico de León, aunque ello no se sustente más que en un deseo.

¿Cuánto dinero gastó, señor Mañueco, durante la precampaña para intentar decir a los leoneses que lo presupuestado no vale para nada, que lo importante es lo que aparece en los medios de comunicación? No me extraña que ustedes hayan estado peleando o discutiendo por ver quién se queda con la Dirección General de Comunicación. No me extraña.

Se lo tengo que decir, señor Mañueco, intentó usted engañar, una vez más, a los leoneses. Y le salió mal, porque -ya sabe aquello que decía un presidente americano- se puede engañar a todo el pueblo parte del tiempo, y a algunas de las personas todo el tiempo, pero no se puede engañar a toda gente todo el tiempo.

Y le voy a advertir aún más: ustedes y los colaboradores en ese bipartidismo sordo son los únicos responsables de que la Mesa para el Futuro de la Provincia de León sea hoy más un esperpento que una esperanza. Son, hoy por hoy, los responsables del fracaso de la enésima intentona de revertir un proceso de empobrecimiento de una provincia que llegó a esta Comunidad siendo la más poblada y la más próspera o de las más prósperas, y que va ocupando, junto con Salamanca y Zamora, hoy los últimos lugares en las tasas de actividad de un modelo de éxito llamado Castilla y León.

Y no hay vuelta atrás, señor Mañueco, ya no le creemos. Se acabó, el trece de febrero fue un antes y un después. Por eso le anticipo que, o comienza a trabajar en serio y da pasos certeros, o se va a encontrar con un rechazo social de grandes dimensiones. Es tiempo ya de soluciones. Deben ustedes buscar fortalecer ese diálogo social; pero deben de buscarlo sin tensionarlo, deben de buscarlo apoyando a ese diálogo social, no simplemente diciendo que van a firmar o que han firmado, sino cumpliendo lo que ustedes firman.

Debe solucionar el problema de estabilidad del empleo de los temporales en la Administración, que hoy estaban aquí fuera manifestándose ante la toma... ante la investidura de usted, señor Mañueco.

Y deben de tomar decisiones rápidas para afrontar los problemas de inflación y crisis energética que salvaguarden la sostenibilidad... la sostenibilidad de la pequeña y la media empresa leonesa y castellana.

Tenga en cuenta mi advertencia, señor Mañueco: estaremos enfrente de todos aquellos que quieran desproveernos de los derechos sociales conquistados. Ni un paso atrás, señorías. Esto no se trata de derechas ni de izquierdas, los derechos no son de los partidos, son de las personas, y ahí estaremos defendiéndolos contra quien sea, contra usted y contra sus socios. Veremos qué hacen ustedes, pero no duden que en los tiempos que corren ni siquiera podemos permitirnos el mínimo debate sobre el recorte de derechos consolidados, no por la izquierda o por la derecha, sino por la sociedad, por los ciudadanos que son los... los verdaderos conseguidores y dueños de los mismos.

Y acabo, señor Mañueco. Acabo diciéndole lo mismo: no creemos en usted, no creemos en su Gobierno; pero también le digo que nosotros sí que estamos dispuestos a hablar de todos los problemas que tienen los leoneses y de todos los problemas que afectan a los castellanos. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Santos Reyero. En representación del Grupo Parlamentario UPL-Soria ¡Ya!, tiene la palabra don José Ángel Ceña Tutor, por un tiempo de quince minutos.


EL SEÑOR CEÑA TUTOR:

Soria ¡Ya! toma hoy por primera vez la palabra en esta tribuna y en este Parlamento. Señor presidente, señoras y señores procuradores, estamos hoy aquí con la legitimidad que nos dan 21 años de movilizaciones en la calle y con la fuerza de los votos de nuestros ciudadanos, que han apoyado nuestras reivindicaciones masivamente: nada menos que un total del 43 % de los votos emitidos en la provincia de Soria. Estamos aquí como resultado de la absoluta falta de compromisos de la Junta de Castilla y León con Soria. Somos el resultado de más de 35 años de olvido y abandono, y los sorianos, a través de esta candidatura, hemos dicho basta.

Los ciudadanos de Soria se han manifestado claramente en contra de las políticas -o, mejor dicho, contra la falta de ellas- de la Junta de Castilla y León en las últimas décadas. Unas políticas que nos han hecho sentir olvidados y abandonados. Hemos sido el furgón de cola de esta Comunidad, no nos hemos sentido integrados, han sido muchos años de planes especiales que se quedaban en el camino, de promesas incumplidas, de notas de prensa que presentaban proyectos fabulosos y luego se quedaban en nada, incluso de obras en las que se invertían millones de euros, como en la Ciudad del Medio Ambiente, y que luego quedaban abandonadas; abandonados como nos sentimos los sorianos por la Comunidad Autónoma que ustedes han dirigido desde que al menos yo tengo memoria.

Y hoy hemos asistido a más declaraciones grandilocuentes, incluso hemos observado que se sienten orgullosos de lo que han hecho. Desde luego, con Soria poco. Muchos planes genéricos, muchas palabras inconcretas. Hasta hoy todo ha quedado en nada. Nada a lo que los ciudadanos sorianos se puedan agarrar, nada que nos permita ser siquiera moderadamente optimistas. Lo que Castilla y León y Soria necesitan son acciones decididas, concretas y urgentes.

Es muy curioso que cuando hemos hablado con ustedes comparten el diagnóstico y su gravedad, comparten incluso las medidas y el tratamiento para hacer frente al problema; pero no lo ponen en marcha. En definitiva, señorías, es el momento de los hechos y no el de las buenas palabras. A lo que ustedes se han dedicado hasta ahora es a dejar pasar el tiempo, condenándonos a los sorianos y al resto de los castellanos y leoneses a la desaparición tanto demográfica como económica.

Ustedes, con sus preocupaciones por mantenerse en el poder no quieren verlo, pero el principal problema que tiene esta Comunidad Autónoma es la despoblación. Así lo perciben los castellanos y leoneses, situando a la despoblación como la primera de sus preocupaciones, por encima del paro o de cualquier otra cuestión.

En estos años, desde que se puso en marcha esta Comunidad Autónoma, la población soriana ha descendido en un 12 %, y la... y más de la mitad de los nacidos en Soria viven fuera de la Comunidad. No es exclusivamente un problema de Soria, pero en Soria es más grave, en Soria ya no tenemos margen. En Castilla y León desde el inicio del proceso autonómico la población ha disminuido en un 7,74 %, nada menos que 200.000 personas, pero todo ello además en un contexto en el... en el que el conjunto de España crecía a un ritmo imparable, hasta en un 25 %.

Llama la atención que la preocupación en el pacto de gobierno PP-Vox por la inmigración ordenada... llama la atención porque nosotros entendemos que el principal problema demográfico de Castilla y León -y además no es de ahora, sino de hace décadas- es la emigración. Lamentablemente somos una región de emigrantes, y la inmigración no ha sido hasta ahora ningún problema. Comencemos por crear las condiciones para que nuestros jóvenes no se tengan que marchar, antes de empezar a poner trabas a los que quieran venir. Uno de cada cuatro jóvenes nacidos en Castilla y León vive fuera, y esta cifra asciende a un 38 % en el caso de los jóvenes titulados.

Según un análisis de la Red de Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa el 76 % de los municipios de Castilla y León está en situación muy grave en términos demográficos; pero esto es mucho más grave en Soria, donde un total de 126 municipios están en riesgo muy grave de desaparición. Hasta ahora no se ha... no se ha abordado el problema con seriedad, no se han puesto medidas, no se han realizado planes serios que aborden este problema a largo plazo y de manera efectiva. Algo se ha hecho mal, muy mal, y ustedes, señor Mañueco, son cómplices, al igual que el Gobierno de la Nación.

Señor Fernández Mañueco, le he escuchado decir que el problema de la despoblación no es exclusivo de Castilla y León, sino que es un problema nacional y europeo, escurriendo así la responsabilidad personal en tanto que gestor de estas políticas o la ausencia de ellas. Lo ha dicho, señor Mañueco. Pero las cifras son tozudas: España crece en habitantes, y lo hace de forma indudable, mientras que Soria y Castilla y León se quedan atrás. No puede haber complacencia ninguna ante estos datos, hay que ponerse manos a la obra y trabajar por y para esta España vaciada.

Hace dos años y medio, en el anterior Debate de Investidura -que me he leído-, usted, señor Fernández Mañueco, reconocía el fenómeno de la despoblación como el mayor desafío al que se enfrenta esta Comunidad Autónoma, y habló de la creación de un grupo de expertos independientes. Hoy ni siquiera ha dicho que es el mayor desafío de la... de la Comunidad Autónoma. Desde Soria ¡Ya! pensamos que el tiempo de análisis y de grupos de expertos ha pasado; hay que ponerse a trabajar ya y hay que hacer frente a este problema, no podemos seguir mareando la perdiz. Es necesario un gran pacto o acuerdo político en esta Comunidad Autónoma para hacer frente a la despoblación; y, sin embargo, leyendo los términos del acuerdo que han firmado PP y Vox, no parece que la despoblación sea su principal desafío. Igual están esperando que el problema se solucione solo.

De los 11 ejes de gobierno que anuncian no aparece la despoblación hasta el eje número 10, y ni siquiera de forma específica. Leo textualmente: "Apoyo a las familias, a la natalidad y a la lucha de la despoblación como centro de las políticas públicas". Es un eje de gobierno abstracto, falto de concreción como para pensar que este Gobierno por fin se va a tomar en serio este problema.

También este plan que anunciaron tiene 32 acciones de gobierno, y no es hasta la acción número 29 cuando se afirma: "Consideraremos el problema de la despoblación y las políticas de demografía una cuestión prioritaria en coordinación con todas las Administraciones Públicas". De nuevo una inconcreción apabullante para abordar una cuestión que los propios ciudadanos castellanos y leoneses consideran el mayor problema que tiene la Comunidad. Cuando el nuevo Gobierno decida hacer frente de una vez y con seriedad a este problema nos encontrará con la mano tendida, como no puede ser de otra manera. Es un problema de Comunidad, un problema de Estado, y hemos de colaborar todos en su solución.

Una de las cuestiones que hay que abordar con urgencia en este Parlamento es impulsar una ley contra la despoblación y para la repoblación, definiendo y estableciendo niveles de zonas despobladas según los criterios utilizados por la propia Unión Europea. A partir de esa definición de despoblación, se podrá elaborar toda una estrategia transversal, con incentivación positiva en todas las líneas de subvenciones, incentivos fiscales, de infraestructuras digitales, de transporte de viajeros, etcétera, para los beneficiarios y utilizados en las zonas muy despobladas.

Ya hace tiempo que los reglamentos europeos establecen que los fondos como el Fondo Social Europeo, el FEADER o el FEDER han de abordar los problemas de las zonas que padecen desventajas demográficas graves y permanentes. Pues bien, ahora que están redactando el Programa Operativo de Castilla y León 2021-2027 -esto, señor Fernández Carriedo, se lo dedico a usted-, le pedimos que preste atención especial al reparto de los fondos en las zonas NUTS 3 de Castilla y León que tengan menos de 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado. Es lo que establecen los fondos europeos. Para ello están: para corregir los desequilibrios; y, sin embargo, la provincia de Soria en el último reparto recibió el 2 % del total de los fondos, cuando tiene el 5 % de población, y en teoría debería recibir más porque estos fondos son para cohesionar el territorio. Nosotros tenemos 8,6 habitantes por kilómetro cuadrado, la densidad de población más baja de España.

Es una cuestión de voluntad política, se puede hacer. No solo lo permiten los Reglamentos Europeos, la Comisión Europea lo quiere; es justo con los territorios despoblados; serviría para corregir desequilibrios territoriales; sería una medida concreta y efectiva de gran calado -no tantos discursos retóricos-; y devolvería parte de la fe perdida por los ciudadanos en sus representantes.

Quiero tratar también el tema de la sanidad. Y de la sanidad hay tantas cosas de las que hablar que cuatro años de legislatura se nos quedarían cortos. En su Acuerdo de Gobierno con Vox habla de que garantizarán la sanidad pública reforzando las inversiones y los presupuestos, fundamentalmente en la Atención Primaria. Es curioso que esta referencia a la Atención Primaria ya estaba en su discurso de hace dos años y medio, y también en el programa... está en el programa electoral del Partido Popular, donde asegura que garantizarán la asistencia en los consultorios locales. Hoy también ha garantizado... ha hablado de garantizar esta asistencia es los consultorios locales por ley.

Pero la realidad es muy tozuda: la asistencia médica en los consultorios locales se ha visto muy reducida. Antes había uno o varios días a la semana de asistencia sin cita. Ahora se hace con cita previa, algo que entorpece y dificulta el servicio. Hay que recordar que muchos de los pacientes de estos núcleos rurales son mayores, y, a ciertas edades, internet y el móvil inteligente les supera. De nuevo, las dificultades de Soria quedan olvidadas, y ustedes no hacen sino incrementar la brecha existente. Hay que prestar esta asistencia sanitaria a todos, sin discriminación por el lugar de residencia.

Por ejemplo, esta semana ha salido en prensa que en Muriel de la Fuente, un pueblo de Soria, no tienen médico ni cobertura. No sé cómo van a contactar telemáticamente con la Administración sanitaria. Lo mismo pasa con la atención sanitaria telefónica. En los centros de salud se ha incrementado -y esto lo reconozco- la telefonía, la atención telefónica, pero a veces los pacientes están toda la mañana llamando y no consiguen contactar -y se quejan, claro-.

Esto hay que cambiarlo, el modelo tiene que cambiar sí o sí; pero tiene que ser para mejorar, no se puede quedar nadie atrás, mucho menos los pacientes de las zonas rurales o despobladas. Hay que recordar que en estas zonas rurales, si no hay médicos, si no hay servicios médicos de calidad, la gente se va.

En muchas ocasiones se nos repite como un mantra que no hay médicos que quieran venir a Soria, o a otros territorios de la Comunidad, como por ejemplo el Bierzo. Parece ser que estamos muy lejos o que no ofrecemos los suficientes incentivos. Yo creo que esto es una excusa y no es aceptable. La obligación de la Consejería de Sanidad es buscar soluciones. Soria está, geográficamente, rodeada por cuatro Comunidades Autónomas, y al menos en tres de ellas (Castilla-La Mancha, Navarra y La Rioja) las condiciones que se ofrecen a los médicos son muy superiores a las que se ofrecen en Castilla y León. Es así, señores.

¿Por qué la Junta de Castilla y León trata o paga peor a los médicos que los de otras Comunidades limítrofes? Para venir a Soria no solo tienen que tener incentivos económicos, también tienen que tener incentivos de progresión profesional y contratos más largos. Y esto es en lo que tienen que trabajar.

El Colegio Oficial de Médicos de Soria calcula que en cinco años Soria perderá el 30 % de sus médicos, situación que, además, se agrava en la Atención Primaria, donde perderá el 42 % de los médicos. Hay que abordar el problema de inmediato.

Proponemos soluciones, como convertir el Hospital de Soria en Hospital Universitario y recuperar los estudios de medicina que nos quitaron a principios de los noventa.

Hay otros muchos ejemplos de la falta de compromiso de la Junta de Castilla y León en temas sanitarios. La tan largamente prometida unidad de radioterapia: desde dos mil siete, que la prometió Juan Vicente Herrera; y hoy usted ha vuelto a prometerla. ¡Quince años después, y estamos esperando! También están esperando en el Bierzo.

Seguimos sin Unidad de Ictus. Seguimos con una única ambulancia medicalizada de emergencias para toda la provincia. Los años que lleva el Hospital Santa Bárbara en obras, o la prometida reapertura de la farmacia de Villar del Río. Y esto son solo unos ejemplos, hay muchos más.

Durante la campaña electoral hemos visitado más de 80 pueblos en la provincia de Soria, y hemos hablado con los ciudadanos, hablado de verdad, de tú a tú. Dos cuestiones comunes se planteaban constantemente: la sanidad y la conectividad a internet.

La conectividad, por la importancia que tiene en nuestros días, es vital para los territorios de la España vaciada. No tener internet de alta velocidad hoy en día es como en los años cincuenta no tener electricidad o agua corriente. Y hoy lo han prometido de nuevo: 20 megas de velocidad en todos los municipios en dos mil veintitrés; 100 megas, en dos mil veinticinco. Una promesa que de verdad aplaudiría si en dos mil veintitrés la viera ejecutada, pero es que han prometido tantas cosas que ya no creemos nada.

En su Acuerdo de Gobierno dicen: "Mejoraremos la conectividad de Castilla y León fortaleciendo las infraestructuras de comunicación y de transportes". No se puede ser más inconcreto. Yo creo que no ofrece esperanza ninguna. Esperábamos un compromiso más concreto. Fíjese, señor Mañueco, en el Reino Unido han abordado el problema de otra manera totalmente distinta: en el primer sitio que hubo 5G en el Reino Unido fue en los territorios más despoblados, en las Tierras Altas de Escocia y en las islas del norte de Escocia. Eso sí que es una medida concreta y decidida, allí sí se comprometen realmente con abordar el problema de la despoblación. Si no hay internet en el pueblo, los nietos no irán a ver a sus abuelos, se perderá la oportunidad del teletrabajo.

En estas condiciones, no podemos apoyar esta investidura, hay demasiadas dudas, demasiadas incertidumbres, demasiadas inconcreciones y demasiados derechos adquiridos en peligro. Y, para nuestra desgracia como sorianos, parece que no nos ofrece sino más de lo mismo. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Ceña Tutor. Para contestar al Grupo Parlamentario UPL-Soria ¡Ya!, tiene la palabra el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Gracias, señor presidente. Gracias, señorías. Empiezo dando la bienvenida al nuevo grupo parlamentario, la Unión del Pueblo Leonés-Soria ¡Ya!, creado entre ambas formaciones políticas, y saludando también a los seis procuradores, y tanto al portavoz, al señor Santos, como al viceportavoz, el señor Ceña Tutor, que se estrena en esta Cámara, y al que le deseo los mayores éxitos y aciertos.

Agradezco a ambos el tono empleado en las formas, en sus intervenciones, de verdad, aunque, bueno, pues algunas de las cuestiones hablaré que no coincidimos en nada en el fondo, y otras, desde luego, me sorprende, porque, bueno, hablaré de ello.

Pero tiene mi compromiso personal, el compromiso de nuestro Gobierno, de tener ese talante, un buen clima parlamentario, que prevalezca siempre tanto dentro como fuera de la Cámara. Yo creo que no es momento ni de enfrentamientos ni de crispación, sino un momento de construir puentes y de una política de mano tendida.

Pero una actitud y un compromiso de mano tendida, desde luego, no puede tener ni líneas rojas ni cordones sanitarios a representantes elegidos democráticamente por las personas de Castilla y León. Me ha sorprendido su actitud, tanto el señor Santos como el señor Ceña. Por eso les pido que disipen sus dudas en relación con el Acuerdo de Gobierno que tanto Partido Popular como Vox hemos alcanzado, porque todos y cada uno de sus puntos y medidas tienen cabida y se van a desarrollar dentro del máximo respeto de la Constitución y el Estatuto (por cierto, como no podía ser de otra manera).

Les pido a sus señorías, por tanto, que basta de miedos anticipatorios y de lecciones de dignidad, desde esa superioridad moral que me ha querido trasladar, señor Santos, respecto de los socios. Hombre, mire, no me hable usted de socios, por favor, no me habla usted de socios, porque sus socios son los mismos que a nivel nacional pactan con quien pactan; sus socios, le recuerdo, que son los responsables del cierre de la minería y de las térmicas en la provincia de León... [aplausos] ... un cierre precipitado e injusto que ha ocasionado desempleo, pérdida de población y, además, no solo en León, sino también en Palencia, y ha favorecido el incremento de la... el precio de la luz e incrementos del IPC.

No sé si usted levantó la voz, alzó la voz. Hoy aquí no ha dicho nada. No ha hablado tampoco nada de las reivindicaciones pendientes del Gobierno de España ni el señor Santos ni el señor Ceña. Aquí hay muchas cuestiones que tiene que hacer la Junta de Castilla y León, pero su silencio ha sido clamoroso respecto de lo que consideramos se debe hacer por León y por Soria desde el Gobierno de España.

Yo, señor Santos, ya que hablamos de León, aprovecho para recordarle que la configuración del actual mapa autonómico está definitivamente cerrada desde hace décadas. Por cierto, me he liado, porque tan pronto hablaba de León como de León, Zamora y Salamanca. Unas veces León no tenía la Facultad de Medicina, entonces hablaba de la provincia, porque en Salamanca sí que hay Facultad de Medicina. Podrían decirle desde Salamanca que por qué no tienen la facultad de Veterinaria que existe en León.

Mire, si es que este tipo de discursos no va a ningún a lado. El mapa autonómico está definitivamente cerrado desde hace décadas. Ya desde el inicio del Estado autonómico, las autonomías provinciales por la Comisión de Expertos no eran vistas como una alternativa recomendable -usted lo sabe-, y sobre las Autonomías se extendió pues ese... esa Comisión de Expertos, el inconveniente de las proliferaciones. Pero, bueno, dicho esto, el Tribunal Constitucional con posterioridad dijo que ninguna provincia tenía un derecho sin más emanado de la propia Constitución para convertirse en Comunidad uniprovincial, y eso correspondía a las Cortes Generales; y el Consejo de Estado, ya más recientemente, en el año dos mil seis, sobre posibles modificaciones de la Constitución, consideraba cerrado el mapa autonómico. Y decía literalmente este dictamen: "Una vez terminada la división del territorio, el principio dispositivo no puede jugar ya en favor de las provincias para hacer posible la creación de nuevos entes dotados de autonomía política".

Conclusión: no hay lugar a posibles discusiones que supongan trocear Castilla y León. Yo interpreto, entiendo, que esa mentalidad que tiene su formación política no es la misma de la formación política de Soria ¡Ya!, así he interpretado a lo largo de estas décadas de... de trabajo de Soria ¡Ya! Pero, bueno, yo creo que es bueno insistir aquí en que la integridad territorial es para nosotros un valor esencial a mantener y a defender; y yo no entiendo por qué usted viene aquí a decirme que el Estatuto de Autonomía de Castilla y León hay que tirarlo a la basura y yo tengo que aplaudirle. Yo, que soy una de las personas que tiene como responsabilidad hacer cumplir el Estatuto de Autonomía de Castilla y León, cuando usted me dice eso, yo le tengo que aplaudir. Eso es lo que parece que usted me está reclamando.

Señor Santos, la división, el aislamiento, enfrentar, buscar diferencias, el agravio, yo creo que no... nunca es solución a los problemas. Tenemos objetivos comunes, podemos hablar de muchas cuestiones. Usted parece que ha buscado el camino de la confrontación, de no dar solución a la provincia de León, de no querer dar solución a los problemas de los leoneses. Lo lamento. Yo, desde luego, no cuenten conmigo para buscar el enfrentamiento entre territorios, entre provincias, ni una lucha cainita respecto de la descentralización.

Mire, la mejor descentralización es que las políticas de la Junta de Castilla y León lleguen a todo el territorio y lleguen a todas las personas vivan en capitales, vivan en ciudades o vivan en cualquier pueblo.

No es ni eficaz ni solidario luchar solo por los intereses de una localidad o de una provincia, y yo creo que hay que tener en cuenta las necesidades de todo el territorio de Castilla y León. Creo que la expresión, el refrán, la unión hace la fuerza, es mucho mejor que ir cada uno a lo suyo, y entiendo que eso agota las energías de manera estéril y, además, ofrece escasos resultados.

Castilla y León, como Comunidad unida impulsa importantes actuaciones para las nueve provincias de la Comunidad Autónoma, y también para León y para Soria. Luego diré. Pero, mire, respecto de los leoneses, hombre, han otorgado mayoritariamente su confianza a formaciones que apuestan por León como parte indisoluble de Castilla y León. Yo creo que eso es así, desde el máximo respeto y la máxima consideración a los votantes de la Unión del Pueblo Leonés.

Pero, mire, le voy a decir al señor Ceña y al señor Santos: yo he nacido donde he nacido, que es en Salamanca, no he nacido en Soria, no he nacido en León; pero ninguno de ustedes me va a dar lecciones de lo que es querer trabajar, patear, la provincia de Soria ni de León. Ninguno de ustedes me va a dar lecciones en eso -y especialmente usted, señor Ceña, porque ha trabajado conmigo mucho tiempo-.

Yo tengo que decirle, respecto del problema de la despoblación, si uno analiza más allá de los informes que tiene en internet, si uno analiza los informes de verdad serios de... de la ONU, por ejemplo, nos dice que el 80 % de la población mundial en las próximas décadas se va a concentrar en dos ámbitos: por un lado en las grandes ciudades y por otro lado en las costas, ya sean las costas atlánticas o mediterráneas. Eso va a ser así en todo el mundo, esa es una tendencia que se produce. Y, desde luego, con esto no estoy... Es así. Ya sé que usted dice que no, pero yo le digo que sí; eso es lo que dicen los informes. Y yo lo que digo es que estoy aquí para dar esa batalla. Yo no he dicho en ningún momento que esté aquí para no dar esa batalla, todo lo contrario.

Mire, ¿cómo se lucha contra la despoblación? En primer lugar, con servicios públicos en todo el territorio: sanidad, servicios sociales, escuelas abiertas. Eso es que ya es obvio, pero lo vuelvo a decir.

En segundo lugar, por la nueva generación de servicios públicos. ¿Es que no he hablado yo del transporte gratuito a la demanda? ¿Es que no he hablado yo de extensión de la banda ancha a todo el territorio? ¿Es que no he hablado del acceso a la vivienda, especialmente en el medio rural? Podría seguir hablando de otros nuevos servicios, que hay que trasladar a todo el territorio. Es así.

Pero también es necesario hacer un apoyo fundamental a los autónomos, a las empresas, a las pymes. Por eso hay una política específica de apoyo, especialmente en el... en el medio rural, a aquellas empresas y autónomos que quieran instalarse en el medio rural.

Mire, me ha sorprendido. Yo creo que a cualquiera que haya escuchado la intervención del señor Ceña hoy aquí le sorprendería que dijera, al salir de... el primer día de la reunión: "Soria ¡Ya! ve posible apoyar un Gobierno en solitario del Partido Popular en Castilla y León". Después de haberle escuchado a usted hoy aquí, pues, como digo, me... me parece sorprendente. Pero bueno.

También, respecto del señor Santos, es verdad que tuvo más habilidad, no lo dijo públicamente; pero en la reunión que tuvimos con usted dijo que iba a tener la misma actitud con el Partido Popular que con el Partido Socialista el año pasado en la moción de censura. Que iba a hacer lo mismo con el señor Tudanca que con el señor Mañueco. Usted se abstuvo con el señor Tudanca. Esa es la realidad. Y ahora va a votar en contra, o así le he entendido yo, que va a votar en contra.

Mire, señor Ceña, no llegamos a un acuerdo porque ustedes pedían el 12 % del marco financiero plurianual para la provincia de Soria, correspondiente al marco... como digo, a los fondos europeos (FEDER, Fondo Social Europeo y el FEADER); esto en exclusiva para Soria, no sé por qué criterio. Y además, del 85... perdón, del 88 % restante, podría acudir la provincia de Soria como cualquier otra provincia. Tenemos el documento que usted nos... nos remitió. Comparten grupo con la Unión del Pueblo Leonés; no sé si ellos estarán de acuerdo con ustedes con ese planteamiento, o incluso qué piensa el partido Por Ávila respecto de esto.

Señor Ceña, yo con cariño se lo digo: no juegue a una postura de insolidaridad con el resto de provincias. Yo creo que aquí hay que hacer un esfuerzo. Y ahí estamos abiertos... yo estoy abierto a estudiar todas las propuestas que me plantee, porque creo que es algo que lo hemos dicho siempre. Pero lo que no vamos a consentir son privilegios de unas provincias sobre otras. No sé si este planteamiento usted lo consideraba privilegio; a mí sí. Y, desde luego, la cohesión y el equilibrio territorial es algo que consideramos también importante.

Creo que la mayoría de las demandas son coincidentes por nuestras respectivas formaciones políticas. Y además tengo que decir que este Gobierno va a ser el principal defensor de las políticas que están en marcha o que se van a cumplir a lo largo de los próximos años. Hombre, les quiero recordar que en los últimos tres años -no llegamos a tres años- hemos tenido dos de pandemia, que no ha sido una situación complicada. No quiero que esto sirva de excusa, simplemente que sirva de explicación.

Mire, tengo que decir que, respecto de la neutralidad, ustedes, tanto la Unión del Pueblo Leonés como Soria ¡Ya!, pues, parece que tienen una preferencia respecto del Partido Socialista con respecto a otras formaciones políticas. Bueno, en el caso de la Unión del Pueblo Leonés es evidente, porque está gobernando en coalición con el Partido Socialista en la Diputación Provincial y está favoreciendo el Gobierno del Partido Socialista en el Ayuntamiento de León. Bueno, vamos a tener cuatro años de trabajo a lo largo de la legislatura, y ya veremos con quién se posiciona cada uno.

Pero, mire, ¿todos queremos una sanidad de primera? Por supuesto. Señor Ceña, me sorprende que hable usted mal de la cita previa. Es que está funcionando, y funciona bien. En las ciudades ya está funcionando y la... Perdone, en las ciudades está funcionando, está funcionando. Y las personas mayores de las ciudades no las considero ni más ni menos listas, inteligentes o capaces que las que viven en el medio rural. Por tanto, el problema no es de las personas. Incluso le voy a decir más: si es que la teleasistencia avanzada va a gestionar esas cuestiones de cita previa, también de seguimiento de medicamentos y de otras cuestiones. Pero tenemos una gran red de centros de salud y de consultorios. Efectivamente, vamos a intensificar el criterio para que se abran los consultorios abiertos totalmente en todos nuestros pueblos; pero hay que recordar que tenemos la mejor ratio de médicos por habitante de toda España.

Se está haciendo una inversión en el Hospital de Santa Bárbara, pero también vamos a hacer una apuesta por el Hospital de Aranda de Duero, de Palencia, de Segovia. Se está culminando el de Salamanca, se apostó por la renovación del Hospital de León, que tendrá mejoras. Las unidades de satélite, tanto en Soria como en el Bierzo, van a ser una realidad -lo he dicho esta mañana-, pero también Ávila, Segovia y Palencia.

Vamos a apostar por la calidad educativa. Ni un solo... ni un solo estudiante acude a las escuelas o a los colegios sin libros ni material escolar por razones económicas, ni en Soria ni en León ni en ninguna otra provincia. Tenemos -fíjese- las mil... casi 1.400 escuelas conectadas; también en Soria, también en León. Tenemos la intención de conectar con conexión ultrarrápida las 16.000 aulas; también de Soria y de León. La teleasistencia avanzada gratuita va a llegar a todas las personas dependientes y a las personas mayores que lo necesiten; eso va a ser una realidad. Como el acceso a la vivienda, especialmente para los jóvenes en el medio rural; en Soria y en León. O medidas de movilidad como el bono rural de transporte gratuito: 2.000 rutas tenemos en toda Castilla y León; también en Soria y también en León. Y ampliarlo a todas las localidades todos los días y con mayor frecuencia; sí también en Soria y en León. Y apostar por carreteras, infraestructuras logísticas de transporte, llevando de la mano del Estado internet a todos los rincones de nuestra Comunidad. Ahí hemos coincidido, y le agradezco su esfuerzo.

Mire, cuando hablamos luchar contra la despoblación, es apostar por los agricultores y por los ganaderos. Es verdad que en la década de los años sesenta había unas más de 300.000 personas que vivían aproximadamente del campo, de la agricultura y de la ganadería; hoy estaríamos en torno entre 50 y 60.000 personas, aproximadamente. A lo mejor esa es otra explicación de por qué se está perdiendo población en el medio rural. Por tanto, una buena gestión de la Política Agraria Común, apoyando la fluidez y el equilibrio de la cadena alimentaria, nos parece muy importante para luchar contra la despoblación, con fuertes inversiones en el regadío, con fuertes inversiones también en las concentraciones parcelarias. Por cierto, la provincia de León va a ser récord en la apuesta por los regadíos en nuestra Comunidad Autónoma; espero que eso no lo interprete como un gesto de perjudicar a la provincia de León, señor Santos.

La industrialización. Hombre, es curioso que usted hable de industrialización, señor Santos. Mire, aquí, un poco a vuela pluma, en el Bierzo, TVITEC, EMOBI y FORESTALIA y otros proyectos van a generar en torno a 1.300 empleos directos. Eso es gracias al esfuerzo de la Junta de Castilla y León, gracias al esfuerzo de la sociedad de León. 240 millones de euros de inversión, y va a generar unos 3.000 empleos de manera indirecta.

También en León, el Bierzo -provincia de León-, todo en su conjunto, Parque Tecnológico de León, parque industrial de Villadangos, Latem, Network Stell y Nexis Farmacéutica, 350 millones de euros de inversión, 600 empleos directos. ¿Se acuerda usted de Vestas, señor Santos? Usted sí; la provincia de León no. Dio una respuesta inmediata la Junta de Castilla y León. [Aplausos].

Le puedo hablar de la provincia de Soria. En Ólvega, el otro día, se hizo una inversión de 40 millones de euros, que va a crear 150 puestos de trabajo, y en la... una empresa maderera -que no puedo decir el nombre- va a hacer una inversión de 80 millones de euros y 200 empleos de trabajo.

Podríamos hablar del tema de Soria, de planes industriales. Le daba miedo hablar de alguna empresa, señor Santos, Renault en Valladolid y en Palencia; Nissan en Ávila, Kronospan en Burgos... Podría seguir hablando de planes territoriales: el Plan Soria Saludable y Conectada o el Plan de... de los municipios mineros de León y Palencia, los de Béjar, Benavente, Medina del Campo, Villadango del Páramo, Segovia, Sierra de la Demanda, Ávila, Tierra de Campos; o iniciativas de estímulo a la inversión en las comarcas de La Raya de Zamora y de Salamanca.

Es importante la fiscalidad diferenciada. No... no sé si es que me he despistado en algún momento, no le he escuchado a usted hablar de la fiscalidad diferenciada, o a lo mejor me he despistado. Si... si lo ha dicho usted, le pido disculpas. La fiscalidad diferenciada es importantísima para luchar contra la despoblación, así podemos compensar a las empresas y puede servir un estímulo a la inversión y a la creación de empleo. Sabe usted que fue una medida ya aprobada por la Comisión Europea.

No voy a hablar de las autovías o de los ferrocarriles porque me imagino que ustedes saldrán ahora reivindicando a la Junta de Castilla y León que seamos exigentes con el Gobierno de España para reclamar las autovías y los ferrocarriles pendientes, especialmente en sus provincias.

Yo quiero que... simplemente una reflexión: siempre que hablo con el Gobierno de España, siempre que tengo la oportunidad de hablar de las infraestructuras, incluyo la provincia de Ávila, incluyo la provincia de Soria, incluyo la provincia de León, pero incluyo las seis provincias restantes, porque todas tienen cuestiones pendientes, y entendemos que la situación económica actual pues va a retrasar algunas infraestructuras. Ese calendario comprensivo de infraestructuras pendientes del que yo le hablaba al señor Tudanca.

Bueno, dicho esto, yo lo que tengo que decir es que Castilla y León tiene que jugar un papel en todas las provincias, y todas las provincias tienen que jugar un papel fundamental como motor de progreso y de modernidad. Y ahí, en la mejora de la vida de todos los castellanos y leoneses, en la mejora de nuestra tierra, en la defensa de la protección de los derechos y libertades siempre nos vamos a encontrar. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco. Para un turno de réplica, tiene la palabra el señor Santos Reyero, por un tiempo de cinco minutos.


EL SEÑOR SANTOS REYERO:

Sí, gracias, presidente. Bien, señor Mañueco, empezó usted diciendo que teníamos su mano tendida, pero que no se puede hacer cordones sanitarios ni líneas rojas. Y acaba... continúa usted diciendo que para usted es una línea roja la descentralización y el problema territorial que existe en León. Por lo tanto, no... desde luego... no, no, no, eso es mentira y usted lo sabe. Eso es mentira, como muchas de las cosas que usted ha dicho. Incluso usted ha hablado de lo uniprovincial y aquí nadie ha hablado de eso. Y usted sabe perfectamente que lo que la UPL defiende es una autonomía de la región leonesa, ¿de acuerdo? Y lo sabe usted perfectamente, pero intenta engañar a la gente.

Como también intenta engañar cuando usted habla del cierre de la minería. Mire, yo no soy aquí sospechoso de defender al Partido Socialista en todas las cosas que ha hecho con respecto al cierre de la minería. Pero, oiga, oyéndole a usted hablar pareciera que el señor Soria era del Partido Socialista. Pero es que ustedes, como ellos, son igual de responsables, y quien no ha variado nunca en su posición respecto a la defensa de la minería -y lo sabe usted perfectamente- es quien le está hablando en estos momentos. Y lo he hecho no solo en esta tribuna, señor Mañueco, y sabe usted que me fastidia especialmente, porque lo he hecho en las propias cuencas mineras -y lo sabe usted-, y lo he hecho como concejal de pueblos mineros. Y he tenido que aguantar las políticas del Partido Popular. Acuérdese, acuérdese de cuando el señor Juan Vicente Herrera pedía perdón aquí, acuérdese usted. Acuerde... ¿o era de otro partido? ¿O era del Partido Socialista también?

Por lo tanto, mire, señor Mañueco, las cosas hay que decirlas como son; y ustedes son muy responsables de lo que ha pasado en las cuencas mineras.

Mire, por enlazar, habla usted aquí del plan de dinamización. ¿Pero usted realmente se cree lo que han hecho en el plan de dinamización? Se lo he explicado muchas veces. Un plan de dinamización o de fomento de empleo no consiste en que aquellas competencias habituales -y me refiero a mantenimiento de carreteras- sean consideras como inversiones adicionales. Dicho de otra forma, señor Mañueco: porque la carretera pase por Cistierna o porque pase por Guardo no significa que ustedes estén haciendo algo por esforzarse por crear actividad económica en Guardo o en Cistierna. Porque, si fuera así, lo estarían haciendo en todas las Comunidades Autónomas. Es decir, el déficit en cuanto a mantenimiento de carreteras es igual en unos lugares que en otros.

Se habla de fondos adicionales, señor Mañueco, de fondos adicionales. Usted ha planteado aquí y ha empezado a hablar de planes de fomento de empleo que probablemente para la gente nueva que ha llegado, para la gente de Soria, pueda parecer "oiga, pues esto que dice...". Pero es que los que llevamos aquí ya mucho tiempo sabemos que eso es papel mojado, que no se ha cumplido absolutamente en ninguno de los territorios, no se ha cumplido en ninguno de los territorios, ni ha generado absolutamente nada reseñable.

Mire, yo nunca he sido -y lo sabe usted- ni de cordones sanitarios ni de líneas rojas. Pero, oiga, déjeme decir que yo no puedo estar cerca de lo que defiende el partido Vox. Y lo tengo que decir. Y se lo he explicado en muchas ocasiones. Yo puedo tener problemas con cualquier partido, pero siempre me he sentado a hablar. Ahora, oiga, hay cosas que se defienden aquí sobre derechos sociales adquiridos durante mucho tiempo que es que ni me planteo sentarme a hablarlo -lo siento, señor Gallardo-, es que ni me planteo hablarlo. Pero es que creo que por lo menos tengo el derecho a decirlo, tengo el derecho a decirlo, desde la educación, pero tengo el derecho a decirlo y a mantenerlo.

Y, mire, le voy a decir una cosa, porque usted ha hablado de que yo he planteado o no he planteado en la reunión. Mire usted, nosotros nos hemos reunido, nos hemos reunido, hemos ido a hablar con usted con la mejor voluntad, y lo primero que ha dicho... bueno, yo le he comentado, tenemos cinco ejes, que son los cinco ejes que nosotros hemos planteado y que hemos defendido durante toda la campaña electoral, y hablábamos de garantizar la sanidad, hablábamos de enfrentar el problema de la despoblación, de la descentralización, del problema territorial y de la reindustrialización. Y usted me ha dicho, mirándome no sé si a los ojos o adónde, señor Mañueco: "Oiga, hablamos de lo que quiera, pero de estas dos cosas no; de descentralización, no; y del problema territorial, no". Oiga, pero y a qué nos íbamos a quedar entonces ahí. ¿Pero usted lo entiende? ¿Entiende perfectamente que, cuando alguien quiere dialogar, consensuar, tiene que ceder; y cuando no quiere ceder nada más que de lo aquello que de lo que él quiere hablar, desde luego, no se produce, desde luego, ningún momento de encuentro y, probablemente, ningún acuerdo posterior?

Ha dicho usted por la mañana... ha hablado de cohesión territorial y que usted no discriminará. Pero es que llega tarde. Se lo expliqué el otro día, señor Mañueco: llega usted tarde. Durante 35 años han estado ustedes discriminando a muchas partes del territorio de esta Comunidad Autónoma. Ahora ustedes dicen que quieren repartirlo de forma igualitaria. Pues no, ya es tarde. Ya es tarde. Ustedes tienen que hacer discriminación positiva para aquellos territorios que más lo necesitan. Y, si no, seguirán ustedes centralizando en el mismo lugar y seguirán ustedes contentos de seguir con esa política.

Y, mire, por fin he conseguido algo.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Tiene que ir terminando, señor Santos.


EL SEÑOR SANTOS REYERO:

(Sí, acabo ya, señor Pollán). He conseguido algo. Usted cada vez que me subía a esta tribuna, o acababa llamándome independentista, o acababa diciendo que casi nadie me votaba. Bueno, pues hemos conseguido algo, ya se le han acabado prácticamente los dos insultos que me practicaba.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Santos Reyero. Para un turno de réplica, tiene la palabra el señor Ceña Tutor, por un tiempo de cinco minutos.


EL SEÑOR CEÑA TUTOR:

Bueno, estoy un poco sorprendido por la réplica del señor Mañueco, pero le quiero advertir, por si acaso no se lo sabe -él, que viaja tanto por Soria-: que Soria está en Castilla y León y quiere quedarse; lo que pasa es que quiere quedarse para que le den los mismos derechos que tienen los demás, y ahora mismo no se lo están dando.

Es un ejemplo claro el del reparto de los fondos europeos. Ha dicho usted que en las negociaciones para nombrar presidente de esta Cámara nosotros propusimos -propusimos, tampoco tuviéramos... tuvimos contrapropuesta- un 12 % del reparto de los fondos europeos. Le recuerdo que Soria tiene el 5 % de los habitantes de Castilla y León y el 12 % del territorio. En el último período de financiación europea recibimos el 2 %. Si recibimos el 2 % de los fondos teniendo el 5 % de los habitantes y el 12 % del territorio, ¿cómo puede decirme usted que estamos tratando equilibradamente y de forma cohesionada a Soria? No la estamos tratando de forma cohesionada ni equilibradamente.

Bien, ha hablado también de industrialización. Yo sería más partidario de hablar de otro concepto: de reindustrialización estratégica. Este concepto lo que significa es que en la pandemia nos hemos dado cuenta que muchas de las industrias se habían deslocalizado en Asia y nos hemos encontrado con que no teníamos suministros. Hay que abordar este problema. Ha hablado de un montón de empresas que se han instalado en León, solo dos en Soria. Me gustaría que algún día subiera a esta tribuna y dijera todas las industrias que se han instalado en Soria que ha traído la Junta de Castilla y León. Por ejemplo, esas 14 empresas que han anunciado que se van a instalar en el polígono del parque empresarial del medio ambiente, que no se han instalado.

Curiosamente ha hablado de... ha hablado de Ólvega y ha hablado de 2 empresas en Ólvega, en un polígono que no es de la Junta de Castilla y León. Y uno de los problemas que tiene Ólvega, y me lo han comunicado algunos empresarios, es la vivienda. Pero la Junta de Castilla y León ha sido tan incapaz de promocionar vivienda que hasta algunos empresarios han tenido que financiar planes de vivienda para sus... para sus empleados. O sea, que no veo yo que se esté tratando con igualdad a los territorios.

Es un concepto un poco extraño -lo he explicado muchas veces en campaña-, el de la transversalidad de Soria ¡Ya!: Soria ¡Ya! no es de izquierdas ni de derechas, Soria ¡Ya! pretende defender los intereses de Soria. Es algo que ustedes, acostumbrados a las etiquetas y a etiquetarlo todo no entienden, pero aquí nosotros no vamos a defender una ideología distinta de la del apoyo al territorio. Y estaremos con usted con la mano tendida. Yo, me sorprende que... me sorprende que... que diga que... que no... que no le hemos... que no le hemos apoyado. O sea, que... que dijimos en una... en una reunión que estaríamos dispuestos a pactar con el Partido Popular. ¡Claro que estaríamos dispuestos a pactar con el Partido Popular! Estamos muy dispuestos a pactar con el Partido Popular, si el Partido Popular cumple su programa, su programa. Pero si lo cumple, si tiene un compromiso cierto con él. Si es que no lo tiene, si es que llevan muchos años. El caso de la radioterapia es un ejemplo palpable. Cuando defendimos el 12 % del dinero de los fondos europeos para Soria, no sé si recuerda que no lo defendíamos solo para Soria, lo defendíamos también para Zamora, porque es una provincia que ha perdido más del 1 % de la población en los últimos siete años, tal y como dicen los fondos europeos. Queríamos ese privilegio para Soria porque los fondos europeos lo reconocen, los fondos europeos reconocen que Soria está en una situación demográfica grave y permanente.

Ha hablado también de las reivindicaciones del Gobierno de España, que si... que no, parece ser... Bueno, yo es que tenía 15 minutos para hablar, no tenía tiempo ilimitado, entonces apoyo las reivindicaciones que haga a territorio de España... al Gobierno de España, pero yo le digo... y yo pensaba que estaba aquí representando los intereses de los sorianos ante la Junta de Castilla y León; y en cuestión de infraestructuras le voy a recordar -parece que no lo sabe- que la única provincia de Castilla y León que no tiene ni un kilómetro de autovía de titularidad autonómica es Soria. Las infraestructuras influyen sobremanera en las personas que viven en el territorio, y ustedes están haciendo dejación de funciones con una parte muy importante del territorio.

Es cierto que muchas de las infraestructuras que están pendientes son de competencia estatal, pero en las que tienen ustedes competencia también están pendientes. Les recuerdo el trayecto entre Yanguas y el confín de la provincia, lindando con La Rioja, que son 4 kilómetros y llevan paralizados pues ni sé el tiempo, la verdad, es una cosa sorprendente.

Y en cuanto al Plan Soria -el Plan Soria II, porque el uno fue un auténtico fracaso, reconocido por ustedes mismos-, el Plan Soria II duró hora y media, porque lo publicaron en el Boletín Oficial de Castilla y León a las siete y media de la mañana y a las nueve por Twitter anunció la disolución del Gobierno y lo dejó inmediatamente sin presupuesto. Pues un plan que dura hora y media, no sé, me gustaría ser optimista, pero me cuesta, me cuesta mucho. No obstante, en todo lo que apoye a Soria, en todo lo que veamos una ventaja para el desarrollo de Soria y de Castilla y León, estaremos de su lado. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Ceña Tutor. Para un turno de dúplica, tiene la palabra el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Bueno, gracias, presidente. Decir que todos los que estamos aquí tenemos nuestra... nuestros planteamientos y que no tenemos que tener una postura coincidente en todo, como ha quedado de manifiesto a lo largo de este intercambio.

Decirle al señor Santos, de las cinco cuestiones que usted planteó en la reunión se le ha olvidado mencionar la sanidad. ¿No? Pues yo creo que ahora, de los cinco temas que ha mencionado no hablaba de sanidad, pero lo damos por bueno, de sanidad.

Planteó cinco cuestiones. Una, le he señalado el Estatuto de Autonomía: es absolutamente imposible porque para eso hay que cambiar el Estatuto de Autonomía, y yo... y yo quiero... perdone, señor Santos, yo quiero cumplir el Estatuto de Autonomía de Castilla y León. Y además... y además le voy a decir que no... se requiere una mayoría cualificada que no existe. Por tanto, usted está en ese debate para generar confusión, generar el agravio, generar el planteamiento. Esto es un debate que ya está cerrado hace décadas y que, desde luego, el mapa autonómico no cabe ni volver a dibujar o reescribir.

Nadie aquí ha dicho nada sobre la descentralización; lo que hemos dicho es que esa es una cuestión que no se puede actuar ni con frivolidad ni, desde luego, con alegría. No se puede venir aquí un día a un acto político del partido, venir, decir que voy a crear no sé qué cuestión, y luego salir corriendo y al día siguiente se me ha olvidado. Hay que hacer un debate sereno, serio, discreto, sosegado, sobre si eso es lo mejor o no para nuestra Comunidad.

Pero decirle también al señor Ceña otras tres empresas: Moreno Sáez, en las Cúpulas; Aperitivos Añavieja, en Ólvega; y Grupo Amatex, en Cabrejas del Pinar. Además, tres municipios, digamos, el entorno del medio rural, aunque Ólvega ya tiene una potencia industrial importante; y, además, están a disposición 390.000 metros cuadrados en el PEMA.

Hombre, decir que Soria no tiene ningún kilómetro de autovía autonómica... Bueno, es que, de la mitad de la Comunidad no tiene kilómetros de autovías autonómicos, porque es que, de las nueve provincias, tienen cinco; pero, si analizamos, Ponferrada, Salamanca, Zamora, también Soria... Mire, yo le podría decir, podría recordar aquí el ofrecimiento que hizo mi antecesor, Juan Vicente Herrera, estuvo dispuesto a cofinanciar la autovía entre Valladolid y Soria: 200 millones de euros. No quiso el Gobierno de España. Pregúntense ustedes quién estaba gobernando en aquel momento el Gobierno de España.

Pero, mire, yo tengo que decirles que desde la Junta venimos trabajando por la cohesión económica y social y también por la cohesión territorial de... de las nueve provincias de Castilla y León, de todas las provincias de Castilla y León. Y, además, yo creo que lo que es bueno para una provincia es bueno para la Comunidad, y al revés.

Fíjese, señor Santos, yo creo que León es una provincia con mucho potencial, se están haciendo cosas y se está apostando por León desde la Junta. Le he puesto ejemplos, se los he recordado. Pero León también tiene que pensar en su orgullo para aportar todas sus capacidades, para ayudarse en primer lugar a sí mismo, y para ayudar a la Comunidad, como ha sido a lo largo de la historia, en lugar de lamentarse, que es la postura más cómoda, la que tiene usted, para no tener iniciativas.

Ahora están ustedes bien: tres procuradores. Bueno, ya tuvieron tres procuradores; eran otras circunstancias. Las olas suben, bajan; las tendencias van y vienen. Pero lo que quiero decirles es -y se lo vuelvo a decir-: no va a darnos lecciones de querer, de dar la cara, de patear la provincia de León al futuro Gobierno. No nos va a dar lecciones, señor Santos. Mire, yo quiero a la provincia de León, como mínimo, tanto como usted. Y no me va a dar lecciones en ese sentido. El que yo haya nacido en Salamanca no quiere decir que no esté comprometido por todos y cada uno de las personas que viven en la provincia de León. Yo sé que ese discurso a usted en estas circunstancias le ha dado buenos resultados. Bien, esto ya iremos viendo qué es lo que ocurre y ya veremos qué es lo que pasa en las próximas elecciones.

Pero lo que sí tengo que decir es que todas las provincias han sido siempre tratadas con justicia, atendiendo a las distintas necesidades; y hay provincias, señor Ceña, que a lo mejor no necesitan un 12 %, es que a lo mejor necesitan el 20. Pero es que usted lo que hizo fue plantear una subasta, digo: "Para que yo le apoye a usted, usted me tiene que dar, de entrada, el 12 % de la tarta que corresponde a todas... a toda la Comunidad Autónoma; y luego, del resto, también participamos la provincia de Soria".

Pero, mire, vamos a ver, si por mucho menos, si por mucho menos, señor Ceña, estamos hoy aquí. Estamos... hemos tenido un proceso electoral, hemos tenido unas elecciones, estamos celebrando este debate. Porque conmigo no valen ni prebendas ni chantajes, señor Ceña. [Aplausos]. Es así. Yo creo que usted ha pensado que yo era el Sánchez de Castilla y León, y ahí se equivocó conmigo.

Tengo que decirle también que ni líneas rojas ni cordones sanitarios. Yo creo que lo que hay que hacer es analizar las políticas en función de lo que hacemos, de lo que decimos. Y yo creo que eso es lo que se tiene que juzgar. Juzgar a las personas, poner etiquetas a las formaciones políticas me parece un error. Yo creo que los... las elecciones ya se han celebrado, los... los ciudadanos han hablado...

Pero lo que sí le puedo decir es, respecto de la fiscalidad rural -lamento que tengamos menos tiempo, le pediremos a la Mesa que para el próximo Debate de Investidura haya más tiempo-, pero ya en el año dos mil, la Junta de Castilla y León, ya en el año dos mil la Junta de Castilla y León aplicó una reducción del 99 % del impuesto de sucesiones en explotaciones agrarias. Y tenemos en vigor en estos momentos ocho beneficios fiscales específicos para el mundo rural: compra, alquiler o rehabilitación de vivienda. Pero también, específicamente para la fiscalidad del mundo rural, decir que estamos entre las tres Comunidades con mejor fiscalidad, más favorable, para el medio rural. Y no nos conformamos, queremos llegar a ser la que mejor fiscalidad rural.

Y vamos a aprobar nuevos beneficios fiscales, los he mencionado esta mañana, vinculados fundamentalmente al impuesto de la renta de las personas físicas, y también el impuesto de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, eximiendo a los jóvenes del pago del impuesto al adquirir su vivienda habitual, y, para el resto, bajarlo del 8 al 3 %. Es una apuesta importante.

También decir que, cuando yo llegué a la Presidencia de la Junta me encontré una negociación en marcha del presidente Herrera, que trabajó en Europa para que se tuviera en cuenta la consideración singular de las zonas con baja densidad demográfica. Yo, personalmente, desde el minuto uno que tomé posesión como presidente, no he dejado de trabajar para conseguirlo. Ahí están las reuniones, Soria fue testigo de una de ellas. Reuniones con los presidentes de Aragón y de Castilla-La Mancha en Soria, en julio del dos mil veinte; en Talavera de la Reina, en diciembre del dos mil veinte; y también en Albarracín, en mayo del dos mil veintiuno. Reuniéndome con la vicepresidenta de la Comisión y comisaria de Demografía, la señora Suica, en febrero del dos mil veinte -me acompañó el entonces vicepresidente de la Junta, señor Igea-; también tuvimos una reunión telemática con la presidenta de la Comisión todos los presidentes de... de Comunidades Autónomas con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en octubre del dos mil veinte. Y hemos tenido también una reunión con la vicepresidenta y comisaria para la Competencia, la danesa señora Vestager, en diciembre del dos mil veinte.

Bueno, son decisiones, apuestas claras, reuniones que permitió el poder considerar y recordar y defender el protagonismo de las zonas rurales, defendiendo una España y una Europa donde hubiera actividad económica y población en todo el territorio.

Conseguimos en abril del dos mil veintiuno que Europa diera luz verde a una fiscalidad diferenciada para estos territorios. Eso es algo que tenemos que sentirnos todos orgullosos de ello. Sí. Estoy hablando en abril del dos mil veintiuno, hace un año. Esperamos que el Gobierno Sánchez pueda aplicar ese ahorro del 20 % de los costes laborales a empresas en estas zonas. Seguimos esperando. Pero nuestro compromiso está bien claro con la fiscalidad diferenciada, que va a beneficiar a Soria y que se puede ampliar a otras zonas. A lo mejor no a provincias completas pero sí a otras zonas de la Comunidad Autónoma, de nuestra Comunidad Autónoma.

Y ya, para ir concluyendo, yo lo que sí le puedo decir es que en la vida uno puede coger muchos caminos, pero coger la política estéril, escoger la irrelevancia me parece un error. Cuando uno tiene la posibilidad de aportar a un Programa de Gobierno yo, desde luego, me hubiera apostado por contribuir al futuro de... de sus provincias representadas, de Soria y de León. Han querido plantear, como digo, pues por un lado una subasta, por otro lado, apostar por esa política de confrontación, cada uno elige el camino que quiere, pero yo, desde luego, por ahí no paso.

Lo que sí creo que es importante es que todos tengan claro que lo que necesita la provincia de León, lo que necesita la provincia de Soria, lo que necesitan las siete provincias restantes de la Comunidad Autónoma de Castilla y León lo va a impulsar el Gobierno que va a salir elegido, que espero, confío, que salga elegido del debate de investidura de hoy y que se forme a partir de la próxima semana. Muchísimas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Fernández Mañueco. En representación del Grupo Parlamentario Mixto, tiene la palabra don Juan Pablo Fernández Santos, por un tiempo de diez minutos.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

Sí. Gracias, presidente. Señorías, las personas lo primero; lo primero la gente. Esta es la premisa irrenunciable que ha guiado todas nuestras actuaciones desde que iniciamos nuestra singladura en estas Cortes, y sin duda será la máxima grabada a fuego en el frontispicio de nuestro proyecto político en la legislatura que ahora comienza.

Porque este aforismo, las personas lo primero, adquiere hoy su verdadero significado, su auténtica potencia, en una jornada en la cual, en la sede de la soberanía de los castellanos y leoneses, de las leonesas y castellanas, se escenifica el pacto de la infamia, que da entrada en el Gobierno autonómico a la ultraderecha, a la moderna encarnación del fascismo, con la tragedia que eso va implicar en forma de lacerantes recortes de derechos y libertades, muy especialmente de mujeres, de emigrantes y del colectivo LGTBI. Y todo ello para regocijo del Partido Popular y del señor Mañueco, que, sin ruborizarse lo más mínimo, da cobijo en su Ejecutivo al racismo, al machismo, a la homofobia y a la xenofobia.

Sin pestañear, sin inmutarse, sin una pizca de vergüenza, hoy se hacen cómplices del odio, del más exacerbado trumpismo, de la política de la más baja estofa. Y ahí está usted, señor Mañueco, ufano, henchido de satisfacción, rebosante de gozo porque va a mantener su poltrona y va a poder seguir tapando todos los hediondos casos de corrupción del Partido Popular con la aquiescencia de esa ultraderecha cobarde con los poderosos e implacable con los débiles y vulnerables.

Usted siempre ha sido un epígono de la más rancia derecha, señor Mañueco, pero este pacto de la vergüenza le hace indistinguible de Vox, para sonrojo del mismísimo Partido Popular europeo, que ha calificado su matrimonio con la ultraderecha de capitulación y de triste sorpresa. Es indubitable que lo que aquí bendicen ustedes con Feijóo a la cabeza abochorna en Europa. La regeneración del Partido Popular patrio era echarse a los brazos de la extrema derecha. Está claro que el señor Feijóo y usted, señor Mañueco, son a la moderación lo que Putin al pacifismo. Y, por cierto, son a los aliados de Putin en Europa a los que usted da entrada con alborozo en su Ejecutivo.

Está visto, señor Mañueco, que usted ha hecho un pan como unas tortas. Por su capricho y por su ciega obediencia al hoy defenestrado Pablo Casado rompió el Gobierno; convocó elecciones anticipadas en lo peor de la sexta ola de la pandemia; dejó a Castilla y León sin presupuestos en un momento crucial para la historia de esta Comunidad, en la que usted debería haber estado centrado única y exclusivamente en procurar la recuperación social y económica de esta tierra; y mintió a todo el mundo, obnubilado por unas encuestas que le han salido rana. Todo ello para llegar hasta aquí, incubando al huevo de la serpiente. Sin duda, pasará usted a los anales, pero de la infamia.

Y es que va usted de hito en hito. En dos mil diecinueve se convirtió en el primer presidente perdedor de la historia de esta Comunidad, y ahora en el primero en introducir a la ultraderecha en el Gobierno.

Su falta de escrúpulos políticos queda condensado en esos 32 puntos del acuerdo con Vox, inconcretos, una vaga declaración de intenciones, una nadería en lo que se refiere a las principales problemáticas de esta Comunidad, pero que es así, desgraciadamente rebela que ustedes van a desamparar a las mujeres víctimas de la violencia machista, que van a abandonar al colectivo LGTBI y que van a hacer de la antipolítica su bandera, porque hoy se hermanan con aquellos que entienden la res publica como problema y no como solución.

Y es que con tal de mantener su sillón, con el único objetivo de conservar la poltrona, se han prosternado ante la ultraderecha, se han bajado los pantalones de la forma más indigna, doblegándose a todas sus exigencias.

Para nosotros es un drama que usted vaya a seguir siendo el presidente de esta Comunidad, apuntalado además por la extrema derecha. Ya demostró la pasada legislatura que usted carece de proyecto político para nuestra tierra y para nuestras gentes. Es por ello que nada esperamos de su mandato más allá de una continuidad perniciosa en la despoblación, en la precariedad, en la desigualdad, en los enormes desequilibrios interprovinciales, en la brecha salarial que sufren las mujeres, en la hiriente privatización de lo común, en el salvaje deterioro de lo público, en la sangrante desindustrialización de esta Comunidad, en la tremebunda destrucción de autónomos, en la opacidad de la Junta y en las corruptelas, ese ADN, esa marca de la casa del Partido Popular. Todo ello sumado al execrable recorte de derechos y libertades que va a provocar, con su anuencia, su compinche de Gobierno.

Y frente a ello, desde Unidas Podemos no vamos a dar ni un paso atrás. Frente a la intolerancia, frente al odio, frente a la merma en derechos y libertades, nos van a tener enfrente. Seguiremos ejerciendo la firme y férrea labor de Oposición, escrutando y escudriñando todas sus actuaciones, denunciando las trapacerías que están por acaecer, y que, estoy convencido, cometerá su Ejecutivo. Pero también, y por supuesto, desgranando propuestas y medidas que mejoren la vida de nuestros conciudadanos, que revitalicen esta tierra y que acaben con la funesta lacra de la despoblación, que es el aciago fruto de las políticas del Partido Popular.

Es por ello que desde Unidas Podemos planteamos cinco ejes de actuación para mejorar la vida de los castellanos y leoneses, de las leonesas y castellanas:

El primero, el blindaje de los servicios públicos: de la sanidad, de la educación y de los servicios sociales. Ustedes están deteriorando hasta lo indecible la sanidad pública. Nosotros abogamos por fortalecerla, garantizando que se invierte en la misma al menos un 8 % del PIB, y robusteciendo muy especialmente la maltrecha pero clave Atención Primaria, destinando a la misma al menos un 25 % del presupuesto total de la Consejería. Además, queremos reforzar la educación pública, que hoy languidece ante su apuesta por la privada concertada. Y en materia de servicios sociales, propugnamos un cambio de paradigma en el modelo residencial, en el que lo público, por fin, sea la regla general y lo privado la puntual excepción, incrementando exponencialmente las plazas públicas en las residencias y recuperando para lo público el servicio de ayuda a domicilio.

Como segundo eje, impulsar una respuesta económica que permita que nuestras paisanas y paisanos puedan quedarse en esta tierra a desarrollar un proyecto vital digno, con estabilidad y con garantías. Y para ello es incuestionable que hay que generar empleo fijo y de calidad. Es por ello que nosotros apostamos por la creación de planes específicos de empleo para las mujeres, para los jóvenes, para los mayores de 45 años y para los moradores del medio rural. Conjuntamente, queremos que se apruebe una ley de autónomos que proteja a un colectivo que es vital para nuestro tejido económico, y al que ustedes le están machacando de forma inmisericorde. Y además, es necesario un cambio, una transformación de nuestro modelo productivo, aprovechando la llegada de fondos europeos; algo que debería cimentarse en la innovación, el desarrollo y la investigación; I+D+i que ha sido sistemáticamente y tradicionalmente olvidados por sus políticas y el objeto de sus más flagrantes incumplimientos. Nosotros queremos que se destine un 3,5 % del PIB al I+D+i, de cara a lograr una reindustrialización en clave verde y digital en esta tierra, que genere empleo de calidad.

Como tercer eje, desarrollar una propuesta habitacional clara, que dé cumplimiento al Artículo 47 de la Constitución, de modo que todo el mundo en esta Comunidad pueda acceder a una vivienda digna en condiciones asequibles, muy especialmente los jóvenes y los habitantes del medio rural. Y para ello es perentorio crear un parque público de viviendas adecuado y suficiente, señor Mañueco, no las 1.500 viviendas que decía usted esta mañana, que son del todo insuficientes.

El cuarto eje, una estrategia de... de infraestructuras dignas y sostenibles, en coordinación con el Gobierno de España, para cohesionar y para vertebrar Castilla y León, impulsando el ferrocarril convencional, el tren de cercanías, la FEVE en la provincia de León; y, por supuesto, un plan de carreteras para adecuarlas y acondicionarlas de cara a que nuestros pueblos no se hallen aislados, como están muchos de ellos a día de hoy. Y, eso sí, garantizar de una vez por todas que en pleno siglo XXI internet llegue al conjunto del territorio de esta Comunidad, porque, señor Mañueco, es grotesco escucharle prometer una y otra vez esta misma cuestión, cuando hay muchas zonas de nuestra Comunidad que están yermas de conexión, ante su eterno retorno de incumplimientos.

Y el quinto eje, una política fiscal verdaderamente progresiva, que dé cumplimiento al mandato consagrado en el Artículo 31 de nuestra Constitución. Porque su política fiscal, señor Mañueco, es regresiva y favorece únicamente a los más ricos, a los más privilegiados, perjudicando al resto, a las mayorías, a las clases medias, a las clases trabajadoras y populares. Y además, para acometer las medidas que precisa esta Comunidad, son necesarios ingresos; y, por ello, es incontrovertible que hay que llevar adelante una reforma fiscal verdaderamente progresiva, que permita, además, fortalecer los servicios públicos y transformar nuestro modelo productivo.

Señorías, a pesar de la tropelía que se va a sellar hoy aquí, dando cabida a la ultraderecha en el Gobierno, vale la pena seguir luchando y continuar portando en estas Cortes la voz de los que piensan que otra Castilla y León es posible, la voz de los olvidados y de los abandonados por sus políticas.

Nosotros continuaremos insubordinándonos ante la impiedad y ante la injusticia, porque creemos en otra Castilla y León, una en la que las personas sean responsables las unas de las otras; una en la que el amparo y la fraternidad sean las raíces éticas del árbol moral de los pueblos; una en la que lo indócil es un deber ante los decretos de servidumbre de los poderosos.

Desde Unidas Podemos, continuaremos dejándonos la piel todos los días y trabajando con denuedo para mejorar la vida de los castellanos y leoneses, de las leonesas y castellanas, porque, a pesar de todos los pesares, somos legión los que inaccesibles sostenemos con fuerza la idea, hecha solo de palabras, de que algún día las estrellas serán para quien las trabaje, de que, más pronto que tarde, por fin las personas en Castilla y León serán lo primero. Muchas gracias.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Santos. En representación del Grupo Parlamentario Mixto, tiene la palabra don Francisco Igea Arisqueta, por un tiempo de diez minutos.


EL SEÑOR IGEA ARISQUETA:

Muchas gracias, señor presidente. Bueno, un gusto volver a vernos, señor Mañueco. Mire, no puedo otorgarle la confianza porque es que ni siquiera me la ha pedido; así que... Ni siquiera tuvo la decencia de reunirse con los grupos políticos que representamos más de 100.000 personas -120.000 personas- en esta Comunidad. Nos envió al señor Carriedo y a la señora Blanco, a quien ya transmitimos nuestra intención.

Pero mire, voy a hacer lo que usted nos ha pedido todo el rato, que es: yo no le juzgaré por sus palabras o por sus promesas, le voy a juzgar por sus hechos, ¿eh? Usted prometió agotar la legislatura; se lo prometió a todos. No lo cumplió. Usted prometió diálogo a esta Cámara para elaborar las normas y los presupuestos. No lo cumplió. Prometió lealtad eterna a Pablo Casado, y ya vimos cómo acabó. Prometió que gobernaría en solitario; y aquí estamos, ¿eh? Usted prometió intentar un dialogo y un acuerdo con todos, y usted ha engañado a Por Ávila, al PSOE, a UPL, en incluso, en un tiempo récord, a Soria ¡Ya!, ¿eh?

Y mire, usted ha dicho que el Partido Socialista buscaba tránsfugas en lo duro de la pandemia, y encontró uno: usted, ¿eh? Porque usted no era el que estaba buscando las medidas sanitarias, usted lo que estaba mirando eran las encuestas.

Mire, es usted el primer político en este país que se aventura en este inhóspito campo de pactar con la ultraderecha: con la intolerancia, con la xenofobia, con el machismo. Unas políticas que van a poner en riesgo el crecimiento económico, las libertades de nuestra Comunidad. Sé que el tema va a sonar exagerado; es más hay gente ya blanqueando el discurso de Vox en la Comunidad, sobre todo desde que el señor García-Gallardo avisó que ya se va a hacer cargo él de la publicidad institucional. Pero voy a tratar de explicarlo porque soy hombre de razonamientos y de hechos, y no de soflamas.

Mire, Vox es el único partido político que ha negado sistemáticamente la presencia de determinados miembros de la prensa en sus actos y en sus ruedas de prensa. Hoy es que lo ha hecho hoy a la puerta aquí el señor Abascal con La Sexta. Pero es que, además que lo señala. Es que la semana pasada señaló a un peligroso izquierdista, Vicente Vallés; y lo señaló en las redes, para que se le persiguiese. Hombre, no tan intensamente como hizo el señor Abascal con el editor de El Jueves, de quien publicó su fotografía y dijo literal: "Es posible que muchos empiecen a exigir responsabilidades al salir de su despacho en la Diagonal de Barcelona". Ole. Menos mal, señor Mañueco, que usted no cede a amenazas, si no yo estaría preocupado.

Bueno, además, Vox es un partido que milita abiertamente en la destrucción de nuestro modelo de Unión Europea, ¿eh? Las élites globalistas la llaman los burócratas de Bruselas, ¿eh? Y a usted no se le ocurre otra cosa que mandar al señor Gallardo a Europa. Eso solo se le ocurre a usted. Mire, usted va a llevar la Comunidad del grupo de los liberales al grupo de los eurófobos. Los que nos tienen que negociar allí nuestras políticas agrarias, industriales, todas esas cosas, pues oiga, lo va a negociar este señor -peligroso, según el señor Tusk, ¿eh?-. Y este señor, que tiene orgullo, de decir que son amigos del único presidente europeo que ha sido felicitado por el señor Putin, que es el señor Orbán. Estos son nuestros emisarios en Europa en este momento.

Bueno, no acaban ahí los perjuicios de introducir lo que se llama "la peste verde" en nuestras instituciones, porque han introducido ustedes también a los negacionistas de la ciencia. Quiero recordar como el señor Abascal, en un programa de radio de máxima audiencia, se negaba a confirmar si se había vacunado o no, ¿eh? Como el señor Buxadé decía que era igual de bueno vacunarse que no vacunarse. Oiga, cuando haya otro brote en la pandemia u otra pandemia, igual tiene que salir usted, porque ya no tiene un vicepresidente que se parta la cara por usted.

Mire, además, sus socios llaman a la política medioambiental "religión climática" o "fanatismo climático". Usted parece convencido esta mañana, ha dicho que iba a pedir al Gobierno que cambiase la política energética, ¿eh? Estos señores han llegado a negar las evidencias más palmarias, incluso delante de la catástrofe del mar Menor, y su portavoz en la ley de enmienda climática, en el Congreso de los Diputados, el señor Francisco José Contreras, dijo esta frase que hay que enmarcar: "Mueren diecisiete veces más personas de frío que de calor en el mundo. Que se caliente un poquito reducirá esas muertes". Ole. Ole.

Mire, estos son sus socios, quienes ustedes han metido en el Gobierno para cuidar de nuestros intereses.

Pero es que en política económica no son mucho mejores, son los reyes de proteccionismo. Y usted también, sorprendentemente, esta mañana se ha convertido al proteccionismo al decir la protección de nuestros productos y nuestras industrias. El proteccionismo en una Comunidad que es... tiene un balance exportador netamente positivo. Oiga, ¿qué va a hacer usted si entran ustedes en una guerra comercial? Porque, claro, ¿ustedes piensan que los demás no van a proteger lo suyo? Mire, lo decía Escohotado: los enemigos del comercio son los enemigos de la libertad.

Pero, si tiene alguna duda, pregúntense qué ocurrió en Inglaterra cuando otro de los admirados socios de estos señores, el señor Farage consiguió sacar a Inglaterra de la Unión Europea. Ocurrió que hoy la fábrica de Swich Mobility está en Valladolid, no está en Inglaterra. Eso es lo que traen las políticas proteccionistas y aislacionistas de estos señores.

Pero además van a acabar con la paz social después de pedir que se quiten las prestaciones sanitarias a los inmigrantes ilegales, que se quiten las ayudas a las asociaciones que cuidan de los inmigrantes, de hostigarlos, de decir que la gente que viene del norte de África es peligrosa con las mujeres porque las violan. Se puede ser xenófobo, muy xenófobo y luego está el señor García-Gallardo.

Mire, parece ser que los únicos apellidos que a ustedes les gustan son los Von Frings, los Tertsch o los Smith. Hay otros apellidos extranjeros que les gustan. Miren, no solamente es humanamente repugnante, ¿eh?, es que además ustedes, que presumen mucho de valores cristianos -seguramente van a acudir esta semana con sus mantillas y sus capuchones a las procesiones-, son, simplemente, sepulcros blanqueados.

Miren, ¿y qué urgencias tenían estos señores para la Comunidad? Pues ya hemos visto. Oiga, mire, era muy fácil: "Queremos lo mismo que Ciudadanos". No. No, no, no; lo que no queremos es ser portavoces, que ahí dan cera. No, no. Vicepresidente -sin trabajar, a ser posible, ¿eh?-. "Queremos tres Consejerías, pero unas de repartir dinero, ¿eh?, unas que son el 9 % del Presupuesto, no me haga usted encargarme de la sanidad, que menudo lío, que menudo lío". Porque a eso es a lo que han venido. Ustedes han venido con 32 puntos de un acuerdo inconcretos, vagos y no con los 100 puntos concretos, con leyes concretas, con reformas concretas sobre transparencia, sobre derechos y garantías, sobre lucha contra la corrupción.

A este respecto le diré que usted ha ganado en esto, porque usted ya no tiene en el Gobierno alguien que promulga la transparencia, la lucha contra la corrupción; tiene un abogado especialista en casos de corrupción. Y eso es bueno para usted. Usted no quería socios; usted quería cómplices.

Y usted tomó esta decisión a sabiendas, siendo consciente, plenamente consciente de lo que iba a ocurrir. Usted prefirió a Vox deliberadamente. No se engañe y no nos engañe.

Pero entre las urgencias hay una que no quiero dejar de reseñar, que es la de ocultar la existencia de la violencia de género. Hoy lo ha dicho el señor García-Gallardo en la rueda de prensa -supongo que lo dirá otra vez-: la violencia no tiene género. Señora Blanco, ¿qué le han dado a usted para admitir esto? Mujeres del Partido Popular, ¿qué les han dado a ustedes para admitir esto? Quizás, ¿que no habrá Comisión de Residencias? Quizás eso. Eso es lo que vale... eso es lo que vale lo que decía la señora Pinacho en la legislatura pasada, que habíamos dejado morir a los ancianos y tal. Y esto ha desaparecido, ha desaparecido, porque ya tienen ustedes un vicepresidente y un cargo y todas estas cosas.

No vamos a hablar de la ley de memoria ni de lo terrible que es intentar decir a los ciudadanos de esta Comunidad y de este país que no hubo abuelos buenos y abuelos malos, como dice el señor García-Gallardo; que quienes traían en un camión a las afueras de Medina del Campo a más de 30 personas, las bajaban del camión, les pegaban un tiro en la nunca y las mandaban a un pozo no eran abuelos malos. Pues no sé de quién eran pero eran muy malos. Tan malos como los que lo hacen en el País Vasco, tan malos como los que hacen en Bucha, igual.

Bueno, pues esto es para ustedes la concordia, ¿eh?, esta es la concordia que nos espera.

Voy a concluir. Mire, ustedes no han planteado aquí ni medidas fiscales ni planes para reformar nuestra sanidad ni Atención Primaria, ni medidas contra la despoblación, nada de nada de las auténticas urgencias de nuestros agricultores, de nuestros ganaderos, de nuestra industria, de nuestras familias. Nada. Solo estas cosas ideológicas.

Mire, señor Mañueco, usted no es digno de confianza porque ha mentido a los ciudadanos, a los partidos políticos, incluso al suyo propio. Usted no es digno de confianza ni siquiera para el presidente de su partido. No venga a pedirnos a nosotros lo que hasta el propio señor Feijóo le ha negado hoy con su ausencia en este hemiciclo.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Igea. A continuación, en representación del Grupo Parlamentario Mixto, tiene un turno don Pedro José Pascual Muñoz, por un tiempo de diez minutos.


EL SEÑOR PASCUAL MUÑOZ:

Muchas gracias, presidente. Buenas tardes, señorías. Nos encontramos en el segundo Debate de Investidura en menos de tres años, y lo que he escuchado esta mañana no es muy diferente de lo que usted dijo en el año dos mil diecinueve. Vuelve a contarnos una declaración de intenciones y hoy usted, el que previsiblemente va a gobernar en esta Comunidad no sabemos si los próximos cuatro años, repite más de lo mismo.

Veremos, aunque tengo muchas dudas, si esta nueva etapa que se inicia hoy es tan estable, fuerte, sólida y duradera como usted lleva prometiendo todos estos días.

Lo mismo que en julio de dos mil diecinueve, usted hoy ha dado un discurso políticamente correcto; pero que a mí, como castellano y leonés, y sobre todo como abulense, no me llega ni me transmite nada, es más, me desilusiona y me decepciona.

La mayoría de nuestros paisanos residen en zonas rurales, es población con mucha edad y -lo más importante- muchos de ellos padecen de enfermedades crónicas pluripatológicas que necesitan, entre otras cosas, un transporte sanitario y unas comunicaciones correctas para poder trasladarse y recibir una atención adecuada y de calidad en tiempo razonable.

Mucho hablar de blindar la asistencia sanitaria, pero no he escuchado nada en concreto en su intervención que cómo piensa hacerlo. Y esta demanda no es solo de los abulenses, señor Mañueco, es algo común a muchas zonas de nuestra Comunidad, pero ustedes -como siempre- más de lo mismo. Porque Castilla y León es una Comunidad muy grande, con nueve provincias muy... muy diferentes entre sí, con peculiaridades diferentes y diferentes necesidades, y a las que durante más de 30 años no se ha tenido en cuenta. Por eso tienen que existir partidos como Por Ávila o Soria ¡Ya!, para reclamar aquello que ustedes olvidan, porque no solo olvidan a territorios y provincias, se olvidan de las personas, que es lo más importante. Tienen que trabajar por provincias que claramente están en desventaja con el resto.

Ante esa pasividad de tantos años, le seguiré trasladando las reivindicaciones que me trasmiten los abulenses y que son siempre las mismas de todos los años: mejorar las comunicaciones tanto por carretera como por ferrocarril. Le recuerdo que hoy para llegar a este Pleno he venido por un tramo de carretera nacional porque seguimos sin conexión con autovía por Valladolid, con Valladolid. Y del ferrocarril mejor ni hablar. Bueno, sí, mencionar, aunque sé que no es competencia de la Junta, pero sí se puede hacer, el AVE, una promesa de su partido, ni está ni se le espera en Ávila ni estará nunca. Otra promesa más.

En cuanto al empleo, señor Mañueco, no me diga que está en marcha un Plan Territorial de Fomento, que ya sé, porque eso ya lo sé, ya le digo, pero todavía va muy lento y es necesario que las propuestas del Plan Territorial se pongan en marcha cuanto antes y que se cumplan. En Castilla y León la tasa media de paro es de 10,3 %. La tasa de paro supera en Ávila el 15 %. Como de costumbre, la más alta de toda la Comunidad.

En cuanto a industria, también estamos a la cola de la Comunidad. El PIB de Ávila es de 5,56, el segundo más bajo de la Comunidad, solo por detrás de Soria.

En cuanto a la sanidad, tiempo tendremos de hablar largo y tendido a lo largo de la legislatura -depende de lo que dure la legislatura-, pero le recuerdo que las provincias como Ávila tenemos un grave problema con la Atención Primaria, tenemos un grave problema con el transporte sanitario, tanto urgente como programado, puesto que seguimos dependiendo de hospitales de referencia para muchas patologías, y sobre todo en las que son tiempodependientes.

Todo esto ya lo sabe, pues lo he dicho cincuenta mil veces aquí, en los dos años y medio o tres que llevo aquí, pero como en otras y muchas reivindicaciones todo se queda en agua de borrajas. Reivindicaciones que, como le digo, yo las hago pero no son mías: son de los abulenses y de todos los castellanos y leoneses. Lo que más me indigna de estos dos años y medio es que no se haya hecho prácticamente nada por saldar la deuda histórica que ustedes tienen con mi provincia. Solo se acuerdan de Ávila en el período electoral.

Y sobre todo me indigna que se haya perdido una gran oportunidad por no llevar a cabo los que eran los mejores Presupuestos, los Presupuestos más altos de la historia, tanto para la Comunidad como para Ávila. Eso decían ustedes; o así lo explicaron. Pero se lo cargaron con un adelanto electoral que nadie entiende y que ni a ustedes les ha supuesto ningún beneficio.

Lo que ha hecho es de vergüenza: escudarse en pactos inexistentes y en supuestas traiciones para echar todo eso por tierra y convocar elecciones. Y esto es algo que yo como abulense no puedo ni debo perdonar. Nos han traicionado ustedes con el único objetivo de sacar un rédito político. Han traicionado a los abulenses para seguir manteniendo su sillón y por el único interés de su partido político, que para ustedes siempre está por encima de todo. Pero está claro que lo que ustedes buscaban con la convocatoria electoral no lo han conseguido y no les ha quedado otra que volver a pactar.

Les dimos nuestro apoyo y nuestra confianza en varias ocasiones, como en los Presupuestos del año dos mil veinte, o aprobando el techo de gasto en dos mil veintiuno para que el Presupuesto de ese año saliese adelante. He confiado en su palabra; pero ustedes nos han pagado aún más olvidando a los abulenses.

Ávila y Castilla y León necesita un presidente que de verdad cumpla con lo que promete, con lo que dice a los ciudadanos, y no que a la primera de cambio y sin justificación abandone a estos ciudadanos, convoque unas elecciones, con el enorme gasto que eso conlleva -ya no solo económico, sino social- y en plena pandemia sanitaria, de crisis económica, con la inestabilidad que eso genera. Porque le recuerdo que, gracias a usted, llevamos casi cuatro meses sin un Gobierno estable, con unos Presupuestos prorrogados y con un panorama sanitario, social y económico que necesitan un Ejecutivo competente que dé la talla al frente de las necesidades de la población. Algo que, visto lo visto, y con el mismo panorama que otro Gobierno de coalición, no sé si se lo dará. ¡Ojalá!

Como le decía, son casi cuatro meses sin estabilidad e incertidumbre. Esa, la certidumbre que buscaba usted adelantando las elecciones, y eso me parece de verdad, señor Mañueco, una falta de respeto hacia todos los castellanos y leoneses. Tienen a trabajadores esenciales, como los del transporte sanitario o los bomberos, o a la gente del campo, desmotivados, desesperados. Al personal público temporal a las puertas del Parlamento esta mañana por el trato tan injusto que están recibiendo por no llevar a cumplimiento la ley.

¿Cómo quedan las iniciativas que se estaban tramitando, señor Mañueco? ¿Las proposiciones no de ley que se aprobaron y que se supone, por lo que nos decían, que ya estaban en tramitación? Aunque, como he visto en estos dos años y medio, mucho aprobar iniciativas para luego no llevar nada a cabo. ¿Qué va a pasar con todo eso, señor Mañueco? Porque entiendo que cuando se aprueba algo en estas Cortes se le debería dar cumplimiento, porque considero que es algo bueno para los castellanos y leoneses. Y, si no, pues qué sentido tiene el Poder Legislativo. ¿Qué ha pasado con las Comisiones de Investigación? ¿Con la que iba a investigar lo sucedido en las residencias, o la del incendio de la sierra de la Paramera de Ávila? Hoy reclamo que se retomen cuanto antes las Comisiones de Investigación de las residencias y la del incendio de la sierra de la Paramera, el incendio que más hectáreas ha calcinado en nuestra Comunidad. ¡Bah!, pero, visto lo visto, parece que a ustedes todo esto les da igual.

Y termino. No me voy a extender más porque me... me caliento y no quiero. (Sí, porque yo he escuchado con mucho respeto también, Raúl. Es que, de verdad...). Y termino ya diciendo que nuestro voto a su investidura de hoy, como ya he anunciado, será que no. Eso no quiere decir que no nos vayan... no... no vayan a tener en contra... nos vayan a tener en contra en todo lo que vayan a proponer en lo que queda de legislatura, ni mucho menos. Esto no quiere decir que me vaya a encontrar en contra, señor Mañueco, para dialogar, consensuar, todo lo que sea bueno para mi provincia y para Castilla y León; para Castilla y León, también. No solamente miro por mi provincia, muchas de las enmiendas eran para Castilla y León. Me encontrarán siempre que encuentren... que... que quieran el progreso para Ávila y para Castilla y León.

Pero el "no" de hoy es porque sigo sin entender el trato desigual que se nos está dando. Tengo muy claro que como vengo haciendo desde que soy procurador por la provincia de Ávila voy a continuar reivindicando, todavía más si cabe, todo aquello que Ávila necesita y que los abulenses me transmiten. Y aunque venga, como muchas veces vengo, sin dormir, después de salir de trabajar, me da igual; voy a seguir haciéndolo porque me siento muy orgulloso de hacerlo por mi provincia.

Ávila y Castilla y León no merecen un presidente que siga manteniendo las diferencias que se han generado en los diferentes Gobiernos regionales y que han hecho que existan provincias de distinta categoría. Porque Ávila sigue igual o peor que hace treinta años, señor Mañueco, y eso no lo podemos permitir. Por eso, todos los abulenses pueden contar conmigo para luchar para que Ávila no sea más que nadie, que no sea más que nadie pero tampoco menos que nadie; para trabajar por una Comunidad, la de Castilla y León, más equitativa y justa para todos sus habitantes, porque nos merecemos -de verdad, señor Mañueco- de una vez por todas ser iguales y tener similares oportunidades. Muchas gracias.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Pascual Muñoz. Para contestar, tiene la palabra el candidato, el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Muchas gracias, presidente. Paso a dar respuesta a los representantes del Grupo Mixto. Y comienzo por el procurador de Podemos, el señor Fernández. Me hubiera gustado empezar agradeciéndole el tono de su intervención, pero con usted es imposible. Ya venía calentando motores en estos días de atrás, porque le hemos escuchado cada cosa... Pero ¿qué quiere que le diga, señor Fernández? Es que usted está pasado de revoluciones. Tranquilícese, serénese, relájese, señor Fernández, no tema. [Aplausos]. No tema, no se desmoralice. Si va a seguir siendo el procurador que más intransigencia y radicalidad traiga a esta Cámara, señor Fernández. [Aplausos]. Nadie le va a quitar ese puesto. No se preocupe. En serio, de verdad se lo digo. Usted va a ser el que más va a insultar, el que más va a faltar al respeto a los demás y, con el permiso del señor Tudanca, también el más intolerante con las políticas elegidas en las urnas por los castellanos y leoneses. Le esperamos aquí.

A usted también le han dicho las personas de Castilla y León que sus soflamas, sus aspavientos y también sus salidas de pie de banco no las queremos en Castilla y León. [Aplausos]. Es la realidad.

Por cierto, una pequeña puntualización. Hablaba usted de esta Cámara, de las Cortes de Castilla y León, y hablaba de la soberanía. Le voy a hacer una pequeña corrección: la soberanía solo está en el pueblo de España, y eso reside en el Congreso de los Diputados, no en las Cortes de Castilla y León. Nosotros somos los representantes del pueblo de Castilla y León. No hay una soberanía compartida; solo la tiene España, el pueblo español y el Congreso de los Diputados. [Aplausos]. Parece mentira que no lo sepa usted, señor Fernández.

Es verdad, esto es una Cámara democrática y aquí se viene a debatir, a discrepar y a consensuar; a lo que no se viene es a hacer numeritos. Porque, hombre, que usted nos venga aquí y nos hable de Putin, ¡eso sí que es un numerito de tomo y lomo! [Aplausos]. Y a mí ya no me puede culpar, porque se lo avisé hace mucho, que su radicalidad no iba a tener ni crédito ni rédito, señor Fernández, que se iba a dar usted un batacazo electoral. Y vaya si se lo ha dado.

Fíjese, el trece de febrero escribía usted en las redes, literal: "Hoy vamos a llenar las urnas...". "¡Demostremos que sí se puede!". Señor Fernández, el catorce de febrero, el día después, cuando ya se conocían los resultados, decía, literal: "No hemos sido capaces de dar la vuelta a 35 años del Partido Popular en Castilla y León y eso nos tiene que hacer reflexionar". Y, desde el catorce de febrero hasta hoy, yo lo que veo es que usted podía haber reflexionado algo, un poco. Pero sigue instalado en ese discurso gritón, faltón, fracasado, punto por punto y coma por coma. Es que usted no cambia, señor Fernández, es invariable.

Castilla y León lo ha dicho alto y claro: no tiene confianza en su opción política. Ha dicho que no, ha dicho que basta a su retórica incendiaria, que usted es un metal que resuena, unos platillos que aturden, y que su eco se apaga poco a poco, señor Fernández. [Aplausos].

Usted es un magnífico ejemplo de la política de Marx, de Groucho Marx. Literal, abro comillas: "El arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y después aplicar los remedios equivocados". Eso es, precisamente, su forma de actuar, señor Fernández. Usted falsea sin ningún pudor el diagnóstico de los problemas. Si no le gusta la realidad, se la inventa. ¡Para qué! La empeora o, si es necesario, la crispa y la denuncia a los cuatro vientos.

Cuando usted habla de privatización, de desmantelamiento de lo público, especialmente en la sanidad y en los servicios que gestiona la Junta de Castilla y León, es absolutamente desconocer la realidad. Porque, fíjate... fíjese, está en la Comunidad Autónoma donde menos porcentaje del presupuesto sanitario se destina a conciertos privados. O en la Comunidad Autónoma, Castilla y León me refiero, con mayor dotación de plazas residenciales de financiación pública de toda España, señor Fernández.

Aunque su mejor receta es la de la despoblación. Fíjese, usted ha decidido presentarse a las elecciones por Valladolid, no por León: una buena reacción contra la despoblación; contra la despoblación de sus escaños, señor Fernández. [Aplausos]. Su presencia menguante en este Hemiciclo no hace más que reflejar el papel menguante de su formación política en la política española, que va camino del más absoluto de los espacios irrelevantes.

Está usted fuera de la realidad política de Castilla y León, aunque es verdad que su partido está dentro del Gobierno de Sánchez. Y la pandemia, la crisis de precios, la guerra de Ucrania a ustedes les han situado todavía más fuera de la realidad. Fíjese la propuesta para luchar contra la factura de la luz: que no sea bajar los impuestos, que sea subirlos. Es que ha hablado aquí de fiscalidad progresiva, y ya sabemos que eso, en su boca o en la de cualquier dirigente de la izquierda, ya sabemos lo que es: hachazo a los bolsillos de los castellanos y leoneses y de los españoles. [Aplausos].

También tiene usted otra propuesta: crear... -usted no, su partido-, crear en España una empresa pública de energía. Eso lo dice todo de su infantilismo político. Porque usted compagina ese infantilismo con el mayor cinismo político. Y, además, todo aderezado con una violencia verbal que es que no nos gusta a nadie, que son más propios de tiempos que no deberíamos ni recordar siquiera.

Mire, yo le puedo decir que usted está fuera de la realidad, que nuestros valores están bien claros: la Constitución del 78, la Monarquía Parlamentaria, la democracia liberal, creer en el Poder Judicial... Esto es así, en todos los casos, no cuando a sus amigos le viene mal. En todos los casos. Esos son mis valores, esos son unos valores que no son como los suyos, de quita y pon. Yo sí creo en Castilla y León y creo en las capacidades de las personas de esta tierra y, sobre todo, en el valor de las ideas y en los proyectos que aquí se forjan.

Señor Fernández, yo le invito a que retome ese tuit, le invito a volver a la realidad y a reflexionar. Y la realidad es que en esta Comunidad va a haber un Gobierno fuerte y sólido para los próximos cuatro años, que, además, va a actuar con eficacia, va a gestionar y defender bien los intereses de las personas de Castilla y León, de la gente: eso de lo que tanto habla usted y tan poco se preocupa, de la gente, mejorando los servicios públicos, superando los retos económicos y afianzando la recuperación para aumentar la cohesión territorial. Señor Fernández, para concluir con usted en esta primera intervención, reflexione, pero hágalo de verdad.

Señor Igea, a usted también le pido que reflexione y que acepte su realidad, su realidad inevitable y fatal, su soledad, su irrelevancia política. La realidad es la que es. No cambia porque usted la tergiverse, no cambia porque usted se invente sus relatos, esas crónicas taurinas de las que me han hablado. ¿Por qué ha llegado usted y su partido a esta situación? (Hagamos una reflexión). Porque usted dinamitó un pacto de Gobierno que funcionaba correctamente... [aplausos] ... y lo hizo para garantizarse su supervivencia política, porque usted solo se preocupa de usted; del servicio honesto a las gentes de esta tierra, eso para otros.

Podía haber seguido los pasos de Aguado en Madrid: salir por las bambalinas del escenario discretamente. Pero no, usted es de los que saltan al precipicio; y ahí es donde ha acabado usted, su partido y unos cuantos compañeros de su partido que no merecían ese final. Fíjese, lo ha dicho, pero lo ha recitado hasta la saciedad en la precampaña y en la campaña electoral: la mentira y la deshonestidad no podían ser premiadas y debían ser castigadas. Son sus palabras, señor Igea. Y Castilla y León ha hablado y han castigado con contundencia la mentira y la deshonestidad. [Aplausos]. Por eso, a usted le han dejado donde está: solo, señor Igea, usted está solo.

Señor Igea, todos los que le escuchamos ahora nos preguntamos: oiga, ¿pero ha asumido usted los resultados electorales? ¿Los conoce? ¿De verdad los conoce, señor Igea? Le voy a... a aclarar algunas cuestiones.

Mire, usted, como candidato de Ciudadanos a la Presidencia de la Junta de Castilla y León en estas últimas elecciones, ha hecho historia en la política de Castilla y León. Usted será recordado por darse el mayor batacazo electoral en Castilla y León; y fíjese que los hay gordos, y aquí algunos hay ejemplos claros. Ha perdido usted el 73 % de sus votos, ha pasado de 12 procuradores a 1. Usted, siempre usted, y solamente usted, señor Igea. [Aplausos]. Usted pedía un duro castigo para la mentira y la deshonestidad, y vaya si lo han hecho los castellanos y leoneses.

Y viene a darnos lecciones de pactos. Pero es que su política de pactos es hipócrita. Oiga, que su partido en el dos mil diecinueve pidieron y aceptaron los votos de Vox para gobernar ayuntamientos y Comunidades Autónomas en toda España. ¿Pero de qué me está hablando usted, señor Igea? ¡Ah!, bueno, que ahora se trata de cambiar el discurso sobre la política de pactos, porque como cada vez que hay elecciones o desaparecen o son irrelevantes, ahora en cada elección nos imponen el cordón sanitario, y se rasgan las vestiduras porque Vox va a formar parte del Gobierno autonómico en base al respaldo de las urnas. Esa legítima aspiración es la misma que ustedes, que usted tuvo en el dos mil diecinueve, y no me acuerdo que nadie les insultara por ello. A lo mejor alguien, pero, no, no me suena; se lo diría en privado.

Señor Igea, su lema de campaña fue "El valor de la palabra". Usted ha demostrado no tener ni valor ni palabra; y se lo digo mirándose a los ojos. Usted demostró no tener valor, porque apuñalar por la espalda a los socios de Gobierno, que éramos nosotros, y además éramos leales y cumplidores, no es de valientes, señor Igea. Necesitaba alguien que le garantizara esos ocho años que usted quería, que le garantizara su sillón y su micrófono, que es lo que le ocupa y lo que le preocupa, señor Igea. Y sus confabulaciones contra nosotros, sus socios, fracasaron, y el trece de febrero ya sabe lo que ocurrió: las urnas le colocaron en su sitio.

Y usted no tiene palabra, porque, fíjese -esto es muy importante-, en noviembre del diecinueve, refiriéndose al mal resultado electoral del señor Rivera, ¿se acuerda usted lo que dijo en El País? "Yo asumiría responsabilidades", refiriéndose a Igea, no... perdón, a Rivera, no a usted. En febrero del... del dos mil veintidós batacazo electoral suyo. Sigue pontificándonos, no cumple con su palabra, no asume ningún tipo de responsabilidad y, por lo que le hemos escuchado, me da la sensación que no tiene ninguna intención. Pues bien, ni valor ni palabra. ¿Qué es lo que representa usted, señor Igea? La traición, representa también la ambición y representa el bisagrismo.

Señor Igea, creer más o menos en las Comunidades Autónomas no impide a nadie formar parte de los Gobiernos autonómicos. Su partido propone eliminar las Diputaciones Provinciales y, que yo sepa, gobierna en varias de ellas con el Partido Popular. [Aplausos].

Señor Igea, que su partido quiera fusionar los municipios, aunque esta mañana he oído que hay otros partidos u otros gobiernos que pretenden eso, no... no creer en la libertad de vivir que tienen todas las personas, de vivir donde quieran, a mí eso no me parece oportuno. ¿Era tal vez por esa la idea, ese interés oculto de cerrar los consultorios en el medio rural a espaldas del Partido Popular? Claro, quitando los servicios públicos -y esencial es la sanidad rural- para estrangular la vida de los pueblos. Sobre este asunto, señor Igea, no más improvisaciones, no más frivolidades.

Y respecto de gobernar con los representantes que están en los Grupos Reformista y Conservadores europeos, si usted sabe que en toda Europa hay Gobiernos regionales de estas características, Gobiernos regionales y locales. Es más, sus socios europeos en Europa, el Grupo de los Liberales, Emma Bonino y los Socialistas, gobiernan en coalición con Salvini en... en Italia. Esa es la realidad.

Y lo que sí le voy a decir es que la Comunidad Autónoma de Castilla y León va a volver al Grupo Popular en el Comité de las Regiones, de donde nunca tuvo que salir; y solo la inocencia -la mía- y sus arteras artes es lo que consiguió llevarlo al Grupo de los Liberales.

Señor Igea, la democracia consiste en escuchar siempre el mandato de las urnas. Por eso, el trece de febrero -están bien claras las conclusiones- el Partido Popular fue el más votado; y también nos dijeron, me hubiera gustado gobernar en solitario, pero que teníamos que llegar a grandes acuerdos. ¿Es malo escuchar a la gente, señor Igea? ¿Es malo llegar a un Acuerdo de Gobierno fuerte, sólido, para cuatro años con la formación Vox? Estamos cumpliendo la voluntad de la gente, de toda la gente, esa de la que tanto hablan algunos que le acompañan, y que tampoco le hacen caso. Y eso es lo que hemos hecho.

Fíjese, un Gobierno con grandes acuerdos va a afrontar esta legislatura. Un Gobierno fuerte y sólido capaz de afrontar los retos de nuestra Comunidad. Conformar un Gobierno de mayoría amplia, un programa centrado en los problemas de la gente, desde la moderación, también desde el diálogo, desde el pacto. No sé qué es lo que le molesta a usted de esto.

Finalizo con usted, señor Igea. He aguantado tres meses -algo más de tres meses- de insultos, de vetos, desprecios. No va a conseguir que baje a la charca infecta y pestilente donde se juega su discurso político. Ha quedado usted a la altura de Podemos, tanto en representación como en histrionismo; son buenos compañeros de viaje. A usted seguro que le hubiera gustado otro relato, pero esta es la realidad, la única realidad, y no otra.

Señor Igea, le voy a recordar aquí sus primeras palabras en este Hemiciclo. ¿Se acuerda usted? El día de la anterior investidura, hace casi tres años, citaba al maestro Delibes y recordaba las primeras palabras del... de la genial obra El camino. Se las recuerdo -se las recuerdo a todos- las palabras de la obra: "Las cosas podían haber acaecido de cualquier otra manera, y sin embargo sucedieron así". Señor Igea, sea usted como Daniel el Mochuelo: acepte la realidad inevitable y fatal que le espera, es decir, su soledad y su irrelevancia política. [Aplausos].

Señor Pascual, mi contestación, en tercer lugar, obedece al número de votos; interprételo no como una descortesía. Ya sé que, en fin, hay cuestiones que a veces se lo toman por lo tremendo, pero no... no es esa mi intención. Y agradecerle, bueno, las formas, porque yo creo que el rigor y la contundencia en la defensa de las legítimas aspiraciones de cada uno no tiene que estar reñido con la educación, con la corrección política y con la debida cortesía parlamentaria.

Yo creo que no es momento de enfrentamientos ni es momento de crispaciones. Ahora lo que toca es trabajar desde el acuerdo y la concertación para ganar entre todos el futuro de Castilla y León.

Mire, Ávila, como las ocho provincias restantes, es una provincia con la que estamos claramente comprometidos, al igual que -como digo- las ocho provincias de... de esta Comunidad; sin que tal compromiso suponga privilegios de unas sobre otras. Le pido que no se arrogue usted toda la representación de la provincia de Ávila, porque no la tiene; tiene uno de siete. Es más, en Ávila, las elecciones no las ganó su formación política, sino el Partido Popular.

Señor Pascual, desde el máximo respeto a sus votantes, le tengo que recordar algunas cuestiones. No entendí por qué no se presentaron en la primera reunión de... de diálogo, no lo entendí; no sé si por el orgullo de algún miembro de su formación política, por celos injustificados; pero, en cualquier caso, les privó una oportunidad de haber llegado a algún acuerdo o, por lo menos, haberlo intentado. Esa es la única verdad, y a partir de ahí cada uno tiene que sacar sus consecuencias.

Mire, lo que sí le tengo que decir es que Ávila, como lo decía antes de Soria o de León, tiene en el Gobierno de Castilla y León el principal impulsor, el principal compromiso con los... con las cuestiones que necesita la provincia de Ávila. Muchas de ellas están desarrolladas o están en curso desde la pasada legislatura: el Plan Territorial de Ávila -¿le suena, señor Pascual?-; las infraestructuras industriales y logísticas de Nissan -le suena, me imagino-; la carretera de Ávila a El Espinar; el polígono de Vicolozano; el mercado de abastos, el centro del antiguo matadero; las instalaciones deportivas, incluida la piscina climatizada; la nueva residencia de personas mayores; la unidad de radioterapia, señor Pascual; el nuevo helipuerto; las inversiones en los centros de salud de la provincia; las inversiones para la reforestación y la recuperación de las zonas afectadas en el incendio de Navalacruz, con el apoyo dado a los ganaderos.

Creo que usted, cuando decía que el incendio de la sierra de La Paramera, que se refería -entiendo- a este incendio, su cabreo me parece que no lo tenía que haber dirigido hacia el Gobierno de Castilla y León, sino hacia otro Gobierno, que fue, pero que todavía no le hemos visto.

Sin olvidar nuestro compromiso por las infraestructuras pendientes, que no voy a citar. Bueno, sí, sí, sí. Porque es que ha hablado usted del AVE. Es que su partido decía: su partido reivindicaba el AVE. Es que ahí me he perdido, porque no sé si, cuando hablaba del AVE que lo reivindicaba su partido, se refería a su partido cuando estaba en el Partido Popular o solo al Partido Popular cuando usted ya no estaba en el Partido Popular. [Aplausos]. Ahí me he perdido un poco.

En cualquier caso, sí que considero que, igual que en Soria y el Corredor Atlántico Noroeste, la conexión... el nudo con Ponferrada, tenemos que hacer un esfuerzo para que los abulenses tengan... no tengan que seguir soportando un viaje... los abulenses y los salmantinos no tengan que seguir soportando un viaje en tren a Madrid más largo que hace décadas.

Bueno, yo creo que sabe usted que las puertas de mi despacho van a estar siempre abiertas. Espero la misma reciprocidad por parte de su formación política. Construir desde la transparencia, también mantener la cohesión y, sobre todo, actuar con sinceridad y con lealtad. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Fernández Mañueco. Para un turno de réplica, tiene la palabra el señor Fernández Santos, por un tiempo de tres minutos veinte segundos.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

Sí. Gracias, presidente. Señor Mañueco, ¿qué voy a hacer con usted? Yo soy inasequible al desaliento con usía. Esta mañana decía usted que no demos por preconcebido ese pacto que, a mi juicio, es un pacto de la infamia. Pero, señor Mañueco, es que lo único que hay preconcebido aquí son sus réplicas; y yo se lo voy a decir hasta con cariño, para que luego no me tache de que hago aspavientos o palabras malsonantes. De verdad, por respeto a la Cámara de Representación Parlamentaria de Castilla y León, un presidente no debería venir con las réplicas escritas de casa, porque eso lo que le provoca es que luego hace el ridículo; porque el señor Tudanca ha dicho una cosa y usted le ha leído otra; porque yo le he dicho una cosa y me ha respondido otra; y porque el señor Igea ha dicho una cosa y usted le ha respondido lo que traía desde casa. No puede ser, de verdad. No, no, que sí. Es un desdoro para este Parlamento tener un presidente que trae las réplicas escritas de casa y que no es capaz de hacer una intervención respondiendo a aseveraciones de sus adversarios políticos.

Vamos con... con cifras concretas. Decía... apunte, por favor, porque creo... quiero que en la posterior réplica, usted, en vez de responder lo que le traen de casa, me responda a lo que yo le estoy diciendo. Usted ha dicho en su alocución anterior que somos una Comunidad Autónoma líder en varios sectores. Quiero que me diga en cuáles. [Murmullos]. Automoción. Con las subvenciones que usted dan a Renault. Aparte de la automoción, ¿en qué... en qué más sectores somos líderes? ¿En qué? ¿En echar a la gente de Castilla y León? ¿En echar a la gente de Castilla y León... [murmullos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías, señorías, por favor.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

... en expulsar a los jóvenes de Castilla y León? Bien. [Murmullos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

Esa es la educación de la bancada del Partido Popular.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Por favor.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

Mire, señor Mañueco, le voy a dar datos concretos, porque dato mata relato: tasa de actividad en Castilla y León, 54,2 %, 4 puntos por debajo de la media de España; tasa de... tasa de empleo, 48,7 %, 2 puntos por debajo de la media de España; autónomos, 5.918 autónomos menos en los últimos dos años; autónomos, 281 autónomos menos en los últimos tres meses; despoblación, 11.779 habitantes menos en el último año; listas de espera, 245.118 personas están en lista de espera a día de hoy. Quiero que usted me diga qué soluciones concretas propone usted para acabar con todas estas cifras, que nos colocan a la cola en los indicadores económicos de nuestro país.

Después, esta mañana usted ha dicho literalmente, y además se ha jactado de que va a hacer servicios sociales más personalizados y defender a los colectivos más vulnerables. Pues mire, señor Mañueco, yo no sé si usted conoce el caso del niño Fabio, que es un alumno de un centro educativo de Tordesillas, de Pedro I de Tordesillas. Pues mire, ustedes llevan seis años incumpliendo una cuestión que se aprobó por mayoría en estas Cortes, y que decía que ustedes tenían que dotar de servicios de enfermería a aquellos centros con educación... con necesidades educativas especiales, que es, precisamente, lo que sufre una... un niño como este, al que están abandonando y desatendiendo. Su credibilidad, se lo vuelvo a decir, es como su oratoria: ninguna.

Después, que me miente usted a Marx. Señor... señor Mañueco, el mayor marxista que hay en esta Cámara es usted, que tiene unos principios y no le gustan... y si no les gustan, tienen otros. Precisamente por eso usted se ha prosternado y se ha doblegado a todas las exigencias de Vox. ¿Qué pasa con el... con el Artículo 473 o con el punto 473 de su programa político para estas elecciones, que decía que ustedes iban a hacer una ley para proteger a las mujeres víctimas de violencia de género? ¿Dónde queda eso? Sí, sí; sí, sí. Eso queda absolutamente diluido en la ley de violencia intrafamiliar que ha hecho Vox. ¿Qué pasa con el Decreto de Memoria Histórica, que había hecho el Partido Popular anterior a usted...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señor Fernández Santos, tiene que ir terminando, por favor.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

(Acabo... acabo ya. Acabo ya). Dos ideas: el Decreto de la Memoria... -que son, además, paradigmáticas y el ejemplo palmario de lo que es el Partido Popular y las ideas del señor Mañueco- ¿Qué pasa con el Decreto de la Memoria Histórica? Quiero que usted me diga hoy aquí si ustedes van a derogar el Decreto de la Memoria Histórica con esa ley de concordia que propugna Vox, que es el antónimo y la... y el oxímoron de la concordia. Y tercero, ¿qué pasa con la ley LGTBI, Ley de Igualdad y Diversidad Sexual (LGTBI), que era un acuerdo unánime de todos los grupos parlamentarios de esta Cámara? Quiero que usted me diga si esa ley se va a tramitar en esta legislatura. Muchas gracias.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Fernández Santos. Para un turno de réplica, tiene la palabra el señor Igea Arisqueta, por un tiempo de tres minutos veinte segundos.


EL SEÑOR IGEA ARISQUETA:

No se preocupe, señor presidente, no creo que lo vaya a gastar, porque la ocasión no lo merece, ¿eh? Mire, no me molesta su deshonestidad, porque la conocía, ¿eh? Conozco mejor, casi, que ninguno de los que están aquí; mejor o igual que alguno en su familia. Así que no me... no me ha sorprendido; la maniobra que ha hecho no me ha sorprendido. Está a su nivel, está en su categoría, donde está usted.

Sí que me ha sorprendido un poco más los aplausos enfervorecidos de parte de unos señores con los que he estado trabajando, y señoras, durante dos años y medio. He de decirles que eso sí me ha sorprendido, ¿eh?, sí me ha sorprendido, desagradablemente. Porque, miren, ustedes saben cuál es la verdad y ustedes saben la verdad de lo sucedido, lo sabe toda la Comunidad, ¿eh?

Y me gustaría poder acabar. (Creo que dijo usted que iba a volver el decoro. Parece que se ha perdido en alguna parte). Mire, lo que ha sucedido en esta Comunidad ha sucedido a la vista de todos. Nosotros hemos asumido nuestra responsabilidad desde el primer día. El primer día dijimos que el resultado era malísimo y el primer día puse mi cargo a disposición de mi partido. Eso es lo que he dicho, y eso es lo que hice, ¿eh? No hizo usted lo mismo: usted ha sacado dos veces el peor resultado del Partido Popular, dos veces, y no ha hecho tal cosa, ¿eh? Oiga, mire, no me acuse a mí de lo que no ha hecho usted, lo que no ha hecho usted; el peor resultado en porcentaje de votos y en número de votos.

Pero yo creo que eso no les interesa a los ciudadanos de esta Comunidad; lo que les interesa es qué va a ocurrir con sus derechos y libertades, qué va a ocurrir con la despoblación, qué va a ocurrir con la sanidad, qué va a ocurrir con todas esas cosas que afectan a la vida de los ciudadanos de esta Comunidad, ¿eh? Y ustedes, a ese respecto, no tenían ninguna urgencia. En esos 32 puntos del pacto, no hay ni una sola urgencia a ese respecto. En lo que ha dicho usted hoy aquí no hay nada nuevo, nada nuevo, ¿eh? Y, desgraciadamente, desgraciadamente, su partido político hoy da un paso en la peor dirección posible, en la dirección de equipararse a los peores pactos que ustedes criticaban, en separar a este país la izquierda y derecha, en abrir una sima entre dos bloques irreconciliables. Su partido hoy aquí, con la ausencia del señor Feijóo, hace lo peor que se podía hacer en la política española, lo peor: meterse en la trinchera contra otra, cargar con los populistas, cargar con la intolerancia y decir "estos son los míos".

Miren, ustedes no tienen el valor suficiente para cruzar al campo abierto, ustedes no tienen el valor suficiente para dar la mano al otro y ustedes, y usted concretamente no tiene ni siquiera el valor suficiente de decir la verdad. Es usted un mentiroso patológico, es usted un ser deshonesto. No le merecen ni sus compañeros de partido ni esta Comunidad ni su familia. [Murmullos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Igea Arisqueta. Para un... un turno de réplica, tiene la palabra el señor Pascual Muñoz, por un tiempo de tres minutos veinte segundos.


EL SEÑOR PASCUAL MUÑOZ:

Muchas gracias, presidente. Señor Mañueco, le agradezco que tenga abierta su puerta. Ya sabe que yo siempre estoy abierto al diálogo. Y no me presenté por una sencilla razón: porque... por esas supuestas conversaciones que decían que yo había tenido a su espalda o maquinaciones políticas que sabe que no van conmigo. Y se lo puede... se lo puede decir el señor Tudanca o el señor Igea, o usted, o señor De la Hoz. Yo, de momento, soy un hombre de palabra, y lo que digo... y si no se fían, mal lo tiene usted, pero yo estoy aquí y la lealtad no la pongo... no tiene usted que dudar de mi... de mi lealtad en lo que yo digo. Y precisamente por eso. Si me van a acusar y... me van a acusar de mercadeo persa, me siento con usted y así no hay ningún problema. Y entonces, me acusa usted directamente de mercadeo persa o de que ando por detrás. Usted, si quiere, digo, que yo me siento con usted cuando quiera. Pero si me siento con otra gente y luego usted interpreta o dice que yo... Y eso es mentira. O sea, yo nunca he ido a espaldas de... de usted para nada, para nada, y que quede muy claro aquí, ¿eh?

Y yo creo que las preocupaciones de los ciudadanos en ese momento eran las cifras tan elevadas de contagios que tenía la Comunidad, la sobrecarga de trabajo que siguen soportando nuestros sanitarios, las malas condiciones en las que se ven obligados a trabajar médicos y enfermeras, las dificultades de muchos jóvenes de la región para encontrar trabajo en su tierra o la falta de empleo. Ya sé, si es que es lo único que tenemos, el Plan Territorial y Nissan. Y Nissan, venga, venga, venga dinero, venga dinero para Nissan. A ver si es verdad que es una solución para los abulenses. Ya sé que es eso. Si, vamos, es lo que único que tenemos, pues claro que me suena. ¿No me va a sonar?

No me ha dicho nada de lo que ha quedado pendiente y de las Comisiones de Investigación. Preocupaciones que siguen ahí y que muchas se han agudizado, porque llevamos con un Gobierno en funciones, y se lo dije antes y se lo digo ahora: yo creo que es una vergüenza.

Y vuelvo a decir lo mismo: estoy en este Parlamento para que Ávila se oiga, para que todo el mundo sepa las carencias que seguimos teniendo y las desventajas de los abulenses. Todas las decisiones que he tomado hasta ahora han sido pensando en los abulenses, de todos los abulenses, los que me votan y los que no me votan. Hablo de los problemas que siguen sin solucionarse en una provincia privilegiada, que desde un lado y desde otro han olvidado. Sus políticas han abandonado a los abulenses, y yo tengo la obligación y la responsabilidad de luchar para que eso cambie.

Después de dos años y medio viendo cómo funcionan las cosas, puedo decirle que mi voz y la de los abulenses seguirá siendo aún más reivindicativa. Seguiré pidiendo mejoras -¿cómo no?- en materia de comunicaciones, de empleo, industria, en sanidad, para que Ávila esté donde tiene que estar, que los abulenses tengan el mismo estatus que el resto de castellanos y leoneses, y tengan también las mismas oportunidades de futuro y de progreso.

Voy a seguir siendo muy reivindicativo con todo lo que se pueda hacer directamente desde la Junta de Castilla y León, pero también con aquellas materias que son competencia del Estado, y por las que ustedes también tienen que luchar, como, por ejemplo, la conexión de Ávila con la autovía A-6, la eliminación de los peajes -el lastre de muchos abulenses que diariamente se desplazan a Madrid a trabajar o a estudiar-, las mejoras en los trenes, tanto en frecuencias como en tiempo de viaje y condiciones de los mismos. Lo del AVE era porque yo decía que no confío en sus promesas. Si yo sé que es una promesa del Partido Popular de Ávila, pero es que, pues no lo cumplieron. ¿Cómo voy a confiar en las promesas del Partido Popular de Ávila, si no lo cumplen? Ya lo sé. Efectivamente, si usted tiene la razón. Correcto, toda la razón para usted. Una promesa que hicieron y que no cumplieron.

Por eso, estaré muy muy vigilante con la representación abulense en estas Cortes, de sus posturas ante las iniciativas que se puedan presentar de los diferentes grupos políticos, y que sean siempre en beneficio de la provincia; siempre que sean en beneficio de la provincia, siempre que sean en beneficio de la provincia, siempre que sean en beneficio de la provincia, vais a contar conmigo. No va a haber ningún problema. Porque si algo he visto hasta ahora es que muchas decisiones se toman en función de lo que se establezca en la disciplina del partido correspondiente. Disciplina que muchas veces va en contra de los intereses y de las necesidades... y de las necesidades, en este caso, de mis paisanos, de los abulenses. Muchas gracias.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Pascual Muñoz. Para un turno de dúplica, tiene la palabra el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

La verdad es que poco o nada me han sorprendido las intervenciones de los portavoces del Grupo Mixto. Son demasiado previsibles. Como ya he indicado anteriormente, hombre, la discrepancia, el tener legítimos planteamientos, la defensa apasionada, es perfectamente compatible con la educación, con el respeto, con la debida cortesía parlamentaria. [Aplausos]. Yo creo que no he hablado en lo personal de ninguno de ustedes; sí he hecho análisis político.

Mire, esto que hablaba de la educación, la cortesía, el respeto, es algo que no acostumbran a practicar algunos en esta Cámara. Pero, señor Fernández -voy por usted-, el dieciocho de enero usted publicó un vídeo para sus potenciales votantes, para que le conocieran lo mejor como candidato. Y en ese vídeo le hacía la siguiente y sencilla pregunta: "¿Qué es lo mejor para vivir... o de vivir en Castilla y León?". Y usted contestaba, literal: "Pues, sin duda, su gente, la calidad de vida y su tranquilidad". Y remachaba: "Es una Comunidad con una... con una maravillosa calidad de vida". Y repito, las palabras textuales del señor Fernández: "Castilla y León es una Comunidad con una maravillosa calidad de vida". Hombre, esto es curioso. ¿Dónde están sus exabruptos, su catastrofismo, su visión tétrica de Castilla y León, esos gritos de "esto se hunde"? ¿Dónde ha quedado, señor Fernández? ¿En qué ha quedado, después de 35 años de Gobiernos presididos por el Partido Popular, que según usted mismo aquí se vive muy bien? Señor Fernández, le queda demasiado falso y demasiado sobreactuado cuando está usted en ese papel de mezcla entre ángel exterminador y profeta del apocalipsis. [Aplausos].

Como le decía antes, su compañero en el Gobierno, credibilidad cero. Mire, su reflexión política es: si nos votan y nos sentamos en los sillones, las cosas van muy bien en Castilla y León; si no, esto es un desastre absoluto. Con esos tópicos tan rancios de la izquierda trasnochada. La política que yo voy a seguir es la de apoyo a las personas.

Me hablaba de Fabio, y me hablaba de las proposiciones no... no de ley de las Cortes de Castilla y León. En esa proposición no de ley se decía que se analizara caso por caso según los técnicos, y los técnicos de la Consejería de Educación han dicho que es mejor que tenga un educador. Yo, si quiere, le traslado todo el expediente, está a su disposición. Lo puede reclamar por la página de transparencia.

Cuando hablamos de cuestiones... Mire, si es que en el ámbito de empleo está mejor la media en Castilla y León que la media de España. Los datos de Castilla y León están mejor que la media de España; sí, señor Fernández. Y el producto interior... el producto interior bruto está también mejor, señor Fernández. Que sí, que sí, que se lo digo yo que sí, que es así. Mire, ¿y cuál son las políticas de su partido con la subida de... de la luz, de los combustibles o de la cesta de... de la compra? No me diga, como otros, que eso no son cuestiones que le interesen a las personas de Castilla y León.

Mire, el principal problema que tienen las personas en España y en Castilla y León es que ven la absoluta incapacidad al Gobierno de Sánchez para afrontar una salida a la situación económica que estamos viviendo. Y si algo han demostrado ustedes, especialmente ustedes, es su rabiosa incapacidad para gestionar nada de nada. Es más, la gente, la que usted cita tanto, y la que se siente aliviada cuando salen ustedes de sus responsabilidades públicas, porque jamás nadie les echa de menos cuando se van de un gobierno; qué curioso. [Aplausos]. Usted solo representa a la demagogia, y ese vídeo que yo le citaba... sí, sí, ese vídeo que yo le citaba decía que en Castilla y León hay calidad de vida y que hacemos aquí las cosas bien. Por tanto, en su fuero interno... sí, en su fuero interno reconoce que se tiene mucho que aprender de las políticas sociales y económicas que aplicamos en Castilla y León.

Señor Igea, le insisto, he aguantado hasta la tarde de hoy, durante tres meses, sus insultos, sus vetos, sus desprecios, sus faltas de respeto, en las redes sociales, en los medios de comunicación, aquí, en la tribuna. No lo entiendo. Si no lo ha conseguido antes, no se preocupe, no lo va a conseguir ahora, no me voy a bajar a esa charca que citaba antes. Yo creo que eso es a lo que aspira en estos momentos, señor Igea, y no lo va a conseguir.

Y me va a permitir que... que haga un pequeño... una excepción literaria. Mire, usted me comparaba hace unos días con un personaje de William Shakespeare, Ricardo III. Es verdad que el resultado final no es al que usted le hubiera gustado, ni el final de la obra, porque Ricardo III, con el que me comparaba, fallece y pierde el trono, y yo aquí sigo y parece que va por buen camino la Presidencia de la Junta. Pero no pude... [aplausos] ... no pude evitar acordarme de otra brillante obra de dicho autor, de una persona... de un personaje que me imagino en el que se sentirá usted profundamente representado, porque usted es el Macbeth de Castilla y León. Es usted el fiel reflejo de alguien cegado por la ambición desmedida, sirviéndose de las peores artes que se puede tener. Ya sabe que Macbeth utilizó la brujería, y a él le falló; y a usted también. Y me explico: usted nos intentó apuñalar por la espalda, a nosotros, sus socios, para conseguir su supervivencia política. Ya sabemos cómo terminó Macbeth, y usted es el fiel reflejo, el fiel espejo político en esta Cámara.

Repite como un mantra ese reparto de sillones y de puestos, por encima del programa. Señor Igea, usted estos últimos días ha estado en otro planeta, porque la prioridad, desde el minuto uno, que el señor García-Gallardo y yo, acompañados ambos por distintas personas de nuestros partidos, la prioridad ha sido el programa. Yo sé que eso a ustedes, a todos los que no están de acuerdo, les revienta, pero es el programa; lo primero que hemos hecho es hablar del programa. Como decía el señor Anguita: "Programa, programa, programa". Y lo que hemos firmado es el programa, señor Igea.

Es más, usted, hace tres años, de lo que hablaba antes que del programa era de los puestos: que si la Presidencia de las Cortes por aquí, que si la Vicepresidencia y la Portavocía por allá, que si unas Consejerías por aquí. No es usted el más indicado para hablar ni de sillones en lugar de programas.

Usted habla de la Vicepresidencia. Y, mire, yo le voy a decir, ya sabe el acuerdo: se ha hablado de diez Consejerías, lo he explicado esta mañana; y el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, además de ser el representante institucional del presidente, asumirá las siguientes funciones -aunque habrá un decreto que lo formalizará-: la primera, Presidencia de la Comisión Delegada del Gobierno; la segunda, la Presidencia de la Comisión de Simplificación Administrativa, incluyendo especialmente los procedimientos ambientales; la tercera, la representación suplente en el Comité de las Regiones; en cuarto lugar, el Comisionado con las Víctimas del Terrorismo; en quinto lugar, la representación institucional de las relaciones con distintas... órganos, instituciones propias de la Comunidad; también, la representación de la Junta de Castilla y León en la Fundación Castilla y León; y las competencias en materia de fundaciones, asociaciones y colegios profesionales.

Oiga, usted ha sido vicepresidente durante casi tres años. ¿Me puede usted decir qué firmó como vicepresidente? ¿Qué competencias tenía usted como vicepresidente? Si no tenía competencias y nunca firmó nada como vicepresidente, señor Igea. ¿Pero cómo viene a meterse en ese charco, señor Igea? [Aplausos]. Su función, su función, era una: enredar. es más, en la práctica, más parecía el consejero de Sanidad que otra cosa.

También se queja usted de tener poco tiempo para hacer Oposición. Pero, bueno, como usted dijo cuando volvió a ponerse la bata de médico, que estaba donde más se le necesitaba, y yo me alegro que usted cumpla con uno de sus deseos.

Insisto: si se repitieron elecciones, si se convocaron elecciones anticipadas, fue exclusivamente porque usted quiso lanzar al precipicio a su partido, a sus compañeros de partido y a sus socios de gobierno, que hasta ese momento habíamos sido leales y cumplidores. Y con eso estaba terminando con la estabilidad política en las instituciones de nuestra tierra.

La mentira y la traición han sido su principal seña de identidad en todos los partidos políticos donde ha militado, señor Igea, y también en su acción de gobierno como vicepresidente de la Junta de Castilla y León, la traición. Porque usted va a ser recordado por el hombre de las tres traiciones: en primer lugar, a las personas de Castilla y León con ese plan de desmantelamiento de los consultorios en el medio rural ya citado; en segundo lugar, nos traicionó a nosotros, sus socios de gobierno, queriendo pactar a nuestras espaldas un presupuesto basado en el chantaje y en las prebendas -parece mentira que usted no me conozca, según dice, me conoce mejor que mi familia, pues no se enteró-; y, en tercer lugar, quiso traicionar también y dinamitar un pacto de gobierno que estaba funcionando con corrección hasta ese momento, negociando en la sombra una moción de censura.

Fíjese -sí, sí, señor Igea-, usted ya ha pactado con radicales en esta Cámara. Sí. Sí, sí, claro que sí. Ha pactado con Unidas Podemos, y ha pactado con Unidas Podemos -sí, usted, usted, señor Fernández- para entregarle la Presidencia de las Cortes a la candidata del Partido Socialista. Fracasó. No lo consiguió, señor Igea. Qué desmemoriado es usted: votar a doña Ana Sánchez, a la que hace menos de un año usted dijo... usted la citó literalmente, la tildó literalmente de incapoz, y que tenía que dejar la Mesa de las Cortes y destinar... dedicarse a la comisión de festejos. Y luego la votó para ser presidenta de las Cortes, ni más ni menos. Continuaba tal vez ese pacto no nato de la moción de censura.

Por tanto, lecciones, las justas, señor Igea, sobre el valor de la palabra, porque su palabra ya sabemos lo que vale. [Aplausos].

Y para finalizar... para finalizar, en mi próximo Gobierno, como en cualquier Gobierno de coalición, habrá diferencias, incluso habrá grandes diferencias. Sería altamente preocupante que no existieran diferencias entre dos partidos diferentes, con programas diferentes, pero que hemos sabido aparcar esas diferencias para conseguir, para ofrecer lo mejor de nosotros mismos a las personas de Castilla y León.

Se acabó, señor Igea. Usted, como Macbeth, quedó prendado de la brujería y ejerció las peores artes para satisfacer, a cualquier precio, su delirio de grandeza, aun a riesgo de tirar al precipicio a sus compañeros, a su propio partido, al que ni ha respetado ni quiere, es lo que ocurre cuando uno ha estado en tantos partidos.

Todo acabó, señoría. Ya llega Macduff, puntual a su cita en este combate político, que le dejará solo e irrelevante estos próximos cuatro años. Tranquilo, Castilla y León seguirá creciendo, seguirá modernizándose, seguirá protegiendo a las personas de Castilla y León, pero usted no estará en esa tarea.

Señor Pascual, al margen de que haya manifestado que no vaya a apoyar mi investidura, le agradezco el tono de mi intervención. No me refería, cuando he hecho referencias a su partido, no me refería a su persona, me refería a algunos miembros de su partido. Pero, bueno, en cualquier caso, usted es un remanso en esas agitadas aguas del Grupo Mixto.

Mire, Ornua y Elgorriaga, son dos empresas adicionales donde ha estado presente, muy presente, la Junta de Castilla y León, y en algunos también el Gobierno de España. Yo creo que, bueno, coincidimos en muchas cosas y me quiero quedar con esta última intervención. Son medidas comunes las que podemos compartir. Pero yo le quiero decir que ambos queremos lo mejor para la provincia de Ávila. Lo decía antes, yo creo que uno puede defender perfectamente cualquier ciudad o cualquier provincia, aunque no haya nacido en él. Pero lo que sí le puedo decir es que este Gobierno, que empezará en unos días su trabajo, va a defender a Ávila y a ustedes. Y lo que sí lamento es que ustedes estén en la barrera y no estén en el terreno de juego. Lamento que por un error de cálculo de alguien de su formación, no de usted, de alguien de su formación, haya ocurrido eso. El nuevo Gobierno y los partidos que le sostienen (Partido Popular y Vox) se van a preocupar de Ávila, vamos a ser beneficiosos para Ávila, vamos a ser beneficiosos para Castilla y León, porque las dos cosas son importantes.

Y le vuelvo a reiterar: las puertas de mi despacho siempre van a estar abiertas, y confío, sé que lo voy a conseguir, tener esa reciprocidad por su parte. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco. Tiene la palabra el portavoz del Grupo Parlamentario Vox Castilla y León, don Juan García-Gallardo Frings, por un tiempo de treinta minutos.


EL SEÑOR GARCÍA-GALLARDO FRINGS:

Buenas tardes. Gracias, querido presidente de las Cortes, señor Pollán. Apreciado señor Fernández Mañueco, distinguidos procuradores en Cortes y demás autoridades, familia y amigos aquí presentes, quiero agradecer públicamente al señor Fernández Mañueco su presentación del Programa de Gobierno de coalición entre el Partido Popular y Vox, y su postulación como presidente de la Junta de Castilla y León tras el mandato inequívoco de las urnas.

El acuerdo alcanzado entre Vox y PP es una prueba de la madurez de ambas formaciones políticas, que han aceptado que las negociaciones no son un concurso para llegar a la victoria o a la derrota. La negociación de este Gobierno ha sido un éxito en el que los únicos vencedores han sido los ciudadanos de Castilla y León.

Señor Fernández Mañueco, le felicito por haber estado a la altura y haber reconocido, pese a las grandes presiones que ha recibido, el lugar en el que los ciudadanos nos han colocado, ni más ni menos.

Puede estar usted tranquilo. En esta ocasión podrá contar con un socio leal, con el que podrá discrepar, sí, pero cuya sinceridad podrá poner usted siempre a prueba sin temor a ser traicionado. [Aplausos].

La disposición a llegar a acuerdos y la conservación de los propios principios no son elementos incompatibles. Puede usted mantener sus principios, igual que yo conservaré los míos, lo cual no nos impedirá llegar a acuerdos en beneficio de los castellanos y los leoneses. Por eso le pido que se mantenga firme, que confíe en Vox, un partido coherente, serio y de fiar, un partido que respeta los acuerdos y la palabra dada.

Señor Fernández Mañueco, es para mí un honor poder formar parte durante los próximos cuatro y difíciles años, de esta coalición de Gobierno entre ambos partidos, en la que voy a participar en mi próxima condición de vicepresidente, junto con tres magníficos consejeros y nuestros respectivos equipos.

Acepto el reto de Gobierno con un profundo sentido del deber y de la alta responsabilidad que implica. La acepto agradecido a los ciudadanos de Castilla y León, que nos han votado en las elecciones; a mi partido, por su confianza en mí; y, por supuesto, a mis compañeros del Grupo Parlamentario Vox, por su valentía al encomendar su vida a este proyecto político, a pesar de las dificultades que comporta y la demonización a la que nos somete una parte de esta Cámara.

Acepto esta responsabilidad con una sola obligación: dedicar cada esfuerzo de mi ser a devolver a esta tierra y a sus gentes la grandeza y la prosperidad que merecen y que un día tuvieron. Son muchos los castellanos y los leoneses que miran al futuro con desesperanza y que anhelan un cambio de rumbo en el Gobierno de esta región.

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco, por entender la necesidad de llegar a este Acuerdo de Gobierno para dar una nueva esperanza a esta tierra tantas veces olvidada por tantos.

Señorías, la libertad no se regala, debemos cuidarla todos los días. Lo hemos comprobado durante estos dos años de pandemia, en los que los derechos y libertades de los españoles han sido injusta y gravemente cercenados. De ahí nuestro empeño por acabar con una anomalía propia de nuestro ordenamiento jurídico, que no tiene réplica en los países de nuestro entorno, me refiero a la llamada Ley de Violencia de Género y al Decreto de Memoria Histórica.

"Todos los españoles han de ser iguales ante la ley, sin discriminación por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social". Hoy existe legislación que viola este artículo. Por eso estoy particularmente orgulloso de formar parte de un Gobierno regional que ha dado un paso para proteger por igual a las víctimas de cualquier tipo de violencia intrafamiliar, independientemente del sexo de la víctima. Porque ¿qué sentido tiene que un huérfano de padre no tenga las mismas ayudas que un huérfano de madre? Ninguno, ¿verdad? [Aplausos]. Pues de eso trata, precisamente, esa ley de violencia intrafamiliar, de que cualquier tipo de víctima en el ámbito familiar tenga la misma protección, ni más ni menos. Esto es fácil de entender, y por eso las manipulaciones de la izquierda y de muchos de los medios de comunicación cada día tienen menos éxito.

En esa línea, señorías, y cambiando de tercio, la izquierda ha utilizado la historia para dividir y enfrentar a los españoles. Odian la reconciliación nacional y el abrazo que se dieron nuestros abuelos; por eso recuerdan el bombardeo de Guernica y olvidan deliberadamente el bombardeo de Cabra. [Aplausos]. La historia... la historia, señores socialistas, debe ser analizada por los historiadores, y cada español debe tener la oportunidad de aproximarse a nuestro pasado con la mirada limpia, sin necesidad de observarlo desde la óptica oficial establecida por el Gobierno de turno. La aprobación de un decreto de concordia es un primer paso que garantizará la libertad de todos para estudiar, interpretar, cada uno a su manera, la historia de nuestro país. Nunca más vamos a permitir que la historia sea utilizada con elemento de división.

Señor Fernández Santos, procurador en Cortes del partido comunista Podemos, nosotros no somos esclavos de ningún tipo de fanatismo histórico, como ustedes. Hace unos días, usted dijo en rueda de prensa que nosotros fusilaríamos a los miembros del Grupo Mixto si pudiésemos. Usted, que no tiene un pelo de tonto -de hecho, gasta una buena melena-, sabe que dijo una soberana estupidez. Nosotros no queremos fusilarle a usted ni ilegalizar a su partido, ni acudimos a sus mítines a tirarles piedra, porque no somos como ustedes. [Aplausos].

Señor Fernández Santos, lo que no está en mi mano es que usted deje de pegarse tiros constantemente en el pie. No es mi culpa que usted entrara en política para competir... para combatir a la casta y se acabara convirtiendo en ella. No es mi culpa que usted entrara en política para defender a los trabajadores y acabara convirtiéndose en el mamporrero de las élites globalistas que quieren destruir nuestro campo, nuestro tejido productivo, nuestra soberanía energética y nuestras tradiciones. No es mi culpa que usted decidiera condenar a nuestra ganadería intensiva del deterioro del medio ambiente, mientras calla contra sus verdaderos culpables. Por eso puede usted dormir tranquilo, en lo que a mí respecta. Lo que no puedo evitar es que usted y su partido sigan cosiéndose el pie a balazos.

Además, si me permite, por la buena convivencia en esta Cámara, lo que sí le pido es que no se maten entre ustedes en el Grupo Mixto por dinero. Se lo pido de verdad, de todo corazón; no merece la pena, aunque ustedes dos estén enfermos de odio. Con la que está cayendo en España, creo que no les costará explicar en sus respectivos lugares de origen, al señor Igea y a usted, que pueden hacer sus respectivas labores parlamentarias con 100.000 euros al año entre los dos. [Aplausos].

Señor Igea, le deseo a usted mayor éxito como youtuber del que ha tenido como vicepresidente. Sin embargo, le auguro... [aplausos] ... sin embargo, le auguro un estrepitoso fracaso. Ya nadie le escucha, ya nadie le quiere; quizá sea por su mala relación con la estadística o por ser un enemigo de la verdad. Y recuerde esto: de tanto practicar la supuesta transparencia que usted tiene tan a gala, se ha vuelto usted transparente, es usted un fantasma político.

Los castellanos y los leoneses les han dado a ustedes un único procurador en Cortes; de doce, a uno. Creo que ya va siendo hora de que dejen ustedes dos de ir llorando por los pasillos de las Cortes, porque llorado se viene de casa. Y si no, que se lo digan al señor Tudanca, que estaba muy triste la noche electoral y, cuando se acordó de que entre todos ustedes se habían subido un 4 % el sueldo, volvió a recuperar la sonrisa. [Aplausos].

Señor Tudanca... señor Tudanca, usted le ha invitado al señor Fernández Mañueco a que volviera a mirar a Europa, y yo le pido a usted que haga, de verdad, lo mismo. Mire usted a Europa, mire lo que pasó ayer en Francia; es usted la señora Hidalgo, es usted el Hidalgo castellano, y yo le auguro un estrepitoso fracaso y que su partido, como ha abandonado a los trabajadores, a los obreros y a quien dice representar, está condenado a su desaparición. [Aplausos].

Ustedes... a ustedes se les llena la boca hablando de ideologías que niegan la humanidad, y, sin embargo, la vergüenza, de la que usted tanto habla en referencia a nuestro pacto, es la vergüenza de sus cinco procuradores en Cortes que deshumanizaron al señor Pollán negándole el saludo. Esa es la vergüenza que usted carga sobre sus espaldas. [Aplausos].

Señor Tudanca, usted ha dicho que yo era de esa España que madruga para volverse a dormir o alguna sandez de ese tipo. ¿Cómo tiene usted la santa vergüenza, si usted no ha trabajado en su vida, si usted no ha trabajado ni un solo día en el sector privado? Mire, señor Tudanca, entre usted, la señora Lastra, el señor Miquel Iceta, no han trabajado los mismos días que yo, con 31 años, en el sector privado; no ha cotizado un solo euro en el sector privado en su vida. Aplíquese el cuento, anda. [Aplausos].

Por fortuna, los castellanos y los leoneses pueden contar con un partido coherente, como es Vox, que en cuanto ha podido ha reducido de manera global un 25 % las asignaciones económicas de todos los grupos parlamentarios, entre otras medidas, provocando un ahorro de más de 300.000 euros al año a nuestros vecinos; un total de un millón y medio por legislatura. Unos vecinos que en estos tiempos están viviendo con tantas dificultades. Y ese ha sido solo el principio. En Vox, junto con el Partido Popular, hemos venido a la política a acabar con el gasto público superfluo; porque los españoles no se pueden permitir que se siga desperdiciando un solo céntimo de dinero público, que es sagrado, señor Tudanca.

Señorías, este acuerdo devuelve la esperanza a una parte relevante de la España olvidada. En España tenemos ahora una primera oportunidad en los antiguos Reinos de León y de Castilla para recuperar la ilusión de todos los españoles en su proyecto de vida en común. A quienes mucho se les concede, mucho se les exige. Toda España mira a Castilla y León, todos nuestros compatriotas vuelven sus ojos hacia nosotros para ver qué vamos a hacer en este Gobierno de coalición. No podemos defraudar su confianza, no podemos fallarles.

Tras tiempos de enfrentamientos entre españoles, alentados por el Gobierno socialcomunista, nuestra preocupación debe ser mirar al futuro, reconstruyendo todo lo que los demás han destruido. Ha llegado el tiempo de conformar una alternativa de Gobierno que destierre las políticas fracasadas que no funcionan en un mundo que está cambiando constantemente. La invasión de Ucrania, la crisis con Marruecos, el delirio climático y las ruinosas recetas de la izquierda nos confirman el camino que debemos seguir: el de las naciones fuertes, la soberanía, la igualdad entre españoles, la libertad y la prosperidad. Ha llegado la hora de la Agenda España de Vox, que tenemos el honor y la responsabilidad de empezar a aplicar desde Castilla y León, en la medida de lo posible, con la representación que nos han dado los ciudadanos de Castilla y León.

En cualquier caso, debe saber, señor Fernández Mañueco, que nuestros objetivos políticos como formación no quedan colmados con este pacto de legislatura y la integración de este Gobierno regional. Vox es el partido de la ley y el orden. Ningún partido ha defendido con tanto empeño el orden jurídico, con notables y recientes éxitos ante el Tribunal Constitucional. Por ello, desde el pleno respeto al Estatuto de Autonomía y a todo el ordenamiento jurídico vigente, sepan que nuestro objetivo político fundacional es y seguirá siendo, cuando tengamos la mayoría parlamentaria suficiente, en primer lugar, la devolución de competencias como sanidad, educación y justicia al Estado central, para después derogar el Título VIII de la Constitución Española. (Sí, no se rían tanto, lo haremos por los trámites legales, no como sus socios golpistas de Cataluña). [Aplausos].

La descentralización administrativa... -escuchen, escuchen- la descentralización administrativa, la vertebración del territorio, la reivindicación de la diversidad y la cercanía a los servicios públicos no requieren la existencia de 17 Parlamentos regionales, con su consecuente laberinto legislativo y sus fronteras inventadas. Son muchos los que aún no entienden la aparente e inexistente paradoja entre que pretendamos gobernar una Comunidad Autónoma y que conservemos la intención de derogar el Estado de las Autonomías. Para entenderlo, déjenme que les explique en qué tipo de España creemos en Vox.

En Vox creemos en una España unida y fuerte, frente a sus enemigos internos y externos; una España de las provincias, que escuche el grito de esa España silenciada a la que están dejando morir lentamente; creemos en una España en la que los españoles tengan en condiciones de igualdad los mismos derechos y los mismos deberes, independientemente de su sexo o lugar de origen.

En Vox creemos en una España que ponga a la familia en el centro de todas sus políticas y que apueste por la natalidad, porque una nación con familias fuertes es una nación fuerte, y una nación con familias débiles es una nación débil. [Aplausos].

Creemos también en una España orgullosa de su pasado y que mira con ilusión al futuro; una nación que abrace la vanguardia sin olvidar la tradición. Creemos en una España próspera, con una industria que vuelva a ser pujante, un sector primario fuerte y donde los jóvenes no tengan que marcharse fuera en busca de las oportunidades que aquí no encuentran.

Esa es la España por la que vamos a luchar y que inspira nuestra acción política también en estas Cortes de Castilla y León. Con la configuración actual del Estado y su reparto de competencias, Vox tiene el deber de concurrir a todas las elecciones que se convoquen, y la responsabilidad de gobernar en todas aquellas instituciones, como la Junta de Castilla y León, en las que a día de hoy se decide el porvenir de nuestros compatriotas.

El eje de nuestra acción política se basa en una premisa clara: los intereses de los castellanos y los leoneses, primero.

Primero, su seguridad material y su bienestar. Desde hoy, los castellanos y los leoneses tienen un Gobierno que trabajará intensamente por garantizar empleos estables y salarios dignos. Un Gobierno austero con lo superfluo, con el bienestar de los políticos y generoso con las cosas verdaderamente necesarias (50.000 euros por no hacer nada). [Aplausos].

En segundo lugar, su soberanía... en segundo lugar, su soberanía y el respeto por su forma de vivir. Hoy los castellanos y leoneses tienen un Gobierno que defenderá sus intereses en el marco de la Unión Europea, para frenar esta deriva destructiva que nos lleva a la ruina. Un Gobierno que apuesta por la reindustrialización y por sacar el máximo provecho a los recursos naturales que tenemos.

En tercer lugar, sus servicios públicos y su derecho a permanecer. Hoy los castellanos y los leoneses tienen un Gobierno decidido a dotar de las infraestructuras necesarias a todas esas provincias abandonadas. Un Gobierno que respete y garantice el derecho a las raíces, a permanecer, de todos aquellos sorianos, segovianos, zamoranos que quieren seguir el camino marcado por sus padres o abuelos, que puedan desarrollar su proyecto vital, formar una familia, allí donde han nacido. Y nada de esto tiene sentido si no defendemos a la familia como columna vertebral de nuestra sociedad.

Estos son los ejes de nuestro Acuerdo de Gobierno, de nuestro compromiso con los castellanos y los leoneses.

Señorías, en el marco de este Gobierno de coalición, Vox va a tener la oportunidad directa de ofrecer una alternativa patriótica y social a los problemas acuciantes del campo, la industria, los trabajadores, la cultura, el turismo y el deporte en Castilla y León. Durante las últimas semanas hemos estado en la tarea de diseñar los Equipos de Gobierno para las tres Consejerías asignadas a Vox durante el proceso de negociación reanudado tras el Pacto de Legislatura. Ha sido un proceso intenso y difícil por la responsabilidad con la que afrontamos esta etapa y por la valía de los numerosos candidatos que hemos considerado para cada uno de los puestos. Algunos partidos políticos han aconsejado más rapidez; sin embargo, la importancia de la misión que nos ocupa exigía afrontarla con la debida prudencia que ha guiado toda nuestra actuación. A diferencia de lo que han hecho otros partidos políticos en el pasado, nuestra actuación ha estado guiada en todo momento por la meritocracia y la búsqueda de los mejores.

Cabe recordar a estos efectos lo que dijo Pericles a los atenienses: "Nosotros no imitamos a nadie, porque somos un modelo para los demás". Lo hemos demostrado y lo seguiremos haciendo: en Vox no imitamos a nadie, porque somos un modelo para los demás.

Queridos Gerardo, Mariano y Gonzalo, gracias por asumir la responsabilidad de liderar cada una de vuestras Consejerías en el primer Gobierno integrado por Vox. Sois un ejemplo de lo que debe ser un buen gobernante: hombres íntegros, con capacidad de dirección y agudo sentido del bien común y de la justicia social.

Querido Gerardo, con grandes renuncias has aparcado temporalmente una prometedora carrera profesional para servir a tu Nación. Solo este gesto te honra, eres un patriota. Desde la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, tenemos a partir de ahora la responsabilidad de afrontar los acuciantes problemas que asolan a los campos de Castilla y León, protegiendo a nuestros productos frente a la competencia desleal extranjera. Además, según lo pactado, aprobaremos una ley de desarrollo y competitividad rural, como muestra de nuestro compromiso con el mundo rural y con sus oportunidades de desarrollo.

Por otro lado... [aplausos] ... por otro lado, desde la Comisión de Simplificación Administrativa tenemos la oportunidad de eliminar ese laberinto burocrático que tantas veces dificulta los quehaceres diarios de las buenas gentes del campo. Asimismo, Vox entra a este Gobierno con la voluntad de acompañar a los ganaderos en su tarea, ayudándoles a cumplir con la normativa, no persiguiéndoles y sancionándoles a la mínima. Vox sella así su compromiso irrevocable con la defensa de los intereses de nuestro campo.

Querido Mariano, tu dilatada experiencia en la Consejería que vas a liderar te convertía en el mejor consejero de Industria, Empleo y Comercio que Vox podía tener. Contar contigo para esta tarea es un verdadero privilegio. Nadie mejor que tú conoce el camino que debemos seguir para evitar el desmantelamiento de nuestra industria y atraer nuevas inversiones a Castilla y León. Tenemos también por delante la responsabilidad de defender a nuestros autónomos y proteger a los comerciantes, todo ello sin olvidar la muy necesaria revisión del modelo de políticas activas de empleo -que se ha demostrado ineficaz- y de la reducción de las subvenciones a los sindicatos y a la patronal: diálogo social, sí; diálogo social ultrasubvencionado, no. [Aplausos]. Vox confirma así su voluntad firme de consolidar un modelo productivo útil para empleadores y empleados, en busca del bien común para toda la Nación.

Y por último, y no por ello menos importante, querido Gonzalo, tu irrupción en la primera línea política ha sido la última muestra de la estrategia del consenso progre contra Vox: mutilar nuestras biografías para después manipularlas con el fin último de deshumanizarnos y convertirnos en objeto de odio de los violentos. Quieren que nos rindamos, que demos un paso atrás. No lo van a conseguir. Nuestro amor a España y a Castilla y León está muy por encima de su odio contra nosotros. Aunque ya te lo he dicho en los últimos días, permíteme desobedecer tu petición: te agradezco públicamente tu generosidad, asumiendo el cargo de consejero de Cultura, Turismo y Deportes. El viaje que emprendiste hace más de cuarenta años, en los ochenta, desde las antípodas ideológicas de Vox hasta tu incorporación al primer Gobierno regional del partido, es un valioso símbolo de lo que queremos reivindicar: la reconciliación nacional, el abrazo, el perdón y la concordia que vamos a elevar a norma. [Aplausos]. Todo ello sin olvidar lo más importante, lo verdaderamente relevante: tu vasta experiencia en defensa de la lengua española y tu protección durante décadas de nuestra cultura y tradiciones.

Señor Tudanca, lávese la boca, cuente hasta cien y váyase usted al rincón de pensar antes de volver a difamar a don Gonzalo Santonja. [Aplausos].

Querido Gonzalo, en nuestras manos está ahora dar una proyección nacional a nuestra cultura y tradiciones locales, aprovechando además nuestra riqueza patrimonial y natural para potenciar el turismo. Debemos fomentar también el deporte en Castilla y León, ofreciendo oportunidades de desarrollo a esta tierra y a sus deportistas. Con todo ello, Vox ratifica así su firme intención de constituirse como una alternativa patriótica y social que haga de la batalla cultural una de sus prioridades.

Señor Fernández Mañueco, la siembra que nos ocupa será larga y difícil. La cosecha final y completa no se llevará a cabo en los primeros cien días, tampoco se logrará en los primeros mil días, ni en la vida de este Gobierno; pero tenemos que empezar, hay que sentar las bases del cambio de rumbo. Empecemos, señor Fernández Mañueco, como dijo San Pablo a los romanos: "Gozosos en la esperanza; pacientes en la tribulación". Los problemas a los que nos enfrentamos no se prestan a soluciones fáciles ni rápidas, el éxito de esta empresa exige perseverancia y visión a largo plazo.

Sin reservas, reitero el apoyo del Grupo Parlamentario Vox a la investidura como presidente del señor Fernández Mañueco. Me comprometo también a desempeñar con lealtad el cargo de vicepresidente de la Junta de Castilla y León, guardando y defendiendo la Constitución y el Estatuto de Autonomía -incluidos sus mecanismos de reforma-, empleando en ello el máximo de mis facultades, con la ayuda del excelente equipo de patriotas que me acompañarán en esta alta tarea. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor García-Gallardo. Para contestar, tiene la palabra el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Muchas gracias, presidente. Muchas gracias, señor García-Gallardo. Gracias por su intervención. Creo que es favorable a mi investidura, cosa que le agradezco.

Pero más allá del voto en sí, quiero agradecerle el tono personal que siempre... el buen tono personal que siempre ha presidido nuestras conversaciones. Aunque, como en todas las negociaciones, hay momentos complicados y difíciles, hemos sido capaces de superarlo en todo momento. Y quiero empezar... agradecerle el tono personal, y se lo traslado a todos los compañeros del Partido Vox.

Mire, somos partidos diferentes, representamos, desde luego, programas diferentes, y vamos a discrepar a lo largo de la legislatura en cuestiones estoy convencido que importantes. Pero, por encima de eso, yo con lo que me quedo es con el acuerdo que el pasado diez de marzo firmamos el Partido Popular y el Partido Vox: un Acuerdo de Legislatura, un acuerdo que permitía un Gobierno fuerte y sólido, que era lo que nos reclamaban todas las personas de Castilla y León.

Los ejes y las acciones que componen ese acuerdo son toda una declaración de intenciones. Por encima de nuestras diferencias y nuestras discrepancias, este pacto lo que buscaba es aunar voluntades y esfuerzos para garantizar una estabilidad política perdida en los últimos tiempos en Castilla y León. Un pacto que inspira en aquello que nos une por encima de las diferencias, por encima de lo que nos separa, ya que, de lo contrario, no hubiera sido posible si no el acuerdo.

Yo creo que tolerar las ideas de los demás no demuestra la falta de compromiso con tus propias ideas. Aquí hemos visto cómo este pacto es precisamente eso: usted pues quiere una Constitución sin Comunidades Autónomas, y yo creo profundamente en el Estado de las Autonomías. Pero eso establece la propia Constitución y el Estatuto de Autonomía de Castilla y León unos mecanismos de reforma -se lo trasladaba antes al señor Santos- y lo reitero ahora: es un tercio para iniciar la reforma; dos tercios de la... para aprobar la reforma, de las Cortes de Castilla y León; y, luego, la aprobación, por ley orgánica, en el Parlamento Nacional.

Pero yo creo que lo que hemos hecho, por encima de cualquier consideración y de valoración, es un ejercicio de responsabilidad para buscar lo mejor para nuestra tierra, para afrontar esa incertidumbre en la que nos encontrábamos en estos momentos en Castilla y León y en España, pero en Europa y en el mundo entero. Con este... con este acuerdo desde luego se neutralizaba cualquier opción de Gobierno compuesto por otros intereses que prefiero no mencionar, pero que no beneficiarían a nuestra tierra.

Es tiempo de generar confianza y credibilidad de la mano de la experiencia, y, por otro lado, con el aval que supone el respaldo mayoritario de los ciudadanos. El pasado trece de febrero pues el voto de todas las personas de Castilla y León convirtió en la mejor prueba de lo que usted dice, de lo que solicita la mayoría de la población: más economía, más crecimiento, menos ideología.

¿Pero qué esperan de nosotros las personas de Castilla y León? ¿Qué esperan de su próximo Gobierno? ¿Qué se espera de todos nosotros? Pues se espera sobre todo que seamos un Gobierno responsable y serio; que seamos buenos gestores y eficaces al mismo tiempo; que seamos capaces de ir más allá de la recuperación económica en momentos difíciles como los que pasamos; un Gobierno comprometido, que impulse la competitividad y que logre proyectar nuestra economía y nuestro empleo. Creo que un Gobierno debe ser sin duda el impulsor del desarrollo económico y social. En definitiva, nuestro... nuestro compromiso es el bienestar de la gente. Y qué mejor manera de hacer eso desde políticas económicas que respondan a la realidad. Y hacerlo también desde principios políticos y sociales en los que en esta tierra nos sentimos profundamente identificados.

La igualdad es el primero de los principios: la igualdad de todos. No hay ciudadanos de primera o de segunda en Castilla y León. Hay hombres y mujeres que aman a su tierra, que quieren seguir aquí y para los que tenemos que trabajar cada día hasta el último aliento. No hay igualdad con distinciones. Es más, la igualdad es el alma de la libertad. De hecho, no hay libertad sin igualdad. Y de eso sabemos mucho en Castilla y León, porque tenemos la mejor red de consultorios en el medio rural de toda España; tenemos los mejores servicios sociales y la mejor educación de toda España; una de las mejores Comunidades Autónomas, con un desarrollo en transporte importantísimo.

Y si la igualdad de oportunidades de todos los castellanos y leoneses no hubiera presidido nuestras políticas a lo largo de las últimas décadas, desde luego no hubiera sido posible. Y, sin duda, todas estas cuestiones de las que estoy hablando, de servicios públicos, de... de la vivienda, de transporte, de... de apostar por internet, todo esto nos hace únicos, y ser únicos nos permite que en cada rincón de esta tierra pueda haber una oportunidad, porque hay voluntad y hay actitud.

Nosotros apostamos por la libertad, y, cuando digo nosotros, me refiero a las dos fuerzas políticas que van a sustentar el futuro Gobierno. No puede haber libertad sin igualdad, no puede haber igualdad sin solidaridad, tanto en Castilla y León como en España. Tenemos la responsabilidad también, desde Castilla y León, de garantizar la unidad de España, porque el peso de nuestra historia sin duda es algo muy importante. Decía Gustavo Bueno que un español no puede ser neutral cuando se habla de España. Pues es verdad, ni usted ni yo en eso somos neutrales. Y nuestro Gobierno, mi Gobierno, tampoco va a ser neutral ante esa situación, va a ser un Gobierno entregado a la cohesión territorial, al equilibrio, a la integridad de Castilla y León, pero también al equilibrio, a la integridad de nuestra patria, de España.

Señoría, Castilla y León es demasiado grande para que pensemos en pequeño. Y pensar en grande implica crecer. Y, para crecer, es necesario que la economía crezca; y la economía se basa en la confianza que podemos trasladar en los empresarios... a los empresarios, a los inversores y también a los trabajadores. Y este Acuerdo es la primera señal para generar esa confianza, que es fundamental. Porque los empresarios, donde ven certeza, donde ven seguridad, donde ven certidumbre, ahí es donde invierten. Y tenemos que hacer una apuesta también con incentivos y políticas económicas eficaces, que es como se crea empleo. Y el empleo fija población. Y si se fija población, se lucha contra la despoblación y se genera arraigo. Y el arraigo es el compromiso firme con esta tierra.

Pues esa debe ser nuestra actitud, y debe ser una actitud en todos y cada uno de los municipios de nuestra Comunidad Autónoma (2.248), en todas las provincias de nuestra Comunidad Autónoma (9), y en nuestra propia Comunidad Autónoma. Esa debe ser nuestra actitud, y ahí radicará la diferencia entre "estar" en Castilla y León o "trabajar por y para" Castilla y León.

El compromiso con esta tierra implica 24 horas al día y 7 días a la semana. No haga caso de la música de viento que a veces suena por estos lares. Esto es lo que ocurre. No se preocupe, señor García-Gallardo, saldremos adelante, con las condiciones necesarias para apostar por la modernidad, con la innovación, también con la digitalización. Es imposible progresar sin cambios y debemos liderar ese cambio que queremos en Castilla y León. Hablaba de digitalización, pero también de internacionalización, la industrialización y la reindustrialización de sectores emergentes -no voy a citar en aquello que el señor Fernández Santos no sabe, pero somos pioneros y punteros en muchas cosas-: estamos, desde luego, en una tierra que es privilegiada y, en este modelo que yo he explicado ahora y en el que coincidimos, esta es nuestra causa y con estos objetivos nos esperan.

Lo ha dicho usted: la expectación es alta, pero la fórmula es sencilla: trabajar de manera incansable por esta tierra. Pero que les quede a todos claro una cosa: hablaba usted de... de presiones; yo no he sido consciente de haber recibido grandes presiones, ni pequeñas presiones, ni presión alguna; lo que sí he sentido es la responsabilidad de la gente a la que tenemos que servir, los que han confiado en nosotros, pero también los que no han confiado en nosotros, porque esa es nuestra responsabilidad, y esa es nuestra tarea.

Y de lo que se trataba con el acuerdo entre Partido Popular y Vox, que culmina hoy en este Debate de Investidura, es un acuerdo "para" Castilla y León, "desde" Castilla y León. He escuchado a muchos políticos hablar de lo que tenía que ocurrir o no. Esto va de Castilla y León, única y exclusivamente. Es verdad que puede interpretarse como un modelo para otros lugares o para otras instituciones, pero hemos hablado única y exclusivamente de Castilla y León, de las políticas para Castilla y León, de qué es lo que tenemos que hacer "en" y "para" Castilla y León, "en" y "para" las personas de Castilla y León. Muchas gracias, señor García-Gallardo. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco. Recuerdo a los procuradores que al finalizar este debate se procederá a la votación. En representación del Grupo Parlamentario Popular, tiene la palabra don Raúl de la Hoz Quintano, por un tiempo de treinta minutos.


EL SEÑOR DE LA HOZ QUINTANO:

Muchas gracias. Presidente, señorías, candidato y presidente de la Junta de Castilla y León, me corresponde el extraordinario honor de representar a mi partido esta tarde para mostrar la posición favorable de los treinta y un componentes del Grupo Parlamentario Popular a la investidura de Alfonso Fernández Mañueco.

La verdad es que, después de lo que hemos escuchado esta tarde aquí, nos quedan algunas dudas o a alguno le podrían quedar algunas dudas sobre la razón que nos ha traído esta tarde aquí. Y es bastante sencillo de resumir: en primer lugar, porque nos vimos obligados a convocar elecciones; en segundo lugar, porque esas elecciones las ganó el Partido Popular; y, en tercer lugar, porque hemos querido dar estabilidad a Castilla y León. Ni más, ni menos. [Aplausos].

Efectivamente, este es un debate fruto de unas elecciones que nos hubiera gustado no tener que haber convocado, pero que resultó inevitable si lo que queríamos era preservar el derecho de los castellanos y los leoneses a que su futuro lo decidieran ellos mismos y no una colección de tránsfugas y desleales a esta tierra y a este Gobierno.

Y, ya ven, los castellanos y los leoneses tuvieron a bien decidir el pasado día trece de febrero que estas elecciones las ganara el Partido Popular y las perdiera el Partido Socialista, que estas elecciones las ganara Alfonso Fernández Mañueco y las perdiera el señor Luis Tudanca. Somos conscientes de que hubieran preferido que el Gobierno se decidiera de otra manera; de hecho, estuvieron trabajando duro para intentar conseguir una moción de censura nueva en esta tierra.

Pero, parafraseando a la ya ausente ideóloga socialista, señora Adriana Lastra, afortunadamente para los castellanos y los leoneses, a su pesar, hemos conseguido que la democracia se haya abierto paso, también en Castilla y León. Y esa democracia que se abre paso llevará dentro de unos minutos a Alfonso Fernández Mañueco a ser elegido presidente de Castilla y León, y a ustedes, esa misma democracia que se ha abierto paso, les llevará al lugar donde tan cómodos se encuentran desde hace ya treinta y cinco años: en la Oposición. [Aplausos]. Eso sí, cada vez más radicalizados, cada vez más exacerbados, cada vez más desquiciados, como hemos tenido la oportunidad de comprobar hoy.

Por ello, permítanle que comience... permítanme que comience pidiendo, ahora que ya han pasado las elecciones, ahora que ya hemos celebrado el Debate de Investidura y ahora que vamos a votar ya la Presidencia de Alfonso Fernández Mañueco, tengan, por favor, el respeto y la sensatez que hasta hoy no han demostrado en esta tierra y en esta Casa. Sí, respeto a esta Institución, respeto a quienes les representan, respeto a los legítimos representantes de los ciudadanos -a todos, a los que les gustan y a los que no les gustan-, respeto al Gobierno de Castilla y León y respeto, sobre todo, a los ciudadanos, a sus decisiones; respeto, en definitiva, a la democracia en Castilla y León. Un respeto que nosotros sí les tenemos y les vamos a tener siempre a ustedes, a todos ustedes, al resto de partidos políticos, por supuesto, porque los ciudadanos han querido que estén todos aquí representados, aunque sea de forma minoritaria. Un respeto que nace ni más ni menos que del acatamiento de la voluntad del millón doscientos mil ciudadanos que nos eligieron a los 81 que estamos hoy aquí para representarles y servir con orgullo a los ciudadanos de Castilla y León.

Fueron ellos los que quisieron que ganara el Partido Popular, como fueron ellos también los que quisieron que la política en esta tierra se continúe practicando, siempre y en todo caso, a través del diálogo y la negociación, pues eso y nada más que eso significa la ausencia de mayorías absolutas. Pero esa lógica que, como lo anterior, molesta solamente a quien perjudica, el Partido Popular como ganador de las elecciones -por cierto, cosa que el Partido Socialista fue incapaz de hacer cuando ganó las elecciones- abrió un proceso de diálogo con absolutamente todos los partidos políticos representados en esta Cámara; con todos, sin distinción alguna.

De algunos recibimos un respetuoso rechazo, de otros su indiferencia, otros ni siquiera se presentaron y otros aún se presentaron única y exclusivamente para insultarnos. Sin embargo, recibimos también de otros la voluntad de encontrarnos en forma distinta y con distinta intensidad. Nos hubiera gustado haber podido explorar antes de esta investidura otras formas de colaboración con otros grupos. Nos hubiera gustado escuchar sus propuestas, especialmente las de aquellos que han puesto hoy el grito en el cielo porque hayamos pactado con Vox.

Porque yo me pregunto: ¿qué es exactamente lo que ha hecho el Partido Socialista de Castilla y León para evitar este pacto? Absolutamente nada. ¿Cuál es la alternativa que ha ofrecido el Partido Socialista de Castilla y León a este pacto? Absolutamente ninguna. ¿Qué propuesta concreta nos han hecho para llegar a algún tipo de acuerdo en cualquier momento de la fase previa a este Debate de Investidura? Absolutamente ninguna. Estaban ustedes deseando que llegara este momento. Estaban ustedes deseando que pactáramos con Vox para, primero, intentar así blanquear sus pactos con terroristas y separatistas, tratando de ponernos a un falso igual nivel a todos. Pero, créanme, los ciudadanos, por mucho que se empeñe el Partido Socialista, son bastante más inteligentes de los que ello... de lo que ellos creen. Los ciudadanos en Castilla y León y en España tienen muy claro que no es lo mismo pactar con Vox que pactar con Bildu; que no es lo mismo sentarse en una mesa con Vox... [aplausos] ... que afirmar, como hemos tenido que escuchar en campaña, que debemos perdonar a los verdugos, mientras, eso sí, acercan presos al País Vasco y entregan las competencias de prisiones al Gobierno vasco. Estos ciudadanos saben perfectamente que no es lo mismo abrazar a una persona que estuvo quinientos y pico días en un zulo, como fue el señor Ortega Lara, que brindar con champán en Navidad con el señor Otegui. Lo tienen realmente claro. [Aplausos].

Y, por otro lado, estaban ustedes, señores del Partido Socialista, deseando este pacto para construir el absurdo discurso que hemos escuchado esta mañana al señor Tudanca de defensa de las libertades y así buscar algún argumento nuevo a su discurso de oposición. Porque no, el Partido Socialista no está pensando en el futuro de Castilla y León ni en lo que va a suceder en los próximos cuatro años; el Partido Socialista está única y exclusivamente pensando en cómo van a afrontar las próximas elecciones municipales, algo que algunos de su partido están... por lo que están realmente preocupados. Y en ese calvario que les queda a ustedes hasta las elecciones municipales, se les hace a ustedes, sin duda, más llevadero, más fácil, y por supuesto más cómodo, ubicarse en las trincheras en las que han decidido colocarse de esa imaginaria y absurda batalla ideológica, en vez de, como nos gustaría, como les gustaría a los castellanos y leoneses, estar sentados en la mesa de construcción del futuro de Castilla y León.

Por eso estaban deseando que pactáramos con Vox. Estaban ustedes deseando que además lo hiciéramos sacrificando algunos de los principios y valores que inspiran a esta Comunidad Autónoma. La mala noticia para ustedes ha sido que el acuerdo es impecable desde el punto de vista político y jurídico. Es absolutamente respetuoso con nuestra Constitución y con nuestro Estatuto de Autonomía. Por eso solo les queda ya apelar a los fantasmas de la realidad paralela que hemos escuchado esta mañana, de su discurso de antaño, el de los buenos, el de los malos, el de los rojos, el de los azules, el de los eslogan ridículas... ridículos de las manifestaciones de los años setenta. Les hubiera encantado que hubiéramos pactado abandonar la lucha contra la lacra de la violencia de género, pero, ya ven, hemos pactado no tocar la Ley de Violencia de Género. Por cierto, algunos se rasgan las vestiduras con eslogan feministas, defendiendo a las mujeres, acusándonos de machistas y no sé cuántas cosas más. Esta mañana... esta tarde, perdón, lo hemos vuelto a comprobar por parte del señor Tudanca.

Permítanme que les dé un dato que demuestra, más allá de las palabras grandilocuentes y la demagogia propia de la izquierda en esta Comunidad Autónoma, que en Castilla y León nos tomamos en serio la lucha contra la violencia de género. Les voy a dar los datos del Observatorio del Consejo General del Poder Judicial, Observatorio de Violencia de Género. Datos correspondientes al año dos mil veintiuno. ¿Saben ustedes cuál es la Comunidad Autónoma en la que menos denuncias hubo por violencia de género en relación con su población? Fue Castilla y León, fue Castilla y León. ¿Saben, por cierto, cuáles fueron las dos Comunidades Autónomas que lideran ese ranking, es decir, las dos Comunidades en las que más denuncias hubo por violencia de género en el año dos mil veintiuno? Casualmente dos Comunidades socialistas: Baleares y Valencia.

El Gobierno de Baleares tiene una Consejería llamada de Igualdad; una Consejería que, además de tapar el caso de las 14 niñas tuteladas por el Gobierno autonómico, que estaban siendo prostituidas con la anuencia, al menos, del Gobierno de la Comunidad, ya hemos visto que trabaja más bien poco por erradicar la violencia de género. Qué fácil es hablar y qué difícil es trabajar. [Aplausos].

Y qué decir... y qué decir de la Generalidad Valenciana. Mónica Oltra -la conocen-, consejera de Igualdad y Políticas Inclusivas. Qué nombre tan bonito para una Consejería que no ha evitado que en el año dos mil veintiuno, en la Comunidad Valenciana, se haya... se hayan presentado 22.000 denuncias por violencia de género. Como tampoco, por cierto, la señora Oltra ha evitado su imputación por encubrimiento en otro caso de abusos sexuales sobre una menor tutelada por la Generalitat; tampoco eso. Está muy bien... [aplausos] ... ponerse camisetas con mensajes impactantes, está muy bien gritar en las manifestaciones; pero, realmente -créanme- está mucho mejor y hacen más favor a las mujeres de nuestra Comunidad Autónoma si hacemos políticas serias, políticas responsables para que, sin demagogia, colaborar a hacer posible que Castilla y León -como le dije antes- haya sido la Comunidad Autónoma de España en la que menos denuncias por violencia de género haya habido en el año dos mil veintiuno. Ya ven, nosotros no nos dedicamos a gritar en las manifestaciones, nos dedicamos a trabajar para erradicar esta lacra.

Les hubiera gustado también que pactáramos prohibir la entrada de inmigrantes en Castilla y León; pero, ya ven, hemos pactado que la inmigración en Castilla y León sea legal y ordenada. ¡Qué barbaridad, ¿verdad?! Esta mañana, por ello... esta tarde -perdón-, por ello, el señor Tudanca nos ha acusado de racistas. Incluso se atrevió a decir: vamos a combatir con todas nuestras fuerzas a los fascistas; si algo necesita Castilla y León es ser tierra de acogida, no de odio, xenofobia y fascismo -dijo el señor Tudanca-. Todo ello porque hemos pactado nuestra voluntad de que la inmigración en Castilla y León sea legal y ordenada.

Miren, esto es el Programa de Gobierno [el orador muestra un documento] -lo de llamarlo "Programa de Gobierno" es una paradoja- del señor Tudanca, con el que concurrió a las elecciones. Página 183 del programa electoral del señor Tudanca: "Apostamos por una inmigración legal y ordenada". [Aplausos]. Pero si es lo mismo. Oiga, o sea, es decir, PP y Vox somos racistas y xenófobos por decir que la inmigración debe ser legal y ordenada, y el señor Tudanca y los señores del Partido Socialista están promoviendo que Castilla y León sea una tierra de acogida y no de odio y fascismo. Literal del señor Tudanca esta tarde. Esta es, y no otra, la hipocresía y la demagogia que hemos visto hoy, que hemos visto esta tarde y que, desgraciadamente, creo que vamos a vivir en esta Cámara en los próximos cuatro años.

Y ya les adelanto: ahí no nos van a encontrar, ahí no van a encontrar al Partido Popular. En nosotros sí podrán encontrar todos el entendimiento, la lealtad y la responsabilidad. Y con quienes nos ofrezcan la misma lealtad y la misma responsabilidad que nosotros ofrecemos hoy y ofreceremos los cuatro años de esta legislatura, estoy seguro que, pese a nuestras diferencias ideológicas, nos vamos a encontrar y podemos... podremos alcanzar acuerdos. Porque eso es, precisamente, y como les decía antes, lo que nos han transmitido a todos los ciudadanos de Castilla y León el pasado trece de febrero, también a ustedes: escuchar y dialogar, especialmente escuchar y dialogar con aquellos que no piensan igual que nosotros.

Sí, señorías, nunca en esta Cámara habían habido... habían estado representados tantos partidos políticos como lo están hoy. Con este escenario, el diálogo se convierte no en una exigencia política, sino en una absoluta necesidad para poder avanzar con firmeza. Con algunos -lo he señalado antes- estoy seguro que ese diálogo será fructífero; con otros, somos conscientes que rehúsan, como lo han hecho hoy, y rehusarán, el diálogo, porque prefieren el estancamiento, porque prefieren el bloqueo. De hecho, llevan trabajando bastante tiempo de forma muy dura para que Castilla y León quedara paralizada bajo esa estrategia desgraciada que vivimos la pasada legislatura del Partido Socialista de "cuanto peor, mejor".

Somos conscientes de que algunos no van a hacer nunca ni una propuesta ni una alternativa leal. Son los que ni están ni se les puede esperar, cuando de ayudar a Castilla y León se trata. Los que utilizan su poder en Madrid no para colaborar con el bienestar de los castellanos y leoneses, sino únicamente para castigarnos por no haber votado al Partido Socialista; son los mismos que siguen perjudicando fiscal y financieramente a Castilla y León, mientras -eso sí- se entregan en cuerpo y alma a otros territorios más afines o necesarios para su supervivencia política. Son los que nos hurtaron los 190 millones de euros del IVA, y que el Tribunal Supremo les ha obligado a pagarnos. Son los que siguen hurtándonos en el reparto de fondos europeos; de los fondos de la dependencia, también; de la cultura; y también, por cierto, de los fondos de lucha contra la violencia de género. De estos, muy poco podemos esperar. De los que quieren acabar con nuestro sistema educativo, muy poco podemos esperar. De los que castigan a nuestro medio rural, a nuestros agricultores, a nuestros mayores, hasta a nuestra lengua, de esos cabe esperar muy poco. De los que nos machacan a impuestos y de los que son incapaces de frenar la inflación en nuestro país, poco cabe esperar.

De estos, es difícil que recibamos la colaboración que necesita Castilla y León, que necesita nuestro proyecto para conseguir ese que se constituye como nuestro objetivo principal: hacer que Castilla y León siga avanzando, que siga creciendo, que siga creando empleo, que siga teniendo la mejor educación de este país, que siga teniendo los mejores servicios públicos de España y que consiga tener la mejor sanidad de nuestro país. Y todo ello con una fiscalidad justa y baja, que en este momento se sitúa como la segunda más baja de España, y seguimos, como anunciaba esta mañana el señor Fernández Mañueco.

Este sigue siendo nuestro objetivo, el objetivo del Partido Popular de Castilla y León, que no consiste ni más ni menos que en hacer posible que nos podamos sentir todos orgullosos de nuestros pueblos, orgullosos de nuestro medio ambiente, de nuestros mayores, de nuestros jóvenes. En definitiva, orgullosos de ser lo que somos. Orgullosos también de nuestra libertad, de nuestra historia y, por supuesto, muy orgullosos de nuestro futuro. Siempre, como dice el primer párrafo del Acuerdo de Legislatura que hemos suscrito con Vox -y leo textualmente-, "con pleno respeto al orden constitucional y al Estatuto de Autonomía, defendiendo la igualdad de todos los ciudadanos de Castilla y León, la igualdad social, laboral y de oportunidades". Y continúo leyendo textualmente: "La igualdad también entre hombres y mujeres". Que nadie espere otra cosa del Partido Popular, porque no lo va a encontrar; que nadie espere otra cosa del Partido Popular que no sea la defensa de Castilla y León y, por tanto y consecuentemente, la defensa de España, de la España de las Autonomías, de la España de la unidad, de la España de la diversidad y, por supuesto, también de la España de la solidaridad.

Pero también que nadie espere de nosotros que enfrentemos a nadie por cuestión de género. Nuestro objetivo es seguir avanzando... seguir haciendo avanzar a Castilla y León en igualdad, sin demagogia, sin utilizaciones partidistas interesadas, sin trampas y con respeto absolutamente a todos, y dialogando, por supuesto, con todos los que quieran dialogar con nosotros.

Y que nadie nos busque tampoco anclados en el pasado. Nosotros no estamos obsesionados, como otros, con revisar nuestra historia, ni mucho menos. Tampoco nos planteamos revisar ni juzgar nuestra historia de forma interesada, como hacen otros. Nosotros miramos al futuro, aprendiendo de lo mucho bueno que hemos hecho en el pasado y también, por supuesto, de aquello que hicimos mal. Pero no para reinterpretarlo interesadamente, sino, al revés, para aprender de ello y ser mejores de cara al futuro. Eso es lo que aprendimos en el setenta y ocho y eso es lo que nosotros denominamos "concordia en Castilla y León". [Aplausos].

Sí, así lo hemos hecho desde que empezáramos a gobernar en Castilla y León, allá por el año ochenta y siete, de la mano de José María Aznar en primer término, de Juan José Lucas después, de Jesús Posada, de Juan Vicente Herrera y ahora de la mano de Alfonso Fernández Mañueco, siempre mirando al futuro, sin complejos, diciendo la verdad y tratando a los castellanos y leoneses con el respeto que merecen de quienes -no lo olvidemos nunca- estamos aquí única y exclusivamente para servirlos.

El Partido Popular no está aquí para dividir, ni vamos tampoco a aceptar que nadie intente dividir a los castellanos y leoneses; estamos aquí para sumar, estamos aquí para multiplicar, estamos aquí para hacer crecer a Castilla y León, con voluntad integradora, constructiva, con lealtad y respeto, y sobre todo -repito, y no tengo problema en hacerlo- con diálogo, siempre con diálogo.

Vivimos tiempos difíciles, sin duda. La caótica situación política, social y económica que vive nuestro país, y que repercute notablemente en nuestra Comunidad, exigía de nosotros no parar la maquinaria pese a la convocatoria de elecciones. Y así lo hemos hecho.

Por cierto, para los que dicen que Castilla y León ha estado paralizada desde que se convocaran elecciones, 300 asuntos han sido aprobados por el Consejo de Gobierno, movilizando más de 2.500 millones de euros. Por cierto, también en el año dos mil uno... dos mil veintiuno, perdón, Castilla y León estuvo por encima de la media nacional en licitación de obra pública, y en lo que llevamos de este año, en el primer trimestre del año dos mil veintidós, también estamos por encima de la media nacional y, por supuesto, por encima del Gobierno de España en licitación de obra pública.

Y, en el ámbito sanitario, ¿recuerdan ustedes lo que tuvimos que escuchar de quienes, por cierto, presentaron una moción de censura en el peor momento de la crisis COVID, cuando nosotros convocamos las elecciones en Castilla y León, que si no nos... que si no nos preocupaban los enfermos, que si no nos preocupaba el COVID, que si adoptábamos... que si no adoptábamos medidas de protección por ganar votos? ¡Cuánto tuvimos que escuchar entonces! ¿Se acuerdan ustedes?

Pues bien, en diciembre, efectivamente, comenzamos a gestionar la sanidad sin el lastre que teníamos hasta ese momento. Y lo hicimos sin restricciones añadidas a las impuestas por el Gobierno de España. ¿Saben cuál fue el resultado de aquello? Castilla y León ha mantenido los niveles más bajos de ingreso y de uci de todas las oleadas que hemos sufrido. Y no solo eso, en este período resulta que en Castilla y León se ha... se ha incrementado la actividad asistencial, han aumentado, respecto del primer trimestre del año pasado, un 12 % las consultas hospitalarias y más de un 40 % las intervenciones quirúrgicas. Y en Atención Primaria han aumentado un 6 % el número de consultas, poniéndose en marcha un plan de consultas de tarde en el que han participado más de 300 profesionales.

Y fíjense, todo hecho... todo ello lo hemos hecho en un clima de diálogo constante y permanente con las organizaciones colegiales y sindicales de la sanidad pública de Castilla y León, recuperando, por cierto, un consenso que nunca debió de perderse en esta Comunidad Autónoma y que nunca va a perderse en esta Comunidad Autónoma en relación con la sanidad pública de Castilla y León. [Aplausos].

Pero bien, ya pasadas las elecciones, la situación especialmente económica que viven nuestras familias, asfixiadas por la descontrolada inflación que el Gobierno de España es incapaz de frenar ni tampoco, por cierto, de compensar como debiera, exige de nosotros que este nuevo Gobierno empiece a andar y lo haga de forma decidida. Tenemos la obligación de suplir la inacción, la indolencia del Gobierno de España ante la crisis económica. Tenemos la obligación de dar las certidumbres a los castellanos y leoneses que el Gobierno de España es incapaz de aportar. Y estamos dispuestos a hacerlo ya. De ahí la importancia de las medidas económicas que el presidente ha anunciado esta mañana. Actuaremos en ausencia del Gobierno de España, como ya estamos acostumbrados a hacerlo, y lo hemos hecho durante la pandemia.

Señorías, es evidente que este grupo, que me ha honrado dándome su representación en esta Cámara hoy, va a votar a favor de la investidura de Alfonso Fernández Mañueco dentro de unos minutos. Los castellanos y los leoneses han querido que así sea; los castellanos y los leoneses han sentenciado con su voto que esta tierra no la puede gobernar quien la desprecia, quien la humilla y quien la ataca, sino, única y exclusivamente, quien la siente, quien la defiende y quien la quiere. Ese es el mensaje que nos dieron el pasado trece. [Aplausos].

Los castellanos y los leoneses llevamos 35 años construyendo esta extraordinaria Comunidad en un modelo, sin duda, de éxito, que es fruto del esfuerzo principalmente de nuestros paisanos, pero también de las políticas que hemos puesto en marcha en el Partido Popular. Y ese modelo no les quepa la menor duda va a continuar. Nuestro modelo educativo, nuestro modelo social, nuestro modelo fiscal, nuestro modelo económico va a continuar como lo hizo la pasada legislatura, y lo hará ahora de la mano de otra formación política, que estamos absolutamente seguros será leal, como no lo fue el anterior partido con el que gobernamos en esta Comunidad Autónoma.

Tenemos un mandato claro, y tenemos claro el compromiso de cumplir ese mandato; y, además, hacerlo en la forma que los ciudadanos quieren que lo hagamos, y a eso nos vamos a dedicar en los próximos cuatro años: a dar soluciones, no a crear problemas; a pensar en los castellanos y en los leoneses y no en los intereses políticos de quienes aquí estamos representados.

Y concluyo. Concluyo con un... con dos agradecimientos. El primero, al Partido Popular, a todos sus cargos públicos, a sus alcaldes, a sus concejales, a sus diputados y senadores; gracias también por estar hoy aquí, por volcaros todos en la campaña electoral de Castilla y León; y gracias muy especialmente a todos los afiliados y simpatizantes del Partido Popular. Son ellos, sin lugar a dudas, los que dan sentido a este proyecto, los que con su trabajo desinteresado... [aplausos] ... nos han dado, nos dan y estoy seguro que nos darán la fuerza y el empuje diario para que, finalmente, hoy podamos estar aquí. Por eso les doy gracias, esperando que se sientan igual de orgullosos que nos sentimos los 30 procuradores del Grupo Popular que vamos a votar a Alfonso Fernández Mañueco a continuación.

Y el segundo agradecimiento, a todos los ciudadanos de Castilla y León, a los que votaron al Partido Popular y a los que no lo hicieron. Sinceramente les digo: trabajaremos duro para devolver la confianza que han depositado en nosotros, para dar cumplimiento al Programa de Gobierno que esta mañana ha presentado Alfonso Fernández Mañueco. Creo humildemente, como lo creen también la mayoría de los castellanos y leoneses, que no hay mejor persona que Alfonso Fernández Mañueco para liderar el futuro de Castilla y León, para asegurar su bienestar... [aplausos] ... y para seguir, en definitiva, construyendo Castilla y León. Sí, señorías, Castilla y León nos espera. El futuro nos espera. Y estoy absolutamente seguro que no vamos a defraudarle. Nada más. Y muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor De la Hoz Quintano. Tiene la palabra el candidato, señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Gracias, presidente. Sin intención de provocar una dúplica del señor De la Hoz, hacer unas breves reflexiones. Llevo toda mi vida afiliado al Partido Popular. Bueno, toda mi vida, no, pero dentro de unos días cumpliré 39 años afiliado al Partido Popular. Yo no concibo otro partido que no sea el Partido Popular, con respeto hacia todas las formaciones políticas. Es mi otra familia, la del Partido Popular. Mi madre fue la que me afilió; mi madre fue la que me llevó a los primeros mítines de la mano de Manuel Fraga, con 12 años. Yo afilié a mis hijas y también, bueno, pues les llevé a los mítines de Aznar y de Rajoy. Ahora ya van ellas cuando quieren.

Queridos procuradores del Partido Popular, con Raúl a la cabeza. Queridos miembros del Gobierno. Queridos cargos públicos del Partido Popular, con los presidentes del partido provincial a la cabeza; el secretario autonómico y todos los miembros de la Ejecutiva regional. Raúl, dirigiste con sabiduría, con inteligencia, la campaña electoral que nos llevó al triunfo, porque creo que el Partido Popular fue quien ganó las elecciones, a veces esta tarde he llegado a dudarlo.

Queridos miembros del Gobierno, muchas gracias, porque habéis estado a la altura en unas circunstancias muy... muy difíciles. Los que entrasteis desde el principio, el que se incorporó a mediados de diciembre. Hemos estado a la altura de estas circunstancias a la que la vida nos ha sometido a esta dura prueba.

Quiero decir también a los compañeros, miembros de... del Grupo Popular, a las personas que trabajan en la sede del partido, en... en el grupo, en todas las sedes del partido. Estáis aquí una muestra de todos los que empezamos en esta precampaña y en esta campaña electoral. Muchas gracias a todos por vuestro trabajo. Gracias también, especiales, a esas personas que con su sinceridad y con su consejo me guían. Gracias a los alcaldes y a los cargos públicos que defienden nuestras siglas en todos y cada uno de los 2.248 ayuntamientos que tiene nuestra Comunidad Autónoma.

Hoy comienza para mí una nueva etapa en mi vida política, y donde estará, como siempre, Castilla y León por encima de las siglas del Partido Popular.

A mi querida familia, quiero pediros comprensión y paciencia, serenidad y tranquilidad. Sé que cuento con los mejores aliados: con mis suegros -iba a decir mi suegra, pero, si no, se enfada mi suegro; con mis suegros-, que son los que me van a ayudar para llevar en casa mi tarea política de la mejor manera posible; bueno, en casa y fuera de casa.

Y también a mis amigos, que son un ejemplo de la pluralidad de... de este Gobierno de coalición. Gracias por estar ahí arriba, en la grada, arriba la nave.

Aquí he oído muchas cosas. Esta tarde se han oído de todo. Yo lo que quiero decir es que, cuando baje de este atril, las negativas las habré olvidado y las positivas las agradezco de corazón. En lo personal, respeto a todas y cada una de las personas que aquí están, que desempeñan su papel, que realizan su tarea; les respeto de verdad en lo personal. Y, por supuesto, pues en la política defendemos posturas distintas.

Y creo que es importante en este debate, para cerrarlo, insistir en que el Partido Popular es un partido fuerte, que hemos tenido el respaldo de las personas de Castilla y León en las urnas y que vamos a estar a la altura; vamos a hacer bien las cosas, todos vamos a hacer bien las cosas. Vamos a liderar el futuro de esta tierra, vamos a liderar el futuro que quieren la mayoría de las personas de Castilla y León; yo creo que eso es algo importante. Y poner por encima de cualquier cosa el interés general.

Hoy es once de abril; once de abril es el aniversario del nacimiento del poeta zamorano León Felipe, que -como saben todos ustedes- estuvo exiliado en México. Él mismo dijo: "... porque no es lo que importa llegar solo ni pronto, sino llegar con todos y a tiempo". Señorías, lleguemos todos y a tiempo por cada uno de los castellanos y por cada uno de los leoneses.

Y también parafraseando a Unamuno, que decía: "Procuremos más ser padres de nuestro futuro que hijos de nuestro pasado". Apostemos por ser padres del futuro de Castilla y León y de España. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco. Señorías, concluido el debate, vamos a proceder en breves minutos a la votación, a los efectos del otorgamiento de la confianza por parte de la Cámara al candidato propuesto para la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

Tal y como establece el Artículo 26.3 del Estatuto de Autonomía de Castilla y León, la confianza se entenderá otorgada si el candidato obtiene el voto favorable de la mayoría absoluta de la Cámara.

La votación, en virtud de lo dispuesto en el Artículo 89.2 del Reglamento, será pública por llamamiento. El señor secretario nombrará a los señores procuradores, y estos responderán "sí", "no" o "abstención". El llamamiento se realizará por orden alfabético del primer apellido, comenzando por el procurador cuyo nombre sea sacado a suerte. Los miembros de la Junta de Castilla y León que sean procuradores y la Mesa de las Cortes votaremos al final.

Vamos a proceder al sorteo para determinar por qué procuradora o procurador comenzará la votación. [El secretario, Sr. Moreno Castrillo, procede a realizar el sorteo].

Señoras y señores procuradores, la votación se iniciará por el número 9, que corresponde a la procuradora Beatriz Coelho Luna. Comienza la votación, y a partir de este momento ruego que nadie entre o salga del salón de sesiones. Tiene la palabra el señor secretario Diego Moreno.

Votación SI/000001

[Los secretarios, Sr. Moreno Castrillo, Sra. Esteban Ayuso y Sra. Pinacho Fernández, proceden al llamamiento de los señores procuradores para que emitan su voto].


LA SEÑORA COELHO LUNA:

Sí.


LA SEÑORA CÓFRECES MARTÍN:

Sí.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ MENÉNDEZ:

Sí.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

No.


LA SEÑORA FRUTOS RUBIO:

No.


LA SEÑORA GALLEGO GONZÁLEZ:

No.


EL SEÑOR GARCÍA FERNÁNDEZ:

No.


LA SEÑORA GARCÍA HERRERO:

Sí.


LA SEÑORA GARCÍA MACARRÓN:

No.


EL SEÑOR GARCÍA NIETO:

Sí.


LA SEÑORA GARCÍA RIOJA:

[No quedó registrado en la grabación].


LA SEÑORA GARCÍA SÁNCHEZ:

Sí.


EL SEÑOR GARCÍA-GALLARDO FRINGS:

Sí.


EL SEÑOR GAVILANES FERNÁNDEZ-LLAMAZARES:

Sí.


LA SEÑORA GÓMEZ URBÁN:

No.


EL SEÑOR GONZÁLEZ REGLERO:

No.


LA SEÑORA GONZALO RAMÍREZ:

No.


EL SEÑOR GUERRERO ARROYO:

No.


EL SEÑOR HERNÁNDEZ ALCOJOR:

No.


EL SEÑOR HERNÁNDEZ HERRERO:

Sí.


EL SEÑOR HERNÁNDEZ LÓPEZ:

Sí.


EL SEÑOR HERNÁNDEZ MARTÍNEZ:

No.


LA SEÑORA HERNANDO RUIZ:

Sí.


EL SEÑOR HIERRO SANTOS:

Sí.


EL SEÑOR DE LA HOZ QUINTANO:

Sí.


EL SEÑOR IGEA ARISQUETA:

No.


EL SEÑOR ILLERA REDÓN:

No.


LA SEÑORA JIMÉNEZ CAMPANO:

[No quedó registrado a la grabación].


EL SEÑOR MARTÍN BENITO:

No.


LA SECRETARIA (SEÑORA ESTEBAN AYUSO):

Repito el nombre, que no lo había dicho: Martín Benito, José Ignacio.


EL SEÑOR MARTÍN BENITO:

No.


EL SEÑOR MARTÍN MARTÍNEZ:

No.


EL SEÑOR MENÉNDEZ BLANCO:

Sí.


LA SEÑORA ORTEGA GÓMEZ:

Sí.


LA SEÑORA PABLOS LABAJO:

No.


EL SEÑOR PABLOS ROMO:

No.


EL SEÑOR PALOMAR SICILIA:

No.


EL SEÑOR PALOMO MARTÍN:

Sí.


LA SEÑORA PALOMO SEBASTIÁN:

No.


EL SEÑOR PASCUAL MUÑOZ:

No.


LA SEÑORA PELEGRINA CORTIJO:

No.


LA SEÑORA PRIETO SÁNCHEZ:

Sí.


EL SEÑOR PUENTE ALCARAZ:

No.


LA SEÑORA RANEDO GÓMEZ:

Sí.


EL SEÑOR REGUERA ACEVEDO:

Sí.


LA SEÑORA RODRÍGUEZ VIDAL:

Sí.


LA SEÑORA ROJO SAHAGÚN:

Sí.


LA SEÑORA RUBIO GARCÍA:

No.


LA SEÑORA RUBIO MARTÍN:

No.


EL SEÑOR RUIZ MEDRANO:

Sí.


LA SEÑORA SACRISTÁN RODRÍGUEZ:

No.


LA SEÑORA SÁNCHEZ BELLOTA:

Sí.


EL SEÑOR SÁNCHEZ MARTÍN:

Sí.


EL SEÑOR SANTOS REYERO:

No.


EL SEÑOR SANZ MERINO:

Sí.


EL SEÑOR SICILIA DOMÉNECH:

Sí.


EL SEÑOR SUÁREZ ARCA:

Sí.


LA SEÑORA SUÁREZ VILLAGRÁ:

Sí.


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

No.


LA SEÑORA VALLEJO QUEVEDO:

Sí.


EL SEÑOR VÁZQUEZ FERNÁNDEZ:

No.


EL SEÑOR BERZOSA PEÑA:

Sí.


LA SEÑORA BLÁZQUEZ DOMÍNGUEZ:

No.


EL SEÑOR BRIONES MARTÍNEZ:

No.


LA SEÑORA CALVO ENRÍQUEZ:

Sí.


EL SEÑOR CAMPOS DE LA FUENTE:

No.


EL SEÑOR CARRERA NORIEGA:

Sí.


EL SEÑOR CEÑA TUTOR:

No.


EL SEÑOR CEPA ÁLVAREZ:

No.


LA SEÑORA BLANCO LLAMAS:

Sí.


EL SEÑOR CARNERO GARCÍA:

Sí.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ CARRIEDO:

Sí.


EL SEÑOR IBÁÑEZ HERNANDO:

Sí.


LA SEÑORA LUCAS NAVAS:

Sí.


EL SEÑOR SUÁREZ-QUIÑONES FERNÁNDEZ:

Sí.


EL SEÑOR VÁZQUEZ RAMOS:

Sí.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO:

Sí.


LA SEÑORA PINACHO FERNÁNDEZ:

Sí.


LA SEÑORA ESTEBAN AYUSO:

Sí.


EL SEÑOR MORENO CASTRILLO:

No.


LA SEÑORA SÁNCHEZ HERNÁNDEZ:

No.


EL SEÑOR VÁZQUEZ REQUERO:

Sí.


EL SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ:

Sí.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

¿Algún procurador o procuradora no ha sido nombrado?

El resultado de la votación es el siguiente. Votos emitidos: ochenta y uno. Favorables a la propuesta: cuarenta y cuatro. En contra: treinta y siete. Abstenciones: cero.

Al haberse alcanzado el voto favorable de la mayoría absoluta de los miembros de las Cortes de Castilla y León, queda investido de la confianza de la Cámara don Alfonso Fernández Mañueco.

Esta Presidencia lo comunicará así a su majestad el rey, a efectos de su nombramiento como presidente de la Junta de Castilla y León, y al Gobierno de la Nación.

Señorías, se levanta la sesión. [Aplausos].

[Se levanta la sesión a las veintiuna horas treinta y cinco minutos].


DS(P) nº 2/11 del 11/4/2022

CVE="DSPLN-11-000002"





Diario de Sesiones de las Cortes de Castilla y León
XI Legislatura
Pleno
DS(P) nº 2/11 del 11/4/2022
CVE: DSPLN-11-000002

DS(P) nº 2/11 del 11/4/2022. Pleno
Sesión Celebrada el día 11 de abril de 2022, en Valladolid
Bajo la Presidencia de: Carlos Pollán Fernández
Pags. 17-123

ORDEN DEL DÍA:

1. Debate de Investidura del Candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

SUMARIO:

 ** Se inicia la sesión a las doce horas.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, abre la sesión y da lectura al único punto del orden dl día.

 ** Primer punto del orden del día. SI/000001.

 ** El secretario, Sr. Moreno Castrillo, da lectura a la propuesta de candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** Intervención del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León, para exponer su Programa de Gobierno.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, suspende la sesión.

 ** Se suspende la sesión a las trece horas cinco minutos y se reanuda a las dieciséis horas.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, reanuda la sesión, anuncia el momento de la votación de investidura y abre un turno de intervenciones.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Socialista, interviene el procurador Sr. Tudanca Fernández.

 ** Contestación del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En turno de réplica, interviene el procurador Sr. Tudanca Fernández.

 ** En turno de dúplica, interviene el Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En representación del Grupo Parlamentario UPL-Soria ¡Ya!, interviene el procurador Sr. Santos Reyero.

 ** En representación del Grupo Parlamentario UPL-Soria ¡Ya!, interviene el procurador Sr. Ceña Tutor.

 ** Contestación del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En turno de réplica, interviene el procurador Sr. Santos Reyero.

 ** En turno de réplica, interviene el procurador Sr. Ceña Tutor.

 ** En turno de dúplica, interviene el Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Mixto, interviene el procurador Sr. Fernández Santos.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Mixto, interviene el procurador Sr. Igea Arisqueta.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Mixto, interviene el procurador Sr. Pascual Muñoz.

 ** Contestación del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En turno de réplica, interviene el procurador Sr. Fernández Santos.

 ** En turno de réplica, interviene el Sr. Igea Arisqueta.

 ** En turno de réplica, interviene el procurador Sr. Pascual Muñoz.

 ** En turno de dúplica, interviene el Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Vox, interviene el Sr. García-Gallardo Frings.

 ** Contestación del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** En representación del Grupo Parlamentario Popular, interviene el procurador Sr. De la Hoz Quintano.

 ** Contestación del Sr. Fernández Mañueco, candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** Votación SI/000001.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, somete a votación la investidura del candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, comunica el resultado de la votación. Queda otorgada la confianza de la Cámara al candidato Sr. Fernández Mañueco por mayoría absoluta de los votos emitidos.

 ** El presidente, Sr. Pollán Fernández, levanta la sesión.

 ** Se levanta la sesión a las veintiuna horas treinta y cinco minutos.

TEXTO:

[Se inicia la sesión a las doce horas].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Se abre la sesión.

SI/000001

Punto único del orden del día: Debate de Investidura del Candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

Ruego al señor secretario proceda a la lectura de la propuesta de candidato formulada por esta Presidencia a la Cámara.


EL SECRETARIO (SEÑOR MORENO CASTRILLO):

"Esta Presidencia, de conformidad con lo establecido en el Artículo 26 del Estatuto de Autonomía de Castilla y León y en el Artículo 135 del Reglamento de la Cámara, tras las preceptivas consultas con los partidos, grupos políticos y coaliciones electorales con representación parlamentaria, tiene el honor de proponer en el Pleno de las Cortes de Castilla y León como candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León al excelentísimo señor procurador don Alfonso Fernández Mañueco. De conformidad con el Artículo 64 del Reglamento, se ordena su publicación en el Boletín Oficial de las Cortes de Castilla y León. En la sede de las Cortes de Castilla y León, a dieciocho de marzo de dos mil veintidós. El presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán Fernández".


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Tiene la palabra don Alfonso Fernández Mañueco para exponer el Programa de Gobierno que pretende formar y solicitar la confianza de las Cortes de Castilla y León. [Aplausos].


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Señor presidente de las Cortes de Castilla y León, señoras y señores procuradores del Partido Socialista Obrero Español, de Vox, de la Unión del Pueblo Leonés, de Soria ¡Ya!, de Unidas Podemos, de Ciudadanos, Por Ávila y Partido Popular de Castilla y León. Autoridades que hoy nos acompañan, querida familia, queridos amigos, leoneses y castellanos, castellanos y leoneses que nos siguen a través de los medios de comunicación y de las redes sociales.

Comparezco ante estas Cortes para presentar el Programa de Gobierno que pretendo impulsar en esta undécima legislatura y solicitar mi investidura como presidente de la Junta de Castilla y León.

La voluntad expresada por las personas de Castilla y León en las elecciones autonómicas del pasado trece de febrero ha conformado una Cámara muy renovada, la más plural de nuestra historia, con representación de hasta ocho formaciones políticas.

Como candidato del partido más votado, asumí el mandato de las urnas y la responsabilidad de alcanzar un acuerdo de Gobierno.

Inicié los contactos con las formaciones representadas en esta Cámara, pensando siempre en el interés de las personas de Castilla y León y con unas referencias esenciales que paso a relatar:

Primero, reflejar la voluntad de los castellanos y leoneses que expresaron democráticamente en las urnas; en segundo lugar, buscar la estabilidad para toda la legislatura, excluyendo cualquier posibilidad de una repetición electoral; en tercer lugar, garantizar, como siempre, los principios de la Constitución Española y del Estatuto de Autonomía de Castilla y León; en cuarto lugar, asumir el programa de mi partido, en cuanto fue la opción más votada, como base de la legislatura; en quinto lugar, hablar de proyectos y actuaciones, no de cuotas de poder o repartos de sillones; en sexto lugar, actuar con transparencia, dando cumplida cuenta de los pasos realizados; y en séptimo lugar, asegurar un gobierno fuerte, sólido y eficaz para los cuatro próximos años. [Aplausos].

Algunos se autoexcluyeron de inmediato -lo que lamento profundamente-; otros plantearon exigencias difíciles de aceptar desde una visión de Comunidad -aunque agradezco su predisposición al acuerdo-, estoy seguro de que alcanzaremos muchos acuerdos a lo largo de la legislatura.

Finalmente, como es sabido, esta voluntad de diálogo cristalizó el pasado diez de marzo en un acuerdo de legislatura suscrito entre el Partido Popular y el partido VOX, un acuerdo del que dimos cuenta de forma inmediata en cuanto se alcanzó con absoluta transparencia. Quiero por tanto expresar a este partido, personalizado en Juan García-Gallardo, mi reconocimiento por llegar a ese acuerdo viable, su voluntad de llegar a un acuerdo viable y firme para toda la legislatura.

Somos dos partidos distintos, cada uno tiene legítimas posiciones, y además las personas de Castilla y León conocen sobradamente cuál son nuestras posiciones; pero hemos sabido dar un ejemplo de generosidad, de responsabilidad y de capacidad de acuerdo: hablando, negociando, buscando puntos de acuerdo cuando era preciso para alcanzar los consensos necesarios.

Todos debemos felicitarnos por el resultado, porque es un acuerdo... [aplausos] ... es un acuerdo que respeta plenamente los principios que asumí al comenzar este proceso de diálogo y de negociación que antes les expuse. También es un acuerdo que refleja la voluntad ampliamente mayoritaria expresada por los castellanos y leoneses en su última cita electoral. Es un acuerdo que plasma la única alternativa viable para evitar una repetición electoral que nadie quería. Es un acuerdo que garantiza cuatro años de estabilidad. Es un acuerdo beneficioso para mejorar nuestra calidad democrática. Y es, en definitiva, un acuerdo necesario para mejorar el futuro de nuestra tierra.

Servirá para que al próximo gobierno de Castilla y León, si esta Cámara me otorga su confianza, se le juzgue por sus hechos y por sus resultados. Tenemos mucho que construir y ser valorado por los actos con justicia, sin prejuicios y sin ataques preconcebidos.

El acuerdo traza el camino para gestionar de forma eficaz los intereses de las personas de Castilla y León porque va a impulsar el futuro de Castilla y León con igualdad; porque apuesta por una importante mejora de nuestros servicios públicos como pilar esencial de la cohesión social y también de la vertebración territorial; porque va a impulsar el crecimiento económico y la creación de empleo, la industrialización, el desarrollo rural, el apoyo a la actividad agrícola y ganadera y el aprovechamiento de nuestros recursos naturales; porque apuesta por avanzar en la recuperación con impuestos bajos, con buena y transparente gestión de los fondos europeos y también con la modernización de las infraestructuras de comunicación y de transporte; y porque quiere desarrollar una Administración eficaz, cercana, transparente, con reducción de trámites en la relación con las empresas y con los ciudadanos, y también racionalizar el gasto burocrático, la transparencia y la rendición de cuentas serán denominador común de nuestra acción de gobierno; porque quieren intensificar la colaboración este acuerdo con la Administración del Estado, pero también, a la vez, con los municipios y las provincias; y porque va a reforzar el papel de Castilla y León en España y hacernos crecer en la Unión Europea. Porque, en suma, busca el progreso y el desarrollo social, cultural y económico de Castilla y León.

Señorías, asumo con plena responsabilidad el encargo de cumplir todos estos contenidos que adelantaré más adelante. Con un gobierno fuerte, con un gobierno solvente, con personas experimentadas, de composición plural, sí, pero también con voz única que trabaje como una piña al servicio de esta tierra. Un gobierno con las ideas claras y también un gobierno sin complejos, que sepa dónde estamos y dónde queremos llegar, que sepa y que asuma con decisión el futuro y los retos que tendremos que afrontar.

El Gobierno, como recoge el Acuerdo de Legislatura, tendrá, además del presidente, un vicepresidente y diez Consejerías. Se mantendrán la mayoría de las Consejerías; la de Transparencia se incorporará a la Consejería de Presidencia y la de Fomento y Medio Ambiente se divide en dos, por un lado, Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, y, por otro lado, Movilidad y Transformación Digital.

Es un Gobierno, señorías, que pretendo dirigir ejerciendo una serie de principios que han inspirado toda mi vida pública y, por supuesto, principios a los que voy a seguir siendo fiel. [Aplausos].

Por un lado... Por un lado, ante todo está la ilusión de trabajar sin descanso por mi tierra, de aprender de mis aciertos y de mis errores, para seguir construyendo entre todos este gran proyecto de vida en común que es Castilla y León. Para mí, Castilla y León es lo primero, por encima de todo, por encima de todos. Castilla y León es la pasión que me alienta cada día, lo que hace que dé lo mejor de mí, y también lo que nos exige lo mejor a todos los que aquí estamos.

Ilusión con humildad también, asumiendo que nadie puede conseguirlo todo sin el apoyo ni el concurso de los demás. Y eso exige también realismo, tanto para asumir los grandes retos a los que se enfrenta Castilla y León -que son muchos- como también para reconocer todas sus fortalezas y, por supuesto, las capacidades -que son innumerables-.

Los problemas de todos y cada uno de los castellanos y leoneses son y serán también mis problemas y los problemas de mi Gobierno. Sería utópico y pretencioso creer que podemos solucionarlos todos; pero garantizo que no faltará cercanía ni voluntad realista para hacerlo.

Y el realismo lleva al rigor, para escuchar, para conocer, para estudiar, para responder a cada reto o problema, sin improvisar o frivolizar con las soluciones; algo que se consigue mejor desde la integración, para sumar o, mejor, multiplicar antes que restar o dividir.

Y como instrumento para ello, el diálogo. Diálogo como forma básica para entender la política, como un rasgo propio de Castilla y León que se viene reflejando de manera repetida, con un diálogo político en las grandes cuestiones de Comunidad, que hemos culminado con éxito en muchas ocasiones. Deseo impulsarlo, deseo mantenerlo en esta legislatura, apelando a la responsabilidad de todos los procuradores que la integramos, pues, como señala nuestro Estatuto de Autonomía, todos y cada uno de los que aquí estamos representamos a la totalidad del pueblo de Castilla y León y, por tanto, a cada uno de nosotros nos concierne su futuro.

También está el diálogo social con empresarios y sindicatos, que es una de las señas de identidad más características y envidiadas de Castilla y León, y es mi firme voluntad que siga siéndolo: seguiré trabajando para alcanzar nuevos acuerdos, porque creo en el diálogo social como fórmula para avanzar con estabilidad y con confianza en el ámbito económico, social y laboral. [Aplausos].

También... también continuaremos con el diálogo con los sectores productivos, con las organizaciones agrarias, con los autónomos, los representantes de actividades como las forestales, de transporte, comercio, cultura o turismo, entre otras; el dialogo... el diálogo civil con todo el tejido asociativo y el tercer sector; y con el voluntariado y, por supuesto, los representantes de los servicios públicos; y el diálogo territorial con nuestras entidades locales, con otras Comunidades Autónomas, buscando mejorar el bienestar de las personas con servicios de más calidad.

Avanzaremos en la renovación de los convenios de colaboración con las Comunidades vecinas, como el ya negociado del País Vasco, o los que se están negociando de Galicia y Madrid, con los trabajos en marcha. Y sin olvidar, por supuesto, el diálogo institucional con el Estado y sus instituciones por encima de las ideologías, siempre para beneficio de Castilla y León y de España.

Señorías, quiero asumir este nuevo tiempo desde la ambición para Castilla y León. Creo firmemente en Castilla y León; una Comunidad madura, una Comunidad viva, dinámica, cada vez más abierta y emprendedora. Creo que las enormes posibilidades de esta tierra y la gran capacidad que tiene para avanzar desde la sólida base de nuestra cultura, nuestro talento y también nuestra historia. Por ello ambiciono la mejor Castilla y León. Les garantizo a todos ustedes que lo mejor está por llegar, y llegará de la mano de mi Gobierno. [Aplausos].

Una Comunidad... Una Comunidad al servicio de las personas que viven aquí, con más oportunidades, más bienestar, más igualdad, más solidaridad y más calidad de vida para todos. Una Comunidad también rica en valores, tolerante, construida desde la prudencia y el rigor -lo que nos caracteriza-; pero también sin renunciar nunca a la ambición, a la capacidad de transformación, afirmando por ello, de manera rotunda, que la España actual no se puede entender sin Castilla y León, sin toda la aportación histórica, cultural, humana y social de nuestra tierra. Así, el orgullo de ser quienes somos, el honor de ser de esta tierra tiene que ser impulso y motor de nuestro crecimiento social y económico. De una gran marca de calidad que refuerce nuestro protagonismo en España y en Europa. Y es que, desde luego, tampoco podemos entender a Castilla y León sin ambas. No podemos entender a Castilla y León sin España como referente. [Aplausos].

Nuestra nación, única y varias veces centenaria, nos convoca a todos y agrupa desde su rica diversidad y pluralidad, y a la que tanto hemos contribuido. Somos castellanos y leoneses, que es nuestra forma de ser españoles; y también estamos profundamente orgullosos de ello. Por eso, cualquiera que atente contra España, contra su integridad, contra su futuro, también atenta contra Castilla y León. [Aplausos]. Como siempre... como siempre, estaremos dispuestos a defender a España en todos sus ámbitos y dimensiones. También, por eso, queremos ser parte muy activa de nuestra nación, ocupando el papel que merecemos por nuestra historia, pero también por el protagonismo actual, con todo lo que ello implica, ni más ni menos.

Y, desde España, integrados de forma activa en una Europa a la que históricamente pertenecemos y a la que tanto hemos aportado. La Europa de la que recibimos recursos, solidaridad y garantías, como vemos lo que ocurre con las vacunas contra la COVID o los fondos para la recuperación; la que ha mostrado también su solidaridad y su unidad ante la guerra de Ucrania; la que recibe mayoritariamente nuestros productos; la que posibilita una política agraria común que protege y ayuda a nuestros agricultores y garantiza la seguridad alimentaria. Por ello, Europa es y seguirá siendo nuestro espacio de convivencia, de progreso y de entendimiento. [Aplausos].

Señor presidente... señor presidente, señoras y señores procuradores, en este marco nos vamos a tener que enfrentar a los retos que se nos presentan en esta undécima legislatura. Vivimos momentos, desgraciadamente, históricos, con cambios e incertidumbres globales que afectan de lleno a nuestra tierra. Estamos consiguiendo superar entre todos y con mucho esfuerzo una cruel pandemia, que comenzó ahora hace dos años, que ha causado mucho dolor personal, sobre todo por los fallecidos, por los que ya no están con nosotros. A ellos les enviamos nuestra emocionado recuerdo y toda nuestra solidaridad y afecto para sus familias. Como también mandamos nuestra solidaridad y todo nuestro apoyo a todos los que han sufrido esta pandemia, trabajando, en su salud, en sus trabajos, en sus negocios, en sus proyectos de vida.

Como es sabido, la lucha sanitaria, social y económica contra la COVID-19 centró gran parte de los esfuerzos más importantes del Gobierno de Castilla y León durante la pasada legislatura; con nuestros aciertos, y también con nuestros errores, actuamos ante esta emergencia sanitaria tomando decisiones urgentes, complejas y a veces muy duras, pero siempre pensando en el interés general. Acaba de... acabar de superar sus consecuencias es una de las encomiendas principales que le espera al nuevo Gobierno de la Comunidad. Porque la pandemia ha evidenciado carencias que nos muestran caminos a seguir, como la de contar con más y mejores servicios públicos, con nuevos modelos de gestión y con más medios para sostenerlo; sin duda, un complejo reto.

La Unión Europea nos está proporcionando importantes recursos para ello. Defender hasta el último euro que corresponda a Castilla y León y utilizarlo como efectivo motor de cambio es otra tarea que nos espera. Ya empezamos... [aplausos] ... ya empezamos a ver resultados esperanzadores en el ámbito económico. Marzo acabó con una cifra de parados que se había reducido en un 24 % con respecto al mes del año dos mil veintiuno, siendo la más baja de los últimos 14 años, y con un paro juvenil situado por primera vez por debajo de las 10.000 personas, alcanzando la cifra más baja de jóvenes desempleados de toda la serie histórica.

Asimismo, nuestra economía creció un 5,5 % en el dos mil veintiuno, tras la caída del 7,9 registrada en el dos mil veinte; lo que supone recuperar en apenas un año el 65 % de los niveles que tenía nuestra economía antes de la pandemia.

Sin embargo, Castilla y León, como España y el resto de Europa, afrontan unas perspectivas económicas muy preocupantes. Los costes energéticos disparados desde hace meses afectan a todos los sectores económicos, a una inflación elevadísima, que no conocíamos desde hacía décadas. Y a ello se añaden cuestiones como la falta de suministros de algunos productos esenciales en el ámbito agrario, minerales también, y determinados elementos básicos para la producción industrial vinculada a la construcción, a la mejora de infraestructuras y al sector de la automoción, por poner tan solo algunos ejemplos.

Esta situación se ha agravado con la injustificable invasión de Ucrania por parte de un tirano criminal que nos plantea un escenario, desde luego, inesperado y altamente incierto. Desde aquí enviamos al pueblo ucraniano una... abrazo fraternal y toda nuestra solidaridad, la de toda Castilla y León. [Aplausos]. [Aplausos del orador].

Como resultado de todo ello, aumentan los costes para los sectores económicos, para los sectores productivos, se reduce el poder adquisitivo de las personas y de las familias. La inflación, como saben, es ese impuesto silencioso hacia las personas más vulnerables, así como hacia las clases medias y trabajadoras. El Gobierno de Castilla y León viene adoptando medidas desde hace tiempo: hemos hecho reformas estructurales y una política energética orientada a reducir la dependencia del exterior; somos líderes en renovables, con un 89 % de la electricidad producida de origen verde; hemos hecho una política de apoyo a particulares, empresas, entidades y Administraciones, con 38 millones de euros en incentivos para fomentar el autoconsumo y también el almacenamiento de la energía.

Y hemos hecho una política social con medidas contra la pobreza energética: en primer lugar, con la ayuda extraordinaria de 130 euros para 45.000 familias vulnerables; en segundo lugar, incrementamos las ayudas de emergencia social a través de las entidades locales: 4.000.000 el año pasado, 4.000.000 este año; en tercer lugar, reforzamos los convenios con las empresas suministradoras para evitar cortes por impagos a familias con dificultades; y, en cuarto lugar, también hemos incrementado las prestaciones económicas a las personas dependientes.

Y dentro de nuestras competencias, llegaremos más lejos: vamos a aprobar un documento de iniciativas de respuesta ante el agravamiento de la situación económica con una batería de medidas por importe de más de 400 millones de euros.

Entre otras: medidas de competitividad energética para aligerar la factura de familias y de empresas; en segundo lugar, actuaciones de financiación para las empresas directamente afectadas por el conflicto de Ucrania; en tercer lugar, medidas para agricultores y ganaderos, incluyendo ayudas directas, por un lado, a los ganaderos, para aliviar el incremento de sus costes. También iniciativas para el sector del transporte para mejorar la financiación de las empresas y abaratar las tarifas de los viajeros; actuaciones de eficiencia y ahorro energético en la Administración autonómica; ayudas a las familias más vulnerables, incluyendo más financiación para las ayudas de emergencia antes citadas y la agilización del bono térmico a sus 83.000 beneficiarios; aumento de las ayudas a los pacientes que tienen que desplazarse, de las indemnizaciones por razón del servicio de los empleados públicos; iniciativas para compensar el incremento de los costes en los contratos del sector público. Y todo ello se acompañará con actuaciones en la reprogramación y el refuerzo de los fondos europeos para orientarlos a las prioridades actuales.

Y también queremos hacer peticiones de calado al Gobierno de España: creación de un fondo de ayuda a los sectores más afectados con los remanentes de las ayudas empresariales con motivo de la pandemia; y creación de un fondo extraordinario para los servicios públicos para sufragar la atención de los refugiados ucranianos, que en principio debería costear la Unión Europea; y en tercer lugar, la reducción de impuestos. Un IVA superreducido para electricidad y gas, y una reducción excepcional del IVA de los combustibles; y no aplicación de la subida fiscal prevista por el Gobierno. A esta medida también contribuiríamos las Autonomías, pues hay que recordar que gran parte de la recaudación corresponde a los territorios.

Estaremos pendientes de la aplicación y de los resultados de las medidas aprobadas por el Gobierno de España. Nos hubiese gustado que se hubiese incluido una bajada de impuestos, como se acordó en la Conferencia de Presidentes Autonómicos de La Palma. Mi Gobierno sí dará el paso: la bajada prevista del impuesto de la renta de las personas físicas para esta legislatura la vamos a efectuar este año. [Aplausos]. Iniciaremos... iniciaremos inmediatamente los trámites del proyecto de ley para rebajar el IRPF a todos los contribuyentes en el primer tramo del impuesto.

Señorías, afrontar un escenario tan complejo para empresas y trabajadores nos exige, por un lado, ideas claras y, por otro lado, determinación. Y les garantizo que el Gobierno que lideraré, si ustedes me otorgan su confianza, tomará medidas contundentes y sin complejos para mejorar la vida de los ciudadanos en Castilla y León. Les garantizo una auténtica revolución fiscal: la mayor bajada de impuestos de la historia de Castilla y León tendrá lugar esta legislatura, especialmente en el mundo rural.

Les garantizo también avances de vanguardia en la protección social, con servicios sociales más personalizados, especialmente para las personas mayores y las personas con discapacidad.

Les garantizo también una inversión sin precedentes en políticas de familia y de natalidad, para que todas las personas puedan desarrollar su proyecto de vida en nuestra Comunidad, luchar contra la despoblación y afrontar el reto demográfico.

Les garantizo un apoyo decidido a nuestro mundo rural, del que estamos especialmente orgullosos. También de nuestros agricultores y ganaderos, que trabajan de sol a sol para que todos podamos disfrutar de una alimentación de calidad. Estamos... [Aplausos]. Estamos en un momento decisivo en la transformación de nuestro medio rural y mi Gobierno siempre estará pendiente a las reclamaciones justas que demandan nuestros agricultores y ganaderos.

No pretendo ni quiero hacer o escribir la historia, antes al contrario: quiero que sean los castellanos y leoneses los que lo hagan, como siempre lo han hecho, levantando esta Comunidad con sus manos para orgullo de todos los que nos encontramos hoy aquí.

Tenemos grandes retos por delante que debemos abordar, siendo también conscientes de nuestros propios recursos y capacidades. Somos, por ejemplo, la Comunidad que cuenta con el mayor patrimonio cultural y natural de toda España, que nos define por un lado como pueblo, y también son claros instrumentos de futuro; que ofrece a quienes viven en ella la mejor educación de toda España, a los servicios públicos de mayor calidad, todos ellos reconocidos de manera objetiva.

Somos una Comunidad que protege, que atiende a las personas que más lo necesitan, y que siempre tiene presentes a las personas mayores, a las personas con discapacidad y a los colectivos más vulnerables.

Somos... [Aplausos]. Somos también una Comunidad más industrializada que la media, hay que recordarlo. A la cabeza de España en sectores como la automoción como distintas producciones agropecuarias o en energías renovables, por poner algunos ejemplos. Contamos en otras muchas industrias punteras: en ciberseguridad, biotecnología, sector aeronáutico, sector farmacéutico y químico, y también en la industria de agroalimentación. Ofrecemos un mercado laboral dinámico y la Formación Profesional es de calidad, que permite al 80 % de sus estudiantes encontrar trabajo, incluso antes de concluir sus estudios.

Somos también líderes en turismo rural y somos referentes en turismo interior y de calidad.

Hemos conseguido un elevado nivel de paz y diálogo social y económico, hasta constituirlo en una seña de identidad de nuestra tierra.

El objetivo esencial de mi Gobierno, si cuento con su confianza, será orientar todos estos activos para poder conseguir que estos recursos permitan la transformación de nuestra tierra y garantizar nuestro futuro, siguiendo para ello dos grandes ejes de actuación: la modernización, por un lado, y la cohesión, por otro.

La modernización para llevar a Castilla y León hacia ese futuro que acabo de describir, avanzando en un proceso que ya emprendimos en la legislatura anterior y que comprende todos nuestros sectores económicos y sociales, poniendo lo mejor de la tecnología al servicio de las personas; utilizándolo, por ejemplo, en la teleasistencia avanzada para nuestros mayores y para las personas dependientes, utilizándolo también para el transporte a la demanda en el medio rural.

También la tecnología más avanzada de Europa al servicio del campo, y con importantes labores de investigación, innovación y agrotecnología para hacer de nuestros productos una referencia en el ámbito nacional e internacional. Impulsaremos un plan de la agroindustria de Castilla y León con nuevas líneas de ayudas para su crecimiento y modernización. Promoveremos una declaración conjunta en el marco estable con todos los representantes de la cadena alimentaria para mejorar el equilibrio entre los distintos eslabones. Aprobaremos una ley de desarrollo y competitividad rural, con medidas de apoyo a la actividad productiva, que mejore el acceso a internet y, también, algo esencial, que garantice los servicios públicos a las personas que viven en el medio rural.

Trabajaremos para conseguir una agricultura moderna y avanzada, que aproveche al máximo las ayudas de la nueva Política Agraria Común: hemos luchado de la mano de las organizaciones agrarias y las cooperativas agrarias para conseguir la mejor Política Agraria Común para Castilla y León y seguiremos haciéndolo. Facilitaremos la gestión de las ayudas de la PAC con el compromiso de pagar en el año, como mínimo, el 90 %. También defenderemos una flexibilización para responder a una nueva situación de los mercados por la invasión rusa de Ucrania.

De manera particular, instaremos al Gobierno de la Nación a recuperar el equilibrio entre la ganadería y la protección del lobo. [Aplausos]. Que apruebe también planes hidrológicos con dimensión nacional desde el máximo consenso. En todo... en todo caso, le solicitaremos al Gobierno de España que facilite el aumento de la superficie de regadío de manera inmediata.

Por nuestra parte, nosotros vamos a actuar en la modernización o nuevo regadío de 30.000 hectáreas. Vamos a facilitar la incorporación de mujeres y jóvenes y vamos a crear un programa específico de sucesión de explotaciones.

Vamos a dirigirnos a otros sectores también, impulsando la modernización, el crecimiento de todo nuestro tejido económico, incidiendo especialmente en nuestros emprendedores, pymes, autónomos, empresas familiares. Esa es nuestra intención, porque tenemos abiertas las puertas a todas las empresas que quieran crecer, que quieran innovar, que quieran instalarse en Castilla y León para crear empleo: con ayudas directas, por un lado; con financiación, por otro; con suelo a bajo precio y también con apoyo a la internacionalización. Queremos favorecer el retorno del talento a nuestra Comunidad, y será otro de los instrumentos que queremos utilizar para ello.

Por su evidente importancia estratégica, queremos seguir impulsando la reindustrialización de nuestra tierra, desde la competitividad, la innovación, la digitalización, una financiación accesible y una fiscalidad favorable. Impulsaremos nuevos planes industriales y desarrollaremos los que ya están en marcha.

Prestaremos atención especial a sectores estratégicos, como el de la automoción, que seguirá teniendo el apoyo decidido para superar las dificultades actuales y para afrontar proyectos generadores de empleo. Saben ustedes los proyectos de empresas ya instaladas aquí, o que se van a instalar, que van a impulsar este sector y que va a crear muchos puestos de trabajo.

Del mismo modo, y buscando corregir las inexplicables carencias que hemos visto, apoyaremos las explotaciones mineras aún existentes y los nuevos proyectos de minería. [Aplausos]. Exigiremos del Gobierno... exigiremos al Gobierno de la Nación revertir la política energética que existe para que sea eficaz y, sobre todo, que permita una verdadera transición justa, para no perjudicar ni a las familias ni a las empresas, y que no se reduzca la competitividad de las mismas.

Vamos a apostar también por el futuro de sectores y actividades vinculadas al comercio, al turismo, al deporte, a la hostelería y, por supuesto, al transporte.

También recordar que nuestra riqueza natural y cultural representa, como antes avancé, unos recursos endógenos de enorme potencialidad. Por ello, defenderemos el patrimonio natural y forestal de Castilla y León, impulsando todas las actividades y oportunidades que se deriven del aprovechamiento para las personas que vivan en su entorno.

Apostaremos por la adaptación necesaria del modelo energético, orientando nuestra competitividad, orientando esa transición hacia la competitividad y la creación de empleo de calidad. Aprobaremos una normativa autonómica sobre el agua, bajo la perspectiva de ahorro y protección del recurso, así como su aprovechamiento óptimo como factor de desarrollo. Modificaremos la Ley de Montes para regular los derechos de absorción del CO2 y mejorar los aprovechamientos forestales. Aprobaremos también la ley autonómica de vías pecuarias e infraestructura verde e implantaremos un nuevo modelo de gestión para el dominio público pecuario.

Asimismo, consolidaremos a Castilla y León como referente cultural básico en España, protegiendo nuestro patrimonio cultural, nuestras tradiciones y la riqueza de nuestro idioma, la riqueza del español. [Aplausos]. Aprobaremos un nuevo marco normativo en materia del patrimonio cultural y de las bibliotecas.

Señorías, vamos a poner todo nuestro empeño en conseguir unas reglas justas de competencia para Castilla y León. Por eso instaremos, reclamaremos, al Gobierno de la Nación y a las instituciones europeas que protejan el producto de nuestro campo y de nuestra industria ante la competencia desleal de productos extracomunitarios con menores requisitos de calidad. Crear empleo... [aplausos]... crear empleo es un objetivo esencial de todas estas medidas de modernización. Por ello, priorizaremos la creación de empleo estable y de calidad, que es, a la postre, la mejor política social.

Y seguiremos apoyando a los trabajadores, con ayudas a la contratación, con medidas de prevención de riesgos laborales y también con la formación; una formación y una recualificación en la que tiene un gran protagonismo la Formación Profesional, que tiene que estar adaptada a las demandas de los nuevos tiempos, apostando por el talento, por un lado, y por la innovación, por otro lado.

Señorías, como dije antes, otro gran eje de actuación será la cohesión social y territorial. Cohesión que debe empezar por lo más básico: la igualdad de las personas. Por eso, una labor primordial de mi Gobierno será vigilar y defender la igualdad ante la ley de todos los castellanos y leoneses. Garantizo la igualdad social, laboral, de oportunidades y la igualdad entre hombres y mujeres. Y de manera especial... [aplausos] ... de manera especial, quisiera resaltar aquí que tendremos siempre presentes a las víctimas del terrorismo, trabajando por su dignidad, memoria, justicia y protección. [Aplausos].

Con la igualdad personal defenderemos la igualdad territorial. Por ello, mi Gobierno trabajará para promover la solidaridad entre todas las Comunidades de España, fortaleciendo el papel de provincias y municipios y defendiendo también nuestros intereses en la Unión Europea. Un camino apropiado para ello es reivindicar nuestra historia común y entenderla como un elemento integrador para la reconciliación. Por eso, vamos a comenzar la tramitación entes del treinta de julio de una normativa en materia de concordia que integrará toda la regulación en la materia como elemento de reconciliación y evitando la utilización de la historia para dividir a los españoles. [Aplausos].

Junto a la igualdad, el equilibrio y la integración son otros pilares de la cohesión. Considero una condición indispensable de progreso que todos los territorios de Castilla y León tengan las mismas oportunidades, recursos similares, servicios equiparables. Que cada persona pueda desarrollar su proyecto de vida en Castilla y León en cualquiera de los rincones, sin que su calidad de vida se vea menoscabada. Por ello, mi Gobierno promoverá el equilibrio territorial entre todas las provincias a través de planes de inversión, de fomento y de desarrollo. Especialmente queremos mejorar la conectividad de Castilla y León, fortaleciendo, por un lado, las infraestructuras de comunicación y de transporte. Modernizaremos nuestra red de carreteras. Exigiremos al Gobierno de España también la culminación de las autovías y ferrocarriles pendientes, además del Corredor Atlántico. Mejoraremos la movilidad y el transporte de las personas y su acceso a los servicios públicos.

Ampliaremos el transporte gratuito a la demanda a todas las localidades, todos los días y con mayor frecuencia. Vamos a crear el "Bono Joven Rural" de transporte interurbano gratuito para los jóvenes que viven en el medio rural. Y el "Bono veinte", con tarifa plana de 20 euros, para el transporte metropolitano. Y también culminaremos la extensión de internet: vamos a llegar al cien por cien de la Comunidad con 30 megas en el dos mil veintitrés y con 100 megas en el dos mil veinticinco. Y abordaremos, de forma intensa también, la capacitación digital de la ciudadanía de Castilla y León.

En este camino de equilibrio, de integración, desde luego, nuestro mundo local requiere un papel protagonista e indispensable. Por ello, apostaremos firmemente por la colaboración con las Administraciones locales y el papel protagonista en el que desempeñan en el territorio los municipios y las provincias. Los mecanismos de cooperación local impulsarán la ejecución de inversiones sostenibles, llegando a todos los municipios de Castilla y León. Y crearemos un nuevo fondo de cohesión para ayuntamientos y diputaciones de 20 millones de euros para inversiones que creen empleo y que fijen población.

Unos servicios públicos de calidad en el territorio, distribuidos de manera ejemplar por todo el territorio, es claramente otro ejercicio, otro ejemplo esencial de nuestra cohesión. Por eso garantizaremos nuestra sanidad de calidad en todo el territorio. Tenemos uno de los mejores sistemas sanitarios de España y seguiremos mejorando. Y lo haremos desde el diálogo con los profesionales, con las entidades locales y también con las fuerzas políticas que quieran sumarse a este proceso. Y presentaremos, una vez más, el presupuesto para sanidad más alto de la historia.

Avanzaremos en una sanidad cercana y moderna, con más medios humanos, con más medios tecnológicos, con un plan de infraestructuras sanitarias, incluidas las unidades satélite de radioterapia comprometidas, que son irrenunciables. Reforzaremos... [aplausos] ... reforzaremos la Atención Primaria para consolidar un sistema sanitario cercano, gratuito e innovador. Los consultorios seguirán abiertos, y vamos a blindar por ley -como ya anuncié antes- la atención sanitaria en nuestros pueblos. [Aplausos].

Aplicaremos un plan de choque para reducir las listas de espera hospitalarias tras el impacto de la COVID, como ya hemos hecho en las listas de espera de la Atención Primaria. Asimismo, desarrollaremos unas políticas sociales para proteger a los ciudadanos que más lo necesitan, luchando contra la pobreza y contra la exclusión social.

Somos la Comunidad que mejor protege a las personas, con servicios de última generación para nuestros mayores, como la teleasistencia avanzada gratuita. Aprobaremos una ley de derechos de las personas mayores, con ampliación de derechos de dependencia, que facilite el acceso a prestaciones de aquellas personas mayores que vivan solas. También una ley de atención residencial en el ámbito de los cuidados de larga duración a las personas que lo necesiten, y una ley de apoyo al proyecto de vida a las personas con algún tipo de discapacidad.

Mi compromiso es proteger a las personas, a las más vulnerables, así ha sido siempre y así va a seguir siendo. Por eso reitero mi compromiso irrenunciable con la lucha contra la violencia de género, la violencia contra las mujeres, ya que esta no se produce solo en el ámbito familiar. Y lo digo alto y claro para que todo el mundo lo entienda: vamos a mantener la ley de lucha contra la violencia de género. No vamos a dar un paso atrás en los derechos reconocidos, ni mucho menos.

Por otra parte... [aplausos] ... por otra parte, vamos a elevar a rango de ley el actual Plan de Prevención de Violencia en el Ámbito Familiar, elaborando y aprobando una nueva ley de lucha contra la violencia intrafamiliar para generar nuevos derechos y proteger a las víctimas, a todas las víctimas. La tramitación de esta norma se iniciará antes del treinta y uno de julio del presente año. Porque existen situaciones que han de abordarse, generando nuevas prestaciones para la... para las víctimas, como la violencia de los hijos contra los padres o contra las personas con discapacidad en el entorno familiar. No creo que nadie pueda estar en contra de esto. Son necesarias campañas de sensibilización y de detección, como lo es la garantía de las alternativas habitacionales y de medios de subsistencia en las situaciones que se producen víctimas en estas circunstancias.

Las dos normas son necesarias, las dos normas son compatibles y las dos normas son complementarias. Mejorar la... [aplausos] ... mejorar la detección, la prevención, ampliar y reforzar la protección de las víctimas y garantizar la mejor atención inmediata e integral es un compromiso irrenunciable.

Otro de nuestros objetivos fundamentales será impulsar una potente política de apoyo a las familias, como institución básica de la sociedad y pilar del estado del bienestar. Ampliaremos la protección social, jurídica y económica a las familias, elevando al máximo rango las políticas de apoyo para que estén a la altura de las mejores de toda España, facilitando el acceso a la vivienda con ayudas al alquiler, a la compra o a la rehabilitación, especialmente a los jóvenes y en el medio rural; y lanzando una línea de avales para facilitar la compra de viviendas a más de 12.000 jóvenes para que puedan emanciparse.

Aprobaremos una reforma de la Ley del Derecho a la Vivienda en Castilla y León, con una mejor regulación del parque público de viviendas, al que se incorporarán 1.500 viviendas más.

Por otro lado, combatiremos el fenómeno delictivo de la ocupación de viviendas con asesoramiento gratuito a las víctimas de este hecho. [Aplausos]. Apoyaremos con decisión la natalidad, con un cheque bebé y con incentivos fiscales progresivos. Avanzaremos también en la conciliación y la corresponsabilidad, con la ampliación del Bono Concilia y con la gratuación... gratuidad -perdón- del Programa Crecemos, entre otros. Además, garantizaremos la gratuidad de la enseñanza de cero a tres años; ya desde el próximo curso será una realidad para los niños de dos a tres años. [Aplausos].

La educación es uno de nuestros mayores éxitos como Comunidad. Estamos a la vanguardia mundial, con una educación pública de excelencia, con calidad y equidad, en centros públicos y concertados, en el mundo urbano y en el mundo rural. Somos ambiciosos, queremos ser todavía mejores y vamos a llegar más lejos. Vamos a consolidar un modelo educativo de excelencia basado en el mérito, en el esfuerzo, la solidaridad y en el apoyo a los que más lo necesitan. Implantaremos también nuevas medidas de éxito educativo y reforzaremos la innovación pedagógica, para ayudar a los alumnos a que puedan superar las dificultades por su propio esfuerzo.

Apostamos por un modelo educativo que genere oportunidades reales y esté libre de todo adoctrinamiento ideológico. En esta Comunidad no hay adoctrinamiento ni lo va a haber por parte de nadie. Y garantizaremos la libre elección de centros y el derecho inalienable de los padres a decidir la educación de sus hijos. [Aplausos].

Potenciaremos la Formación Profesional, que es un itinerario de éxito orientado al empleo, flexible, ajustado a las necesidades del mercado laboral. Y seguiremos exigiendo una EBAU única en todo el territorio nacional, para garantizar la igualdad de oportunidades de nuestros estudiantes. [Aplausos]. Queremos fortalecer la Universidad, aumentando la financiación y los fondos para investigación como factor de impulso de la excelencia. Y también facilitaremos el acceso a la universidad ampliando el número de becas y también bajando progresivamente las tasas universitarias.

Señorías, realizar este conjunto de iniciativas quiere... requiere contar con los medios adecuados. A este fin, seguiremos luchando por una financiación autonómica justa, que sea solidaria y sobre todo acorde con el coste efectivo de la prestación de los servicios públicos para acabar con la infrafinanciación de Castilla y León. [Aplausos]. Asimismo... asimismo, y como antes avancé, aprovecharemos los nuevos fondos europeos y garantizaremos que lleguen con transparencia, y con rapidez y eficacia, a todos los rincones de nuestra Comunidad Autónoma.

Vamos a continuar impulsando en Castilla y León una política fiscal inteligente, capaz de atraer y retener tejido productivo. Como también les indiqué con anterioridad, a lo largo de esta legislatura tendremos la fiscalidad más baja de nuestra historia, especialmente en el medio rural, señorías. Y pedimos al Gobierno de España que aplique también una fiscalidad diferenciada que contribuya a luchar contra la despoblación. [Aplausos]. Bajamos impuestos porque es bueno para las familias y las empresas. Rebajaremos el tramo autonómico del IRPF a todos los contribuyentes este mismo año, como anuncié con anterioridad. Aplicaremos nuevas deducciones por residir en zonas de riesgo en despoblación y por trasladar... por trasladarse a trabajar a esas zonas. Y ampliaremos también los beneficios fiscales de acceso a la vivienda; reduciremos el impuesto de transmisiones para las empresas que se instalen en el medio rural, bonificaremos la compra y el alquiler de explotaciones agrarias prioritarias y de fincas rústicas; y bonificaremos el 95 % de las tasas generales de pesca, caza y también la específica de galgos.

Aseguraremos también una Administración cercana, eficaz, austera y transparente, a la vez que reduciremos las cargas administrativas de ciudadanos y empresas, ámbito en el que queremos consolidar una Función Pública moderna, que promueva el talento y la profesionalización.

Señorías, las actuaciones de modernización y cohesión de Castilla y León que acabo de exponer están orientadas a un fin estratégico para nosotros: hacer de nuestra tierra un lugar atractivo para vivir y superar así esos retos demográficos que tanto nos preocupan hoy.

Consideramos el problema de la despoblación y las políticas de demografía una cuestión nacional prioritaria que debe ser abordada en coordinación con otras Administraciones públicas. Políticas que deben promover -y así lo apoyaremos- una inmigración ordenada, que desde la integración cultural, económica y social, y en contra de las mafias ilegales, contribuya al futuro de España y de Castilla y León.

Castilla y León somos tierra de acogida: de quienes se marcharon y quieren volver, de quienes quieren regresar; y también de quienes llegan buscando una nueva oportunidad. [Aplausos]. Creemos... creemos enriquecedor y necesario incorporar dentro de nuestra sociedad a todas las personas que quieran venir desde todos los rincones de mundo, siempre de forma legal, ordenada, con clara vocación de incorporarse al mercado laboral y que busquen la plena integración a través del respeto a las leyes, los valores y las libertades europeas de la sociedad que las integra.

A las personas que lo necesiten vamos a seguir atendiéndolas a través del sistema de servicios sociales que tenemos. En este punto, quiero referirme especialmente a la acogida de refugiados ucranianos por la cruel e injusta invasión rusa. Estamos a su lado, como dije antes. Tienen nuestra solidaridad, de todo el pueblo de Castilla y León. Tenemos en marcha el protocolo de atención a estas personas para cubrir sus necesidades básicas y... y conseguir su integración laboral y también social.

El protocolo, que tiene que financiar Europa, contempla quince medidas de apoyo a las familias en el ámbito de sanidad, de educación, de vivienda, de economía y de empleo. Lo hacemos en coordinación con el Gobierno de España y el resto de Administraciones, así como las entidades que trabajan también con las personas desplazadas.

Señorías, este conjunto de actuaciones las vamos a desarrollar dentro de los instrumentos que nuestro Estado autonómico y constitucional nos proporciona. Llevamos treinta y nueve años de progreso económico y de avances sociales impulsado por nuestro modelo autonómico, que acerca el poder político al territorio, que nos permite conocer de primera mano sus necesidades y aportar también las soluciones apropiadas para ello, que muestra su eficacia para promover el bienestar de los castellanos y leoneses.

Por ello, defiendo con firmeza consolidar el Estado de las Autonomías, pero que sea moderno y eficiente al servicio de las personas, que sirva para unir más a España, expresando su riqueza pero a la vez su diversidad dentro de nuestra patria común. Por ello, quiero seguir demostrando todos los beneficios que el Estado Autonómico ofrece en esta nueva etapa política que ahora comienza. [Aplausos].

Señor presidente, señorías, he querido exponer mi Programa de Gobierno a todos los castellanos y leoneses, a quienes nos debemos y ante quienes debemos de responder. Me dirijo a ellos desde esta tribuna con el orgullo del que conoce y ama a esta tierra y a sus paisanos por encima de todo. He dedicado gran parte de mi vida a recorrer Castilla y León, a encontrarme con la gente cara a cara, con su realidad, y a comprender el legado de una Comunidad que solo ansía prosperidad y futuro. Porque, si algo define el carácter de los castellanos y de los leoneses, es sin duda ese espíritu de superación constante, una ambición repleta de responsabilidad, reconociendo la realidad de las cosas y agradeciendo la franqueza por encima de todo.

Mi propósito para esta nueva etapa es estar a disposición de ellos una vez más y tenderles la mano una vez más, mirarlos de frente para asumir que los tiempos que nos esperan no van a ser fáciles, que nos aguardan retos complejos, pero con la convicción de que los afrontaremos juntos. Somos un pueblo leal y sobrio, pero a la vez dinámico y enérgico: cuando se trata de seguir adelante, estamos los primeros ante cualquier adversidad.

Castilla y León está en el lado correcto de la historia y, por ello, debe ocupar el lugar que legítimamente le corresponde, que no es otro que el de abrir el camino de la recuperación y la transformación de España. Esa es la fuerza que nos impulsa y es la fuerza que impulsará a una gran Nación, a España. Quiero liderar ese camino, porque sé hacia dónde dirigir nuestros pasos.

Quiero comprometerme hoy con las personas de Castilla y León para continuar con un cambio imparable en el que ellos son los únicos protagonistas y recordarles que vivimos en el mejor lugar del mundo. A ellos les ofrezco voluntad, firmeza, pasión, determinación y una férrea lealtad ligada a los intereses de nuestra tierra.

Hoy, en esta Cámara, ante la mirada atenta de la historia y como legítimos representantes de nuestro pueblo, pido su confianza a todos para seguir construyendo juntos el futuro de una Comunidad única, el futuro de Castilla y León y el futuro de España. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco. Señorías, de acuerdo con el Artículo 135.4 del Reglamento de esta Cámara, esta Presidencia decreta una interrupción de la sesión para que, a su reanudación, puedan intervenir los representantes de los grupos parlamentarios. El debate se reanudará a las dieciséis horas de esta tarde. Se interrumpe la sesión.

[Se suspende la sesión a las trece horas cinco minutos y se reanuda a las dieciséis horas].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Se reanuda la sesión. Esta Presidencia anuncia que la votación de investidura tendrá lugar en el momento inmediatamente posterior a la terminación del debate.

En representación del Grupo Parlamentario Socialista, tiene la palabra don Luis Tudanca Fernández, por un tiempo máximo de treinta minutos. [Aplausos].


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

Muchas gracias, señor presidente. Muy buenas tardes a todos y a todas. Quizá la historia sí se repite, quizá debamos volver a enfrentarnos una y otra vez a los mismos retos, a los mismos problemas, al mismo viejo adversario con diferente disfraz. Quizá las sociedades, efectivamente, estén condenadas a repetir la historia, y su único movimiento sea, inevitablemente, un péndulo. Pero de lo que nadie duda es que han llegado a esta tierra milenaria tiempos oscuros.

Esta mañana, usted, señor Mañueco, solemne, ha terminado su discurso afirmando estar en el lado correcto de la historia. No, señor Mañueco, usted no está en el lado correcto de la historia... [aplausos] ... todo lo contrario. Pero es que, cuando lo ha dicho, he pensado a qué me recordaba a mí esa frase; y, efectivamente, a mí me recordó a quien en realidad es la gurú ideológica del Partido Popular, la señora Ayuso. Hace unos meses, en un programa de televisión, afirmó literalmente, con la misma solemnidad que usted: "Si te llaman fascista, estás en el lado correcto de la historia". Pues ustedes sabrán... [aplausos] ... nosotros estamos en el otro lado: en el lado de los demócratas, en el lado de una Europa que usted quiere ser referente, y nos mira hoy avergonzada de forma completa.

Ayer, precisamente ayer, veíamos en Francia el avance de una extrema derecha a la que todos llaman por su nombre, todos. Allí, al instante, todos los partidos, a la izquierda y a la derecha, renunciaban a aliarse con ella; todos los partidos ponían en marcha un cordón sanitario que impida su acceso al poder. Precisamente, la francesa Simone de Beauvoir nos advertía, hace más de setenta años, que no olvidáramos nunca que bastaría una crisis política, económica o religiosa para que los derechos de las mujeres volvieran a ser cuestionados. "Esos derechos -nos decía- nunca se dan por adquiridos. Debéis permanecer vigilantes toda vuestra vida". Y ese momento ha llegado, ese momento es ahora.

El siglo XX abrió la puerta a aquellas ideologías que negaban al otro, que negaban incluso la mera humanidad de aquellos a los que se consideraba ideológicamente ajenos. Hoy, el Partido Popular, apenas un día después de ver lo que ha sucedido en Francia, de comprobar como también su partido hermano en Francia renegaba de ella, ha sido usted, señor Mañueco, quien ha abierto de nuevo las puertas de la extrema derecha... [aplausos] ... ha abierto las puertas de Castilla y León y de su Gobierno a quienes quieren cuestionar los derechos de las mujeres; y pasará a la historia por ello, pagará ante la historia por ello, señor Mañueco.

Y ahora bien, le advierto, les advierto que nosotros somos los que estábamos vigilantes, que seguimos vigilantes y que estamos en pie para defender la igualdad y proteger los derechos de las mujeres. Que no cederemos, no nos rendiremos, que vamos a dar la lucha hasta el último aliento para proteger todo lo logrado, todos los avances conseguidos durante estos años. Nos tendrán enfrente, con la fuerza y la convicción de los hombres y las mujeres feministas, que no estamos dispuestos a que ustedes negocien sus derechos a cambio de su poder, señor Mañueco. [Aplausos].

Pero uno se pregunta cómo hemos llegado hasta aquí, por qué hemos llegado hasta aquí, por qué, precisamente, en Castilla y León, una tierra siempre moderada, siempre templada, vaya a ser la primera Comunidad Autónoma de España y una de las primeras regiones de Europa en tener un Gobierno en el que participa la extrema derecha. Y la respuesta es usted, señor Mañueco: en apenas tres años ha convertido al Partido Popular de Castilla y León, antaño moderado, en el caballo de Troya de la extrema derecha en España, señor Mañueco, usted. [Aplausos].

No vamos a olvidar tampoco cómo hemos llegado hasta aquí. El pasado veinte de diciembre, el rey, el presidente del Gobierno y el presidente de la Xunta de Galicia -fíjese cómo son las cosas- coincidían en Zamora en un acto muy trascendente para la vertebración territorial en España: la puesta en servicio de la línea de alta velocidad que, a través de Castilla y León, une Madrid con Galicia. Y minutos antes de ese evento, señor Mañueco... el señor Mañueco decidió bajar a Castilla y León de ese tren. Decidió que la ciudadanía de esta tierra no estuviera representada en ese acto, decidió dar plantón al Jefe del Estado y al resto de representantes institucionales; decidió en base a intereses que nada tenían que ver con la gente de Castilla y León.

A las órdenes de Pablo Casado -qué tiempos aquellos, ¿verdad?- y al albur de unas encuestas que le auguraban una mayoría gloriosa, como en los tiempos pasados, usted sacrificaba a Castilla y León al altar de sus intereses partidistas, fruto de su terror a tener que enfrentarse a los casos de corrupción que tenía por delante en los tribunales.

El pacto de dos mil diecinueve con el señor Igea y con Ciudadanos lo decidieron otros; y esta convocatoria electoral también, dejando a esta tierra sin presupuestos y sin Gobierno en la etapa más decisiva de nuestra historia reciente. Y este es el primer reproche: hace tres años, el Gobierno de Castilla y León lo decidió el señor Ribera y hoy lo ha decidido el señor Abascal, ambos en un despacho de Madrid, ambos obviando nuestra Autonomía. [Aplausos].

Y así... y así las cosas, ¡ay!, hoy se enfrenta a esta investidura en el mundo real. Se ha encontrado con que no vive dentro de unas encuestas de esas de encargo, que le pintaban un mundo ideal. Hoy llega aquí después de más de tres meses sin Gobierno, tras semanas de un bloqueo institucional sin precedentes; y llega humillado y rehén de una extrema derecha sin complejos, que pretende, con su complicidad, llevar al boletín oficial aquellas cosas que su portavoz decía en Twitter... que su vicepresidente -perdón-; lamentablemente, su vicepresidente.

Señor Mañueco, hoy pide la investidura a esta Cámara para conformar un Gobierno contra las mujeres, contra los trabajadores y trabajadoras, contra los sindicatos, contra el diálogo social, contra este Parlamento; y el Grupo Parlamentario Socialista votará no... [aplausos] ... con toda nuestra convicción y con todo el amor que le tenemos a esta tierra, que se queda en las peores manos posibles en el peor momento posible.

Decía... decía Amélie Nothomb que la realidad siempre se apresura a demostrarnos hasta qué punto carecemos de imaginación. Y, desde luego, en Castilla y León así lo parece; no imaginábamos esto. Usted convocó elecciones para conseguir un Gobierno fuerte y en solitario; y llega aquí con un Gobierno que, antes de empezar, ya todo el mundo da por fallido en unos pocos meses, y llega con muy mala compañía.

Usted convocó elecciones para darle a Castilla y León estabilidad, y ha provocado la mayor crisis institucional de nuestra historia, logrando que, en mitad de una pandemia y en una terrible crisis económica y social, estuviéramos sin Gobierno, sin Parlamento, y no se tomase ninguna medida, ninguna. Ni la pandemia, ni la crisis derivada de la guerra de Putin y la invasión de Ucrania son culpa de este Gobierno ni de ninguno en nuestro país, pero sí tenía la responsabilidad de tomar medidas para paliar las consecuencias de ellas ante los ciudadanos, especialmente los más vulnerables.

Aquí volvemos a su famosa perversión del lenguaje. Al principio fue la palabra, ¿verdad? Pues parece que las palabras en boca del señor Mañueco no significan lo mismo que para el resto de los mortales, porque más de 40 días después del inicio de la guerra, 28 días después de constituirse estas Cortes, usted anunció que tomaría medidas inmediatas para hacer frente a la crisis derivada de la guerra de Ucrania; inmediatas. ¿Cómo se queda? Pero que las tomará cuando conforme Gobierno, que ya lo deja para después de las vacaciones de Semana Santa. Definitivamente, usted no habla el mismo idioma que el resto de los mortales, señor Mañueco.

Es que esta mañana ha dicho que Castilla y León va muy bien porque está más industrializada que la media de España. Impresionante. Y que casi todos nuestros jóvenes encuentran trabajo. Hombre, será fuera de Castilla y León, como lleva pasando más de treinta años, que no hace más que expulsarles por cientos de miles. [Aplausos]. Yo no sé en qué mundo vive, señor Mañueco, pero mire, es que la gente no puede esperar, es que hace prácticamente un mes ya le propuse una serie de medidas para hacer frente en esta tierra a las consecuencias de la crisis, y ya hemos registrado en esta Cámara una iniciativa para poner en marcha un plan de respuesta a la crisis por la invasión de Ucrania. Y hoy se lo reitero, un plan de choque con un volumen de ayudas, por más de 357 millones de euros, que contemple, al menos, las siguientes medidas:

En primer lugar, la convocatoria del fondo de 163 millones en ayudas directas para empresas y autónomos, que ya se ha aprobado en este Parlamento; en segundo lugar, una bonificación extra al combustible de al menos 10 céntimos, que se sume a la aprobada por el Estado; en tercer lugar, garantizar el adelanto del 90 % de la PAC sin cargas administrativas ni financieras, señor Mañueco; en cuarto lugar, revisar temporalmente las tasas a los sectores más afectados por la crisis; la creación de una ayuda extraordinaria directa contra la pobreza energética por el mismo importe del bono social térmico y eléctrico, que podría alcanzar los 260 euros por familia; incrementar las ayudas de emergencia social en al menos 5.000.000 de euros; aumentar la dotación de la convocatoria de ayudas al alquiler y la cuantía de las mismas; bonificar en un 10 % los billetes de transporte de viajeros y establecer una ayuda a las entidades locales para bonificar el precio del transporte público. Y, de acuerdo con el diálogo social -del que usted solo se acuerda en los discursos-, que se establezca una ayuda complementaria a los trabajadores y trabajadores en ERTE de al menos 3.000.000 de euros; ayudas para la diversificación internacional de las empresas y para la solvencia de empresas exportadores afectadas por la crisis; y la puesta en marcha de un nuevo fondo de ayudas extraordinarias para empresas y autónomos.

Esta fue nuestra propuesta, esta es nuestra propuesta, esta es la respuesta que necesita la ciudadanía de Castilla y León en un momento de extraordinaria dificultad. Una respuesta inmediata hubiera sido adoptar estas medidas hace semanas; hoy ya es tarde. Hoy por fin ha anunciado un plan sin terminar de concretar. Pero más vale tarde que nunca. Yo espero que su Gobierno esta vez no dé la espalda a la gente de esta tierra antes, incluso, de formarse, señor Mañueco.

De nosotros, la gente de esta tierra, puede seguir esperando esto. A pesar de las dificultades, o precisamente por ello, vamos a seguir trabajando por Castilla y León, vamos a seguir haciendo política útil y propuestas que hagan mejor la vida de la gente, señor Mañueco. [Aplausos].

Mire, estos años han sido muy duros, nunca nos imaginamos algo así: apenas recuperándonos de una crisis financiera terrible nos golpeó una pandemia que no imaginábamos más que en nuestras peores pesadillas, llegó también un volcán a nuestro país, una guerra en Europa con consecuencias que aún no podemos prever del todo; y todo ello ha provocado un enorme daño a millones de familias. Al drama en forma de desempleo, de exclusión, de familiares perdidos, se suma la incertidumbre, se suma el miedo al futuro; y, como en cada momento de crisis, hay quien trata de salvar lo mejor de nosotros mismos, quien contribuye a que nadie se quede por el camino y quien aliente el caos para tratar de pescar en río revuelto.

No esperen de mí, no esperen de nosotros jugar a eso: nunca. Hoy, precisamente hoy, quiero reivindicar la esperanza. La esperanza de que otra Castilla y León es posible, una tierra con enormes oportunidades, con un gran talento que por fin pueda darle un futuro mejor a nuestros hijos y a nuestras hijas; una tierra que sea conocida por su patrimonio y su cultura, por sus emprendedores y su industria, por sus universidades y la capacidad de innovar.

La esperanza también en otra manera de hacer política, una en la que el fin nunca justifica los medios; en la que llegar al poder a cualquier precio no es un objetivo legítimo; en la que la palabra tiene valor y se cumple; en la que se puedan tener a la vez los barcos y la honra a pesar de luchar contra los elementos. Porque, a pesar de todo lo que está pasando, a pesar de todo lo que están haciendo, no oirán de mí nunca un insulto ni un ataque personal. Se lo dije hace tres años; entonces fue investido tras perder las elecciones y pactando con quienes prometían cambio y regeneración. Hoy será investido gracias a los votos de la extrema derecha.

No le votaré, señor Mañueco; pero también será mi presidente, porque lo será de todos los castellanos y los leoneses. Nosotros nunca pondremos en duda su legitimidad nosotros nunca apostaremos por desestabilizar y debilitar unas instituciones que están siempre por encima de quienes las ocupamos; nosotros nunca contribuiremos, nunca, a la antipolítica, a aumentar la brecha de desconfianza que existe entre los ciudadanos y sus representantes. Hoy, más que nunca, no queremos ser como ustedes. Nunca seremos como ustedes. [Aplausos]. Tampoco en esto.

Porque los socialistas sabemos muy bien, muy bien, lo que costó conseguir y consolidar la democracia en nuestro país; y por eso, precisamente por eso, a pesar de la desazón que sé que hay en buena parte de la sociedad, de la gente de nuestra tierra, hoy les pido que no se rindan. Nosotros no lo haremos; nosotros seguiremos en pie, defendiendo los derechos y las libertades, defendiendo siempre lo mejor para Castilla y León. Siempre. [Aplausos]. Porque, de la misma manera que respetaremos las instituciones y haremos cuanto sea posible para defenderlas, vamos a enfrentarnos hasta el último aliento, hasta el último aliento, contra un Gobierno que viene a acabar con la verdad y con la memoria, y que se ha declarado enemigo de los trabajadores y de las mujeres.

Porque, como decía mi admirado Zweig, hablando de la trágica deriva de Europa, su querida Europa, en los años previos a la Segunda Guerra Mundial, los culpables eran aquellos que con sus palabras instigaban la guerra, pero también lo éramos nosotros si no dirigíamos contra ellos las nuestras. No puede ser más actual su alegato contra la indiferencia. Desde luego, aquí, en mi tierra, yo no seré cómplice, tampoco por omisión, de la extrema derecha. Los socialistas alzaremos la voz contra los que instigan el odio. [Aplausos].

Porque, aparte de las soflamas de sus socios, señor Mañueco, ¿qué objetivo tiene su Gobierno? El problema es que ya le conocemos todos demasiado bien. Hace tres años ya nos contó aquí un supuesto programa de investidura, pero durante aquellas semanas -¿se acuerdan?- dijo aquella famosa frase de "yo, lo que diga Ciudadanos". Y así fue: durante tres años el presidente ha sido el señor Igea, el ciudadano Igea, en singular, porque su partido -como pronosticó su antiguo portavoz- ha muerto y en paz descanse. Y ahora se repite el guion: usted ha pasado de "lo que diga Ciudadanos" a "lo que diga Vox". Pero el salto ético y moral es abismal. Abismal. [Aplausos]. Como ya le conocemos, señor Mañueco, hoy sabemos que el verdadero presidente de la Junta será el señor García-Gallardo. Se le verá menos, seguro; trabajará menos, también; tendrá Vicepresidencia, pero no competencias. Cosas de la España que madruga (para volverse a la cama, supongo). [Aplausos].

Por cierto, que, en su afán de regenerar y... y recortar gasto público, esta mañana nos hemos enterado de refilón, nos ha contado que va a crear una Consejería más. Había que cuadrar los sillones, ¿verdad, señor Mañueco? Ahora Vox... ahora Vox mandará, claro que mandará, ya lo hemos visto estas semanas. Usted ha entregado la Vicepresidencia... la Presidencia, perdón, de esta Cámara a la extrema derecha. Aún resuenan por los pasillos de esta Cámara los vítores de los procuradores de Vox cuando usted y el señor Feijóo, en palabra del jefe de los Populares europeos, Donald Tusk, capituló ante la extrema derecha. Porque ustedes han capitulado. Porque toda apariencia de derecha moderada que les quedara ha sido disuelta en este acuerdo de poder. Porque por fin el Partido Popular ha llegado a su destino después de su interminable viaje al centro, y están más a la derecha que nunca, más a la derecha que nunca. [Aplausos].

Hoy... hoy, al menos, el señor Feijóo debió venir a dar la cara, por lo menos a dar la cara. En la vida se deben asumir las decisiones que uno toma, y hoy el Partido Popular del señor Feijóo se esconde, y nos deja a los castellanos y a los leoneses con un Gobierno con la extrema derecha. Pero no lo vamos a olvidar, señor Feijóo; no lo vamos a olvidar.

El drama es que hace tres años todo tenían... todos teníamos claro que, después de lo que había hecho, Ciudadanos desaparecería. Y hoy, lamentablemente, lo que no tenemos claro es si quien será absorbido será el Partido Popular.

El nuevo Partido Popular -es el nuevo Partido Popular- solo ha cambiado de presidente, después de que al último se le ocurriera denunciar la corrupción de algún dirigente de su propio partido. ¡Un sacrilegio! ¿Pero nadie le advirtió al señor Casado de la omertà dentro del Partido Popular? ¿Nadie le avisó? [Aplausos].

Pero hoy... hoy entendemos las prisas, hoy sabemos que había más, mucho más, que en el Partido Popular los hermanos, los primos y sus amigos hacen negocios con nuestro dolor en los momentos más duros de la pandemia; que, cuando hablan de meritocracia, en realidad hablan de familia, de su familia, y que dejarían de criticar lo que llaman despectivamente "subvenciones o paguitas" si lo llamáramos "comisiones", y dieran no para llegar a fin de mes a las familias vulnerables, sino para guardar un Ferrari o un Jaguar en su garaje. Entonces ya no les parecería tan mal. [Aplausos].

Son las mismas prisas que le hicieron privatizar, señor Mañueco, los test de antígenos a principios de año a dos empresas de ex altos cargos del PP; las mismas prisas que le hicieron convocar, señor Mañueco, estas elecciones para que no llegaran a tiempo los juicios de la "perla negra", de la trama eólica, de las primarias de su partido. Solo en la trama eólica hay una petición de penas de 138 años de cárcel, más 848 millones de euros en multas, a ex altos cargos del Partido Popular en la Junta de Castilla y León.

Toda esa corrupción que les ha hecho ya confesar que hicieron trampas en sus primarias para elegirle. Hoy leemos también en los medios de comunicación que lo que hicieron en Salamanca durante sus primarias también lo hicieron en León, extendiendo la mancha. Toda esa corrupción que han traído los 35 años de Gobierno del PP. Esa corrupción cuya mera mención le hace al señor Mañueco levantarse de una reunión con el PSOE a los quince minutos -¡a los quince minutos!-, mientras aguanta durante semanas la humillación de la extrema derecha, para terminar cediendo en todo, en todo. [Aplausos].

Toda esa corrupción, toda esa corrupción que incluye en Castilla y León a un empresario condenado hace tres días por cinco delitos en la trama Gürtel de financiación ilegal del Partido Popular. El mismo empresario propiedad... propietario de la mitad de la televisión de esta tierra, que luego publica en su periódico, tras recibir decenas y decenas de millones de euros de dinero público, que el mayor chiringuito son las Cortes de Castilla y León. Sí, este Parlamento, la representación democrática de los ciudadanos y las ciudadanas. [Aplausos]. ¡Pero cómo se atreve! El problema no es la Administración paralela, ni la corrupción, ni la caja b; su problema es la democracia. Pareciera que algunos no quieren que haya control al Gobierno, pareciera que quieren volver a los tiempos donde solo uno mandaba, ¿verdad? ¡Y no se lo vamos a permitir! [Aplausos].

Fíjense, fíjense si es trascendente esto que las dos últimas semanas la investidura ha estado paralizada tan solo por ver quién controlaba en el Gobierno el dinero de la publicidad institucional, ¿verdad? Es casi de lo poco que sabemos de este Gobierno, a pesar de su discurso de esta mañana, señor Mañueco. Porque, aunque hace mucho que Castilla y León no tiene Gobierno, la parálisis ahora es crítica. Ya le dije que no ha tomado ninguna medida frente a esta última crisis. Pero es que de su pacto en realidad no sabemos nada. No se ha propuesto ni una medida concreta para luchar contra la despoblación, ni una medida para hacer frente a los desequilibrios territoriales, nada para mejorar la sanidad y el estado del bienestar, ni una medida para ayudar a nuestro desarrollo económico, ni una propuesta real para nuestro campo.

El control de la comunicación y la inmigración ordenada. Estas han sido dos de sus preocupaciones. Otro eufemismo para hablar simple y llanamente de racismo. Eso es lo que ustedes en realidad quieren decir. [Aplausos]. Lo siguiente fue... lo siguiente fue acabar con el adoctrinamiento en las aulas. Un adoctrinamiento que usted, señor Mañueco, explicó entre balbuceos que no existe, pero que precisamente por eso hay que insistir. Me lo explique.

Es que usted hoy lo único que ha concretado son las medidas que le exige Vox. El resto son las mismas promesas que llevan haciendo más de 30 años: las unidades de radioterapia, prometidas desde dos mil siete; los consultorios médicos, que duran abiertos lo que duran sus discursos. Y así todo. Ese es su Programa de Gobierno hoy, la nada más absoluta.

La digitalización, la política de vivienda y la educación 0 a 3 años se le ha pasado decir, por lo que sea, que se va a poner en marcha por fin gracias a los fondos del Gobierno de España y a los fondos europeos. Se le ha pasado. [Aplausos].

La siguiente preocupación de este Gobierno... la siguiente preocupación de este Gobierno ha sido acabar con los sindicatos y darle la puntilla al diálogo social. Así es, porque aquí ya llueve sobre mojado. Usted puede decir cuantas veces quiera que cree en el diálogo social, señor Mañueco; pero si después de haber permitido los ataques de su anterior socio, por primera vez en la historia haber incumplido los acuerdos del diálogo social, le entrega la Consejería de Empleo y el control del diálogo social a la extrema derecha, que insulta y amenaza a los representantes de los trabajadores y trabajadoras, será usted el único responsable, señor Mañueco, el único. [Aplausos].

Yo quiero hoy volver a reivindicar el papel decisivo del diálogo social en nuestra tierra, que ha logrado avances en materia de protección social y de desarrollo económico. Esta Comunidad Autónoma sería mucho peor sin el trabajo incansable por el consenso y la paz social que han hecho los sindicatos y la patronal, como lo están haciendo a nivel nacional de nuevo. En esta crisis todo el mundo está contribuyendo, salvo ustedes.

Eso sí, de momento lo único que tiene fecha de caducidad en Castilla y León son la lucha contra la violencia de género y la memoria histórica. Y aquí me van a permitir detenerme un momento.

Miren, la pasada semana, en apenas cuarenta y ocho horas, tres mujeres fueron asesinadas. A una joven de diecisiete años le dieron una paliza. Un niño de once años fue asesinado por su padre solo con el fin de provocar un dolor inenarrable a su madre. Han sido ya 1.136 mujeres las asesinadas desde que hay registros. La violencia de género existe, claro que existe. Ha costado mucho visibilizar, sacar del ámbito familiar y doméstico una violencia que se ejerce contra las mujeres en una sociedad machista a la que le queda mucho por hacer. Y yo no soy más que un hombre que ha tenido la suerte de aprender y trabajar durante muchos años con muchas feministas. Un hombre consciente de que nos queda tanto por hacer que no podemos permitirnos retroceder ni un solo milímetro. [Aplausos].

Por eso hoy le pido, señor Mañueco, hoy le pido, hoy le suplico que no mercadee con la igualdad y con los derechos de las mujeres; que no dilapide todo lo que hemos conseguido; que no dilapide el Pacto de Estado contra la Violencia de Género. Le pido que tramite de forma inmediata el proyecto... el anteproyecto de ley autonómica de atención integral a las víctimas de violencia de género que estaba pendiente en Castilla y León, señor Mañueco, se lo pido. [Aplausos]. No puede... no puede hacernos retroceder. Y no puede hacernos trampas, porque usted sabe que no tramitar esa ley que ya estaba acordada es un retroceso. Es un proyecto elaborado desde el consenso, es una ley que cuenta con el apoyo del diálogo social y de numerosos colectivos, es una ley de todos y de todas. No podemos permitir que la extrema derecha se imponga a los derechos de las mujeres, señor Mañueco, no podemos. [Aplausos].

Y, fíjese, también en lo que respecta a la memoria histórica, en Castilla y León llegamos a cierto consenso. Es que acordamos una normativa, que era limitada, claro, pero que sacó de la confrontación buena parte del debate. Eso fue antes de que usted llegara, por supuesto, y antes de la llegada de Vox. Este Parlamento logró un importante acuerdo para desarrollar una normativa específica en Castilla y León y para poner en marcha el Consejo Asesor de Memoria Histórica. Este Parlamento ha vivido un homenaje y reconocimiento a las víctimas de la Guerra Civil y de la dictadura franquista en la figura de Mercedes Abril, que luchó durante décadas para darle una digna sepultura a su padre. Y se trata de eso, solo de eso, justamente de eso, de reparación, de verdad, de memoria democrática.

Mire, señor Mañueco, esto es una cita literal: "Una democracia no se puede permitir tener muertos en las cunetas desde hace ochenta años". [Aplausos]. No es mía. Esto es lo que le decía a esta Cámara el anterior vicepresidente de la Junta de Castilla y León del Partido Popular. ¡No puede traicionar la memoria, no puede traicionar el legado del propio Partido Popular, señor Mañueco!

Fíjense, tres años después usted se presenta aquí sin haber cumplido el Pacto de Gobierno con Ciudadanos. Es que no ha cumplido ni una línea. No ha cumplido tampoco el Pacto por la Reconstrucción al que llegamos todas las fuerzas políticas, no ha cumplido los acuerdos con el diálogo social ni los que firmó con los empleados públicos como el de las 35 horas. Por cierto, creo que esta mañana ni una sola mención a los empleados públicos, ni una sola mención, con lo importantes que han sido en esta pandemia y para sostener el estado de bienestar. A ver si va a resultar que va a tener palabra ahora, que va a empezar a tener palabra cumpliendo el acuerdo con la extrema derecha. Mire, es que es la primera vez que veo en mi mayor crítica hacia usted su mayor virtud. Le animo, señor Mañueco, a que sea usted mismo, solo eso, que incumpla el pacto con Vox. Solo tiene que hacer lo mismo de siempre. [Aplausos].

Aunque lamentablemente... aunque lamentablemente espero todo lo contrario; lo terrible es que usted, que ha incumplido todos los acuerdos a los que ha llegado con todo el mundo, quizá empiece a cumplir su palabra con el pacto más infame que haya firmado nunca. Y a pesar de ello, o precisamente por ello, el Grupo Parlamentario Socialista seguirá trayendo propuestas siempre.

Ya le anuncio aquí que, además del plan de choque para hacer frente a las consecuencias de la guerra de Ucrania, que ya les he relatado, presentaremos en esta Cámara iniciativas para garantizar la implantación de la educación de 0 a 3 años gratuita -y pública, que se le olvida, y pública- [aplausos]; la puesta en marcha de una red de centros comarcales de Formación Profesional; el incremento de la financiación de las universidades públicas; la creación otra vez de una comisión de investigación sobre lo sucedido en las residencias durante la pandemia -la convocatoria precipitada de elecciones disolvió también esta Comisión, que no acabó sus trabajos-, y que es indispensable para saber qué pasó y cambiar el modelo de atención para proteger por fin de forma adecuada a nuestros mayores.

Vamos a traer iniciativas, sí, para suprimir la administración paralela, esos chiringuitos que les gustan tanto y que en tres años no tuvieron tiempo -¿verdad, señor Igea?- de suprimir; la puesta en marcha de bonificaciones fiscales para luchar contra la despoblación; medidas contra la exclusión financiera; el refuerzo de la inversión en sanidad y la reapertura -sí, de nuevo- de toda la red de Atención Primaria; la gratuidad de los libros de texto y el material escolar; el cambio en el modelo de atención residencial y el aumento de las plazas públicas; el impulso de una ley para hacer frente al reto demográfico para impulsar la cohesión territorial y para luchar contra la despoblación, para avanzar en la descentralización económica y administrativa de nuestra Comunidad y reducir los desequilibrios; para luchar contra el cambio climático y defender la Agenda 2030, en contra de lo que piensan sus socios.

Y los fondos europeos. Señoras y señores procuradores, no podemos perder más tiempo: somos la única Comunidad autónoma que tiene paralizada la gestión de los fondos europeos, seguramente la única Comunidad autónoma que no puede permitírselo. Porque, sin una gestión adecuada, eficaz y ambiciosa de estos fondos, Castilla y León puede perder el último tren para hacer frente al reto demográfico, para revertir la sangría, los desequilibrios territoriales, para cambiar el modelo económico y productivo, para retener el talento joven, que se ve obligado a emigrar desde hace generaciones. Ya sabemos que estamos en tiempos de enormes dificultades, pero también podemos aprovechar la llegada de estos fondos europeos por parte del Gobierno y de Europa.

Los proyectos estratégicos para la recuperación y la transformación económica parece que han sido diseñados para nosotros: vehículo eléctrico, salud de vanguardia, energías renovables e hidrógeno, cadena agroalimentaria, economía de la lengua, economía circular, la economía de los cuidados... En cada uno de esos campos, Castilla y León puede y debe ser protagonista. Y, sin embargo, llevamos meses y meses viendo pasar el tiempo sin ambición, sin transparencia. Y el futuro de nuestra tierra para las próximas décadas depende de hacer esto bien. No hagan que tengamos que arrepentirnos dentro de unos años.

Señoras y señores procuradores, hoy, de este Parlamento, saldrá elegido el presidente de Castilla y León. Señor Mañueco, usted no será mi enemigo, ningún parlamentario de esta Cámara lo será. A pesar de todo lo que hemos visto estos años, yo sigo creyendo en la política, sigo creyendo en el servicio público, en el interés general. Sigo pensando que la política es un noble arte que debe buscar el acuerdo entre los que pensamos diferente. Sigo pensando que en la política no hay enemigos, quizá adversarios, que compartimos más cosas de las que nos separan. Y, sin embargo, sí combato ideas, con todas mis fuerzas. No creo que todos seamos iguales, en ningún partido, y defiendo con convicción los ideales en los que creo. Y creo en la igualdad, en la solidaridad y en la justicia social. Creo que la libertad individual solo está garantizada si hay igualdad de oportunidades. Y me declaro feminista. Sí, feminista. [Aplausos].

Por eso, por eso, sí combatiré a los que no creen en la igualdad de mujeres y hombres, a quienes atacan a las minorías, a quienes creen que hay refugiados de primera y de segunda, a quienes quieren volver a meter en el armario a los que tanto han luchado por los derechos de los colectivos LGTBI.

Y, por eso, me rebelo hoy contra la equidistancia y contra la indiferencia. Ya escribió Hannah Arendt que el mal, en su encarnación más terrible, se banalizaba. Hoy, de forma impune, vemos en España cómo, en horario de máxima audiencia, se compara en Guernica a los que bombardeaban con los que eran bombardeados. Esa es la deshumanización del adversario, las que le hablaba al inicio de mi intervención: derrotar al que piensa diferente lo justifica todo. Y no es verdad.

Así que no, hoy me niego a blanquear lo que está haciendo el Partido Popular, y consintiendo: que Castilla y León inicie una de sus páginas más negras.

Pero la esperanza sigue viva. Hemos superado enormes dificultades...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señor Tudanca, tiene que ir terminando.


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

(Termino ya, señor presidente). ... La esperanza sigue viva, hemos superado enormes dificultades y superaremos esta también. Esta tierra volverá a ser un lugar de oportunidades, volverá a tener futuro, volverá a ser un ejemplo de diálogo y acuerdos. Esta tierra, a la que hoy muchos miran con temor, será también la que devuelva el aliento y la esperanza de que la rabia se convierta en rebeldía. Así que, en Castilla y León, cuando parece todo perdido, como decía Miguel Hernández en su Canción última: dejadnos la esperanza. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Tudanca. Para contestar, tiene la palabra el candidato, el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Muy buenas tardes. Gracias, señor presidente. Señor Tudanca, nos ha sorprendido: está alcanzando usted las más altas cotas de la moderación, la tolerancia, la cortesía parlamentaria y la convivencia democrática. Solo una frustración galopante, personal y política podría haberle hecho caer a usted en su discurso, un discurso sin altura de miras.

Tenía un reto importante esta tarde, encontrar adjetivos para llevar más lejos su escalada de descalificaciones que a lo largo de los tres últimos años nos ha destinado. Un reto, la verdad, difícil de superar; y ha triunfado, señor Tudanca. En todo lo demás ha sufrido una derrota, pero en eso de los insultos ha triunfado de verdad. Enhorabuena, porque, hasta que no suba al estrado el señor Fernández, está usted en la élite de la descalificación y en lo más granado del insulto. [Aplausos].

Por desgracia para usted, señor Tudanca, no es eso lo que quieren las personas de Castilla y León. Mire, su estilo, su proyecto, vacío de contenido, basado en el enfrentamiento, no convence en Castilla y León. En la noche electoral usted mismo lo reconocía, cuando le tentó esa idea de dimitir, usted lo dijo: otros vendrán y harán que el cambio llegue a esta tierra.

Precisamente, el cambio que usted habla, el que quiere de verdad la Comunidad, el proyecto de transformación y de modernización que quiere esta tierra es el que representa mi candidatura. De lo que no se ha enterado, señor Tudanca, es que la mayoría piensa que usted representa un cambio, sí, pero un cambio a peor. Acéptelo porque es así, es un hecho: usted lo que representa es un cambio a peor. [Aplausos].

Señor Tudanca... señor Tudanca, no deja de sorprenderme lo mucho que le cuesta a usted aceptar los resultados de la democracia. Para usted la democracia solo vale cuando le permite al Partido Socialista gobernar, y no vale en el resto de los casos. Lo que usted ha oído de mi boca esta mañana es lo que ha salido de una mayoría de las urnas el trece de febrero. Esa es la realidad. Las personas de Castilla y León con su voto decidieron eso el trece de febrero; en libertad, en una jornada tranquila, de participación democrática, para elegir a los representantes en las instituciones de nuestra Comunidad. Unas instituciones, por cierto, que merecen un respeto, porque ¿qué es un Parlamento? Parece mentira que tenga que hacerme yo esta pregunta. ¿Qué es un Parlamento? Un Parlamento... un Parlamento es un sitio al que se viene a hablar con aquellos con los que no estamos de acuerdo, o con los que estamos en desacuerdo, a... a confrontar ideas, a mostrar niveles de conocimiento, de trabajo y de respeto por las gentes a las que representamos.

Mire, solo en los regímenes autoritarios los parlamentos sirven para coincidir en todo, para reflejar un pensamiento único. Quien no entiende esto, quien empieza por negar el saludo al que tiene otra forma de pensar, ha suspendido en primero de democracia... [aplausos] ... han suspendido en primero de democracia, y no nos pueden dar lecciones a nadie. Ustedes no pueden dar lecciones a nadie. ¿Lo han entendido? A nadie, señor Tudanca.

Usted... [aplausos] ... señor Tudanca, usted, rasgándose las vestiduras sanchistas, decía que había otro camino -le hemos escuchado aquí-, había otro camino, y lo dice usted que hace tan solo unos meses nos obligó a toda Castilla y León a atravesar por un lodazal.

Mire, como ya le he dicho muchas veces: usted es sobre todo un político dócil y sumiso al interés de Sánchez. Cumpliendo las órdenes de Sánchez usted embarcó a Castilla y León en una vergonzosa moción de censura apoyada en tránsfugas. ¿Quién puede fiarse de usted, señor Tudanca? [Aplausos]. Ya ha demostrado que la estabilidad de Castilla y León no le importa nada de nada. Solo le importa la voz de su amo. Usted no ha querido dialogar. Se ha tachado a sí mismo como portavoz de los que votaron socialismo en febrero. Se ha autoexcluido de aportar algo para las personas de esta tierra. Ha preferido quedarse en la grada chillando; chillando como un aficionado exaltado, en vez de participar de forma responsable en el terreno de juego político, porque nunca, nunca tuvo el más mínimo interés de aportar ideas a Castilla y León. Ya sabemos cómo son sus ofertas: son de postureo, son ofertas que nunca son reales ni sinceras. A usted no le interesa garantizar la estabilidad de esta tierra. Usted lo que quiere es romper la estabilidad de Castilla y León, alimentar una confusión donde no sea posible construir nada.

Mire, señor Tudanca, su Gobierno, su comportamiento desde la moción de censura le inhabilita para dar lecciones políticas, y mucho menos lecciones morales a nadie. No, señor Tudanca, ni de usted ni del señor Sánchez aceptamos lecciones, sermones, imposiciones ni inquisiciones. [Aplausos].

Habla usted de pactos, y Sánchez también habla de pactos. Oiga, aquí no hay pactos con separatistas que consideran inferiores a los niños que hablan castellano. Aquí no hay pactos con los que organizan homenajes para recibir como héroes a los terroristas asesinos de ETA. [Aplausos]. Aquí no hay pactos con los golpistas que cuestionan la democracia de España. Aquí no hay pactos con los que alientan la violencia en las calles o con los que aplauden la ocupación de las viviendas. Y por eso lo suyo, señor Tudanca, y lo del señor Sánchez, es un ejercicio de hipocresía, de cinismo político en grado sumo. Aquí defendemos principios en los que cree la inmensa mayoría de las personas de Castilla y León.

Se los voy a recordar: la unidad de España, la igualdad de todos los españoles...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Por favor, guarden...


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

... la defensa del Estatuto y de la Constitución del setenta y ocho...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señor... señor Fernández Mañueco, señor Mañueco. Por favor, guarden silencio. [Murmullos].


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

... la defensa del Estatuto, de la Constitución del setenta y ocho y la aplicación de la ley. ¿Recuerda, señor Tudanca? Porque estos son los valores que yo defendí en el año dos mil diecinueve, los mismos; los mismos defiendo hoy aquí, porque la coherencia siempre es importante, pero en política mucho más. Hoy puedo venir aquí a defender el mandato de los castellanos y leoneses con un proyecto reconocible y previsible, porque yo ofrezco certidumbre y seguridad. Yo sigo en mi sitio, el Partido Popular sigue en su sitio. Es este Partido Socialista el que ya no se reconoce a sí mismo. [Aplausos].

Señor Tudanca, frente a sus intrigas de estos meses yo me presento en estas Cortes con un Acuerdo de Gobierno que está a la vista de todos, accesible para los miembros de esta Cámara y de toda la sociedad de Castilla y León. Un acuerdo transparente, claro, con luz y taquígrafos. Constituye un Programa de Gobierno que he desgranado en la mañana de hoy solicitando la confianza de esta Cámara; un acuerdo que nace de la responsabilidad, del respeto y también de la lealtad a esta tierra, a la Constitución y al Estatuto, que son nuestras normas máximas.

Aunque usted, señor Tudanca, nunca lo vaya a reconocer, este es un pacto que expresa el sentir mayoritario de las personas de Castilla y León, un pacto del que estoy orgulloso, y miles y miles de personas de esta Comunidad también lo están, y serán muchos más cuando la lean, dejando a un lado ideas preconcebidas y prejuicios. Cualquiera que lea objetivamente el pacto entenderá que se trata de un punto de equilibrio aceptado y asumido por las personas.

Mire, señor Tudanca, una de las columnas principales de este pacto, de este acuerdo que hemos suscrito con Vox es el principio de igualdad. Por su actitud, está claro que usted cree que la igualdad solo puede defenderse con ideas preconcebidas y con prejuicios. Yo creo que la igualdad se debe defender con hechos y con valores arraigados.

Ustedes se quejan muchas veces -y además lo hacen con vehemencia y con muchas alharacas- de los 35 años del Gobierno del Partido Popular. Yo estoy orgulloso de esos 35 años de Gobierno del Partido Popular; o, mejor dicho, estoy muy orgulloso de esos 35 años. Si las personas de Castilla y León nos dan su respaldo, por algo será. Entre otras cosas, porque tenemos una trayectoria política, tenemos una trayectoria política, somos un ejemplo en defensa de la igualdad, mientras usted solo tiene palabrería sobreactuada y ofendida.

Mire, hay un dato que usted, que nadie debe olvidar jamás: que miles y miles de mujeres han votado para que ustedes sigan en la Oposición y nosotros seamos Gobierno. [Aplausos]. Porque ustedes pueden cerrar los ojos a ese hecho, pero esa es así. Hoy le exijo... hoy le exijo que respeten ustedes a esos miles y miles de mujeres, que son adultas, que son mayores de edad, que saben lo que quieren, que no necesitan tutelas, y menos de una izquierda fracasada y trasnochada, y que no son de peor condición que absolutamente nadie; son iguales, orgullosamente iguales. Pero es que a ustedes se les ve el plumero: dicen defender un valor o a un colectivo, pero a la hora de la verdad solo defienden a los suyos, a sus propias ideas, a su propia posibilidad de llegar al poder o de mantenerse en él. Pues se lo digo alto y claro: las mujeres de Castilla y León le van a dar a usted y al señor Sánchez una lección de independencia, de autosuficiencia, de no dejarse manipular ni adoctrinar por ustedes. [Aplausos]. Ellas lo van a ver: un Gobierno que trabaja por sus intereses, por una igualdad efectiva. Y tendrán ustedes que pedir disculpas por todas las barbaridades que han dicho.

Lo he señalado en muchos foros y lo repito hoy aquí: yo no voy a dar ni un paso atrás en la lucha contra la violencia, ni un paso atrás en la garantía de protección de cualquier mujer contra una agresión machista, ni un paso atrás en la plena vigencia de la Ley de Violencia de Género, ni un paso atrás en la violencia contra nuestros menores, mayores, discapacitados, en el entorno familiar. También hay que combatir la violencia en el ámbito familiar. Y compromiso, sí, con una nueva ley de violencia intrafamiliar, que -como he explicado reiterar... reiteradamente- supondrá ampliar, elevar a rango de ley el vigente Plan de Prevención de Violencia en el Ámbito Familiar; y que solo va a servir... solo servirá para mejorar la atención a todas las víctimas: mujeres, menores, mayores, personas con discapacidad, personas vulnerables. ¿Qué problema puede tener usted o nadie con esto? Dejen de generar confusión y, sobre todo, dejen de mentir. ¿Qué problema hay en intentar prevenir que un hijo agreda física o psicológicamente a su padre?

Algo similar ocurre en relación con las personas inmigrantes. El pacto que hemos suscrito considera la inmigración legal y ordenada como una fuente de oportunidades. Pero es que, si no tuviéramos esos problemas de despoblación en Castilla y León... No, nuestra tierra es una tierra abierta, una tierra de acogida, como estamos demostrándole al pueblo de Ucrania. ¿Acaso están ustedes en contra del principio de legalidad, del Estado de Derecho? Porque es lo único que... que apunta el pacto en este tema, que promoveremos una inmigración legal y ordenada, como defiende... o, mejor dicho, como tiene que hacer cumplir el Gobierno de España: luchar contra las mafias, defender nuestras fronteras y también ayudar a los países en origen, para que todas aquellas personas que, cumpliendo las normas vigentes, quieran vivir, trabajar, contribuir al futuro de Castilla y León, integrarse en nuestra sociedad, en nuestra economía y en nuestra cultura, esa integración. Y vamos a trabajar por la integración (como dice, por cierto, nada más y nada menos que el Estatuto de Autonomía de Castilla y León).

Oiga, yo creo en el diálogo social, y voy a trabajar con el máximo empeño y con la máxima voluntad de acuerdo para que podamos llegar a esos acuerdos con el diálogo social. Recuerda usted la legislatura pasada; es curioso, en las peores circunstancias, en menos tiempo conseguimos el mayor número posible de acuerdos respecto el diálogo social. Mire, respecto a este asunto, yo... como dice el refrán, "cuando uno no quiere, dos no barajan". Lo que sí le puedo decir es que la Junta de Castilla y León está en disposición de dar lo mejor de sí para llegar a otros acuerdos.

Respecto del trabajo del Gobierno en funciones, lo que tengo que decir es que no es verdad lo que dice usted. Ha habido un Gobierno en plenitud de funciones. Mire, desde el veinte de diciembre, hemos aprobado más de trescientos expedientes y se han movilizado 2.500 millones de euros -que se dice bien y pronto-, aproximadamente, el 25 % del presupuesto de la Junta de Castilla y León. Hemos aprobado iniciativas tan importantes como el Plan Director de Promoción Industrial, el Plan Estratégico de Igualdad, el Decreto de Conciertos Sociales... Bueno, yo entiendo que esto a ustedes no les importa mucho. Hemos incrementado el 6 % la cuantía de las prestaciones de dependencia, que benefician a 77.000 personas; hemos coordinado con el Gobierno de España la labor que tenemos que hacer para ayudar a los refugiados ucranianos; ayudas complementarias para los ganaderos en la política agraria común; hemos convocado 1.200 plazas de maestros; ayudas a las universidades públicas para que contraten investigadores. En fin, colaboración con las entidades locales, dotación de infraestructuras... Podría seguir hablando.

Si usted analiza desde el día que se convoca las elecciones hasta que va a estar en plenitud el Gobierno, eche cuentas, estamos hablando de doce, catorce días; teniendo en cuenta que entre medias han estado las Navidades y la Semana Santa, me parece que estamos dentro de algo absolutamente homologable.

Respecto de la memoria histórica, le tengo que decir algo especialmente importante: la normativa en materia de la concordia lo que buscamos es un elemento de reconciliación de verdad, evitando la utilización de la historia para dividir a los españoles. Estamos hablando de un tema muy sensible en el plano personal y muy delicado en el plano histórico, y por eso hay que tratarlo con mucho cuidado. Más allá de las obligaciones legales, hay una elemental un... humanidad que nos lleva, desde luego, a dar todo el apoyo a aquellas personas, a aquellos dramas personales causados por la guerra civil y la posterior dictadura. Así lo hemos hecho, y así lo seguiremos haciendo. En ningún caso se va a dejar de ayudar a las personas que quieran recuperar los restos de sus seres queridos; pero seguiremos rechazando que esto se quiera utilizar como instrumento de confrontación política o para reescribir la historia desde una única visión. Hay que superar esta situación; y nuestro objetivo es ese.

Mire, respecto de otras cuestiones, vamos a garantizar, después de esos 35 años de Gobierno en nuestra Comunidad, en Castilla y León, vamos a seguir garantizando la educación y la sanidad. Es algo que me parece importante. Pero creo que hay algo que hay que tener en cuenta en estos momentos. Mire, yo represento la estabilidad en Castilla y León; y usted representa la incertidumbre política, la búsqueda de tránsfugas y la añoranza de un gobierno Frankenstein en Castilla y León. No era eso lo que querían las personas de esta tierra... [aplausos] ... en consecuencia, han votado, señor Tudanca; y usted lo tiene que asumir.

También tiene que asumir que yo represento hoy la defensa de los intereses de Castilla y León, mientras usted solo representa la defensa de los intereses, el sometimiento a Sánchez. Siempre ha sido así. Siempre ha defendido las políticas de Sánchez -me refiero-, incluso cuando atentaban más claramente contra nuestros sectores estratégicos y contra nuestros intereses. Podría hablar del campo, del azúcar, de la remolacha, la carne, la automoción, las minas, las térmicas... hasta Navacerrada, señor Tudanca. O cuando nos discriminan sin ningún pudor en el reparto de fondos o en los presupuestos generales del Estado. No era eso lo que querían las personas de Castilla y León, y, en consecuencia, han votado; y usted lo tiene que asumir, señor Tudanca.

Yo hoy represento aquí un proyecto útil para las personas, mientras que usted simplemente representa un modelo fracasado, señor Tudanca, y eso que emergía reforzado después de su fracasada moción de censura. Usted perdió la moción, perdió el rumbo y también perdió el norte. Sí, así es, señor Tudanca.

Yo vengo aquí con el aval de los estudios e informes independientes que dice que, en Castilla y León, tanto en sanidad como educación, como en dependencia, como en servicios sociales, gestionamos muy bien en esta tierra. Usted viene aquí con palabras gruesas y con cualquier pancarta a la que agarrarse que crea que así desgasta a la Junta. No era eso lo que querían las personas de Castilla y León y, en consecuencia, han votado; y usted lo tiene que asumir, señor Tudanca.

Y sigo. Yo represento hoy políticas de crecimiento económico y generación de empleo, políticas de impuestos bajos; y usted encarna una política fiscal de asfixia a las personas, a las familias y a las empresas. Y eso solo conduce a una menor calidad de vida. [Aplausos]. Usted siempre quiere copiar los sablazos fiscales de Sánchez. No sé por qué, pero no era eso lo que querían las personas de Castilla y León y, en consecuencia, han votado; y usted, señor Tudanca, lo tiene que asumir.

Yo represento el diálogo, el acuerdo, la unión; usted, el enfrentamiento y la convulsión. Yo represento un proyecto de futuro para esta tierra; y usted alguien que quiso ser alternativa y que ha fracasado, señor Tudanca. Algún día usted lo tendrá que asumir: Castilla y León no quiere ser una muesca más en la cartuchera del señor Sánchez. [Aplausos].

Estoy orgulloso de las actuaciones que hemos impulsado estos últimos años para proteger a las personas de Castilla y León y para modernizar nuestra tierra; y también estoy muy orgulloso del programa que me propongo cumplir, con responsabilidad, con ilusión, de la mano del señor García-Gallardo, y también con el máximo esfuerzo y empeño, para ofrecer a las personas servicios públicos de primer nivel, mayor prioridad para nuestra sanidad pública, para que Castilla y León siga siendo la locomotora en educación de España, para proteger y apoyar a las familias y también apostar por la natalidad, para poner las cosas más fáciles a las pymes y a los autónomos, para reforzar y modernizar infraestructuras y servicios. La solución de nuestros problemas demográficos tiene que pasar por alinear todas las políticas: las de crecimiento económico, las de modernización de infraestructuras, las de garantía de los servicios públicos, para así poder afrontar el futuro.

Y por... para demostrar a quienes solo saben hablar mal de esta tierra que Castilla y León merece la pena y es atractiva. Que tenemos recursos, que somos una potencia en muchos sectores, y que también podemos crecer en otros muchos. Y por eso aquí viene más gente de la que se va, aunque a ustedes no les... no les guste, porque eso les descuadra... (sí, ya oigo, oigo) les descuadra los argumentarios de siempre.

Señor Tudanca, después de lo que sabemos de usted y de su intervención de hoy, dudo que haga una Oposición constructiva en los próximos años, una Oposición en positivo -como siempre nos promete, pero nunca cumple-, con propuestas e ideas, y que se siente a dialogar. Espero al menos tener un cauce de diálogo, al menos, para contar con usted en las reivindicaciones justas que hagamos al Gobierno de España en defensa de los intereses de Castilla y León.

Le voy a poner algunos ejemplos: fondos COVID, infraestructuras, trato adecuado a nuestro campo, a nuestros sectores estratégicos, y no discriminación frente a otras Comunidades Autónomas.

Voy concluyendo. Señor Tudanca, súmese a ese cambio imparable tantas veces ha demandado para Castilla y León, porque ese cambio está aquí, es real, es más grande que usted y que yo. Elija esta tierra, elija el lado correcto de la historia para Castilla y León, porque tiene que renegar de aquellos que quieren ningunearla. Póngase del lado correcto de la historia, porque es lo mínimo que merecemos las personas de Castilla y León. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Fernández Mañueco. Para un turno de réplica, tiene la palabra el señor Tudanca Fernández, por un tiempo de diez minutos.


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

Muchas gracias, señor presidente. Empezaba el señor Mañueco su réplica diciendo que no le he sorprendido (porque, sí, no recuerdo muy bien). Usted sí que no me ha sorprendido: llevamos aquí tres años y es capaz todavía de sacarme diez folios con la réplica escrita. [Aplausos]. Claro, esto de traer la réplica escrita quiere decir que usted ha venido a reprocharme que yo hable de cambio, cuando no he hablado de cambio en toda mi intervención, porque aquí lo que se ha producido es el mayor...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías, por favor.


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

... retroceso en términos históricos de la historia de Castilla y León. Eso es lo que están haciendo ustedes con la extrema derecha, señor Mañueco. [Aplausos].

Es que escuchándole uno se preguntaba... yo no sé qué va a decir luego el señor portavoz de Vox. Pero si usted ha ejercido hoy de portavoz de la extrema derecha. Es que lo que da verdadero pavor es que el Partido Popular en Castilla y León y en España es irreconocible. El problema no es que usted esté orgulloso de los 35 años de Gobiernos del PP aquí; el problema es que los que vinieron antes que usted aquí en el Partido Popular no se reconocen en el PP que usted ha hecho, no se reconocen. [Aplausos]. Es que... es que habla de modernización. Acaba de pactar con la extrema derecha el mayor recorte de libertades y de derechos de nuestra historia y habla de modernizar nuestra Comunidad, y habla...

Mire, señor Mañueco, se lo he dicho muchas veces: no intento darle lecciones éticas ni morales. La política no está para eso, el Parlamento no está para eso. Allá usted con su conciencia, allá usted. Ahora bien, que usted venga aquí a dar lecciones de parlamentarismo y que compare... que compare no saludar con pactar con la extrema derecha el fin de los derechos de las mujeres, de los trabajadores, del colectivo LGTBI... ¡hombre, por favor, pero cómo es posible! [Aplausos].

Es que ustedes... es que ustedes han dicho del Gobierno de España que es ilegítimo, que es ilegal, han llamado al presidente del Gobierno asesino. Pero que a mí no me tiene usted que decir que no dude de su legitimidad, que se lo he dicho: que no, que yo creo profundamente en la democracia y en el parlamentarismo, y en los acuerdos. Ahora, lo que he criticado siempre es que usted llegara a acuerdos con quienes dijeron que venían a cambiar y a regenerar habiendo perdido las elecciones, y ahora pacte, además, con la extrema derecha. Hombre, que sí, si yo ya sé cuáles han sido los resultados electorales. También los suyos: los dos peores resultados de la historia del Partido Popular en Castilla y León. Los dos peores. Los dos peores. [Aplausos].

Mire, impuestos, impuestos. Usted ha prometido una revolución fiscal -que en la misma frase, señor Mañueco, y revolución, me ha parecido fuerte-. Pero, mire, para hablarle de impuestos. Claro que nosotros queremos hablar de impuestos. Y claro que yo defiendo que subir o bajar impuestos no es de izquierdas o de derechas, depende a quién se los subas y depende a quién se los bajes. Nosotros queremos subir los impuestos a los que más tienen para darle más a quien más necesitan, y para tener un buen estado de bienestar.

¿Sabe usted que en Castilla y León 780.000 castellanos y leoneses no pagan ya IRPF? Y que, por tanto, cualquier bajada que usted haga no les va a beneficiar: los que más lo necesitan. Porque ustedes solo bajan impuestos a los que más tienen. Eso es lo que quieren hacer. [Aplausos].

Es que que den ustedes lecciones de revolución fiscal ahora que estamos hablando de crisis energética y de crisis de los combustibles. ¿Pero se acuerdan del centimazo sanitario? ¿Se acuerdan que ustedes subieron 5 céntimos la gasolina y que un Gobierno socialista lo ha bajado 20? ¿Se acuerdan? ¿Se acuerdan? [Aplausos]. Lo subieron ustedes, los combustibles, lo subieron ustedes, y votaron en contra de bajar el IVA de la energía. Es que ustedes han sido los que, cuando llegaron al poder en dos mil once, subieron el IRPF cinco veces, dos el impuesto de sociedades, dos el IVA, dos el IBI, mantuvieron el impuesto de patrimonio, crearon 12 nuevos impuestos. Que le pusieron un impuesto al sol, señor Mañueco. Que no nos dan lecciones a nosotros de política fiscal. No, no nos la dan.

Y luego, miren, fíjense, fíjense que yo no quería...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías, por favor.


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

... no quería hablar de esto en mi intervención, porque para empezar todavía no está nombrado el Gobierno, pero ya en su intervención hizo un amago, hizo un amago, y ya la ha rematado en la réplica, claro. Usted se ha puesto a hablar de víctimas del terrorismo, se ha puesto a intentar darnos lecciones. Bueno, a mí... me gustaría -que no se me olvide- que me dijera un solo insulto que yo le haya dedicado. Uno, solo uno, en todos estos años, no hoy, en todos estos años.

Mire, usted ha tenido la desfachatez de hablar de víctimas del terrorismo cuando va a nombrar consejero de Cultura al señor Santonja. [El orador muestra una imagen]. Imagínense... [aplausos] ... imagínense qué estarían diciendo en este país, qué estarían diciendo ustedes, qué estaría diciendo la extrema derecha si alguien que iba a mítines de Herri Batasuna en los años del plomo fuera nombrado consejero de esta Comunidad Autónoma, qué estarían diciendo. [Aplausos]. Ochenta víctimas, ochenta asesinatos de ETA el año que escribía un artículo defendiendo a un fundador de la banda terrorista, señor García-Gallardo. Eso es lo que ustedes son. Y usted viene aquí y nos habla de reconciliación, de reconciliación. Claro, ya se podrían haber apuntado ustedes antes, después de todas las cosas que hemos tenido que aguantar los socialistas, que fuimos, junto con muchos otros -también ustedes- quienes sufrimos los peores años en el País Vasco y quienes logramos que en este país hace más de diez años que una banda terrorista no asesina. Y estamos muy orgullosos. Pero, por favor... [aplausos] ... no vuelvan a utilizar el nombre de las víctimas del terrorismo, no se atrevan. Que aquí el único... el único en esta Cámara que ha llegado a acuerdos con Bildu es el señor Maroto, que sigue... sigue empadronado en Sotosalvo... [aplausos] ... veremos cuánto tiempo le dura, veremos cuánto tiempo, veremos cuánto tiempo.

Y, hombre, el señor Feijoo el otro día va y nos dice que el Partido Popular escribió la Constitución. Hombre, para empezar podría existir, pero es que no existía entonces el Partido Popular. Es que entonces era Alianza Popular, y 8 diputados de Alianza Popular votaron a favor, pero es que hubo 5 que votaron en contra y 3 se abstuvieron. Es que Alianza Popular, sus antecesores, hicieron campaña por la abstención en la Constitución. Así que no es suya. Afortunadamente es de todos los españoles. No, no, no es usted el que tiene... [aplausos] ... la exclusiva de la derecha constitucional.

Mire, usted habla de pactos sin prejuicios y sin complejos. Y tanto. Si usted no tiene complejos en venir a defender hoy un pacto con la extrema derecha. Bueno, habló de los independentistas. ¡Pero si en campaña electoral estaba llamando independentistas a Soria ¡Ya! y a la Unión del Pueblo Leonés! ¡Pero cómo corrieron luego a ver si le daba la Presidencia de la Cámara! Cómo corrían por los pasillos para ver si esos satánicos independentistas castellanos y leoneses les daban la independencia y les daban la Presidencia de la Cámara. ¿Pero de verdad es posible que usted sea capaz de decir esas cosas en esta Cámara?

Y mire, usted... usted no puede hoy venir a hacer como que no pasaba nada, como que no ha sucedido nada, como que esto es un acuerdo más, como que esto es únicamente un acuerdo de Gobierno que pasa sin pena ni gloria. No, no lo es. Usted no puede escudarse con lo que sucede en otros sitios para justificar un pacto con la extrema derecha porque lo que ha sucedido aquí no sucede en ningún otro sitio de España ni de Europa.

Usted ahora trata de envolverse en la bandera de la oposición al Gobierno de España -para variar-, olvidando, por ejemplo, que este Gobierno ha recibido ya 42 millones de euros para la restauración de las minas en León desde el mes de noviembre, y están sin ejecutar porque usted ha paralizado la actividad de este Gobierno. [Aplausos]. Usted no puede negar que ha recibido en fondos COVID nada más y nada menos que 1.584 millones de euros y que tiene sin utilizar, ha dejado sin utilizar, 245 millones de euros de esos fondos. Usted no puede negar que ha recibido ya fondos europeos por encima de los 800 millones de euros, y que no sabemos dónde están, que si uno repasa todas las convocatorias del Boletín Oficial de las Cortes de Castilla y León en la plataforma del plan de recuperación no llegan a 250 millones de euros las convocatorias que han sacado, y ustedes tienen la jeta de decir que el dinero de los fondos europeos no llega a los bolsillos de las familias. No, lo tienen ustedes porque han estado pactando el poder con la extrema derecha... [Aplausos]. Eso es lo que ha sucedido en esta Comunidad Autónoma.

Así que no, señor Mañueco, no, no, no: usted no puede hacer como que no pasa nada, usted no puede justificar este pacto como uno más. Señor Mañueco, se lo he dicho antes: nos vamos a oponer con todas nuestras fuerzas a todos los intentos que ustedes hagan con la extrema derecha de blanquear el acuerdo, de limitar los derechos de los castellanos y los leoneses.

Vamos a defender con uñas y dientes el diálogo social, con los que sí ha podido firmar el mayor número de acuerdos de la historia. Ya solo faltaba que los hubiera cumplido ¿verdad?, porque los acuerdos se pueden firmar pero si uno no les cumple es que no cree en el diálogo social ni defiende a los trabajadores y trabajadoras.

Y usted ha tenido la desfachatez de hablar de concordia. Mire, es que no, es que me niego a que ustedes pongan en el mismo lugar a los golpistas y a los republicanos... [aplausos] ... a los que fueron masacrados después de la Guerra Civil sin que hubiera guerra, solo por acabar con el que pensaba diferente, los que todavía no han podido enterrar de forma digna a sus familiares, los que no le han podido poner su nombre en una lápida a su familia. No les pueden poner en el mismo lugar que a los asesinos. Y eso no es no creer en la concordia; no, eso es creer en la verdad y en la reparación, eso es creer en la memoria histórica, en la que su partido, en la que el Gobierno del Partido Popular de esta tierra antes de que usted llegara también creía. Así que (termino ya, señor presidente) ya me gustaría... ya me gustaría que el Partido Popular que queda fuera el que hubo.

Somos los mejores en esta Comunidad Autónoma. Tenemos la mejor Comunidad Autónoma, pero no podemos ser los mejores: no podemos tener los mejores servicios públicos, no podemos tener el mejor empleo, la mejor industria, si llevamos siendo 30 años los que más población perdemos, si todos se quieren marchar de aquí porque no hay oportunidades; y eso es responsabilidad suya.

Hay otra Castilla y León posible, y yo no me voy a rendir. Haga lo que haga, digan lo que digan, no tendrán la suerte de ver a un socialista rindiéndose en la batalla por Castilla y León y contra la extrema derecha, no van a tener esa suerte, señor Mañueco. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Tudanca Fernández. Para un turno de dúplica, tiene la palabra el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Muchas gracias, señor presidente y miembros de la Mesa. "Hay que saber perdonar, hay que reconocer a las víctimas y perdonar a los verdugos". Eso lo dijo el señor Briones, que está sentado justo detrás de usted. [Aplausos]. ¡No puede venir nadie a darnos lecciones de eso! ¡La vergüenza es que siga ahí sentado todavía el señor Briones! No nos va a dar lecciones. No. Ni usted, ni usted, señor Briones.

Y, hombre, que diga usted que no ha abusado del insulto, de la descalificación ni hoy ni en estos tres años es, cuando menos, chocante. Alguna vez le he dicho en esta Cámara que usted tenía que madurar, señor Tudanca. Hoy creo que ha madurado. Es más, tengo la sensación de que está usted un poco pasado, diría que superado por la tarea a la que se le encomendó y que sabe que no está a la altura. Usted ya lo dio a entender la noche del trece de febrero.

Le propongo una ocupación para usted, que se le da fenomenal: negar la mayoría que eligen las urnas de Castilla y León. ¿Cuál es su función? Pues uno acude al proceso electoral; cuando este se resuelve, ataca a la mayoría parlamentaria que surge de las urnas. Eso es lo que hizo usted en el año dos mil diecinueve: criticar la mayoría parlamentaria en esta Cámara, con una pataleta infantil que todavía le dura. [Murmullos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías, señorías, por favor...


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Es lo que hizo usted en el año... Pataleta infantil que todavía le dura. Es lo que hizo usted también el año pasado, en el dos mil veintiuno: atacar la mayoría asentada en el Gobierno de la Comunidad con una moción de censura que tenía el transfuguismo de aliado. Y es lo que hace nuevamente hoy, señor Tudanca, negar la nueva mayoría surgida de las últimas elecciones. Y es lo que va a seguir haciendo porque es lo que mejor se le da: negar que alguien que no sea usted pueda gobernar.

Se equivoca, señor Tudanca. Supongo que esto tiene su complicación y que, desde luego, hace falta una maestría que exige, por un lado, mucho cinismo, también pocos escrúpulos y, por qué no decirlo, un talento innato. Se autoconvence a sí mismo, pensando que es la mayoría la que está equivocada y que solo usted tiene razón, señor Tudanca.

Presumió usted muchas veces de ser la Oposición útil. Lo dijo aquí, en esta Cámara, en muchas ocasiones. Y la ciudadanía de Castilla y León le ha recompensado: quieren que siga ahí, en la Oposición. [Aplausos].

Hablaba también, señor Tudanca, de que usted tiene la sensación de que Castilla y León ha perdido un tren, cuando, en realidad, el único que ha perdido el tren ha sido usted. Porque usted, señor Tudanca, carece de credibilidad. Fíjese, mientras el Gobierno estaba preocupado por buscar profesionales sanitarios, por buscar material, mientras la Junta hacía ese trabajo, usted se dedicaba a buscar otro tipo de cosas, buscaba tránsfugas, señor Tudanca: usted traicionó a Castilla y León, usted pasó de firmar el Pacto para la Recuperación a embarcarse en una nauseabunde... nauseabunda búsqueda de tránsfugas, hasta debajo de las piedras (y mejor ahorrarnos los sórdidos detalles).

Las elecciones se han producido por usted. Bueno, y algún otro. Porque su prioridad en la pasada legislatura nunca fueron los servicios públicos, ni la igualdad, ni la recuperación económica. No, nada de eso le importaba. ¿Cuál era su prioridad? La búsqueda del poder a cualquier precio, mediante intrigas palaciegas y sin preocuparse en absoluto de Castilla y León. Y volvió a demostrarlo usted cuando nos reunimos después de las elecciones. Acuérdese, usted y yo, y algunos compañeros suyos y míos, usted fue el representante del Partido Socialista en la primera reunión a la que yo acudí. ¿Lo recuerda usted, se acordará? ¿Cuál fue su actitud en esa reunión, señor Tudanca? Yo lo voy a explicar hoy aquí, esta tarde.

Le planteé crear un grupo de trabajo para hablar de un programa de legislatura; lo rechazó. Propuse un esquema de colaboración con el Gobierno de España en la lucha contra la despoblación; lo rechazó. También sugerí la posibilidad de elaborar un calendario, comprensivo, para las infraestructuras pendientes que el Gobierno de España tiene que ejecutar en nuestra Comunidad Autónoma; también lo rechazó, estaba presionado por Sánchez. Hablé de la defensa del medio rural; y su contestación, en ese caso, fue el silencio. Saqué el tema de los acuerdos esenciales para la Comunidad; de nuevo, me encontré con el silencio. Saqué el tema del diálogo social -usted, el paladín, el defensor del diálogo social-; ahí, simplemente evasivas. Planteé la necesidad de apostar por la estabilidad de tener un gobierno en Castilla y León; y, otra vez, evasivas.

Eso es lo que ocurrió, señor Tudanca. Es más, dijo que usted no era el culpable de la inestabilidad. Y yo digo que sí, que era el culpable de la inestabilidad. Usted y algún otro, no vamos a dejarle solo a usted. Y, después de quince minutos de reunión, de chocar contra ese muro de negativas y subterfugios, el remate de la fiesta es el insulto y la falta de respeto por su parte. Ante esa situación, di por terminada la reunión.

Señor Tudanca, a usted se le llenó la boca con la palabra corrupción. A usted le encantan los procedimientos inquisitoriales, los juicios paralelos, erigirse en juez y parte, y, si le dejaran, también sería verdugo. Deje trabajar a la Justicia, señor Tudanca. Lleva usted cinco años acusando con su dedo, cebando la injusta "pena del telediario". ¿Y qué hay? Nada de nada, señor Tudanca. Usted contra... usted cabalga en la contradicción. Fíjese, reclama justicia para los suyos, pero condena a los demás con ligereza. Respete la presunción de inocencia, respete los procedimientos judiciales, respete a los tribunales de justicia, señor Tudanca, es lo único que le pido, porque usted, cabalgando en esa contradicción, alguna vez le va a acabar derribando.

Mire, señor Tudanca, ¿sabe lo que nos diferencia a usted y a mí? Que es a quién servimos. Yo sirvo a Castilla y León; usted, a Sánchez. Y nos diferencia también lo que hemos demostrado. [Aplausos]. Y nos diferencia también lo que hemos demostrado. Y la confianza que nos han otorgado las personas de Castilla y León: yo, a gobernar; usted, sencillamente a esperar a que otros vengan a sustituirle. Yo no aspiro a encontrar en usted en una Oposición constructiva, lo ha demostrado esta tarde. Usted no es más que el representante de Sánchez en Castilla y León.

Bien, se vio en los debates electorales. ¿Lo recuerda usted, señor Tudanca, cuando yo le hablaba del coste de la luz, el precio de la gasolina, la cesta de la compra? Preocupaban y mucho a las personas de Castilla y León, y usted se revolvía y decía que no, que eso no interesaba, que eso no era hablar de las preocupaciones de Castilla y León. Está usted muy alejado de las necesidades de la gente y del sentir de esta tierra. ¿Sería capaz de repetirlo hoy aquí, con el coste de la vida disparado, mientras la economía nos machaca a todos?

Por eso le reitero que ojalá usted esté del lado de Castilla y León, no del mío ni del de nuestro Gobierno, del lado de Castilla y León, para aquellas reivindicaciones justas ante este Gobierno o cualquier otro Gobierno que venga. Que sienta usted, por favor, señor Tudanca, los colores de Castilla y León, porque hasta ahora lo único que ha demostrado es que siente los colores de Sánchez.

Mire, yo voy a trabajar por Castilla y León, y creo que la economía es algo muy importante: dinamizar la economía, apoyar los emprendedores, a nuestros autónomos, a los trabajadores, claro que sí, ¿quién ha dicho nada contra los trabajadores? Todo lo contrario. Hemos hablado de esforzarnos, de apoyar a las empresas, de apoyar a los trabajadores, a darles más y mejor formación, de ayudar a los agricultores y ganaderos y al medio rural, porque están viviendo una de las etapas más complicadas de su vida. También apostar por la industria, la de la automoción, la de la agroalimentación y otras tan importantes como la farmacéutica o la ciberseguridad. Apostar a las... por las entidades locales, apostar por aquellas personas que quieren innovar en nuestra tierra, al lado del tejido social y del tercer sector.

Mire, señor Tudanca, usted me habla de un plan anticrisis para afrontar su situación, con ayudas que algunas ya se pusieron en marcha y otras no aplica ninguna Comunidad Autónoma, especialmente las gobernadas por el Partido Socialista. Fíjese, en el mes de noviembre, en los premios de CEOE Castilla y León, el diez de noviembre exactamente, ya advertí -y se me tildó de todo por su parte- que se... que había nubarrones que complicaban la recuperación, entre ellos la subida de la energía y de la inflación. Hasta el mes de marzo -casi seis meses- el Gobierno de España presentó un plan. ¿Y qué ha tenido que ocurrir para que el Gobierno de España haya tenido que actuar? Más subida de la luz, el combustible a precio de oro, más inflación, huelga de transportes, desabastecimiento en los supermercados, una guerra, y es un plan que simplemente pone parches, pero no adopta medidas estructurales. Ni racionalización de gastos ni también de rediseño de los fondos europeos, ni cumple con el compromiso... el compromiso...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Perdón, señor... señor Fernández Mañueco. Rogaría a los diputados y senadores que se encuentran en la sala guarden silencio, por favor.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Decía que ese plan no cumple el compromiso que asumió con los presidentes de las Comunidades Autónomas. La Declaración de La Palma lo dice muy claro, literal, se abre comillas: "Rebajas fiscales para amortiguar el impacto de los precios de la energía en los recibos que pagan familias y empresas". Han incumplido desde el Gobierno de España. Y hay que atajar la subida del precio de la energía y de la inflación. Hay que bajar los impuestos porque eso va a ayudar a las familias a llegar a fin de mes y a las empresas a cuadrar las cuentas y ganar competitividad. Así incentivaremos el consumo, tendrán liquidez las empresas, se reactivará la economía y el empleo.

¿Y qué es lo que pedimos? Un IVA superreducido del gas, de la electricidad y de los hidrocarburos, y si el Gobierno de España toma esta decisión no estamos hablando de una decisión que se asuma simplemente a las espaldas del presupuesto del Gobierno. No, no. Porque es que gran parte de la recaudación van a las Comunidades Autónomas. Solo en Castilla y León estamos hablando de unos 260 millones de euros, que van a estar mucho mejor en manos de las familias y de las empresas de Castilla y León y de toda España.

¿Y nosotros qué es lo que vamos a hacer? No nos quedamos cruzados de brazos: vamos a bajar el tramo autonómico del impuesto de la renta de las personas físicas; ya eliminamos el impuesto de sucesiones y donaciones entre cónyuges y de padres a hijos; y apostamos por tener la fiscalidad más baja de la historia.

Mire, también hemos anunciado esta mañana, o más... mejor dicho, hemos recordado qué es lo que... qué es lo que hicimos para luchar contra la pobreza energética -no lo voy a recordar, porque parece que usted no lo escuchó, aunque se lo podría recordar-, pero lo que está claro es que el Gobierno de Sánchez no sirve para reflotar España. Mire, en Castilla y León tenemos una política económica que funciona. El producto interior bruto y el empleo soportaron la pandemia mejor que la media de España -esto es un hecho, es un dato-, y ahora nuestro producto interior bruto ha crecido mejor, más que la media de España, y estamos tres puntos por encima de la media de nuestro país. Sus recetas son claras: paro y crisis; la nuestra: crecimiento y empleo.

Es posible -lo hemos demostrado-, hemos demostrado que bajando los impuestos gestionamos y damos unos mejores servicios públicos. Es verdad que después de cuarenta años de democracia, bueno, pues a eso que se llama gestión, a eso que se llama eficacia, a eso que se llama cumplir con la palabra dada, yo no espero que los... después de cuarenta años de democracia, los españoles piensen que eso es compatible con el sanchismo.

Y para ir concluyendo, voy a trabajar por servicios públicos de calidad -lo he dicho hasta la saciedad-, voy a estar con el medio rural, con las grandes ciudades y también con los municipios intermedios.

Quiero recordar que, por darles una... algunos pequeños detalles. Mire, hablaba usted de gestión de fondos europeos, de gestión de las ayudas de los fondos para las empresas que nos dio el Gobierno de España. Efectivamente, perdimos 245 millones de euros, perdimos todos, por la inflexibilidad de los criterios estrictos que puso el Gobierno de Sánchez. Hemos reclamado; y esta mañana he vuelto a reiterar, que nos repongan ese dinero, que lo volveremos a dar a las empresas... [aplausos] ... a repartir a las empresas, a aquellas que los criterios estrictos del Gobierno de Sánchez impidieron aceptar.

Decir que hoy ha salido una noticia... -tiene usted mala suerte- ha salido una noticia: Castilla y León está entre las cinco Comunidades Autónomas que mejor gestiona los fondos europeos. Ya lo siento, señor Tudanca, estropearle hoy... [aplausos] ... el discurso.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías, por favor. Por favor.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Y mire, cuando hablaba, en mi primera... en mi primer turno ante usted de ponerse del lado de los intereses de Castilla y León, se me olvidó hablar del IVA. El IVA, le ganamos al Gobierno de Sánchez, en el Tribunal Supremo, 195 millones de euros. Ya me hubiera gustado contar con su apoyo, señor Tudanca. Pero, bueno, esos 195 millones de euros irán destinados a los colectivos que más lo necesitan.

Mire, para concluir esta intervención. Voy a liderar un Gobierno sólido y fuerte, basado en el acuerdo, orientado a los intereses generales de todas las personas de Castilla y León. Y usted lo tiene que asumir, señor Tudanca, las personas de esta tierra han votado, las urnas han dictado sentencia: usted en la Oposición; nosotros a gobernar. Pierde Sánchez; gana Castilla y León y gana España. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Fernández Mañueco. A continuación, en representación del Grupo Parlamentario UPL-Soria ¡Ya!, tiene la palabra don Luis Mariano Santos Reyero, por un tiempo de quince minutos.


EL SEÑOR SANTOS REYERO:

Sí, gracias, señor presidente. Señorías. Antes de nada, queremos sumarnos al apoyo al pueblo ucraniano, también al pueblo saharaui y a todos aquellos que tienen conflictos bélicos o soportan la opresión sobre sus territorios.

Dicho esto, señor Mañueco, dos cuestiones preliminares. La primera es que, como ya le dije hace hoy tres años, entendemos perfectamente que en el plano político es indispensable conseguir el mayor número de apoyos, construir una opción que permita constituir una mayoría capaz de gobernar una Comunidad Autónoma o cualquier Administración. La verdad es que la elección para usted no era fácil: gobernar con sus actuales socios o gobernar en minoría. Los ciudadanos, al fin y al cabo, juzgarán sus cesiones.

No sé si, en verdad, ustedes han elegido la opción más o menos difícil, porque, aunque repiten y repiten hasta la saciedad las bondades de este acuerdo, en la intimidad confiesan la dura realidad que les va a tocar vivir en esta legislatura. Sinceramente, no sé qué pensar; al fin y al cabo, son ustedes socios hermanos, porque quien hoy ocupa las sillas de la extrema derecha estaban ayer, seguramente, engordando las filas de los afiliados del Partido Popular.

La segunda cuestión, señor Mañueco, es que, igual que uno acepta ese juego matemático, lo que no parece de recibo es que, durante todo el tiempo en el que ustedes han negociado, solo hemos asistido a un vulgar reparto de sillones y de Consejerías; eso, mientras el país y la Autonomía se desangra con una inflación galopante o con un incremento energético que pone en solfa muchas actividades económicas. Y mire que me recuerda esto a lo acontecido hace tres años; es más, sus actuales socios no se han cortado: querían la misma parte del pastel que había conseguido Ciudadanos. Era difícil hablar de ejes programáticos, porque algunos acudieron a estas elecciones sin ni siquiera compartir con todos nosotros cuál era su programa. La verdad es que quizás haya sido mejor así; ahora nadie podrá acusarles de no cumplirlo. Difícil incumplir lo que no tienes.

Y ahí nos encontramos, señor Mañueco, con una fuerza destructiva en un lado diciendo que no creo en las Comunidades Autónomas, pero quiero la Presidencia de las Cortes y tres Consejerías; y un discurso de un candidato que, encantado de conocerse, cree que puede pedir el apoyo a su investidura esgrimiendo una línea continuista que sigue agravando las enormes diferencias territoriales de una Comunidad Autónoma sin identidad, que no responde a ninguno de los desafíos de la gente.

Pues no, señor Mañueco, en esta corta legislatura que hoy empezamos, no va a contar con el... con el voto... el voto de UPL. Y no lo va a tener, como a usted no se le escapa, porque, como la mayoría de las fuerzas de esta Cámara, sigue negando la mayor. Porque, a pesar de que... de que la mayoría del pueblo leonés le dice que no se encuentra a gusto aquí, ustedes siguen obcecados en ni siquiera abrir una línea de diálogo. Da lo mismo que solo dos de cada diez leoneses quieran estar en Castilla y León, que seis de cada diez quieran la autonomía de la región leonesa; ustedes están más en no escuchar el grito de un pueblo que todos los días se despierta en un lugar territorial que ni quiere ni desea, ni responde a sus expectativas. Y que hoy encuentra aquí un Gobierno formado por quien durante 35 años sigue sin querer hablar del tema, un Gobierno, señor Mañueco, donde la otra parte agarra la bandera del leonesismo para defender el conocimiento de la historia de una tierra, sin saber que esa bandera que agarran significa esa ruptura territorial, y que hoy enfrentarán para garantizarse el nuevo estatus adquirido, y que, como sus anteriores socios, venían a luchar contra el eje del mal, que eran ustedes; pero eso era antes.

Y mira que se lo han puesto ustedes fácil, han estado practicando durante años el adoctrinamiento histórico, y lo han hecho tan bien que han permitido que el incipiente presidente de las Cortes desmonte el artificio de quien sostiene que Castilla y León es la cuna del parlamentarismo. Esa falta de cultura provocada por el ejercicio de un adoctrinamiento generado pone en evidencia solo... no solo el desprecio de algunos con la historia de León, sino el terrible efecto del adoctrinamiento que esta Comunidad ha generado. En ese nivel de este modelo de éxito nos encontramos.

Pero no es esa la única razón, señor Mañueco, para que hoy nosotros digamos no a su investidura, surgen para nosotros muchísimas dudas, que estoy seguro usted no va a responder, porque si por algo se ha caracterizado su Gobierno con sus anteriores socios de Ciudadanos es por ser usted el presidente que mejor se ha escondido: se escondió detrás de la verborrea y el afán de protagonismo del otrora vicepresidente de la Junta; se escondió usted en plena pandemia, ejerciendo de colaborador innecesario dimitió usted de dar solución a los graves problemas de esta tierra con ninguna actuación importante en casi tres años de Gobierno. Y ahora nos dice, cuando busca apoyos, que de lo territorial ni hablamos, y que de invertir el efecto... el exceso de centralismo tampoco.

Así las cosas, señor Mañueco, no teníamos mucho más de lo que hablar para preparar la cita de hoy. Ustedes, como otros, siguen con su soberbia, intentando discernir cuál es la estrategia contra el leonesismo, cómo combaten sus malos resultados electorales, siguen pensando que perder tres de las cuatro ciudades leonesas es fruto de la moda; y, en ese camino autodestructivo, en el que han descubierto como sus propios concejales apuestan por ese debate territorial, ustedes siguen abrazando la farola -que seguro, con el tiempo, dejará de dar luz-.

Pero, fíjese, hasta con ese gesto displicente y soberbio en el que ustedes nos llaman a negociar, a sentarnos en la mesa, y a pesar de intentar convencernos y exigir de qué tema se habla o no se habla, hasta con eso, yo le adelanto hoy aquí que no vamos a levantarnos de una mesa si en ella están los temas esenciales que nos preocupan a nosotros.

Nosotros no somos como ustedes, sabemos lo que significa la política; y eso quiere decir que hablaremos de los problemas sanitarios que tiene esta mancomunidad de provincias. Porque sabemos que no se puede dejar en manos de quienes destrozaron un servicio esencial el futuro sanitario de los diferentes territorios de esta Comunidad.

No vamos a permitir más pruebas piloto, vamos a luchar por que nuestros pueblos sigan teniendo un servicio decente, por que se abran todos los consultorios, por que tengamos el número apropiado de profesionales, por que León tenga su facultad de medicina, por que nuestros profesionales tengan unas condiciones laborales dignas, unas condiciones que no les haga plantearse abandonar este territorio. Una sanidad que debe enfrentar una lista de espera inaguantable, una Asistencia Primaria debilitada y un déficit de profesiones clave en un entorno caracterizado por la dispersión geográfica y las altas tasas de envejecimiento poblacional. Una sanidad que no puede vivir de promesas vacías, sino de realidades; que no está dispuesta a aguantar las promesas políticas durante cada campaña electoral, mientras pasan los años sin cumplirlas; que quiere ver que, por ejemplo, radioterapia en el Bierzo es una realidad, o que no quiere que para que la plantilla de médicos en Villablino sea acorde con las necesidades tengan que salir a la calle todos los ciudadanos de Laciana.

Queremos y vamos a luchar por que en esta mancomunidad todas las provincias tengan una ratio de profesionales adecuado, por que no exista diferencias a la hora de atender las necesidades de los ciudadanos; y lo que es más importante, que el servicio de atención no sea diferente dependiendo del lugar donde se reside.

Garantizar la calidad de un servicio esencial sanitario es una de las grandes claves, condición sine qua non para enfrentar el grave problema de la despoblación. Y ahí nos fijamos también, señor Mañueco: nada esperamos de quienes se han convertido en los líderes de la pérdida de población; nada de quienes permiten, sin ruborizarse, que León pierda 5.000 habitantes al año, con una sangría continua; nada de quien despacha el tema con una frase -ya lapidaria- "este es un problema mundial, europeo y global".

Detrás de esa cruel mentira se esconden los más de 9.000 habitantes que pierden León, Zamora y Salamanca todos los años. Detrás de esas cifras se esconden latrocinios como con los fondos europeos destinados a territorios fronterizos y vinculados a inversiones en La Raya fronteriza de Zamora y Salamanca acaben destinándose a otros territorios. Y después dirá usted que ustedes están entre las cinco Comunidades que mejor reparten los fondos. Pero ¿para quién?, señor Mañueco. Detrás están el esfuerzo de otras Comunidades Autónomas por revitalizar infraestructuras como la Vía de la Plata, mientras ustedes duermen el sueño de los justos; y detrás está, sin duda, una configuración autonómica centralizada, donde los diferentes esfuerzos económicos discurren con una fuerza centrípeta, en vez de lo recomendable y justo, que lo... que sería que lo hicieran de forma centrífuga.

Y no, no es verdad que todos los territorios sufran por igual. No es lo mismo perder 150.000 habitantes en 35 años que ganar 1.000 o 30.000. Sí puede ser que algunos pueblos, dentro del movimiento migratorio de lo rural a lo urbano, puedan manifestarse en todos los pueblos de esta mancomunidad de provincias, pero no es verdad que todos sufran ese ritmo de despoblación, algunos porque ya no pueden desangrarse más, como es Zamora, otros, porque van camino de ello, el caso de León y Salamanca, mientras todos sus esfuerzos, señor Mañueco, sus esfuerzos del Partido Popular, durante estos 35 años, se destinan a concentrar poder y ni siquiera a hablar de descentralización o de configuración territorial, no sea que el chollo se acabe para muchos.

Y no, señor Mañueco, tampoco le podemos apoyar porque ni siquiera ha mostrado usted interés en buscar un modelo industrial que discrimine positivamente a aquellos territorios que más lo necesitan. Es usted rehén de una gran empresa a la que, ni más ni menos, los anteriores presidentes autonómicos han sido capaces de regalar más de 225 millones de euros desde mil novecientos noventa y tres. A una empresa, una multinacional francesa. Y han sido incapaces de llevar a cabo un verdadero plan industrial en aquellos territorios menos industrializados. Eso sí, usted ha sido capaz también de presupuestar 100.000 euros y gastar 50.000 en campañas de publicidad institucional para decirle a los ciudadanos que la inversión va a ser de 14 millones de euros en el Parque Tecnológico de León, aunque ello no se sustente más que en un deseo.

¿Cuánto dinero gastó, señor Mañueco, durante la precampaña para intentar decir a los leoneses que lo presupuestado no vale para nada, que lo importante es lo que aparece en los medios de comunicación? No me extraña que ustedes hayan estado peleando o discutiendo por ver quién se queda con la Dirección General de Comunicación. No me extraña.

Se lo tengo que decir, señor Mañueco, intentó usted engañar, una vez más, a los leoneses. Y le salió mal, porque -ya sabe aquello que decía un presidente americano- se puede engañar a todo el pueblo parte del tiempo, y a algunas de las personas todo el tiempo, pero no se puede engañar a toda gente todo el tiempo.

Y le voy a advertir aún más: ustedes y los colaboradores en ese bipartidismo sordo son los únicos responsables de que la Mesa para el Futuro de la Provincia de León sea hoy más un esperpento que una esperanza. Son, hoy por hoy, los responsables del fracaso de la enésima intentona de revertir un proceso de empobrecimiento de una provincia que llegó a esta Comunidad siendo la más poblada y la más próspera o de las más prósperas, y que va ocupando, junto con Salamanca y Zamora, hoy los últimos lugares en las tasas de actividad de un modelo de éxito llamado Castilla y León.

Y no hay vuelta atrás, señor Mañueco, ya no le creemos. Se acabó, el trece de febrero fue un antes y un después. Por eso le anticipo que, o comienza a trabajar en serio y da pasos certeros, o se va a encontrar con un rechazo social de grandes dimensiones. Es tiempo ya de soluciones. Deben ustedes buscar fortalecer ese diálogo social; pero deben de buscarlo sin tensionarlo, deben de buscarlo apoyando a ese diálogo social, no simplemente diciendo que van a firmar o que han firmado, sino cumpliendo lo que ustedes firman.

Debe solucionar el problema de estabilidad del empleo de los temporales en la Administración, que hoy estaban aquí fuera manifestándose ante la toma... ante la investidura de usted, señor Mañueco.

Y deben de tomar decisiones rápidas para afrontar los problemas de inflación y crisis energética que salvaguarden la sostenibilidad... la sostenibilidad de la pequeña y la media empresa leonesa y castellana.

Tenga en cuenta mi advertencia, señor Mañueco: estaremos enfrente de todos aquellos que quieran desproveernos de los derechos sociales conquistados. Ni un paso atrás, señorías. Esto no se trata de derechas ni de izquierdas, los derechos no son de los partidos, son de las personas, y ahí estaremos defendiéndolos contra quien sea, contra usted y contra sus socios. Veremos qué hacen ustedes, pero no duden que en los tiempos que corren ni siquiera podemos permitirnos el mínimo debate sobre el recorte de derechos consolidados, no por la izquierda o por la derecha, sino por la sociedad, por los ciudadanos que son los... los verdaderos conseguidores y dueños de los mismos.

Y acabo, señor Mañueco. Acabo diciéndole lo mismo: no creemos en usted, no creemos en su Gobierno; pero también le digo que nosotros sí que estamos dispuestos a hablar de todos los problemas que tienen los leoneses y de todos los problemas que afectan a los castellanos. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Santos Reyero. En representación del Grupo Parlamentario UPL-Soria ¡Ya!, tiene la palabra don José Ángel Ceña Tutor, por un tiempo de quince minutos.


EL SEÑOR CEÑA TUTOR:

Soria ¡Ya! toma hoy por primera vez la palabra en esta tribuna y en este Parlamento. Señor presidente, señoras y señores procuradores, estamos hoy aquí con la legitimidad que nos dan 21 años de movilizaciones en la calle y con la fuerza de los votos de nuestros ciudadanos, que han apoyado nuestras reivindicaciones masivamente: nada menos que un total del 43 % de los votos emitidos en la provincia de Soria. Estamos aquí como resultado de la absoluta falta de compromisos de la Junta de Castilla y León con Soria. Somos el resultado de más de 35 años de olvido y abandono, y los sorianos, a través de esta candidatura, hemos dicho basta.

Los ciudadanos de Soria se han manifestado claramente en contra de las políticas -o, mejor dicho, contra la falta de ellas- de la Junta de Castilla y León en las últimas décadas. Unas políticas que nos han hecho sentir olvidados y abandonados. Hemos sido el furgón de cola de esta Comunidad, no nos hemos sentido integrados, han sido muchos años de planes especiales que se quedaban en el camino, de promesas incumplidas, de notas de prensa que presentaban proyectos fabulosos y luego se quedaban en nada, incluso de obras en las que se invertían millones de euros, como en la Ciudad del Medio Ambiente, y que luego quedaban abandonadas; abandonados como nos sentimos los sorianos por la Comunidad Autónoma que ustedes han dirigido desde que al menos yo tengo memoria.

Y hoy hemos asistido a más declaraciones grandilocuentes, incluso hemos observado que se sienten orgullosos de lo que han hecho. Desde luego, con Soria poco. Muchos planes genéricos, muchas palabras inconcretas. Hasta hoy todo ha quedado en nada. Nada a lo que los ciudadanos sorianos se puedan agarrar, nada que nos permita ser siquiera moderadamente optimistas. Lo que Castilla y León y Soria necesitan son acciones decididas, concretas y urgentes.

Es muy curioso que cuando hemos hablado con ustedes comparten el diagnóstico y su gravedad, comparten incluso las medidas y el tratamiento para hacer frente al problema; pero no lo ponen en marcha. En definitiva, señorías, es el momento de los hechos y no el de las buenas palabras. A lo que ustedes se han dedicado hasta ahora es a dejar pasar el tiempo, condenándonos a los sorianos y al resto de los castellanos y leoneses a la desaparición tanto demográfica como económica.

Ustedes, con sus preocupaciones por mantenerse en el poder no quieren verlo, pero el principal problema que tiene esta Comunidad Autónoma es la despoblación. Así lo perciben los castellanos y leoneses, situando a la despoblación como la primera de sus preocupaciones, por encima del paro o de cualquier otra cuestión.

En estos años, desde que se puso en marcha esta Comunidad Autónoma, la población soriana ha descendido en un 12 %, y la... y más de la mitad de los nacidos en Soria viven fuera de la Comunidad. No es exclusivamente un problema de Soria, pero en Soria es más grave, en Soria ya no tenemos margen. En Castilla y León desde el inicio del proceso autonómico la población ha disminuido en un 7,74 %, nada menos que 200.000 personas, pero todo ello además en un contexto en el... en el que el conjunto de España crecía a un ritmo imparable, hasta en un 25 %.

Llama la atención que la preocupación en el pacto de gobierno PP-Vox por la inmigración ordenada... llama la atención porque nosotros entendemos que el principal problema demográfico de Castilla y León -y además no es de ahora, sino de hace décadas- es la emigración. Lamentablemente somos una región de emigrantes, y la inmigración no ha sido hasta ahora ningún problema. Comencemos por crear las condiciones para que nuestros jóvenes no se tengan que marchar, antes de empezar a poner trabas a los que quieran venir. Uno de cada cuatro jóvenes nacidos en Castilla y León vive fuera, y esta cifra asciende a un 38 % en el caso de los jóvenes titulados.

Según un análisis de la Red de Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa el 76 % de los municipios de Castilla y León está en situación muy grave en términos demográficos; pero esto es mucho más grave en Soria, donde un total de 126 municipios están en riesgo muy grave de desaparición. Hasta ahora no se ha... no se ha abordado el problema con seriedad, no se han puesto medidas, no se han realizado planes serios que aborden este problema a largo plazo y de manera efectiva. Algo se ha hecho mal, muy mal, y ustedes, señor Mañueco, son cómplices, al igual que el Gobierno de la Nación.

Señor Fernández Mañueco, le he escuchado decir que el problema de la despoblación no es exclusivo de Castilla y León, sino que es un problema nacional y europeo, escurriendo así la responsabilidad personal en tanto que gestor de estas políticas o la ausencia de ellas. Lo ha dicho, señor Mañueco. Pero las cifras son tozudas: España crece en habitantes, y lo hace de forma indudable, mientras que Soria y Castilla y León se quedan atrás. No puede haber complacencia ninguna ante estos datos, hay que ponerse manos a la obra y trabajar por y para esta España vaciada.

Hace dos años y medio, en el anterior Debate de Investidura -que me he leído-, usted, señor Fernández Mañueco, reconocía el fenómeno de la despoblación como el mayor desafío al que se enfrenta esta Comunidad Autónoma, y habló de la creación de un grupo de expertos independientes. Hoy ni siquiera ha dicho que es el mayor desafío de la... de la Comunidad Autónoma. Desde Soria ¡Ya! pensamos que el tiempo de análisis y de grupos de expertos ha pasado; hay que ponerse a trabajar ya y hay que hacer frente a este problema, no podemos seguir mareando la perdiz. Es necesario un gran pacto o acuerdo político en esta Comunidad Autónoma para hacer frente a la despoblación; y, sin embargo, leyendo los términos del acuerdo que han firmado PP y Vox, no parece que la despoblación sea su principal desafío. Igual están esperando que el problema se solucione solo.

De los 11 ejes de gobierno que anuncian no aparece la despoblación hasta el eje número 10, y ni siquiera de forma específica. Leo textualmente: "Apoyo a las familias, a la natalidad y a la lucha de la despoblación como centro de las políticas públicas". Es un eje de gobierno abstracto, falto de concreción como para pensar que este Gobierno por fin se va a tomar en serio este problema.

También este plan que anunciaron tiene 32 acciones de gobierno, y no es hasta la acción número 29 cuando se afirma: "Consideraremos el problema de la despoblación y las políticas de demografía una cuestión prioritaria en coordinación con todas las Administraciones Públicas". De nuevo una inconcreción apabullante para abordar una cuestión que los propios ciudadanos castellanos y leoneses consideran el mayor problema que tiene la Comunidad. Cuando el nuevo Gobierno decida hacer frente de una vez y con seriedad a este problema nos encontrará con la mano tendida, como no puede ser de otra manera. Es un problema de Comunidad, un problema de Estado, y hemos de colaborar todos en su solución.

Una de las cuestiones que hay que abordar con urgencia en este Parlamento es impulsar una ley contra la despoblación y para la repoblación, definiendo y estableciendo niveles de zonas despobladas según los criterios utilizados por la propia Unión Europea. A partir de esa definición de despoblación, se podrá elaborar toda una estrategia transversal, con incentivación positiva en todas las líneas de subvenciones, incentivos fiscales, de infraestructuras digitales, de transporte de viajeros, etcétera, para los beneficiarios y utilizados en las zonas muy despobladas.

Ya hace tiempo que los reglamentos europeos establecen que los fondos como el Fondo Social Europeo, el FEADER o el FEDER han de abordar los problemas de las zonas que padecen desventajas demográficas graves y permanentes. Pues bien, ahora que están redactando el Programa Operativo de Castilla y León 2021-2027 -esto, señor Fernández Carriedo, se lo dedico a usted-, le pedimos que preste atención especial al reparto de los fondos en las zonas NUTS 3 de Castilla y León que tengan menos de 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado. Es lo que establecen los fondos europeos. Para ello están: para corregir los desequilibrios; y, sin embargo, la provincia de Soria en el último reparto recibió el 2 % del total de los fondos, cuando tiene el 5 % de población, y en teoría debería recibir más porque estos fondos son para cohesionar el territorio. Nosotros tenemos 8,6 habitantes por kilómetro cuadrado, la densidad de población más baja de España.

Es una cuestión de voluntad política, se puede hacer. No solo lo permiten los Reglamentos Europeos, la Comisión Europea lo quiere; es justo con los territorios despoblados; serviría para corregir desequilibrios territoriales; sería una medida concreta y efectiva de gran calado -no tantos discursos retóricos-; y devolvería parte de la fe perdida por los ciudadanos en sus representantes.

Quiero tratar también el tema de la sanidad. Y de la sanidad hay tantas cosas de las que hablar que cuatro años de legislatura se nos quedarían cortos. En su Acuerdo de Gobierno con Vox habla de que garantizarán la sanidad pública reforzando las inversiones y los presupuestos, fundamentalmente en la Atención Primaria. Es curioso que esta referencia a la Atención Primaria ya estaba en su discurso de hace dos años y medio, y también en el programa... está en el programa electoral del Partido Popular, donde asegura que garantizarán la asistencia en los consultorios locales. Hoy también ha garantizado... ha hablado de garantizar esta asistencia es los consultorios locales por ley.

Pero la realidad es muy tozuda: la asistencia médica en los consultorios locales se ha visto muy reducida. Antes había uno o varios días a la semana de asistencia sin cita. Ahora se hace con cita previa, algo que entorpece y dificulta el servicio. Hay que recordar que muchos de los pacientes de estos núcleos rurales son mayores, y, a ciertas edades, internet y el móvil inteligente les supera. De nuevo, las dificultades de Soria quedan olvidadas, y ustedes no hacen sino incrementar la brecha existente. Hay que prestar esta asistencia sanitaria a todos, sin discriminación por el lugar de residencia.

Por ejemplo, esta semana ha salido en prensa que en Muriel de la Fuente, un pueblo de Soria, no tienen médico ni cobertura. No sé cómo van a contactar telemáticamente con la Administración sanitaria. Lo mismo pasa con la atención sanitaria telefónica. En los centros de salud se ha incrementado -y esto lo reconozco- la telefonía, la atención telefónica, pero a veces los pacientes están toda la mañana llamando y no consiguen contactar -y se quejan, claro-.

Esto hay que cambiarlo, el modelo tiene que cambiar sí o sí; pero tiene que ser para mejorar, no se puede quedar nadie atrás, mucho menos los pacientes de las zonas rurales o despobladas. Hay que recordar que en estas zonas rurales, si no hay médicos, si no hay servicios médicos de calidad, la gente se va.

En muchas ocasiones se nos repite como un mantra que no hay médicos que quieran venir a Soria, o a otros territorios de la Comunidad, como por ejemplo el Bierzo. Parece ser que estamos muy lejos o que no ofrecemos los suficientes incentivos. Yo creo que esto es una excusa y no es aceptable. La obligación de la Consejería de Sanidad es buscar soluciones. Soria está, geográficamente, rodeada por cuatro Comunidades Autónomas, y al menos en tres de ellas (Castilla-La Mancha, Navarra y La Rioja) las condiciones que se ofrecen a los médicos son muy superiores a las que se ofrecen en Castilla y León. Es así, señores.

¿Por qué la Junta de Castilla y León trata o paga peor a los médicos que los de otras Comunidades limítrofes? Para venir a Soria no solo tienen que tener incentivos económicos, también tienen que tener incentivos de progresión profesional y contratos más largos. Y esto es en lo que tienen que trabajar.

El Colegio Oficial de Médicos de Soria calcula que en cinco años Soria perderá el 30 % de sus médicos, situación que, además, se agrava en la Atención Primaria, donde perderá el 42 % de los médicos. Hay que abordar el problema de inmediato.

Proponemos soluciones, como convertir el Hospital de Soria en Hospital Universitario y recuperar los estudios de medicina que nos quitaron a principios de los noventa.

Hay otros muchos ejemplos de la falta de compromiso de la Junta de Castilla y León en temas sanitarios. La tan largamente prometida unidad de radioterapia: desde dos mil siete, que la prometió Juan Vicente Herrera; y hoy usted ha vuelto a prometerla. ¡Quince años después, y estamos esperando! También están esperando en el Bierzo.

Seguimos sin Unidad de Ictus. Seguimos con una única ambulancia medicalizada de emergencias para toda la provincia. Los años que lleva el Hospital Santa Bárbara en obras, o la prometida reapertura de la farmacia de Villar del Río. Y esto son solo unos ejemplos, hay muchos más.

Durante la campaña electoral hemos visitado más de 80 pueblos en la provincia de Soria, y hemos hablado con los ciudadanos, hablado de verdad, de tú a tú. Dos cuestiones comunes se planteaban constantemente: la sanidad y la conectividad a internet.

La conectividad, por la importancia que tiene en nuestros días, es vital para los territorios de la España vaciada. No tener internet de alta velocidad hoy en día es como en los años cincuenta no tener electricidad o agua corriente. Y hoy lo han prometido de nuevo: 20 megas de velocidad en todos los municipios en dos mil veintitrés; 100 megas, en dos mil veinticinco. Una promesa que de verdad aplaudiría si en dos mil veintitrés la viera ejecutada, pero es que han prometido tantas cosas que ya no creemos nada.

En su Acuerdo de Gobierno dicen: "Mejoraremos la conectividad de Castilla y León fortaleciendo las infraestructuras de comunicación y de transportes". No se puede ser más inconcreto. Yo creo que no ofrece esperanza ninguna. Esperábamos un compromiso más concreto. Fíjese, señor Mañueco, en el Reino Unido han abordado el problema de otra manera totalmente distinta: en el primer sitio que hubo 5G en el Reino Unido fue en los territorios más despoblados, en las Tierras Altas de Escocia y en las islas del norte de Escocia. Eso sí que es una medida concreta y decidida, allí sí se comprometen realmente con abordar el problema de la despoblación. Si no hay internet en el pueblo, los nietos no irán a ver a sus abuelos, se perderá la oportunidad del teletrabajo.

En estas condiciones, no podemos apoyar esta investidura, hay demasiadas dudas, demasiadas incertidumbres, demasiadas inconcreciones y demasiados derechos adquiridos en peligro. Y, para nuestra desgracia como sorianos, parece que no nos ofrece sino más de lo mismo. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Ceña Tutor. Para contestar al Grupo Parlamentario UPL-Soria ¡Ya!, tiene la palabra el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Gracias, señor presidente. Gracias, señorías. Empiezo dando la bienvenida al nuevo grupo parlamentario, la Unión del Pueblo Leonés-Soria ¡Ya!, creado entre ambas formaciones políticas, y saludando también a los seis procuradores, y tanto al portavoz, al señor Santos, como al viceportavoz, el señor Ceña Tutor, que se estrena en esta Cámara, y al que le deseo los mayores éxitos y aciertos.

Agradezco a ambos el tono empleado en las formas, en sus intervenciones, de verdad, aunque, bueno, pues algunas de las cuestiones hablaré que no coincidimos en nada en el fondo, y otras, desde luego, me sorprende, porque, bueno, hablaré de ello.

Pero tiene mi compromiso personal, el compromiso de nuestro Gobierno, de tener ese talante, un buen clima parlamentario, que prevalezca siempre tanto dentro como fuera de la Cámara. Yo creo que no es momento ni de enfrentamientos ni de crispación, sino un momento de construir puentes y de una política de mano tendida.

Pero una actitud y un compromiso de mano tendida, desde luego, no puede tener ni líneas rojas ni cordones sanitarios a representantes elegidos democráticamente por las personas de Castilla y León. Me ha sorprendido su actitud, tanto el señor Santos como el señor Ceña. Por eso les pido que disipen sus dudas en relación con el Acuerdo de Gobierno que tanto Partido Popular como Vox hemos alcanzado, porque todos y cada uno de sus puntos y medidas tienen cabida y se van a desarrollar dentro del máximo respeto de la Constitución y el Estatuto (por cierto, como no podía ser de otra manera).

Les pido a sus señorías, por tanto, que basta de miedos anticipatorios y de lecciones de dignidad, desde esa superioridad moral que me ha querido trasladar, señor Santos, respecto de los socios. Hombre, mire, no me hable usted de socios, por favor, no me habla usted de socios, porque sus socios son los mismos que a nivel nacional pactan con quien pactan; sus socios, le recuerdo, que son los responsables del cierre de la minería y de las térmicas en la provincia de León... [aplausos] ... un cierre precipitado e injusto que ha ocasionado desempleo, pérdida de población y, además, no solo en León, sino también en Palencia, y ha favorecido el incremento de la... el precio de la luz e incrementos del IPC.

No sé si usted levantó la voz, alzó la voz. Hoy aquí no ha dicho nada. No ha hablado tampoco nada de las reivindicaciones pendientes del Gobierno de España ni el señor Santos ni el señor Ceña. Aquí hay muchas cuestiones que tiene que hacer la Junta de Castilla y León, pero su silencio ha sido clamoroso respecto de lo que consideramos se debe hacer por León y por Soria desde el Gobierno de España.

Yo, señor Santos, ya que hablamos de León, aprovecho para recordarle que la configuración del actual mapa autonómico está definitivamente cerrada desde hace décadas. Por cierto, me he liado, porque tan pronto hablaba de León como de León, Zamora y Salamanca. Unas veces León no tenía la Facultad de Medicina, entonces hablaba de la provincia, porque en Salamanca sí que hay Facultad de Medicina. Podrían decirle desde Salamanca que por qué no tienen la facultad de Veterinaria que existe en León.

Mire, si es que este tipo de discursos no va a ningún a lado. El mapa autonómico está definitivamente cerrado desde hace décadas. Ya desde el inicio del Estado autonómico, las autonomías provinciales por la Comisión de Expertos no eran vistas como una alternativa recomendable -usted lo sabe-, y sobre las Autonomías se extendió pues ese... esa Comisión de Expertos, el inconveniente de las proliferaciones. Pero, bueno, dicho esto, el Tribunal Constitucional con posterioridad dijo que ninguna provincia tenía un derecho sin más emanado de la propia Constitución para convertirse en Comunidad uniprovincial, y eso correspondía a las Cortes Generales; y el Consejo de Estado, ya más recientemente, en el año dos mil seis, sobre posibles modificaciones de la Constitución, consideraba cerrado el mapa autonómico. Y decía literalmente este dictamen: "Una vez terminada la división del territorio, el principio dispositivo no puede jugar ya en favor de las provincias para hacer posible la creación de nuevos entes dotados de autonomía política".

Conclusión: no hay lugar a posibles discusiones que supongan trocear Castilla y León. Yo interpreto, entiendo, que esa mentalidad que tiene su formación política no es la misma de la formación política de Soria ¡Ya!, así he interpretado a lo largo de estas décadas de... de trabajo de Soria ¡Ya! Pero, bueno, yo creo que es bueno insistir aquí en que la integridad territorial es para nosotros un valor esencial a mantener y a defender; y yo no entiendo por qué usted viene aquí a decirme que el Estatuto de Autonomía de Castilla y León hay que tirarlo a la basura y yo tengo que aplaudirle. Yo, que soy una de las personas que tiene como responsabilidad hacer cumplir el Estatuto de Autonomía de Castilla y León, cuando usted me dice eso, yo le tengo que aplaudir. Eso es lo que parece que usted me está reclamando.

Señor Santos, la división, el aislamiento, enfrentar, buscar diferencias, el agravio, yo creo que no... nunca es solución a los problemas. Tenemos objetivos comunes, podemos hablar de muchas cuestiones. Usted parece que ha buscado el camino de la confrontación, de no dar solución a la provincia de León, de no querer dar solución a los problemas de los leoneses. Lo lamento. Yo, desde luego, no cuenten conmigo para buscar el enfrentamiento entre territorios, entre provincias, ni una lucha cainita respecto de la descentralización.

Mire, la mejor descentralización es que las políticas de la Junta de Castilla y León lleguen a todo el territorio y lleguen a todas las personas vivan en capitales, vivan en ciudades o vivan en cualquier pueblo.

No es ni eficaz ni solidario luchar solo por los intereses de una localidad o de una provincia, y yo creo que hay que tener en cuenta las necesidades de todo el territorio de Castilla y León. Creo que la expresión, el refrán, la unión hace la fuerza, es mucho mejor que ir cada uno a lo suyo, y entiendo que eso agota las energías de manera estéril y, además, ofrece escasos resultados.

Castilla y León, como Comunidad unida impulsa importantes actuaciones para las nueve provincias de la Comunidad Autónoma, y también para León y para Soria. Luego diré. Pero, mire, respecto de los leoneses, hombre, han otorgado mayoritariamente su confianza a formaciones que apuestan por León como parte indisoluble de Castilla y León. Yo creo que eso es así, desde el máximo respeto y la máxima consideración a los votantes de la Unión del Pueblo Leonés.

Pero, mire, le voy a decir al señor Ceña y al señor Santos: yo he nacido donde he nacido, que es en Salamanca, no he nacido en Soria, no he nacido en León; pero ninguno de ustedes me va a dar lecciones de lo que es querer trabajar, patear, la provincia de Soria ni de León. Ninguno de ustedes me va a dar lecciones en eso -y especialmente usted, señor Ceña, porque ha trabajado conmigo mucho tiempo-.

Yo tengo que decirle, respecto del problema de la despoblación, si uno analiza más allá de los informes que tiene en internet, si uno analiza los informes de verdad serios de... de la ONU, por ejemplo, nos dice que el 80 % de la población mundial en las próximas décadas se va a concentrar en dos ámbitos: por un lado en las grandes ciudades y por otro lado en las costas, ya sean las costas atlánticas o mediterráneas. Eso va a ser así en todo el mundo, esa es una tendencia que se produce. Y, desde luego, con esto no estoy... Es así. Ya sé que usted dice que no, pero yo le digo que sí; eso es lo que dicen los informes. Y yo lo que digo es que estoy aquí para dar esa batalla. Yo no he dicho en ningún momento que esté aquí para no dar esa batalla, todo lo contrario.

Mire, ¿cómo se lucha contra la despoblación? En primer lugar, con servicios públicos en todo el territorio: sanidad, servicios sociales, escuelas abiertas. Eso es que ya es obvio, pero lo vuelvo a decir.

En segundo lugar, por la nueva generación de servicios públicos. ¿Es que no he hablado yo del transporte gratuito a la demanda? ¿Es que no he hablado yo de extensión de la banda ancha a todo el territorio? ¿Es que no he hablado del acceso a la vivienda, especialmente en el medio rural? Podría seguir hablando de otros nuevos servicios, que hay que trasladar a todo el territorio. Es así.

Pero también es necesario hacer un apoyo fundamental a los autónomos, a las empresas, a las pymes. Por eso hay una política específica de apoyo, especialmente en el... en el medio rural, a aquellas empresas y autónomos que quieran instalarse en el medio rural.

Mire, me ha sorprendido. Yo creo que a cualquiera que haya escuchado la intervención del señor Ceña hoy aquí le sorprendería que dijera, al salir de... el primer día de la reunión: "Soria ¡Ya! ve posible apoyar un Gobierno en solitario del Partido Popular en Castilla y León". Después de haberle escuchado a usted hoy aquí, pues, como digo, me... me parece sorprendente. Pero bueno.

También, respecto del señor Santos, es verdad que tuvo más habilidad, no lo dijo públicamente; pero en la reunión que tuvimos con usted dijo que iba a tener la misma actitud con el Partido Popular que con el Partido Socialista el año pasado en la moción de censura. Que iba a hacer lo mismo con el señor Tudanca que con el señor Mañueco. Usted se abstuvo con el señor Tudanca. Esa es la realidad. Y ahora va a votar en contra, o así le he entendido yo, que va a votar en contra.

Mire, señor Ceña, no llegamos a un acuerdo porque ustedes pedían el 12 % del marco financiero plurianual para la provincia de Soria, correspondiente al marco... como digo, a los fondos europeos (FEDER, Fondo Social Europeo y el FEADER); esto en exclusiva para Soria, no sé por qué criterio. Y además, del 85... perdón, del 88 % restante, podría acudir la provincia de Soria como cualquier otra provincia. Tenemos el documento que usted nos... nos remitió. Comparten grupo con la Unión del Pueblo Leonés; no sé si ellos estarán de acuerdo con ustedes con ese planteamiento, o incluso qué piensa el partido Por Ávila respecto de esto.

Señor Ceña, yo con cariño se lo digo: no juegue a una postura de insolidaridad con el resto de provincias. Yo creo que aquí hay que hacer un esfuerzo. Y ahí estamos abiertos... yo estoy abierto a estudiar todas las propuestas que me plantee, porque creo que es algo que lo hemos dicho siempre. Pero lo que no vamos a consentir son privilegios de unas provincias sobre otras. No sé si este planteamiento usted lo consideraba privilegio; a mí sí. Y, desde luego, la cohesión y el equilibrio territorial es algo que consideramos también importante.

Creo que la mayoría de las demandas son coincidentes por nuestras respectivas formaciones políticas. Y además tengo que decir que este Gobierno va a ser el principal defensor de las políticas que están en marcha o que se van a cumplir a lo largo de los próximos años. Hombre, les quiero recordar que en los últimos tres años -no llegamos a tres años- hemos tenido dos de pandemia, que no ha sido una situación complicada. No quiero que esto sirva de excusa, simplemente que sirva de explicación.

Mire, tengo que decir que, respecto de la neutralidad, ustedes, tanto la Unión del Pueblo Leonés como Soria ¡Ya!, pues, parece que tienen una preferencia respecto del Partido Socialista con respecto a otras formaciones políticas. Bueno, en el caso de la Unión del Pueblo Leonés es evidente, porque está gobernando en coalición con el Partido Socialista en la Diputación Provincial y está favoreciendo el Gobierno del Partido Socialista en el Ayuntamiento de León. Bueno, vamos a tener cuatro años de trabajo a lo largo de la legislatura, y ya veremos con quién se posiciona cada uno.

Pero, mire, ¿todos queremos una sanidad de primera? Por supuesto. Señor Ceña, me sorprende que hable usted mal de la cita previa. Es que está funcionando, y funciona bien. En las ciudades ya está funcionando y la... Perdone, en las ciudades está funcionando, está funcionando. Y las personas mayores de las ciudades no las considero ni más ni menos listas, inteligentes o capaces que las que viven en el medio rural. Por tanto, el problema no es de las personas. Incluso le voy a decir más: si es que la teleasistencia avanzada va a gestionar esas cuestiones de cita previa, también de seguimiento de medicamentos y de otras cuestiones. Pero tenemos una gran red de centros de salud y de consultorios. Efectivamente, vamos a intensificar el criterio para que se abran los consultorios abiertos totalmente en todos nuestros pueblos; pero hay que recordar que tenemos la mejor ratio de médicos por habitante de toda España.

Se está haciendo una inversión en el Hospital de Santa Bárbara, pero también vamos a hacer una apuesta por el Hospital de Aranda de Duero, de Palencia, de Segovia. Se está culminando el de Salamanca, se apostó por la renovación del Hospital de León, que tendrá mejoras. Las unidades de satélite, tanto en Soria como en el Bierzo, van a ser una realidad -lo he dicho esta mañana-, pero también Ávila, Segovia y Palencia.

Vamos a apostar por la calidad educativa. Ni un solo... ni un solo estudiante acude a las escuelas o a los colegios sin libros ni material escolar por razones económicas, ni en Soria ni en León ni en ninguna otra provincia. Tenemos -fíjese- las mil... casi 1.400 escuelas conectadas; también en Soria, también en León. Tenemos la intención de conectar con conexión ultrarrápida las 16.000 aulas; también de Soria y de León. La teleasistencia avanzada gratuita va a llegar a todas las personas dependientes y a las personas mayores que lo necesiten; eso va a ser una realidad. Como el acceso a la vivienda, especialmente para los jóvenes en el medio rural; en Soria y en León. O medidas de movilidad como el bono rural de transporte gratuito: 2.000 rutas tenemos en toda Castilla y León; también en Soria y también en León. Y ampliarlo a todas las localidades todos los días y con mayor frecuencia; sí también en Soria y en León. Y apostar por carreteras, infraestructuras logísticas de transporte, llevando de la mano del Estado internet a todos los rincones de nuestra Comunidad. Ahí hemos coincidido, y le agradezco su esfuerzo.

Mire, cuando hablamos luchar contra la despoblación, es apostar por los agricultores y por los ganaderos. Es verdad que en la década de los años sesenta había unas más de 300.000 personas que vivían aproximadamente del campo, de la agricultura y de la ganadería; hoy estaríamos en torno entre 50 y 60.000 personas, aproximadamente. A lo mejor esa es otra explicación de por qué se está perdiendo población en el medio rural. Por tanto, una buena gestión de la Política Agraria Común, apoyando la fluidez y el equilibrio de la cadena alimentaria, nos parece muy importante para luchar contra la despoblación, con fuertes inversiones en el regadío, con fuertes inversiones también en las concentraciones parcelarias. Por cierto, la provincia de León va a ser récord en la apuesta por los regadíos en nuestra Comunidad Autónoma; espero que eso no lo interprete como un gesto de perjudicar a la provincia de León, señor Santos.

La industrialización. Hombre, es curioso que usted hable de industrialización, señor Santos. Mire, aquí, un poco a vuela pluma, en el Bierzo, TVITEC, EMOBI y FORESTALIA y otros proyectos van a generar en torno a 1.300 empleos directos. Eso es gracias al esfuerzo de la Junta de Castilla y León, gracias al esfuerzo de la sociedad de León. 240 millones de euros de inversión, y va a generar unos 3.000 empleos de manera indirecta.

También en León, el Bierzo -provincia de León-, todo en su conjunto, Parque Tecnológico de León, parque industrial de Villadangos, Latem, Network Stell y Nexis Farmacéutica, 350 millones de euros de inversión, 600 empleos directos. ¿Se acuerda usted de Vestas, señor Santos? Usted sí; la provincia de León no. Dio una respuesta inmediata la Junta de Castilla y León. [Aplausos].

Le puedo hablar de la provincia de Soria. En Ólvega, el otro día, se hizo una inversión de 40 millones de euros, que va a crear 150 puestos de trabajo, y en la... una empresa maderera -que no puedo decir el nombre- va a hacer una inversión de 80 millones de euros y 200 empleos de trabajo.

Podríamos hablar del tema de Soria, de planes industriales. Le daba miedo hablar de alguna empresa, señor Santos, Renault en Valladolid y en Palencia; Nissan en Ávila, Kronospan en Burgos... Podría seguir hablando de planes territoriales: el Plan Soria Saludable y Conectada o el Plan de... de los municipios mineros de León y Palencia, los de Béjar, Benavente, Medina del Campo, Villadango del Páramo, Segovia, Sierra de la Demanda, Ávila, Tierra de Campos; o iniciativas de estímulo a la inversión en las comarcas de La Raya de Zamora y de Salamanca.

Es importante la fiscalidad diferenciada. No... no sé si es que me he despistado en algún momento, no le he escuchado a usted hablar de la fiscalidad diferenciada, o a lo mejor me he despistado. Si... si lo ha dicho usted, le pido disculpas. La fiscalidad diferenciada es importantísima para luchar contra la despoblación, así podemos compensar a las empresas y puede servir un estímulo a la inversión y a la creación de empleo. Sabe usted que fue una medida ya aprobada por la Comisión Europea.

No voy a hablar de las autovías o de los ferrocarriles porque me imagino que ustedes saldrán ahora reivindicando a la Junta de Castilla y León que seamos exigentes con el Gobierno de España para reclamar las autovías y los ferrocarriles pendientes, especialmente en sus provincias.

Yo quiero que... simplemente una reflexión: siempre que hablo con el Gobierno de España, siempre que tengo la oportunidad de hablar de las infraestructuras, incluyo la provincia de Ávila, incluyo la provincia de Soria, incluyo la provincia de León, pero incluyo las seis provincias restantes, porque todas tienen cuestiones pendientes, y entendemos que la situación económica actual pues va a retrasar algunas infraestructuras. Ese calendario comprensivo de infraestructuras pendientes del que yo le hablaba al señor Tudanca.

Bueno, dicho esto, yo lo que tengo que decir es que Castilla y León tiene que jugar un papel en todas las provincias, y todas las provincias tienen que jugar un papel fundamental como motor de progreso y de modernidad. Y ahí, en la mejora de la vida de todos los castellanos y leoneses, en la mejora de nuestra tierra, en la defensa de la protección de los derechos y libertades siempre nos vamos a encontrar. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco. Para un turno de réplica, tiene la palabra el señor Santos Reyero, por un tiempo de cinco minutos.


EL SEÑOR SANTOS REYERO:

Sí, gracias, presidente. Bien, señor Mañueco, empezó usted diciendo que teníamos su mano tendida, pero que no se puede hacer cordones sanitarios ni líneas rojas. Y acaba... continúa usted diciendo que para usted es una línea roja la descentralización y el problema territorial que existe en León. Por lo tanto, no... desde luego... no, no, no, eso es mentira y usted lo sabe. Eso es mentira, como muchas de las cosas que usted ha dicho. Incluso usted ha hablado de lo uniprovincial y aquí nadie ha hablado de eso. Y usted sabe perfectamente que lo que la UPL defiende es una autonomía de la región leonesa, ¿de acuerdo? Y lo sabe usted perfectamente, pero intenta engañar a la gente.

Como también intenta engañar cuando usted habla del cierre de la minería. Mire, yo no soy aquí sospechoso de defender al Partido Socialista en todas las cosas que ha hecho con respecto al cierre de la minería. Pero, oiga, oyéndole a usted hablar pareciera que el señor Soria era del Partido Socialista. Pero es que ustedes, como ellos, son igual de responsables, y quien no ha variado nunca en su posición respecto a la defensa de la minería -y lo sabe usted perfectamente- es quien le está hablando en estos momentos. Y lo he hecho no solo en esta tribuna, señor Mañueco, y sabe usted que me fastidia especialmente, porque lo he hecho en las propias cuencas mineras -y lo sabe usted-, y lo he hecho como concejal de pueblos mineros. Y he tenido que aguantar las políticas del Partido Popular. Acuérdese, acuérdese de cuando el señor Juan Vicente Herrera pedía perdón aquí, acuérdese usted. Acuerde... ¿o era de otro partido? ¿O era del Partido Socialista también?

Por lo tanto, mire, señor Mañueco, las cosas hay que decirlas como son; y ustedes son muy responsables de lo que ha pasado en las cuencas mineras.

Mire, por enlazar, habla usted aquí del plan de dinamización. ¿Pero usted realmente se cree lo que han hecho en el plan de dinamización? Se lo he explicado muchas veces. Un plan de dinamización o de fomento de empleo no consiste en que aquellas competencias habituales -y me refiero a mantenimiento de carreteras- sean consideras como inversiones adicionales. Dicho de otra forma, señor Mañueco: porque la carretera pase por Cistierna o porque pase por Guardo no significa que ustedes estén haciendo algo por esforzarse por crear actividad económica en Guardo o en Cistierna. Porque, si fuera así, lo estarían haciendo en todas las Comunidades Autónomas. Es decir, el déficit en cuanto a mantenimiento de carreteras es igual en unos lugares que en otros.

Se habla de fondos adicionales, señor Mañueco, de fondos adicionales. Usted ha planteado aquí y ha empezado a hablar de planes de fomento de empleo que probablemente para la gente nueva que ha llegado, para la gente de Soria, pueda parecer "oiga, pues esto que dice...". Pero es que los que llevamos aquí ya mucho tiempo sabemos que eso es papel mojado, que no se ha cumplido absolutamente en ninguno de los territorios, no se ha cumplido en ninguno de los territorios, ni ha generado absolutamente nada reseñable.

Mire, yo nunca he sido -y lo sabe usted- ni de cordones sanitarios ni de líneas rojas. Pero, oiga, déjeme decir que yo no puedo estar cerca de lo que defiende el partido Vox. Y lo tengo que decir. Y se lo he explicado en muchas ocasiones. Yo puedo tener problemas con cualquier partido, pero siempre me he sentado a hablar. Ahora, oiga, hay cosas que se defienden aquí sobre derechos sociales adquiridos durante mucho tiempo que es que ni me planteo sentarme a hablarlo -lo siento, señor Gallardo-, es que ni me planteo hablarlo. Pero es que creo que por lo menos tengo el derecho a decirlo, tengo el derecho a decirlo, desde la educación, pero tengo el derecho a decirlo y a mantenerlo.

Y, mire, le voy a decir una cosa, porque usted ha hablado de que yo he planteado o no he planteado en la reunión. Mire usted, nosotros nos hemos reunido, nos hemos reunido, hemos ido a hablar con usted con la mejor voluntad, y lo primero que ha dicho... bueno, yo le he comentado, tenemos cinco ejes, que son los cinco ejes que nosotros hemos planteado y que hemos defendido durante toda la campaña electoral, y hablábamos de garantizar la sanidad, hablábamos de enfrentar el problema de la despoblación, de la descentralización, del problema territorial y de la reindustrialización. Y usted me ha dicho, mirándome no sé si a los ojos o adónde, señor Mañueco: "Oiga, hablamos de lo que quiera, pero de estas dos cosas no; de descentralización, no; y del problema territorial, no". Oiga, pero y a qué nos íbamos a quedar entonces ahí. ¿Pero usted lo entiende? ¿Entiende perfectamente que, cuando alguien quiere dialogar, consensuar, tiene que ceder; y cuando no quiere ceder nada más que de lo aquello que de lo que él quiere hablar, desde luego, no se produce, desde luego, ningún momento de encuentro y, probablemente, ningún acuerdo posterior?

Ha dicho usted por la mañana... ha hablado de cohesión territorial y que usted no discriminará. Pero es que llega tarde. Se lo expliqué el otro día, señor Mañueco: llega usted tarde. Durante 35 años han estado ustedes discriminando a muchas partes del territorio de esta Comunidad Autónoma. Ahora ustedes dicen que quieren repartirlo de forma igualitaria. Pues no, ya es tarde. Ya es tarde. Ustedes tienen que hacer discriminación positiva para aquellos territorios que más lo necesitan. Y, si no, seguirán ustedes centralizando en el mismo lugar y seguirán ustedes contentos de seguir con esa política.

Y, mire, por fin he conseguido algo.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Tiene que ir terminando, señor Santos.


EL SEÑOR SANTOS REYERO:

(Sí, acabo ya, señor Pollán). He conseguido algo. Usted cada vez que me subía a esta tribuna, o acababa llamándome independentista, o acababa diciendo que casi nadie me votaba. Bueno, pues hemos conseguido algo, ya se le han acabado prácticamente los dos insultos que me practicaba.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Santos Reyero. Para un turno de réplica, tiene la palabra el señor Ceña Tutor, por un tiempo de cinco minutos.


EL SEÑOR CEÑA TUTOR:

Bueno, estoy un poco sorprendido por la réplica del señor Mañueco, pero le quiero advertir, por si acaso no se lo sabe -él, que viaja tanto por Soria-: que Soria está en Castilla y León y quiere quedarse; lo que pasa es que quiere quedarse para que le den los mismos derechos que tienen los demás, y ahora mismo no se lo están dando.

Es un ejemplo claro el del reparto de los fondos europeos. Ha dicho usted que en las negociaciones para nombrar presidente de esta Cámara nosotros propusimos -propusimos, tampoco tuviéramos... tuvimos contrapropuesta- un 12 % del reparto de los fondos europeos. Le recuerdo que Soria tiene el 5 % de los habitantes de Castilla y León y el 12 % del territorio. En el último período de financiación europea recibimos el 2 %. Si recibimos el 2 % de los fondos teniendo el 5 % de los habitantes y el 12 % del territorio, ¿cómo puede decirme usted que estamos tratando equilibradamente y de forma cohesionada a Soria? No la estamos tratando de forma cohesionada ni equilibradamente.

Bien, ha hablado también de industrialización. Yo sería más partidario de hablar de otro concepto: de reindustrialización estratégica. Este concepto lo que significa es que en la pandemia nos hemos dado cuenta que muchas de las industrias se habían deslocalizado en Asia y nos hemos encontrado con que no teníamos suministros. Hay que abordar este problema. Ha hablado de un montón de empresas que se han instalado en León, solo dos en Soria. Me gustaría que algún día subiera a esta tribuna y dijera todas las industrias que se han instalado en Soria que ha traído la Junta de Castilla y León. Por ejemplo, esas 14 empresas que han anunciado que se van a instalar en el polígono del parque empresarial del medio ambiente, que no se han instalado.

Curiosamente ha hablado de... ha hablado de Ólvega y ha hablado de 2 empresas en Ólvega, en un polígono que no es de la Junta de Castilla y León. Y uno de los problemas que tiene Ólvega, y me lo han comunicado algunos empresarios, es la vivienda. Pero la Junta de Castilla y León ha sido tan incapaz de promocionar vivienda que hasta algunos empresarios han tenido que financiar planes de vivienda para sus... para sus empleados. O sea, que no veo yo que se esté tratando con igualdad a los territorios.

Es un concepto un poco extraño -lo he explicado muchas veces en campaña-, el de la transversalidad de Soria ¡Ya!: Soria ¡Ya! no es de izquierdas ni de derechas, Soria ¡Ya! pretende defender los intereses de Soria. Es algo que ustedes, acostumbrados a las etiquetas y a etiquetarlo todo no entienden, pero aquí nosotros no vamos a defender una ideología distinta de la del apoyo al territorio. Y estaremos con usted con la mano tendida. Yo, me sorprende que... me sorprende que... que diga que... que no... que no le hemos... que no le hemos apoyado. O sea, que... que dijimos en una... en una reunión que estaríamos dispuestos a pactar con el Partido Popular. ¡Claro que estaríamos dispuestos a pactar con el Partido Popular! Estamos muy dispuestos a pactar con el Partido Popular, si el Partido Popular cumple su programa, su programa. Pero si lo cumple, si tiene un compromiso cierto con él. Si es que no lo tiene, si es que llevan muchos años. El caso de la radioterapia es un ejemplo palpable. Cuando defendimos el 12 % del dinero de los fondos europeos para Soria, no sé si recuerda que no lo defendíamos solo para Soria, lo defendíamos también para Zamora, porque es una provincia que ha perdido más del 1 % de la población en los últimos siete años, tal y como dicen los fondos europeos. Queríamos ese privilegio para Soria porque los fondos europeos lo reconocen, los fondos europeos reconocen que Soria está en una situación demográfica grave y permanente.

Ha hablado también de las reivindicaciones del Gobierno de España, que si... que no, parece ser... Bueno, yo es que tenía 15 minutos para hablar, no tenía tiempo ilimitado, entonces apoyo las reivindicaciones que haga a territorio de España... al Gobierno de España, pero yo le digo... y yo pensaba que estaba aquí representando los intereses de los sorianos ante la Junta de Castilla y León; y en cuestión de infraestructuras le voy a recordar -parece que no lo sabe- que la única provincia de Castilla y León que no tiene ni un kilómetro de autovía de titularidad autonómica es Soria. Las infraestructuras influyen sobremanera en las personas que viven en el territorio, y ustedes están haciendo dejación de funciones con una parte muy importante del territorio.

Es cierto que muchas de las infraestructuras que están pendientes son de competencia estatal, pero en las que tienen ustedes competencia también están pendientes. Les recuerdo el trayecto entre Yanguas y el confín de la provincia, lindando con La Rioja, que son 4 kilómetros y llevan paralizados pues ni sé el tiempo, la verdad, es una cosa sorprendente.

Y en cuanto al Plan Soria -el Plan Soria II, porque el uno fue un auténtico fracaso, reconocido por ustedes mismos-, el Plan Soria II duró hora y media, porque lo publicaron en el Boletín Oficial de Castilla y León a las siete y media de la mañana y a las nueve por Twitter anunció la disolución del Gobierno y lo dejó inmediatamente sin presupuesto. Pues un plan que dura hora y media, no sé, me gustaría ser optimista, pero me cuesta, me cuesta mucho. No obstante, en todo lo que apoye a Soria, en todo lo que veamos una ventaja para el desarrollo de Soria y de Castilla y León, estaremos de su lado. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Ceña Tutor. Para un turno de dúplica, tiene la palabra el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Bueno, gracias, presidente. Decir que todos los que estamos aquí tenemos nuestra... nuestros planteamientos y que no tenemos que tener una postura coincidente en todo, como ha quedado de manifiesto a lo largo de este intercambio.

Decirle al señor Santos, de las cinco cuestiones que usted planteó en la reunión se le ha olvidado mencionar la sanidad. ¿No? Pues yo creo que ahora, de los cinco temas que ha mencionado no hablaba de sanidad, pero lo damos por bueno, de sanidad.

Planteó cinco cuestiones. Una, le he señalado el Estatuto de Autonomía: es absolutamente imposible porque para eso hay que cambiar el Estatuto de Autonomía, y yo... y yo quiero... perdone, señor Santos, yo quiero cumplir el Estatuto de Autonomía de Castilla y León. Y además... y además le voy a decir que no... se requiere una mayoría cualificada que no existe. Por tanto, usted está en ese debate para generar confusión, generar el agravio, generar el planteamiento. Esto es un debate que ya está cerrado hace décadas y que, desde luego, el mapa autonómico no cabe ni volver a dibujar o reescribir.

Nadie aquí ha dicho nada sobre la descentralización; lo que hemos dicho es que esa es una cuestión que no se puede actuar ni con frivolidad ni, desde luego, con alegría. No se puede venir aquí un día a un acto político del partido, venir, decir que voy a crear no sé qué cuestión, y luego salir corriendo y al día siguiente se me ha olvidado. Hay que hacer un debate sereno, serio, discreto, sosegado, sobre si eso es lo mejor o no para nuestra Comunidad.

Pero decirle también al señor Ceña otras tres empresas: Moreno Sáez, en las Cúpulas; Aperitivos Añavieja, en Ólvega; y Grupo Amatex, en Cabrejas del Pinar. Además, tres municipios, digamos, el entorno del medio rural, aunque Ólvega ya tiene una potencia industrial importante; y, además, están a disposición 390.000 metros cuadrados en el PEMA.

Hombre, decir que Soria no tiene ningún kilómetro de autovía autonómica... Bueno, es que, de la mitad de la Comunidad no tiene kilómetros de autovías autonómicos, porque es que, de las nueve provincias, tienen cinco; pero, si analizamos, Ponferrada, Salamanca, Zamora, también Soria... Mire, yo le podría decir, podría recordar aquí el ofrecimiento que hizo mi antecesor, Juan Vicente Herrera, estuvo dispuesto a cofinanciar la autovía entre Valladolid y Soria: 200 millones de euros. No quiso el Gobierno de España. Pregúntense ustedes quién estaba gobernando en aquel momento el Gobierno de España.

Pero, mire, yo tengo que decirles que desde la Junta venimos trabajando por la cohesión económica y social y también por la cohesión territorial de... de las nueve provincias de Castilla y León, de todas las provincias de Castilla y León. Y, además, yo creo que lo que es bueno para una provincia es bueno para la Comunidad, y al revés.

Fíjese, señor Santos, yo creo que León es una provincia con mucho potencial, se están haciendo cosas y se está apostando por León desde la Junta. Le he puesto ejemplos, se los he recordado. Pero León también tiene que pensar en su orgullo para aportar todas sus capacidades, para ayudarse en primer lugar a sí mismo, y para ayudar a la Comunidad, como ha sido a lo largo de la historia, en lugar de lamentarse, que es la postura más cómoda, la que tiene usted, para no tener iniciativas.

Ahora están ustedes bien: tres procuradores. Bueno, ya tuvieron tres procuradores; eran otras circunstancias. Las olas suben, bajan; las tendencias van y vienen. Pero lo que quiero decirles es -y se lo vuelvo a decir-: no va a darnos lecciones de querer, de dar la cara, de patear la provincia de León al futuro Gobierno. No nos va a dar lecciones, señor Santos. Mire, yo quiero a la provincia de León, como mínimo, tanto como usted. Y no me va a dar lecciones en ese sentido. El que yo haya nacido en Salamanca no quiere decir que no esté comprometido por todos y cada uno de las personas que viven en la provincia de León. Yo sé que ese discurso a usted en estas circunstancias le ha dado buenos resultados. Bien, esto ya iremos viendo qué es lo que ocurre y ya veremos qué es lo que pasa en las próximas elecciones.

Pero lo que sí tengo que decir es que todas las provincias han sido siempre tratadas con justicia, atendiendo a las distintas necesidades; y hay provincias, señor Ceña, que a lo mejor no necesitan un 12 %, es que a lo mejor necesitan el 20. Pero es que usted lo que hizo fue plantear una subasta, digo: "Para que yo le apoye a usted, usted me tiene que dar, de entrada, el 12 % de la tarta que corresponde a todas... a toda la Comunidad Autónoma; y luego, del resto, también participamos la provincia de Soria".

Pero, mire, vamos a ver, si por mucho menos, si por mucho menos, señor Ceña, estamos hoy aquí. Estamos... hemos tenido un proceso electoral, hemos tenido unas elecciones, estamos celebrando este debate. Porque conmigo no valen ni prebendas ni chantajes, señor Ceña. [Aplausos]. Es así. Yo creo que usted ha pensado que yo era el Sánchez de Castilla y León, y ahí se equivocó conmigo.

Tengo que decirle también que ni líneas rojas ni cordones sanitarios. Yo creo que lo que hay que hacer es analizar las políticas en función de lo que hacemos, de lo que decimos. Y yo creo que eso es lo que se tiene que juzgar. Juzgar a las personas, poner etiquetas a las formaciones políticas me parece un error. Yo creo que los... las elecciones ya se han celebrado, los... los ciudadanos han hablado...

Pero lo que sí le puedo decir es, respecto de la fiscalidad rural -lamento que tengamos menos tiempo, le pediremos a la Mesa que para el próximo Debate de Investidura haya más tiempo-, pero ya en el año dos mil, la Junta de Castilla y León, ya en el año dos mil la Junta de Castilla y León aplicó una reducción del 99 % del impuesto de sucesiones en explotaciones agrarias. Y tenemos en vigor en estos momentos ocho beneficios fiscales específicos para el mundo rural: compra, alquiler o rehabilitación de vivienda. Pero también, específicamente para la fiscalidad del mundo rural, decir que estamos entre las tres Comunidades con mejor fiscalidad, más favorable, para el medio rural. Y no nos conformamos, queremos llegar a ser la que mejor fiscalidad rural.

Y vamos a aprobar nuevos beneficios fiscales, los he mencionado esta mañana, vinculados fundamentalmente al impuesto de la renta de las personas físicas, y también el impuesto de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, eximiendo a los jóvenes del pago del impuesto al adquirir su vivienda habitual, y, para el resto, bajarlo del 8 al 3 %. Es una apuesta importante.

También decir que, cuando yo llegué a la Presidencia de la Junta me encontré una negociación en marcha del presidente Herrera, que trabajó en Europa para que se tuviera en cuenta la consideración singular de las zonas con baja densidad demográfica. Yo, personalmente, desde el minuto uno que tomé posesión como presidente, no he dejado de trabajar para conseguirlo. Ahí están las reuniones, Soria fue testigo de una de ellas. Reuniones con los presidentes de Aragón y de Castilla-La Mancha en Soria, en julio del dos mil veinte; en Talavera de la Reina, en diciembre del dos mil veinte; y también en Albarracín, en mayo del dos mil veintiuno. Reuniéndome con la vicepresidenta de la Comisión y comisaria de Demografía, la señora Suica, en febrero del dos mil veinte -me acompañó el entonces vicepresidente de la Junta, señor Igea-; también tuvimos una reunión telemática con la presidenta de la Comisión todos los presidentes de... de Comunidades Autónomas con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en octubre del dos mil veinte. Y hemos tenido también una reunión con la vicepresidenta y comisaria para la Competencia, la danesa señora Vestager, en diciembre del dos mil veinte.

Bueno, son decisiones, apuestas claras, reuniones que permitió el poder considerar y recordar y defender el protagonismo de las zonas rurales, defendiendo una España y una Europa donde hubiera actividad económica y población en todo el territorio.

Conseguimos en abril del dos mil veintiuno que Europa diera luz verde a una fiscalidad diferenciada para estos territorios. Eso es algo que tenemos que sentirnos todos orgullosos de ello. Sí. Estoy hablando en abril del dos mil veintiuno, hace un año. Esperamos que el Gobierno Sánchez pueda aplicar ese ahorro del 20 % de los costes laborales a empresas en estas zonas. Seguimos esperando. Pero nuestro compromiso está bien claro con la fiscalidad diferenciada, que va a beneficiar a Soria y que se puede ampliar a otras zonas. A lo mejor no a provincias completas pero sí a otras zonas de la Comunidad Autónoma, de nuestra Comunidad Autónoma.

Y ya, para ir concluyendo, yo lo que sí le puedo decir es que en la vida uno puede coger muchos caminos, pero coger la política estéril, escoger la irrelevancia me parece un error. Cuando uno tiene la posibilidad de aportar a un Programa de Gobierno yo, desde luego, me hubiera apostado por contribuir al futuro de... de sus provincias representadas, de Soria y de León. Han querido plantear, como digo, pues por un lado una subasta, por otro lado, apostar por esa política de confrontación, cada uno elige el camino que quiere, pero yo, desde luego, por ahí no paso.

Lo que sí creo que es importante es que todos tengan claro que lo que necesita la provincia de León, lo que necesita la provincia de Soria, lo que necesitan las siete provincias restantes de la Comunidad Autónoma de Castilla y León lo va a impulsar el Gobierno que va a salir elegido, que espero, confío, que salga elegido del debate de investidura de hoy y que se forme a partir de la próxima semana. Muchísimas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Fernández Mañueco. En representación del Grupo Parlamentario Mixto, tiene la palabra don Juan Pablo Fernández Santos, por un tiempo de diez minutos.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

Sí. Gracias, presidente. Señorías, las personas lo primero; lo primero la gente. Esta es la premisa irrenunciable que ha guiado todas nuestras actuaciones desde que iniciamos nuestra singladura en estas Cortes, y sin duda será la máxima grabada a fuego en el frontispicio de nuestro proyecto político en la legislatura que ahora comienza.

Porque este aforismo, las personas lo primero, adquiere hoy su verdadero significado, su auténtica potencia, en una jornada en la cual, en la sede de la soberanía de los castellanos y leoneses, de las leonesas y castellanas, se escenifica el pacto de la infamia, que da entrada en el Gobierno autonómico a la ultraderecha, a la moderna encarnación del fascismo, con la tragedia que eso va implicar en forma de lacerantes recortes de derechos y libertades, muy especialmente de mujeres, de emigrantes y del colectivo LGTBI. Y todo ello para regocijo del Partido Popular y del señor Mañueco, que, sin ruborizarse lo más mínimo, da cobijo en su Ejecutivo al racismo, al machismo, a la homofobia y a la xenofobia.

Sin pestañear, sin inmutarse, sin una pizca de vergüenza, hoy se hacen cómplices del odio, del más exacerbado trumpismo, de la política de la más baja estofa. Y ahí está usted, señor Mañueco, ufano, henchido de satisfacción, rebosante de gozo porque va a mantener su poltrona y va a poder seguir tapando todos los hediondos casos de corrupción del Partido Popular con la aquiescencia de esa ultraderecha cobarde con los poderosos e implacable con los débiles y vulnerables.

Usted siempre ha sido un epígono de la más rancia derecha, señor Mañueco, pero este pacto de la vergüenza le hace indistinguible de Vox, para sonrojo del mismísimo Partido Popular europeo, que ha calificado su matrimonio con la ultraderecha de capitulación y de triste sorpresa. Es indubitable que lo que aquí bendicen ustedes con Feijóo a la cabeza abochorna en Europa. La regeneración del Partido Popular patrio era echarse a los brazos de la extrema derecha. Está claro que el señor Feijóo y usted, señor Mañueco, son a la moderación lo que Putin al pacifismo. Y, por cierto, son a los aliados de Putin en Europa a los que usted da entrada con alborozo en su Ejecutivo.

Está visto, señor Mañueco, que usted ha hecho un pan como unas tortas. Por su capricho y por su ciega obediencia al hoy defenestrado Pablo Casado rompió el Gobierno; convocó elecciones anticipadas en lo peor de la sexta ola de la pandemia; dejó a Castilla y León sin presupuestos en un momento crucial para la historia de esta Comunidad, en la que usted debería haber estado centrado única y exclusivamente en procurar la recuperación social y económica de esta tierra; y mintió a todo el mundo, obnubilado por unas encuestas que le han salido rana. Todo ello para llegar hasta aquí, incubando al huevo de la serpiente. Sin duda, pasará usted a los anales, pero de la infamia.

Y es que va usted de hito en hito. En dos mil diecinueve se convirtió en el primer presidente perdedor de la historia de esta Comunidad, y ahora en el primero en introducir a la ultraderecha en el Gobierno.

Su falta de escrúpulos políticos queda condensado en esos 32 puntos del acuerdo con Vox, inconcretos, una vaga declaración de intenciones, una nadería en lo que se refiere a las principales problemáticas de esta Comunidad, pero que es así, desgraciadamente rebela que ustedes van a desamparar a las mujeres víctimas de la violencia machista, que van a abandonar al colectivo LGTBI y que van a hacer de la antipolítica su bandera, porque hoy se hermanan con aquellos que entienden la res publica como problema y no como solución.

Y es que con tal de mantener su sillón, con el único objetivo de conservar la poltrona, se han prosternado ante la ultraderecha, se han bajado los pantalones de la forma más indigna, doblegándose a todas sus exigencias.

Para nosotros es un drama que usted vaya a seguir siendo el presidente de esta Comunidad, apuntalado además por la extrema derecha. Ya demostró la pasada legislatura que usted carece de proyecto político para nuestra tierra y para nuestras gentes. Es por ello que nada esperamos de su mandato más allá de una continuidad perniciosa en la despoblación, en la precariedad, en la desigualdad, en los enormes desequilibrios interprovinciales, en la brecha salarial que sufren las mujeres, en la hiriente privatización de lo común, en el salvaje deterioro de lo público, en la sangrante desindustrialización de esta Comunidad, en la tremebunda destrucción de autónomos, en la opacidad de la Junta y en las corruptelas, ese ADN, esa marca de la casa del Partido Popular. Todo ello sumado al execrable recorte de derechos y libertades que va a provocar, con su anuencia, su compinche de Gobierno.

Y frente a ello, desde Unidas Podemos no vamos a dar ni un paso atrás. Frente a la intolerancia, frente al odio, frente a la merma en derechos y libertades, nos van a tener enfrente. Seguiremos ejerciendo la firme y férrea labor de Oposición, escrutando y escudriñando todas sus actuaciones, denunciando las trapacerías que están por acaecer, y que, estoy convencido, cometerá su Ejecutivo. Pero también, y por supuesto, desgranando propuestas y medidas que mejoren la vida de nuestros conciudadanos, que revitalicen esta tierra y que acaben con la funesta lacra de la despoblación, que es el aciago fruto de las políticas del Partido Popular.

Es por ello que desde Unidas Podemos planteamos cinco ejes de actuación para mejorar la vida de los castellanos y leoneses, de las leonesas y castellanas:

El primero, el blindaje de los servicios públicos: de la sanidad, de la educación y de los servicios sociales. Ustedes están deteriorando hasta lo indecible la sanidad pública. Nosotros abogamos por fortalecerla, garantizando que se invierte en la misma al menos un 8 % del PIB, y robusteciendo muy especialmente la maltrecha pero clave Atención Primaria, destinando a la misma al menos un 25 % del presupuesto total de la Consejería. Además, queremos reforzar la educación pública, que hoy languidece ante su apuesta por la privada concertada. Y en materia de servicios sociales, propugnamos un cambio de paradigma en el modelo residencial, en el que lo público, por fin, sea la regla general y lo privado la puntual excepción, incrementando exponencialmente las plazas públicas en las residencias y recuperando para lo público el servicio de ayuda a domicilio.

Como segundo eje, impulsar una respuesta económica que permita que nuestras paisanas y paisanos puedan quedarse en esta tierra a desarrollar un proyecto vital digno, con estabilidad y con garantías. Y para ello es incuestionable que hay que generar empleo fijo y de calidad. Es por ello que nosotros apostamos por la creación de planes específicos de empleo para las mujeres, para los jóvenes, para los mayores de 45 años y para los moradores del medio rural. Conjuntamente, queremos que se apruebe una ley de autónomos que proteja a un colectivo que es vital para nuestro tejido económico, y al que ustedes le están machacando de forma inmisericorde. Y además, es necesario un cambio, una transformación de nuestro modelo productivo, aprovechando la llegada de fondos europeos; algo que debería cimentarse en la innovación, el desarrollo y la investigación; I+D+i que ha sido sistemáticamente y tradicionalmente olvidados por sus políticas y el objeto de sus más flagrantes incumplimientos. Nosotros queremos que se destine un 3,5 % del PIB al I+D+i, de cara a lograr una reindustrialización en clave verde y digital en esta tierra, que genere empleo de calidad.

Como tercer eje, desarrollar una propuesta habitacional clara, que dé cumplimiento al Artículo 47 de la Constitución, de modo que todo el mundo en esta Comunidad pueda acceder a una vivienda digna en condiciones asequibles, muy especialmente los jóvenes y los habitantes del medio rural. Y para ello es perentorio crear un parque público de viviendas adecuado y suficiente, señor Mañueco, no las 1.500 viviendas que decía usted esta mañana, que son del todo insuficientes.

El cuarto eje, una estrategia de... de infraestructuras dignas y sostenibles, en coordinación con el Gobierno de España, para cohesionar y para vertebrar Castilla y León, impulsando el ferrocarril convencional, el tren de cercanías, la FEVE en la provincia de León; y, por supuesto, un plan de carreteras para adecuarlas y acondicionarlas de cara a que nuestros pueblos no se hallen aislados, como están muchos de ellos a día de hoy. Y, eso sí, garantizar de una vez por todas que en pleno siglo XXI internet llegue al conjunto del territorio de esta Comunidad, porque, señor Mañueco, es grotesco escucharle prometer una y otra vez esta misma cuestión, cuando hay muchas zonas de nuestra Comunidad que están yermas de conexión, ante su eterno retorno de incumplimientos.

Y el quinto eje, una política fiscal verdaderamente progresiva, que dé cumplimiento al mandato consagrado en el Artículo 31 de nuestra Constitución. Porque su política fiscal, señor Mañueco, es regresiva y favorece únicamente a los más ricos, a los más privilegiados, perjudicando al resto, a las mayorías, a las clases medias, a las clases trabajadoras y populares. Y además, para acometer las medidas que precisa esta Comunidad, son necesarios ingresos; y, por ello, es incontrovertible que hay que llevar adelante una reforma fiscal verdaderamente progresiva, que permita, además, fortalecer los servicios públicos y transformar nuestro modelo productivo.

Señorías, a pesar de la tropelía que se va a sellar hoy aquí, dando cabida a la ultraderecha en el Gobierno, vale la pena seguir luchando y continuar portando en estas Cortes la voz de los que piensan que otra Castilla y León es posible, la voz de los olvidados y de los abandonados por sus políticas.

Nosotros continuaremos insubordinándonos ante la impiedad y ante la injusticia, porque creemos en otra Castilla y León, una en la que las personas sean responsables las unas de las otras; una en la que el amparo y la fraternidad sean las raíces éticas del árbol moral de los pueblos; una en la que lo indócil es un deber ante los decretos de servidumbre de los poderosos.

Desde Unidas Podemos, continuaremos dejándonos la piel todos los días y trabajando con denuedo para mejorar la vida de los castellanos y leoneses, de las leonesas y castellanas, porque, a pesar de todos los pesares, somos legión los que inaccesibles sostenemos con fuerza la idea, hecha solo de palabras, de que algún día las estrellas serán para quien las trabaje, de que, más pronto que tarde, por fin las personas en Castilla y León serán lo primero. Muchas gracias.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Santos. En representación del Grupo Parlamentario Mixto, tiene la palabra don Francisco Igea Arisqueta, por un tiempo de diez minutos.


EL SEÑOR IGEA ARISQUETA:

Muchas gracias, señor presidente. Bueno, un gusto volver a vernos, señor Mañueco. Mire, no puedo otorgarle la confianza porque es que ni siquiera me la ha pedido; así que... Ni siquiera tuvo la decencia de reunirse con los grupos políticos que representamos más de 100.000 personas -120.000 personas- en esta Comunidad. Nos envió al señor Carriedo y a la señora Blanco, a quien ya transmitimos nuestra intención.

Pero mire, voy a hacer lo que usted nos ha pedido todo el rato, que es: yo no le juzgaré por sus palabras o por sus promesas, le voy a juzgar por sus hechos, ¿eh? Usted prometió agotar la legislatura; se lo prometió a todos. No lo cumplió. Usted prometió diálogo a esta Cámara para elaborar las normas y los presupuestos. No lo cumplió. Prometió lealtad eterna a Pablo Casado, y ya vimos cómo acabó. Prometió que gobernaría en solitario; y aquí estamos, ¿eh? Usted prometió intentar un dialogo y un acuerdo con todos, y usted ha engañado a Por Ávila, al PSOE, a UPL, en incluso, en un tiempo récord, a Soria ¡Ya!, ¿eh?

Y mire, usted ha dicho que el Partido Socialista buscaba tránsfugas en lo duro de la pandemia, y encontró uno: usted, ¿eh? Porque usted no era el que estaba buscando las medidas sanitarias, usted lo que estaba mirando eran las encuestas.

Mire, es usted el primer político en este país que se aventura en este inhóspito campo de pactar con la ultraderecha: con la intolerancia, con la xenofobia, con el machismo. Unas políticas que van a poner en riesgo el crecimiento económico, las libertades de nuestra Comunidad. Sé que el tema va a sonar exagerado; es más hay gente ya blanqueando el discurso de Vox en la Comunidad, sobre todo desde que el señor García-Gallardo avisó que ya se va a hacer cargo él de la publicidad institucional. Pero voy a tratar de explicarlo porque soy hombre de razonamientos y de hechos, y no de soflamas.

Mire, Vox es el único partido político que ha negado sistemáticamente la presencia de determinados miembros de la prensa en sus actos y en sus ruedas de prensa. Hoy es que lo ha hecho hoy a la puerta aquí el señor Abascal con La Sexta. Pero es que, además que lo señala. Es que la semana pasada señaló a un peligroso izquierdista, Vicente Vallés; y lo señaló en las redes, para que se le persiguiese. Hombre, no tan intensamente como hizo el señor Abascal con el editor de El Jueves, de quien publicó su fotografía y dijo literal: "Es posible que muchos empiecen a exigir responsabilidades al salir de su despacho en la Diagonal de Barcelona". Ole. Menos mal, señor Mañueco, que usted no cede a amenazas, si no yo estaría preocupado.

Bueno, además, Vox es un partido que milita abiertamente en la destrucción de nuestro modelo de Unión Europea, ¿eh? Las élites globalistas la llaman los burócratas de Bruselas, ¿eh? Y a usted no se le ocurre otra cosa que mandar al señor Gallardo a Europa. Eso solo se le ocurre a usted. Mire, usted va a llevar la Comunidad del grupo de los liberales al grupo de los eurófobos. Los que nos tienen que negociar allí nuestras políticas agrarias, industriales, todas esas cosas, pues oiga, lo va a negociar este señor -peligroso, según el señor Tusk, ¿eh?-. Y este señor, que tiene orgullo, de decir que son amigos del único presidente europeo que ha sido felicitado por el señor Putin, que es el señor Orbán. Estos son nuestros emisarios en Europa en este momento.

Bueno, no acaban ahí los perjuicios de introducir lo que se llama "la peste verde" en nuestras instituciones, porque han introducido ustedes también a los negacionistas de la ciencia. Quiero recordar como el señor Abascal, en un programa de radio de máxima audiencia, se negaba a confirmar si se había vacunado o no, ¿eh? Como el señor Buxadé decía que era igual de bueno vacunarse que no vacunarse. Oiga, cuando haya otro brote en la pandemia u otra pandemia, igual tiene que salir usted, porque ya no tiene un vicepresidente que se parta la cara por usted.

Mire, además, sus socios llaman a la política medioambiental "religión climática" o "fanatismo climático". Usted parece convencido esta mañana, ha dicho que iba a pedir al Gobierno que cambiase la política energética, ¿eh? Estos señores han llegado a negar las evidencias más palmarias, incluso delante de la catástrofe del mar Menor, y su portavoz en la ley de enmienda climática, en el Congreso de los Diputados, el señor Francisco José Contreras, dijo esta frase que hay que enmarcar: "Mueren diecisiete veces más personas de frío que de calor en el mundo. Que se caliente un poquito reducirá esas muertes". Ole. Ole.

Mire, estos son sus socios, quienes ustedes han metido en el Gobierno para cuidar de nuestros intereses.

Pero es que en política económica no son mucho mejores, son los reyes de proteccionismo. Y usted también, sorprendentemente, esta mañana se ha convertido al proteccionismo al decir la protección de nuestros productos y nuestras industrias. El proteccionismo en una Comunidad que es... tiene un balance exportador netamente positivo. Oiga, ¿qué va a hacer usted si entran ustedes en una guerra comercial? Porque, claro, ¿ustedes piensan que los demás no van a proteger lo suyo? Mire, lo decía Escohotado: los enemigos del comercio son los enemigos de la libertad.

Pero, si tiene alguna duda, pregúntense qué ocurrió en Inglaterra cuando otro de los admirados socios de estos señores, el señor Farage consiguió sacar a Inglaterra de la Unión Europea. Ocurrió que hoy la fábrica de Swich Mobility está en Valladolid, no está en Inglaterra. Eso es lo que traen las políticas proteccionistas y aislacionistas de estos señores.

Pero además van a acabar con la paz social después de pedir que se quiten las prestaciones sanitarias a los inmigrantes ilegales, que se quiten las ayudas a las asociaciones que cuidan de los inmigrantes, de hostigarlos, de decir que la gente que viene del norte de África es peligrosa con las mujeres porque las violan. Se puede ser xenófobo, muy xenófobo y luego está el señor García-Gallardo.

Mire, parece ser que los únicos apellidos que a ustedes les gustan son los Von Frings, los Tertsch o los Smith. Hay otros apellidos extranjeros que les gustan. Miren, no solamente es humanamente repugnante, ¿eh?, es que además ustedes, que presumen mucho de valores cristianos -seguramente van a acudir esta semana con sus mantillas y sus capuchones a las procesiones-, son, simplemente, sepulcros blanqueados.

Miren, ¿y qué urgencias tenían estos señores para la Comunidad? Pues ya hemos visto. Oiga, mire, era muy fácil: "Queremos lo mismo que Ciudadanos". No. No, no, no; lo que no queremos es ser portavoces, que ahí dan cera. No, no. Vicepresidente -sin trabajar, a ser posible, ¿eh?-. "Queremos tres Consejerías, pero unas de repartir dinero, ¿eh?, unas que son el 9 % del Presupuesto, no me haga usted encargarme de la sanidad, que menudo lío, que menudo lío". Porque a eso es a lo que han venido. Ustedes han venido con 32 puntos de un acuerdo inconcretos, vagos y no con los 100 puntos concretos, con leyes concretas, con reformas concretas sobre transparencia, sobre derechos y garantías, sobre lucha contra la corrupción.

A este respecto le diré que usted ha ganado en esto, porque usted ya no tiene en el Gobierno alguien que promulga la transparencia, la lucha contra la corrupción; tiene un abogado especialista en casos de corrupción. Y eso es bueno para usted. Usted no quería socios; usted quería cómplices.

Y usted tomó esta decisión a sabiendas, siendo consciente, plenamente consciente de lo que iba a ocurrir. Usted prefirió a Vox deliberadamente. No se engañe y no nos engañe.

Pero entre las urgencias hay una que no quiero dejar de reseñar, que es la de ocultar la existencia de la violencia de género. Hoy lo ha dicho el señor García-Gallardo en la rueda de prensa -supongo que lo dirá otra vez-: la violencia no tiene género. Señora Blanco, ¿qué le han dado a usted para admitir esto? Mujeres del Partido Popular, ¿qué les han dado a ustedes para admitir esto? Quizás, ¿que no habrá Comisión de Residencias? Quizás eso. Eso es lo que vale... eso es lo que vale lo que decía la señora Pinacho en la legislatura pasada, que habíamos dejado morir a los ancianos y tal. Y esto ha desaparecido, ha desaparecido, porque ya tienen ustedes un vicepresidente y un cargo y todas estas cosas.

No vamos a hablar de la ley de memoria ni de lo terrible que es intentar decir a los ciudadanos de esta Comunidad y de este país que no hubo abuelos buenos y abuelos malos, como dice el señor García-Gallardo; que quienes traían en un camión a las afueras de Medina del Campo a más de 30 personas, las bajaban del camión, les pegaban un tiro en la nunca y las mandaban a un pozo no eran abuelos malos. Pues no sé de quién eran pero eran muy malos. Tan malos como los que lo hacen en el País Vasco, tan malos como los que hacen en Bucha, igual.

Bueno, pues esto es para ustedes la concordia, ¿eh?, esta es la concordia que nos espera.

Voy a concluir. Mire, ustedes no han planteado aquí ni medidas fiscales ni planes para reformar nuestra sanidad ni Atención Primaria, ni medidas contra la despoblación, nada de nada de las auténticas urgencias de nuestros agricultores, de nuestros ganaderos, de nuestra industria, de nuestras familias. Nada. Solo estas cosas ideológicas.

Mire, señor Mañueco, usted no es digno de confianza porque ha mentido a los ciudadanos, a los partidos políticos, incluso al suyo propio. Usted no es digno de confianza ni siquiera para el presidente de su partido. No venga a pedirnos a nosotros lo que hasta el propio señor Feijóo le ha negado hoy con su ausencia en este hemiciclo.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Igea. A continuación, en representación del Grupo Parlamentario Mixto, tiene un turno don Pedro José Pascual Muñoz, por un tiempo de diez minutos.


EL SEÑOR PASCUAL MUÑOZ:

Muchas gracias, presidente. Buenas tardes, señorías. Nos encontramos en el segundo Debate de Investidura en menos de tres años, y lo que he escuchado esta mañana no es muy diferente de lo que usted dijo en el año dos mil diecinueve. Vuelve a contarnos una declaración de intenciones y hoy usted, el que previsiblemente va a gobernar en esta Comunidad no sabemos si los próximos cuatro años, repite más de lo mismo.

Veremos, aunque tengo muchas dudas, si esta nueva etapa que se inicia hoy es tan estable, fuerte, sólida y duradera como usted lleva prometiendo todos estos días.

Lo mismo que en julio de dos mil diecinueve, usted hoy ha dado un discurso políticamente correcto; pero que a mí, como castellano y leonés, y sobre todo como abulense, no me llega ni me transmite nada, es más, me desilusiona y me decepciona.

La mayoría de nuestros paisanos residen en zonas rurales, es población con mucha edad y -lo más importante- muchos de ellos padecen de enfermedades crónicas pluripatológicas que necesitan, entre otras cosas, un transporte sanitario y unas comunicaciones correctas para poder trasladarse y recibir una atención adecuada y de calidad en tiempo razonable.

Mucho hablar de blindar la asistencia sanitaria, pero no he escuchado nada en concreto en su intervención que cómo piensa hacerlo. Y esta demanda no es solo de los abulenses, señor Mañueco, es algo común a muchas zonas de nuestra Comunidad, pero ustedes -como siempre- más de lo mismo. Porque Castilla y León es una Comunidad muy grande, con nueve provincias muy... muy diferentes entre sí, con peculiaridades diferentes y diferentes necesidades, y a las que durante más de 30 años no se ha tenido en cuenta. Por eso tienen que existir partidos como Por Ávila o Soria ¡Ya!, para reclamar aquello que ustedes olvidan, porque no solo olvidan a territorios y provincias, se olvidan de las personas, que es lo más importante. Tienen que trabajar por provincias que claramente están en desventaja con el resto.

Ante esa pasividad de tantos años, le seguiré trasladando las reivindicaciones que me trasmiten los abulenses y que son siempre las mismas de todos los años: mejorar las comunicaciones tanto por carretera como por ferrocarril. Le recuerdo que hoy para llegar a este Pleno he venido por un tramo de carretera nacional porque seguimos sin conexión con autovía por Valladolid, con Valladolid. Y del ferrocarril mejor ni hablar. Bueno, sí, mencionar, aunque sé que no es competencia de la Junta, pero sí se puede hacer, el AVE, una promesa de su partido, ni está ni se le espera en Ávila ni estará nunca. Otra promesa más.

En cuanto al empleo, señor Mañueco, no me diga que está en marcha un Plan Territorial de Fomento, que ya sé, porque eso ya lo sé, ya le digo, pero todavía va muy lento y es necesario que las propuestas del Plan Territorial se pongan en marcha cuanto antes y que se cumplan. En Castilla y León la tasa media de paro es de 10,3 %. La tasa de paro supera en Ávila el 15 %. Como de costumbre, la más alta de toda la Comunidad.

En cuanto a industria, también estamos a la cola de la Comunidad. El PIB de Ávila es de 5,56, el segundo más bajo de la Comunidad, solo por detrás de Soria.

En cuanto a la sanidad, tiempo tendremos de hablar largo y tendido a lo largo de la legislatura -depende de lo que dure la legislatura-, pero le recuerdo que las provincias como Ávila tenemos un grave problema con la Atención Primaria, tenemos un grave problema con el transporte sanitario, tanto urgente como programado, puesto que seguimos dependiendo de hospitales de referencia para muchas patologías, y sobre todo en las que son tiempodependientes.

Todo esto ya lo sabe, pues lo he dicho cincuenta mil veces aquí, en los dos años y medio o tres que llevo aquí, pero como en otras y muchas reivindicaciones todo se queda en agua de borrajas. Reivindicaciones que, como le digo, yo las hago pero no son mías: son de los abulenses y de todos los castellanos y leoneses. Lo que más me indigna de estos dos años y medio es que no se haya hecho prácticamente nada por saldar la deuda histórica que ustedes tienen con mi provincia. Solo se acuerdan de Ávila en el período electoral.

Y sobre todo me indigna que se haya perdido una gran oportunidad por no llevar a cabo los que eran los mejores Presupuestos, los Presupuestos más altos de la historia, tanto para la Comunidad como para Ávila. Eso decían ustedes; o así lo explicaron. Pero se lo cargaron con un adelanto electoral que nadie entiende y que ni a ustedes les ha supuesto ningún beneficio.

Lo que ha hecho es de vergüenza: escudarse en pactos inexistentes y en supuestas traiciones para echar todo eso por tierra y convocar elecciones. Y esto es algo que yo como abulense no puedo ni debo perdonar. Nos han traicionado ustedes con el único objetivo de sacar un rédito político. Han traicionado a los abulenses para seguir manteniendo su sillón y por el único interés de su partido político, que para ustedes siempre está por encima de todo. Pero está claro que lo que ustedes buscaban con la convocatoria electoral no lo han conseguido y no les ha quedado otra que volver a pactar.

Les dimos nuestro apoyo y nuestra confianza en varias ocasiones, como en los Presupuestos del año dos mil veinte, o aprobando el techo de gasto en dos mil veintiuno para que el Presupuesto de ese año saliese adelante. He confiado en su palabra; pero ustedes nos han pagado aún más olvidando a los abulenses.

Ávila y Castilla y León necesita un presidente que de verdad cumpla con lo que promete, con lo que dice a los ciudadanos, y no que a la primera de cambio y sin justificación abandone a estos ciudadanos, convoque unas elecciones, con el enorme gasto que eso conlleva -ya no solo económico, sino social- y en plena pandemia sanitaria, de crisis económica, con la inestabilidad que eso genera. Porque le recuerdo que, gracias a usted, llevamos casi cuatro meses sin un Gobierno estable, con unos Presupuestos prorrogados y con un panorama sanitario, social y económico que necesitan un Ejecutivo competente que dé la talla al frente de las necesidades de la población. Algo que, visto lo visto, y con el mismo panorama que otro Gobierno de coalición, no sé si se lo dará. ¡Ojalá!

Como le decía, son casi cuatro meses sin estabilidad e incertidumbre. Esa, la certidumbre que buscaba usted adelantando las elecciones, y eso me parece de verdad, señor Mañueco, una falta de respeto hacia todos los castellanos y leoneses. Tienen a trabajadores esenciales, como los del transporte sanitario o los bomberos, o a la gente del campo, desmotivados, desesperados. Al personal público temporal a las puertas del Parlamento esta mañana por el trato tan injusto que están recibiendo por no llevar a cumplimiento la ley.

¿Cómo quedan las iniciativas que se estaban tramitando, señor Mañueco? ¿Las proposiciones no de ley que se aprobaron y que se supone, por lo que nos decían, que ya estaban en tramitación? Aunque, como he visto en estos dos años y medio, mucho aprobar iniciativas para luego no llevar nada a cabo. ¿Qué va a pasar con todo eso, señor Mañueco? Porque entiendo que cuando se aprueba algo en estas Cortes se le debería dar cumplimiento, porque considero que es algo bueno para los castellanos y leoneses. Y, si no, pues qué sentido tiene el Poder Legislativo. ¿Qué ha pasado con las Comisiones de Investigación? ¿Con la que iba a investigar lo sucedido en las residencias, o la del incendio de la sierra de la Paramera de Ávila? Hoy reclamo que se retomen cuanto antes las Comisiones de Investigación de las residencias y la del incendio de la sierra de la Paramera, el incendio que más hectáreas ha calcinado en nuestra Comunidad. ¡Bah!, pero, visto lo visto, parece que a ustedes todo esto les da igual.

Y termino. No me voy a extender más porque me... me caliento y no quiero. (Sí, porque yo he escuchado con mucho respeto también, Raúl. Es que, de verdad...). Y termino ya diciendo que nuestro voto a su investidura de hoy, como ya he anunciado, será que no. Eso no quiere decir que no nos vayan... no... no vayan a tener en contra... nos vayan a tener en contra en todo lo que vayan a proponer en lo que queda de legislatura, ni mucho menos. Esto no quiere decir que me vaya a encontrar en contra, señor Mañueco, para dialogar, consensuar, todo lo que sea bueno para mi provincia y para Castilla y León; para Castilla y León, también. No solamente miro por mi provincia, muchas de las enmiendas eran para Castilla y León. Me encontrarán siempre que encuentren... que... que quieran el progreso para Ávila y para Castilla y León.

Pero el "no" de hoy es porque sigo sin entender el trato desigual que se nos está dando. Tengo muy claro que como vengo haciendo desde que soy procurador por la provincia de Ávila voy a continuar reivindicando, todavía más si cabe, todo aquello que Ávila necesita y que los abulenses me transmiten. Y aunque venga, como muchas veces vengo, sin dormir, después de salir de trabajar, me da igual; voy a seguir haciéndolo porque me siento muy orgulloso de hacerlo por mi provincia.

Ávila y Castilla y León no merecen un presidente que siga manteniendo las diferencias que se han generado en los diferentes Gobiernos regionales y que han hecho que existan provincias de distinta categoría. Porque Ávila sigue igual o peor que hace treinta años, señor Mañueco, y eso no lo podemos permitir. Por eso, todos los abulenses pueden contar conmigo para luchar para que Ávila no sea más que nadie, que no sea más que nadie pero tampoco menos que nadie; para trabajar por una Comunidad, la de Castilla y León, más equitativa y justa para todos sus habitantes, porque nos merecemos -de verdad, señor Mañueco- de una vez por todas ser iguales y tener similares oportunidades. Muchas gracias.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Pascual Muñoz. Para contestar, tiene la palabra el candidato, el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Muchas gracias, presidente. Paso a dar respuesta a los representantes del Grupo Mixto. Y comienzo por el procurador de Podemos, el señor Fernández. Me hubiera gustado empezar agradeciéndole el tono de su intervención, pero con usted es imposible. Ya venía calentando motores en estos días de atrás, porque le hemos escuchado cada cosa... Pero ¿qué quiere que le diga, señor Fernández? Es que usted está pasado de revoluciones. Tranquilícese, serénese, relájese, señor Fernández, no tema. [Aplausos]. No tema, no se desmoralice. Si va a seguir siendo el procurador que más intransigencia y radicalidad traiga a esta Cámara, señor Fernández. [Aplausos]. Nadie le va a quitar ese puesto. No se preocupe. En serio, de verdad se lo digo. Usted va a ser el que más va a insultar, el que más va a faltar al respeto a los demás y, con el permiso del señor Tudanca, también el más intolerante con las políticas elegidas en las urnas por los castellanos y leoneses. Le esperamos aquí.

A usted también le han dicho las personas de Castilla y León que sus soflamas, sus aspavientos y también sus salidas de pie de banco no las queremos en Castilla y León. [Aplausos]. Es la realidad.

Por cierto, una pequeña puntualización. Hablaba usted de esta Cámara, de las Cortes de Castilla y León, y hablaba de la soberanía. Le voy a hacer una pequeña corrección: la soberanía solo está en el pueblo de España, y eso reside en el Congreso de los Diputados, no en las Cortes de Castilla y León. Nosotros somos los representantes del pueblo de Castilla y León. No hay una soberanía compartida; solo la tiene España, el pueblo español y el Congreso de los Diputados. [Aplausos]. Parece mentira que no lo sepa usted, señor Fernández.

Es verdad, esto es una Cámara democrática y aquí se viene a debatir, a discrepar y a consensuar; a lo que no se viene es a hacer numeritos. Porque, hombre, que usted nos venga aquí y nos hable de Putin, ¡eso sí que es un numerito de tomo y lomo! [Aplausos]. Y a mí ya no me puede culpar, porque se lo avisé hace mucho, que su radicalidad no iba a tener ni crédito ni rédito, señor Fernández, que se iba a dar usted un batacazo electoral. Y vaya si se lo ha dado.

Fíjese, el trece de febrero escribía usted en las redes, literal: "Hoy vamos a llenar las urnas...". "¡Demostremos que sí se puede!". Señor Fernández, el catorce de febrero, el día después, cuando ya se conocían los resultados, decía, literal: "No hemos sido capaces de dar la vuelta a 35 años del Partido Popular en Castilla y León y eso nos tiene que hacer reflexionar". Y, desde el catorce de febrero hasta hoy, yo lo que veo es que usted podía haber reflexionado algo, un poco. Pero sigue instalado en ese discurso gritón, faltón, fracasado, punto por punto y coma por coma. Es que usted no cambia, señor Fernández, es invariable.

Castilla y León lo ha dicho alto y claro: no tiene confianza en su opción política. Ha dicho que no, ha dicho que basta a su retórica incendiaria, que usted es un metal que resuena, unos platillos que aturden, y que su eco se apaga poco a poco, señor Fernández. [Aplausos].

Usted es un magnífico ejemplo de la política de Marx, de Groucho Marx. Literal, abro comillas: "El arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y después aplicar los remedios equivocados". Eso es, precisamente, su forma de actuar, señor Fernández. Usted falsea sin ningún pudor el diagnóstico de los problemas. Si no le gusta la realidad, se la inventa. ¡Para qué! La empeora o, si es necesario, la crispa y la denuncia a los cuatro vientos.

Cuando usted habla de privatización, de desmantelamiento de lo público, especialmente en la sanidad y en los servicios que gestiona la Junta de Castilla y León, es absolutamente desconocer la realidad. Porque, fíjate... fíjese, está en la Comunidad Autónoma donde menos porcentaje del presupuesto sanitario se destina a conciertos privados. O en la Comunidad Autónoma, Castilla y León me refiero, con mayor dotación de plazas residenciales de financiación pública de toda España, señor Fernández.

Aunque su mejor receta es la de la despoblación. Fíjese, usted ha decidido presentarse a las elecciones por Valladolid, no por León: una buena reacción contra la despoblación; contra la despoblación de sus escaños, señor Fernández. [Aplausos]. Su presencia menguante en este Hemiciclo no hace más que reflejar el papel menguante de su formación política en la política española, que va camino del más absoluto de los espacios irrelevantes.

Está usted fuera de la realidad política de Castilla y León, aunque es verdad que su partido está dentro del Gobierno de Sánchez. Y la pandemia, la crisis de precios, la guerra de Ucrania a ustedes les han situado todavía más fuera de la realidad. Fíjese la propuesta para luchar contra la factura de la luz: que no sea bajar los impuestos, que sea subirlos. Es que ha hablado aquí de fiscalidad progresiva, y ya sabemos que eso, en su boca o en la de cualquier dirigente de la izquierda, ya sabemos lo que es: hachazo a los bolsillos de los castellanos y leoneses y de los españoles. [Aplausos].

También tiene usted otra propuesta: crear... -usted no, su partido-, crear en España una empresa pública de energía. Eso lo dice todo de su infantilismo político. Porque usted compagina ese infantilismo con el mayor cinismo político. Y, además, todo aderezado con una violencia verbal que es que no nos gusta a nadie, que son más propios de tiempos que no deberíamos ni recordar siquiera.

Mire, yo le puedo decir que usted está fuera de la realidad, que nuestros valores están bien claros: la Constitución del 78, la Monarquía Parlamentaria, la democracia liberal, creer en el Poder Judicial... Esto es así, en todos los casos, no cuando a sus amigos le viene mal. En todos los casos. Esos son mis valores, esos son unos valores que no son como los suyos, de quita y pon. Yo sí creo en Castilla y León y creo en las capacidades de las personas de esta tierra y, sobre todo, en el valor de las ideas y en los proyectos que aquí se forjan.

Señor Fernández, yo le invito a que retome ese tuit, le invito a volver a la realidad y a reflexionar. Y la realidad es que en esta Comunidad va a haber un Gobierno fuerte y sólido para los próximos cuatro años, que, además, va a actuar con eficacia, va a gestionar y defender bien los intereses de las personas de Castilla y León, de la gente: eso de lo que tanto habla usted y tan poco se preocupa, de la gente, mejorando los servicios públicos, superando los retos económicos y afianzando la recuperación para aumentar la cohesión territorial. Señor Fernández, para concluir con usted en esta primera intervención, reflexione, pero hágalo de verdad.

Señor Igea, a usted también le pido que reflexione y que acepte su realidad, su realidad inevitable y fatal, su soledad, su irrelevancia política. La realidad es la que es. No cambia porque usted la tergiverse, no cambia porque usted se invente sus relatos, esas crónicas taurinas de las que me han hablado. ¿Por qué ha llegado usted y su partido a esta situación? (Hagamos una reflexión). Porque usted dinamitó un pacto de Gobierno que funcionaba correctamente... [aplausos] ... y lo hizo para garantizarse su supervivencia política, porque usted solo se preocupa de usted; del servicio honesto a las gentes de esta tierra, eso para otros.

Podía haber seguido los pasos de Aguado en Madrid: salir por las bambalinas del escenario discretamente. Pero no, usted es de los que saltan al precipicio; y ahí es donde ha acabado usted, su partido y unos cuantos compañeros de su partido que no merecían ese final. Fíjese, lo ha dicho, pero lo ha recitado hasta la saciedad en la precampaña y en la campaña electoral: la mentira y la deshonestidad no podían ser premiadas y debían ser castigadas. Son sus palabras, señor Igea. Y Castilla y León ha hablado y han castigado con contundencia la mentira y la deshonestidad. [Aplausos]. Por eso, a usted le han dejado donde está: solo, señor Igea, usted está solo.

Señor Igea, todos los que le escuchamos ahora nos preguntamos: oiga, ¿pero ha asumido usted los resultados electorales? ¿Los conoce? ¿De verdad los conoce, señor Igea? Le voy a... a aclarar algunas cuestiones.

Mire, usted, como candidato de Ciudadanos a la Presidencia de la Junta de Castilla y León en estas últimas elecciones, ha hecho historia en la política de Castilla y León. Usted será recordado por darse el mayor batacazo electoral en Castilla y León; y fíjese que los hay gordos, y aquí algunos hay ejemplos claros. Ha perdido usted el 73 % de sus votos, ha pasado de 12 procuradores a 1. Usted, siempre usted, y solamente usted, señor Igea. [Aplausos]. Usted pedía un duro castigo para la mentira y la deshonestidad, y vaya si lo han hecho los castellanos y leoneses.

Y viene a darnos lecciones de pactos. Pero es que su política de pactos es hipócrita. Oiga, que su partido en el dos mil diecinueve pidieron y aceptaron los votos de Vox para gobernar ayuntamientos y Comunidades Autónomas en toda España. ¿Pero de qué me está hablando usted, señor Igea? ¡Ah!, bueno, que ahora se trata de cambiar el discurso sobre la política de pactos, porque como cada vez que hay elecciones o desaparecen o son irrelevantes, ahora en cada elección nos imponen el cordón sanitario, y se rasgan las vestiduras porque Vox va a formar parte del Gobierno autonómico en base al respaldo de las urnas. Esa legítima aspiración es la misma que ustedes, que usted tuvo en el dos mil diecinueve, y no me acuerdo que nadie les insultara por ello. A lo mejor alguien, pero, no, no me suena; se lo diría en privado.

Señor Igea, su lema de campaña fue "El valor de la palabra". Usted ha demostrado no tener ni valor ni palabra; y se lo digo mirándose a los ojos. Usted demostró no tener valor, porque apuñalar por la espalda a los socios de Gobierno, que éramos nosotros, y además éramos leales y cumplidores, no es de valientes, señor Igea. Necesitaba alguien que le garantizara esos ocho años que usted quería, que le garantizara su sillón y su micrófono, que es lo que le ocupa y lo que le preocupa, señor Igea. Y sus confabulaciones contra nosotros, sus socios, fracasaron, y el trece de febrero ya sabe lo que ocurrió: las urnas le colocaron en su sitio.

Y usted no tiene palabra, porque, fíjese -esto es muy importante-, en noviembre del diecinueve, refiriéndose al mal resultado electoral del señor Rivera, ¿se acuerda usted lo que dijo en El País? "Yo asumiría responsabilidades", refiriéndose a Igea, no... perdón, a Rivera, no a usted. En febrero del... del dos mil veintidós batacazo electoral suyo. Sigue pontificándonos, no cumple con su palabra, no asume ningún tipo de responsabilidad y, por lo que le hemos escuchado, me da la sensación que no tiene ninguna intención. Pues bien, ni valor ni palabra. ¿Qué es lo que representa usted, señor Igea? La traición, representa también la ambición y representa el bisagrismo.

Señor Igea, creer más o menos en las Comunidades Autónomas no impide a nadie formar parte de los Gobiernos autonómicos. Su partido propone eliminar las Diputaciones Provinciales y, que yo sepa, gobierna en varias de ellas con el Partido Popular. [Aplausos].

Señor Igea, que su partido quiera fusionar los municipios, aunque esta mañana he oído que hay otros partidos u otros gobiernos que pretenden eso, no... no creer en la libertad de vivir que tienen todas las personas, de vivir donde quieran, a mí eso no me parece oportuno. ¿Era tal vez por esa la idea, ese interés oculto de cerrar los consultorios en el medio rural a espaldas del Partido Popular? Claro, quitando los servicios públicos -y esencial es la sanidad rural- para estrangular la vida de los pueblos. Sobre este asunto, señor Igea, no más improvisaciones, no más frivolidades.

Y respecto de gobernar con los representantes que están en los Grupos Reformista y Conservadores europeos, si usted sabe que en toda Europa hay Gobiernos regionales de estas características, Gobiernos regionales y locales. Es más, sus socios europeos en Europa, el Grupo de los Liberales, Emma Bonino y los Socialistas, gobiernan en coalición con Salvini en... en Italia. Esa es la realidad.

Y lo que sí le voy a decir es que la Comunidad Autónoma de Castilla y León va a volver al Grupo Popular en el Comité de las Regiones, de donde nunca tuvo que salir; y solo la inocencia -la mía- y sus arteras artes es lo que consiguió llevarlo al Grupo de los Liberales.

Señor Igea, la democracia consiste en escuchar siempre el mandato de las urnas. Por eso, el trece de febrero -están bien claras las conclusiones- el Partido Popular fue el más votado; y también nos dijeron, me hubiera gustado gobernar en solitario, pero que teníamos que llegar a grandes acuerdos. ¿Es malo escuchar a la gente, señor Igea? ¿Es malo llegar a un Acuerdo de Gobierno fuerte, sólido, para cuatro años con la formación Vox? Estamos cumpliendo la voluntad de la gente, de toda la gente, esa de la que tanto hablan algunos que le acompañan, y que tampoco le hacen caso. Y eso es lo que hemos hecho.

Fíjese, un Gobierno con grandes acuerdos va a afrontar esta legislatura. Un Gobierno fuerte y sólido capaz de afrontar los retos de nuestra Comunidad. Conformar un Gobierno de mayoría amplia, un programa centrado en los problemas de la gente, desde la moderación, también desde el diálogo, desde el pacto. No sé qué es lo que le molesta a usted de esto.

Finalizo con usted, señor Igea. He aguantado tres meses -algo más de tres meses- de insultos, de vetos, desprecios. No va a conseguir que baje a la charca infecta y pestilente donde se juega su discurso político. Ha quedado usted a la altura de Podemos, tanto en representación como en histrionismo; son buenos compañeros de viaje. A usted seguro que le hubiera gustado otro relato, pero esta es la realidad, la única realidad, y no otra.

Señor Igea, le voy a recordar aquí sus primeras palabras en este Hemiciclo. ¿Se acuerda usted? El día de la anterior investidura, hace casi tres años, citaba al maestro Delibes y recordaba las primeras palabras del... de la genial obra El camino. Se las recuerdo -se las recuerdo a todos- las palabras de la obra: "Las cosas podían haber acaecido de cualquier otra manera, y sin embargo sucedieron así". Señor Igea, sea usted como Daniel el Mochuelo: acepte la realidad inevitable y fatal que le espera, es decir, su soledad y su irrelevancia política. [Aplausos].

Señor Pascual, mi contestación, en tercer lugar, obedece al número de votos; interprételo no como una descortesía. Ya sé que, en fin, hay cuestiones que a veces se lo toman por lo tremendo, pero no... no es esa mi intención. Y agradecerle, bueno, las formas, porque yo creo que el rigor y la contundencia en la defensa de las legítimas aspiraciones de cada uno no tiene que estar reñido con la educación, con la corrección política y con la debida cortesía parlamentaria.

Yo creo que no es momento de enfrentamientos ni es momento de crispaciones. Ahora lo que toca es trabajar desde el acuerdo y la concertación para ganar entre todos el futuro de Castilla y León.

Mire, Ávila, como las ocho provincias restantes, es una provincia con la que estamos claramente comprometidos, al igual que -como digo- las ocho provincias de... de esta Comunidad; sin que tal compromiso suponga privilegios de unas sobre otras. Le pido que no se arrogue usted toda la representación de la provincia de Ávila, porque no la tiene; tiene uno de siete. Es más, en Ávila, las elecciones no las ganó su formación política, sino el Partido Popular.

Señor Pascual, desde el máximo respeto a sus votantes, le tengo que recordar algunas cuestiones. No entendí por qué no se presentaron en la primera reunión de... de diálogo, no lo entendí; no sé si por el orgullo de algún miembro de su formación política, por celos injustificados; pero, en cualquier caso, les privó una oportunidad de haber llegado a algún acuerdo o, por lo menos, haberlo intentado. Esa es la única verdad, y a partir de ahí cada uno tiene que sacar sus consecuencias.

Mire, lo que sí le tengo que decir es que Ávila, como lo decía antes de Soria o de León, tiene en el Gobierno de Castilla y León el principal impulsor, el principal compromiso con los... con las cuestiones que necesita la provincia de Ávila. Muchas de ellas están desarrolladas o están en curso desde la pasada legislatura: el Plan Territorial de Ávila -¿le suena, señor Pascual?-; las infraestructuras industriales y logísticas de Nissan -le suena, me imagino-; la carretera de Ávila a El Espinar; el polígono de Vicolozano; el mercado de abastos, el centro del antiguo matadero; las instalaciones deportivas, incluida la piscina climatizada; la nueva residencia de personas mayores; la unidad de radioterapia, señor Pascual; el nuevo helipuerto; las inversiones en los centros de salud de la provincia; las inversiones para la reforestación y la recuperación de las zonas afectadas en el incendio de Navalacruz, con el apoyo dado a los ganaderos.

Creo que usted, cuando decía que el incendio de la sierra de La Paramera, que se refería -entiendo- a este incendio, su cabreo me parece que no lo tenía que haber dirigido hacia el Gobierno de Castilla y León, sino hacia otro Gobierno, que fue, pero que todavía no le hemos visto.

Sin olvidar nuestro compromiso por las infraestructuras pendientes, que no voy a citar. Bueno, sí, sí, sí. Porque es que ha hablado usted del AVE. Es que su partido decía: su partido reivindicaba el AVE. Es que ahí me he perdido, porque no sé si, cuando hablaba del AVE que lo reivindicaba su partido, se refería a su partido cuando estaba en el Partido Popular o solo al Partido Popular cuando usted ya no estaba en el Partido Popular. [Aplausos]. Ahí me he perdido un poco.

En cualquier caso, sí que considero que, igual que en Soria y el Corredor Atlántico Noroeste, la conexión... el nudo con Ponferrada, tenemos que hacer un esfuerzo para que los abulenses tengan... no tengan que seguir soportando un viaje... los abulenses y los salmantinos no tengan que seguir soportando un viaje en tren a Madrid más largo que hace décadas.

Bueno, yo creo que sabe usted que las puertas de mi despacho van a estar siempre abiertas. Espero la misma reciprocidad por parte de su formación política. Construir desde la transparencia, también mantener la cohesión y, sobre todo, actuar con sinceridad y con lealtad. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Fernández Mañueco. Para un turno de réplica, tiene la palabra el señor Fernández Santos, por un tiempo de tres minutos veinte segundos.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

Sí. Gracias, presidente. Señor Mañueco, ¿qué voy a hacer con usted? Yo soy inasequible al desaliento con usía. Esta mañana decía usted que no demos por preconcebido ese pacto que, a mi juicio, es un pacto de la infamia. Pero, señor Mañueco, es que lo único que hay preconcebido aquí son sus réplicas; y yo se lo voy a decir hasta con cariño, para que luego no me tache de que hago aspavientos o palabras malsonantes. De verdad, por respeto a la Cámara de Representación Parlamentaria de Castilla y León, un presidente no debería venir con las réplicas escritas de casa, porque eso lo que le provoca es que luego hace el ridículo; porque el señor Tudanca ha dicho una cosa y usted le ha leído otra; porque yo le he dicho una cosa y me ha respondido otra; y porque el señor Igea ha dicho una cosa y usted le ha respondido lo que traía desde casa. No puede ser, de verdad. No, no, que sí. Es un desdoro para este Parlamento tener un presidente que trae las réplicas escritas de casa y que no es capaz de hacer una intervención respondiendo a aseveraciones de sus adversarios políticos.

Vamos con... con cifras concretas. Decía... apunte, por favor, porque creo... quiero que en la posterior réplica, usted, en vez de responder lo que le traen de casa, me responda a lo que yo le estoy diciendo. Usted ha dicho en su alocución anterior que somos una Comunidad Autónoma líder en varios sectores. Quiero que me diga en cuáles. [Murmullos]. Automoción. Con las subvenciones que usted dan a Renault. Aparte de la automoción, ¿en qué... en qué más sectores somos líderes? ¿En qué? ¿En echar a la gente de Castilla y León? ¿En echar a la gente de Castilla y León... [murmullos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías, señorías, por favor.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

... en expulsar a los jóvenes de Castilla y León? Bien. [Murmullos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señorías.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

Esa es la educación de la bancada del Partido Popular.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Por favor.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

Mire, señor Mañueco, le voy a dar datos concretos, porque dato mata relato: tasa de actividad en Castilla y León, 54,2 %, 4 puntos por debajo de la media de España; tasa de... tasa de empleo, 48,7 %, 2 puntos por debajo de la media de España; autónomos, 5.918 autónomos menos en los últimos dos años; autónomos, 281 autónomos menos en los últimos tres meses; despoblación, 11.779 habitantes menos en el último año; listas de espera, 245.118 personas están en lista de espera a día de hoy. Quiero que usted me diga qué soluciones concretas propone usted para acabar con todas estas cifras, que nos colocan a la cola en los indicadores económicos de nuestro país.

Después, esta mañana usted ha dicho literalmente, y además se ha jactado de que va a hacer servicios sociales más personalizados y defender a los colectivos más vulnerables. Pues mire, señor Mañueco, yo no sé si usted conoce el caso del niño Fabio, que es un alumno de un centro educativo de Tordesillas, de Pedro I de Tordesillas. Pues mire, ustedes llevan seis años incumpliendo una cuestión que se aprobó por mayoría en estas Cortes, y que decía que ustedes tenían que dotar de servicios de enfermería a aquellos centros con educación... con necesidades educativas especiales, que es, precisamente, lo que sufre una... un niño como este, al que están abandonando y desatendiendo. Su credibilidad, se lo vuelvo a decir, es como su oratoria: ninguna.

Después, que me miente usted a Marx. Señor... señor Mañueco, el mayor marxista que hay en esta Cámara es usted, que tiene unos principios y no le gustan... y si no les gustan, tienen otros. Precisamente por eso usted se ha prosternado y se ha doblegado a todas las exigencias de Vox. ¿Qué pasa con el... con el Artículo 473 o con el punto 473 de su programa político para estas elecciones, que decía que ustedes iban a hacer una ley para proteger a las mujeres víctimas de violencia de género? ¿Dónde queda eso? Sí, sí; sí, sí. Eso queda absolutamente diluido en la ley de violencia intrafamiliar que ha hecho Vox. ¿Qué pasa con el Decreto de Memoria Histórica, que había hecho el Partido Popular anterior a usted...


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Señor Fernández Santos, tiene que ir terminando, por favor.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

(Acabo... acabo ya. Acabo ya). Dos ideas: el Decreto de la Memoria... -que son, además, paradigmáticas y el ejemplo palmario de lo que es el Partido Popular y las ideas del señor Mañueco- ¿Qué pasa con el Decreto de la Memoria Histórica? Quiero que usted me diga hoy aquí si ustedes van a derogar el Decreto de la Memoria Histórica con esa ley de concordia que propugna Vox, que es el antónimo y la... y el oxímoron de la concordia. Y tercero, ¿qué pasa con la ley LGTBI, Ley de Igualdad y Diversidad Sexual (LGTBI), que era un acuerdo unánime de todos los grupos parlamentarios de esta Cámara? Quiero que usted me diga si esa ley se va a tramitar en esta legislatura. Muchas gracias.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Fernández Santos. Para un turno de réplica, tiene la palabra el señor Igea Arisqueta, por un tiempo de tres minutos veinte segundos.


EL SEÑOR IGEA ARISQUETA:

No se preocupe, señor presidente, no creo que lo vaya a gastar, porque la ocasión no lo merece, ¿eh? Mire, no me molesta su deshonestidad, porque la conocía, ¿eh? Conozco mejor, casi, que ninguno de los que están aquí; mejor o igual que alguno en su familia. Así que no me... no me ha sorprendido; la maniobra que ha hecho no me ha sorprendido. Está a su nivel, está en su categoría, donde está usted.

Sí que me ha sorprendido un poco más los aplausos enfervorecidos de parte de unos señores con los que he estado trabajando, y señoras, durante dos años y medio. He de decirles que eso sí me ha sorprendido, ¿eh?, sí me ha sorprendido, desagradablemente. Porque, miren, ustedes saben cuál es la verdad y ustedes saben la verdad de lo sucedido, lo sabe toda la Comunidad, ¿eh?

Y me gustaría poder acabar. (Creo que dijo usted que iba a volver el decoro. Parece que se ha perdido en alguna parte). Mire, lo que ha sucedido en esta Comunidad ha sucedido a la vista de todos. Nosotros hemos asumido nuestra responsabilidad desde el primer día. El primer día dijimos que el resultado era malísimo y el primer día puse mi cargo a disposición de mi partido. Eso es lo que he dicho, y eso es lo que hice, ¿eh? No hizo usted lo mismo: usted ha sacado dos veces el peor resultado del Partido Popular, dos veces, y no ha hecho tal cosa, ¿eh? Oiga, mire, no me acuse a mí de lo que no ha hecho usted, lo que no ha hecho usted; el peor resultado en porcentaje de votos y en número de votos.

Pero yo creo que eso no les interesa a los ciudadanos de esta Comunidad; lo que les interesa es qué va a ocurrir con sus derechos y libertades, qué va a ocurrir con la despoblación, qué va a ocurrir con la sanidad, qué va a ocurrir con todas esas cosas que afectan a la vida de los ciudadanos de esta Comunidad, ¿eh? Y ustedes, a ese respecto, no tenían ninguna urgencia. En esos 32 puntos del pacto, no hay ni una sola urgencia a ese respecto. En lo que ha dicho usted hoy aquí no hay nada nuevo, nada nuevo, ¿eh? Y, desgraciadamente, desgraciadamente, su partido político hoy da un paso en la peor dirección posible, en la dirección de equipararse a los peores pactos que ustedes criticaban, en separar a este país la izquierda y derecha, en abrir una sima entre dos bloques irreconciliables. Su partido hoy aquí, con la ausencia del señor Feijóo, hace lo peor que se podía hacer en la política española, lo peor: meterse en la trinchera contra otra, cargar con los populistas, cargar con la intolerancia y decir "estos son los míos".

Miren, ustedes no tienen el valor suficiente para cruzar al campo abierto, ustedes no tienen el valor suficiente para dar la mano al otro y ustedes, y usted concretamente no tiene ni siquiera el valor suficiente de decir la verdad. Es usted un mentiroso patológico, es usted un ser deshonesto. No le merecen ni sus compañeros de partido ni esta Comunidad ni su familia. [Murmullos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Gracias, señor Igea Arisqueta. Para un... un turno de réplica, tiene la palabra el señor Pascual Muñoz, por un tiempo de tres minutos veinte segundos.


EL SEÑOR PASCUAL MUÑOZ:

Muchas gracias, presidente. Señor Mañueco, le agradezco que tenga abierta su puerta. Ya sabe que yo siempre estoy abierto al diálogo. Y no me presenté por una sencilla razón: porque... por esas supuestas conversaciones que decían que yo había tenido a su espalda o maquinaciones políticas que sabe que no van conmigo. Y se lo puede... se lo puede decir el señor Tudanca o el señor Igea, o usted, o señor De la Hoz. Yo, de momento, soy un hombre de palabra, y lo que digo... y si no se fían, mal lo tiene usted, pero yo estoy aquí y la lealtad no la pongo... no tiene usted que dudar de mi... de mi lealtad en lo que yo digo. Y precisamente por eso. Si me van a acusar y... me van a acusar de mercadeo persa, me siento con usted y así no hay ningún problema. Y entonces, me acusa usted directamente de mercadeo persa o de que ando por detrás. Usted, si quiere, digo, que yo me siento con usted cuando quiera. Pero si me siento con otra gente y luego usted interpreta o dice que yo... Y eso es mentira. O sea, yo nunca he ido a espaldas de... de usted para nada, para nada, y que quede muy claro aquí, ¿eh?

Y yo creo que las preocupaciones de los ciudadanos en ese momento eran las cifras tan elevadas de contagios que tenía la Comunidad, la sobrecarga de trabajo que siguen soportando nuestros sanitarios, las malas condiciones en las que se ven obligados a trabajar médicos y enfermeras, las dificultades de muchos jóvenes de la región para encontrar trabajo en su tierra o la falta de empleo. Ya sé, si es que es lo único que tenemos, el Plan Territorial y Nissan. Y Nissan, venga, venga, venga dinero, venga dinero para Nissan. A ver si es verdad que es una solución para los abulenses. Ya sé que es eso. Si, vamos, es lo que único que tenemos, pues claro que me suena. ¿No me va a sonar?

No me ha dicho nada de lo que ha quedado pendiente y de las Comisiones de Investigación. Preocupaciones que siguen ahí y que muchas se han agudizado, porque llevamos con un Gobierno en funciones, y se lo dije antes y se lo digo ahora: yo creo que es una vergüenza.

Y vuelvo a decir lo mismo: estoy en este Parlamento para que Ávila se oiga, para que todo el mundo sepa las carencias que seguimos teniendo y las desventajas de los abulenses. Todas las decisiones que he tomado hasta ahora han sido pensando en los abulenses, de todos los abulenses, los que me votan y los que no me votan. Hablo de los problemas que siguen sin solucionarse en una provincia privilegiada, que desde un lado y desde otro han olvidado. Sus políticas han abandonado a los abulenses, y yo tengo la obligación y la responsabilidad de luchar para que eso cambie.

Después de dos años y medio viendo cómo funcionan las cosas, puedo decirle que mi voz y la de los abulenses seguirá siendo aún más reivindicativa. Seguiré pidiendo mejoras -¿cómo no?- en materia de comunicaciones, de empleo, industria, en sanidad, para que Ávila esté donde tiene que estar, que los abulenses tengan el mismo estatus que el resto de castellanos y leoneses, y tengan también las mismas oportunidades de futuro y de progreso.

Voy a seguir siendo muy reivindicativo con todo lo que se pueda hacer directamente desde la Junta de Castilla y León, pero también con aquellas materias que son competencia del Estado, y por las que ustedes también tienen que luchar, como, por ejemplo, la conexión de Ávila con la autovía A-6, la eliminación de los peajes -el lastre de muchos abulenses que diariamente se desplazan a Madrid a trabajar o a estudiar-, las mejoras en los trenes, tanto en frecuencias como en tiempo de viaje y condiciones de los mismos. Lo del AVE era porque yo decía que no confío en sus promesas. Si yo sé que es una promesa del Partido Popular de Ávila, pero es que, pues no lo cumplieron. ¿Cómo voy a confiar en las promesas del Partido Popular de Ávila, si no lo cumplen? Ya lo sé. Efectivamente, si usted tiene la razón. Correcto, toda la razón para usted. Una promesa que hicieron y que no cumplieron.

Por eso, estaré muy muy vigilante con la representación abulense en estas Cortes, de sus posturas ante las iniciativas que se puedan presentar de los diferentes grupos políticos, y que sean siempre en beneficio de la provincia; siempre que sean en beneficio de la provincia, siempre que sean en beneficio de la provincia, siempre que sean en beneficio de la provincia, vais a contar conmigo. No va a haber ningún problema. Porque si algo he visto hasta ahora es que muchas decisiones se toman en función de lo que se establezca en la disciplina del partido correspondiente. Disciplina que muchas veces va en contra de los intereses y de las necesidades... y de las necesidades, en este caso, de mis paisanos, de los abulenses. Muchas gracias.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Pascual Muñoz. Para un turno de dúplica, tiene la palabra el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

La verdad es que poco o nada me han sorprendido las intervenciones de los portavoces del Grupo Mixto. Son demasiado previsibles. Como ya he indicado anteriormente, hombre, la discrepancia, el tener legítimos planteamientos, la defensa apasionada, es perfectamente compatible con la educación, con el respeto, con la debida cortesía parlamentaria. [Aplausos]. Yo creo que no he hablado en lo personal de ninguno de ustedes; sí he hecho análisis político.

Mire, esto que hablaba de la educación, la cortesía, el respeto, es algo que no acostumbran a practicar algunos en esta Cámara. Pero, señor Fernández -voy por usted-, el dieciocho de enero usted publicó un vídeo para sus potenciales votantes, para que le conocieran lo mejor como candidato. Y en ese vídeo le hacía la siguiente y sencilla pregunta: "¿Qué es lo mejor para vivir... o de vivir en Castilla y León?". Y usted contestaba, literal: "Pues, sin duda, su gente, la calidad de vida y su tranquilidad". Y remachaba: "Es una Comunidad con una... con una maravillosa calidad de vida". Y repito, las palabras textuales del señor Fernández: "Castilla y León es una Comunidad con una maravillosa calidad de vida". Hombre, esto es curioso. ¿Dónde están sus exabruptos, su catastrofismo, su visión tétrica de Castilla y León, esos gritos de "esto se hunde"? ¿Dónde ha quedado, señor Fernández? ¿En qué ha quedado, después de 35 años de Gobiernos presididos por el Partido Popular, que según usted mismo aquí se vive muy bien? Señor Fernández, le queda demasiado falso y demasiado sobreactuado cuando está usted en ese papel de mezcla entre ángel exterminador y profeta del apocalipsis. [Aplausos].

Como le decía antes, su compañero en el Gobierno, credibilidad cero. Mire, su reflexión política es: si nos votan y nos sentamos en los sillones, las cosas van muy bien en Castilla y León; si no, esto es un desastre absoluto. Con esos tópicos tan rancios de la izquierda trasnochada. La política que yo voy a seguir es la de apoyo a las personas.

Me hablaba de Fabio, y me hablaba de las proposiciones no... no de ley de las Cortes de Castilla y León. En esa proposición no de ley se decía que se analizara caso por caso según los técnicos, y los técnicos de la Consejería de Educación han dicho que es mejor que tenga un educador. Yo, si quiere, le traslado todo el expediente, está a su disposición. Lo puede reclamar por la página de transparencia.

Cuando hablamos de cuestiones... Mire, si es que en el ámbito de empleo está mejor la media en Castilla y León que la media de España. Los datos de Castilla y León están mejor que la media de España; sí, señor Fernández. Y el producto interior... el producto interior bruto está también mejor, señor Fernández. Que sí, que sí, que se lo digo yo que sí, que es así. Mire, ¿y cuál son las políticas de su partido con la subida de... de la luz, de los combustibles o de la cesta de... de la compra? No me diga, como otros, que eso no son cuestiones que le interesen a las personas de Castilla y León.

Mire, el principal problema que tienen las personas en España y en Castilla y León es que ven la absoluta incapacidad al Gobierno de Sánchez para afrontar una salida a la situación económica que estamos viviendo. Y si algo han demostrado ustedes, especialmente ustedes, es su rabiosa incapacidad para gestionar nada de nada. Es más, la gente, la que usted cita tanto, y la que se siente aliviada cuando salen ustedes de sus responsabilidades públicas, porque jamás nadie les echa de menos cuando se van de un gobierno; qué curioso. [Aplausos]. Usted solo representa a la demagogia, y ese vídeo que yo le citaba... sí, sí, ese vídeo que yo le citaba decía que en Castilla y León hay calidad de vida y que hacemos aquí las cosas bien. Por tanto, en su fuero interno... sí, en su fuero interno reconoce que se tiene mucho que aprender de las políticas sociales y económicas que aplicamos en Castilla y León.

Señor Igea, le insisto, he aguantado hasta la tarde de hoy, durante tres meses, sus insultos, sus vetos, sus desprecios, sus faltas de respeto, en las redes sociales, en los medios de comunicación, aquí, en la tribuna. No lo entiendo. Si no lo ha conseguido antes, no se preocupe, no lo va a conseguir ahora, no me voy a bajar a esa charca que citaba antes. Yo creo que eso es a lo que aspira en estos momentos, señor Igea, y no lo va a conseguir.

Y me va a permitir que... que haga un pequeño... una excepción literaria. Mire, usted me comparaba hace unos días con un personaje de William Shakespeare, Ricardo III. Es verdad que el resultado final no es al que usted le hubiera gustado, ni el final de la obra, porque Ricardo III, con el que me comparaba, fallece y pierde el trono, y yo aquí sigo y parece que va por buen camino la Presidencia de la Junta. Pero no pude... [aplausos] ... no pude evitar acordarme de otra brillante obra de dicho autor, de una persona... de un personaje que me imagino en el que se sentirá usted profundamente representado, porque usted es el Macbeth de Castilla y León. Es usted el fiel reflejo de alguien cegado por la ambición desmedida, sirviéndose de las peores artes que se puede tener. Ya sabe que Macbeth utilizó la brujería, y a él le falló; y a usted también. Y me explico: usted nos intentó apuñalar por la espalda, a nosotros, sus socios, para conseguir su supervivencia política. Ya sabemos cómo terminó Macbeth, y usted es el fiel reflejo, el fiel espejo político en esta Cámara.

Repite como un mantra ese reparto de sillones y de puestos, por encima del programa. Señor Igea, usted estos últimos días ha estado en otro planeta, porque la prioridad, desde el minuto uno, que el señor García-Gallardo y yo, acompañados ambos por distintas personas de nuestros partidos, la prioridad ha sido el programa. Yo sé que eso a ustedes, a todos los que no están de acuerdo, les revienta, pero es el programa; lo primero que hemos hecho es hablar del programa. Como decía el señor Anguita: "Programa, programa, programa". Y lo que hemos firmado es el programa, señor Igea.

Es más, usted, hace tres años, de lo que hablaba antes que del programa era de los puestos: que si la Presidencia de las Cortes por aquí, que si la Vicepresidencia y la Portavocía por allá, que si unas Consejerías por aquí. No es usted el más indicado para hablar ni de sillones en lugar de programas.

Usted habla de la Vicepresidencia. Y, mire, yo le voy a decir, ya sabe el acuerdo: se ha hablado de diez Consejerías, lo he explicado esta mañana; y el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, además de ser el representante institucional del presidente, asumirá las siguientes funciones -aunque habrá un decreto que lo formalizará-: la primera, Presidencia de la Comisión Delegada del Gobierno; la segunda, la Presidencia de la Comisión de Simplificación Administrativa, incluyendo especialmente los procedimientos ambientales; la tercera, la representación suplente en el Comité de las Regiones; en cuarto lugar, el Comisionado con las Víctimas del Terrorismo; en quinto lugar, la representación institucional de las relaciones con distintas... órganos, instituciones propias de la Comunidad; también, la representación de la Junta de Castilla y León en la Fundación Castilla y León; y las competencias en materia de fundaciones, asociaciones y colegios profesionales.

Oiga, usted ha sido vicepresidente durante casi tres años. ¿Me puede usted decir qué firmó como vicepresidente? ¿Qué competencias tenía usted como vicepresidente? Si no tenía competencias y nunca firmó nada como vicepresidente, señor Igea. ¿Pero cómo viene a meterse en ese charco, señor Igea? [Aplausos]. Su función, su función, era una: enredar. es más, en la práctica, más parecía el consejero de Sanidad que otra cosa.

También se queja usted de tener poco tiempo para hacer Oposición. Pero, bueno, como usted dijo cuando volvió a ponerse la bata de médico, que estaba donde más se le necesitaba, y yo me alegro que usted cumpla con uno de sus deseos.

Insisto: si se repitieron elecciones, si se convocaron elecciones anticipadas, fue exclusivamente porque usted quiso lanzar al precipicio a su partido, a sus compañeros de partido y a sus socios de gobierno, que hasta ese momento habíamos sido leales y cumplidores. Y con eso estaba terminando con la estabilidad política en las instituciones de nuestra tierra.

La mentira y la traición han sido su principal seña de identidad en todos los partidos políticos donde ha militado, señor Igea, y también en su acción de gobierno como vicepresidente de la Junta de Castilla y León, la traición. Porque usted va a ser recordado por el hombre de las tres traiciones: en primer lugar, a las personas de Castilla y León con ese plan de desmantelamiento de los consultorios en el medio rural ya citado; en segundo lugar, nos traicionó a nosotros, sus socios de gobierno, queriendo pactar a nuestras espaldas un presupuesto basado en el chantaje y en las prebendas -parece mentira que usted no me conozca, según dice, me conoce mejor que mi familia, pues no se enteró-; y, en tercer lugar, quiso traicionar también y dinamitar un pacto de gobierno que estaba funcionando con corrección hasta ese momento, negociando en la sombra una moción de censura.

Fíjese -sí, sí, señor Igea-, usted ya ha pactado con radicales en esta Cámara. Sí. Sí, sí, claro que sí. Ha pactado con Unidas Podemos, y ha pactado con Unidas Podemos -sí, usted, usted, señor Fernández- para entregarle la Presidencia de las Cortes a la candidata del Partido Socialista. Fracasó. No lo consiguió, señor Igea. Qué desmemoriado es usted: votar a doña Ana Sánchez, a la que hace menos de un año usted dijo... usted la citó literalmente, la tildó literalmente de incapoz, y que tenía que dejar la Mesa de las Cortes y destinar... dedicarse a la comisión de festejos. Y luego la votó para ser presidenta de las Cortes, ni más ni menos. Continuaba tal vez ese pacto no nato de la moción de censura.

Por tanto, lecciones, las justas, señor Igea, sobre el valor de la palabra, porque su palabra ya sabemos lo que vale. [Aplausos].

Y para finalizar... para finalizar, en mi próximo Gobierno, como en cualquier Gobierno de coalición, habrá diferencias, incluso habrá grandes diferencias. Sería altamente preocupante que no existieran diferencias entre dos partidos diferentes, con programas diferentes, pero que hemos sabido aparcar esas diferencias para conseguir, para ofrecer lo mejor de nosotros mismos a las personas de Castilla y León.

Se acabó, señor Igea. Usted, como Macbeth, quedó prendado de la brujería y ejerció las peores artes para satisfacer, a cualquier precio, su delirio de grandeza, aun a riesgo de tirar al precipicio a sus compañeros, a su propio partido, al que ni ha respetado ni quiere, es lo que ocurre cuando uno ha estado en tantos partidos.

Todo acabó, señoría. Ya llega Macduff, puntual a su cita en este combate político, que le dejará solo e irrelevante estos próximos cuatro años. Tranquilo, Castilla y León seguirá creciendo, seguirá modernizándose, seguirá protegiendo a las personas de Castilla y León, pero usted no estará en esa tarea.

Señor Pascual, al margen de que haya manifestado que no vaya a apoyar mi investidura, le agradezco el tono de mi intervención. No me refería, cuando he hecho referencias a su partido, no me refería a su persona, me refería a algunos miembros de su partido. Pero, bueno, en cualquier caso, usted es un remanso en esas agitadas aguas del Grupo Mixto.

Mire, Ornua y Elgorriaga, son dos empresas adicionales donde ha estado presente, muy presente, la Junta de Castilla y León, y en algunos también el Gobierno de España. Yo creo que, bueno, coincidimos en muchas cosas y me quiero quedar con esta última intervención. Son medidas comunes las que podemos compartir. Pero yo le quiero decir que ambos queremos lo mejor para la provincia de Ávila. Lo decía antes, yo creo que uno puede defender perfectamente cualquier ciudad o cualquier provincia, aunque no haya nacido en él. Pero lo que sí le puedo decir es que este Gobierno, que empezará en unos días su trabajo, va a defender a Ávila y a ustedes. Y lo que sí lamento es que ustedes estén en la barrera y no estén en el terreno de juego. Lamento que por un error de cálculo de alguien de su formación, no de usted, de alguien de su formación, haya ocurrido eso. El nuevo Gobierno y los partidos que le sostienen (Partido Popular y Vox) se van a preocupar de Ávila, vamos a ser beneficiosos para Ávila, vamos a ser beneficiosos para Castilla y León, porque las dos cosas son importantes.

Y le vuelvo a reiterar: las puertas de mi despacho siempre van a estar abiertas, y confío, sé que lo voy a conseguir, tener esa reciprocidad por su parte. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco. Tiene la palabra el portavoz del Grupo Parlamentario Vox Castilla y León, don Juan García-Gallardo Frings, por un tiempo de treinta minutos.


EL SEÑOR GARCÍA-GALLARDO FRINGS:

Buenas tardes. Gracias, querido presidente de las Cortes, señor Pollán. Apreciado señor Fernández Mañueco, distinguidos procuradores en Cortes y demás autoridades, familia y amigos aquí presentes, quiero agradecer públicamente al señor Fernández Mañueco su presentación del Programa de Gobierno de coalición entre el Partido Popular y Vox, y su postulación como presidente de la Junta de Castilla y León tras el mandato inequívoco de las urnas.

El acuerdo alcanzado entre Vox y PP es una prueba de la madurez de ambas formaciones políticas, que han aceptado que las negociaciones no son un concurso para llegar a la victoria o a la derrota. La negociación de este Gobierno ha sido un éxito en el que los únicos vencedores han sido los ciudadanos de Castilla y León.

Señor Fernández Mañueco, le felicito por haber estado a la altura y haber reconocido, pese a las grandes presiones que ha recibido, el lugar en el que los ciudadanos nos han colocado, ni más ni menos.

Puede estar usted tranquilo. En esta ocasión podrá contar con un socio leal, con el que podrá discrepar, sí, pero cuya sinceridad podrá poner usted siempre a prueba sin temor a ser traicionado. [Aplausos].

La disposición a llegar a acuerdos y la conservación de los propios principios no son elementos incompatibles. Puede usted mantener sus principios, igual que yo conservaré los míos, lo cual no nos impedirá llegar a acuerdos en beneficio de los castellanos y los leoneses. Por eso le pido que se mantenga firme, que confíe en Vox, un partido coherente, serio y de fiar, un partido que respeta los acuerdos y la palabra dada.

Señor Fernández Mañueco, es para mí un honor poder formar parte durante los próximos cuatro y difíciles años, de esta coalición de Gobierno entre ambos partidos, en la que voy a participar en mi próxima condición de vicepresidente, junto con tres magníficos consejeros y nuestros respectivos equipos.

Acepto el reto de Gobierno con un profundo sentido del deber y de la alta responsabilidad que implica. La acepto agradecido a los ciudadanos de Castilla y León, que nos han votado en las elecciones; a mi partido, por su confianza en mí; y, por supuesto, a mis compañeros del Grupo Parlamentario Vox, por su valentía al encomendar su vida a este proyecto político, a pesar de las dificultades que comporta y la demonización a la que nos somete una parte de esta Cámara.

Acepto esta responsabilidad con una sola obligación: dedicar cada esfuerzo de mi ser a devolver a esta tierra y a sus gentes la grandeza y la prosperidad que merecen y que un día tuvieron. Son muchos los castellanos y los leoneses que miran al futuro con desesperanza y que anhelan un cambio de rumbo en el Gobierno de esta región.

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco, por entender la necesidad de llegar a este Acuerdo de Gobierno para dar una nueva esperanza a esta tierra tantas veces olvidada por tantos.

Señorías, la libertad no se regala, debemos cuidarla todos los días. Lo hemos comprobado durante estos dos años de pandemia, en los que los derechos y libertades de los españoles han sido injusta y gravemente cercenados. De ahí nuestro empeño por acabar con una anomalía propia de nuestro ordenamiento jurídico, que no tiene réplica en los países de nuestro entorno, me refiero a la llamada Ley de Violencia de Género y al Decreto de Memoria Histórica.

"Todos los españoles han de ser iguales ante la ley, sin discriminación por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social". Hoy existe legislación que viola este artículo. Por eso estoy particularmente orgulloso de formar parte de un Gobierno regional que ha dado un paso para proteger por igual a las víctimas de cualquier tipo de violencia intrafamiliar, independientemente del sexo de la víctima. Porque ¿qué sentido tiene que un huérfano de padre no tenga las mismas ayudas que un huérfano de madre? Ninguno, ¿verdad? [Aplausos]. Pues de eso trata, precisamente, esa ley de violencia intrafamiliar, de que cualquier tipo de víctima en el ámbito familiar tenga la misma protección, ni más ni menos. Esto es fácil de entender, y por eso las manipulaciones de la izquierda y de muchos de los medios de comunicación cada día tienen menos éxito.

En esa línea, señorías, y cambiando de tercio, la izquierda ha utilizado la historia para dividir y enfrentar a los españoles. Odian la reconciliación nacional y el abrazo que se dieron nuestros abuelos; por eso recuerdan el bombardeo de Guernica y olvidan deliberadamente el bombardeo de Cabra. [Aplausos]. La historia... la historia, señores socialistas, debe ser analizada por los historiadores, y cada español debe tener la oportunidad de aproximarse a nuestro pasado con la mirada limpia, sin necesidad de observarlo desde la óptica oficial establecida por el Gobierno de turno. La aprobación de un decreto de concordia es un primer paso que garantizará la libertad de todos para estudiar, interpretar, cada uno a su manera, la historia de nuestro país. Nunca más vamos a permitir que la historia sea utilizada con elemento de división.

Señor Fernández Santos, procurador en Cortes del partido comunista Podemos, nosotros no somos esclavos de ningún tipo de fanatismo histórico, como ustedes. Hace unos días, usted dijo en rueda de prensa que nosotros fusilaríamos a los miembros del Grupo Mixto si pudiésemos. Usted, que no tiene un pelo de tonto -de hecho, gasta una buena melena-, sabe que dijo una soberana estupidez. Nosotros no queremos fusilarle a usted ni ilegalizar a su partido, ni acudimos a sus mítines a tirarles piedra, porque no somos como ustedes. [Aplausos].

Señor Fernández Santos, lo que no está en mi mano es que usted deje de pegarse tiros constantemente en el pie. No es mi culpa que usted entrara en política para competir... para combatir a la casta y se acabara convirtiendo en ella. No es mi culpa que usted entrara en política para defender a los trabajadores y acabara convirtiéndose en el mamporrero de las élites globalistas que quieren destruir nuestro campo, nuestro tejido productivo, nuestra soberanía energética y nuestras tradiciones. No es mi culpa que usted decidiera condenar a nuestra ganadería intensiva del deterioro del medio ambiente, mientras calla contra sus verdaderos culpables. Por eso puede usted dormir tranquilo, en lo que a mí respecta. Lo que no puedo evitar es que usted y su partido sigan cosiéndose el pie a balazos.

Además, si me permite, por la buena convivencia en esta Cámara, lo que sí le pido es que no se maten entre ustedes en el Grupo Mixto por dinero. Se lo pido de verdad, de todo corazón; no merece la pena, aunque ustedes dos estén enfermos de odio. Con la que está cayendo en España, creo que no les costará explicar en sus respectivos lugares de origen, al señor Igea y a usted, que pueden hacer sus respectivas labores parlamentarias con 100.000 euros al año entre los dos. [Aplausos].

Señor Igea, le deseo a usted mayor éxito como youtuber del que ha tenido como vicepresidente. Sin embargo, le auguro... [aplausos] ... sin embargo, le auguro un estrepitoso fracaso. Ya nadie le escucha, ya nadie le quiere; quizá sea por su mala relación con la estadística o por ser un enemigo de la verdad. Y recuerde esto: de tanto practicar la supuesta transparencia que usted tiene tan a gala, se ha vuelto usted transparente, es usted un fantasma político.

Los castellanos y los leoneses les han dado a ustedes un único procurador en Cortes; de doce, a uno. Creo que ya va siendo hora de que dejen ustedes dos de ir llorando por los pasillos de las Cortes, porque llorado se viene de casa. Y si no, que se lo digan al señor Tudanca, que estaba muy triste la noche electoral y, cuando se acordó de que entre todos ustedes se habían subido un 4 % el sueldo, volvió a recuperar la sonrisa. [Aplausos].

Señor Tudanca... señor Tudanca, usted le ha invitado al señor Fernández Mañueco a que volviera a mirar a Europa, y yo le pido a usted que haga, de verdad, lo mismo. Mire usted a Europa, mire lo que pasó ayer en Francia; es usted la señora Hidalgo, es usted el Hidalgo castellano, y yo le auguro un estrepitoso fracaso y que su partido, como ha abandonado a los trabajadores, a los obreros y a quien dice representar, está condenado a su desaparición. [Aplausos].

Ustedes... a ustedes se les llena la boca hablando de ideologías que niegan la humanidad, y, sin embargo, la vergüenza, de la que usted tanto habla en referencia a nuestro pacto, es la vergüenza de sus cinco procuradores en Cortes que deshumanizaron al señor Pollán negándole el saludo. Esa es la vergüenza que usted carga sobre sus espaldas. [Aplausos].

Señor Tudanca, usted ha dicho que yo era de esa España que madruga para volverse a dormir o alguna sandez de ese tipo. ¿Cómo tiene usted la santa vergüenza, si usted no ha trabajado en su vida, si usted no ha trabajado ni un solo día en el sector privado? Mire, señor Tudanca, entre usted, la señora Lastra, el señor Miquel Iceta, no han trabajado los mismos días que yo, con 31 años, en el sector privado; no ha cotizado un solo euro en el sector privado en su vida. Aplíquese el cuento, anda. [Aplausos].

Por fortuna, los castellanos y los leoneses pueden contar con un partido coherente, como es Vox, que en cuanto ha podido ha reducido de manera global un 25 % las asignaciones económicas de todos los grupos parlamentarios, entre otras medidas, provocando un ahorro de más de 300.000 euros al año a nuestros vecinos; un total de un millón y medio por legislatura. Unos vecinos que en estos tiempos están viviendo con tantas dificultades. Y ese ha sido solo el principio. En Vox, junto con el Partido Popular, hemos venido a la política a acabar con el gasto público superfluo; porque los españoles no se pueden permitir que se siga desperdiciando un solo céntimo de dinero público, que es sagrado, señor Tudanca.

Señorías, este acuerdo devuelve la esperanza a una parte relevante de la España olvidada. En España tenemos ahora una primera oportunidad en los antiguos Reinos de León y de Castilla para recuperar la ilusión de todos los españoles en su proyecto de vida en común. A quienes mucho se les concede, mucho se les exige. Toda España mira a Castilla y León, todos nuestros compatriotas vuelven sus ojos hacia nosotros para ver qué vamos a hacer en este Gobierno de coalición. No podemos defraudar su confianza, no podemos fallarles.

Tras tiempos de enfrentamientos entre españoles, alentados por el Gobierno socialcomunista, nuestra preocupación debe ser mirar al futuro, reconstruyendo todo lo que los demás han destruido. Ha llegado el tiempo de conformar una alternativa de Gobierno que destierre las políticas fracasadas que no funcionan en un mundo que está cambiando constantemente. La invasión de Ucrania, la crisis con Marruecos, el delirio climático y las ruinosas recetas de la izquierda nos confirman el camino que debemos seguir: el de las naciones fuertes, la soberanía, la igualdad entre españoles, la libertad y la prosperidad. Ha llegado la hora de la Agenda España de Vox, que tenemos el honor y la responsabilidad de empezar a aplicar desde Castilla y León, en la medida de lo posible, con la representación que nos han dado los ciudadanos de Castilla y León.

En cualquier caso, debe saber, señor Fernández Mañueco, que nuestros objetivos políticos como formación no quedan colmados con este pacto de legislatura y la integración de este Gobierno regional. Vox es el partido de la ley y el orden. Ningún partido ha defendido con tanto empeño el orden jurídico, con notables y recientes éxitos ante el Tribunal Constitucional. Por ello, desde el pleno respeto al Estatuto de Autonomía y a todo el ordenamiento jurídico vigente, sepan que nuestro objetivo político fundacional es y seguirá siendo, cuando tengamos la mayoría parlamentaria suficiente, en primer lugar, la devolución de competencias como sanidad, educación y justicia al Estado central, para después derogar el Título VIII de la Constitución Española. (Sí, no se rían tanto, lo haremos por los trámites legales, no como sus socios golpistas de Cataluña). [Aplausos].

La descentralización administrativa... -escuchen, escuchen- la descentralización administrativa, la vertebración del territorio, la reivindicación de la diversidad y la cercanía a los servicios públicos no requieren la existencia de 17 Parlamentos regionales, con su consecuente laberinto legislativo y sus fronteras inventadas. Son muchos los que aún no entienden la aparente e inexistente paradoja entre que pretendamos gobernar una Comunidad Autónoma y que conservemos la intención de derogar el Estado de las Autonomías. Para entenderlo, déjenme que les explique en qué tipo de España creemos en Vox.

En Vox creemos en una España unida y fuerte, frente a sus enemigos internos y externos; una España de las provincias, que escuche el grito de esa España silenciada a la que están dejando morir lentamente; creemos en una España en la que los españoles tengan en condiciones de igualdad los mismos derechos y los mismos deberes, independientemente de su sexo o lugar de origen.

En Vox creemos en una España que ponga a la familia en el centro de todas sus políticas y que apueste por la natalidad, porque una nación con familias fuertes es una nación fuerte, y una nación con familias débiles es una nación débil. [Aplausos].

Creemos también en una España orgullosa de su pasado y que mira con ilusión al futuro; una nación que abrace la vanguardia sin olvidar la tradición. Creemos en una España próspera, con una industria que vuelva a ser pujante, un sector primario fuerte y donde los jóvenes no tengan que marcharse fuera en busca de las oportunidades que aquí no encuentran.

Esa es la España por la que vamos a luchar y que inspira nuestra acción política también en estas Cortes de Castilla y León. Con la configuración actual del Estado y su reparto de competencias, Vox tiene el deber de concurrir a todas las elecciones que se convoquen, y la responsabilidad de gobernar en todas aquellas instituciones, como la Junta de Castilla y León, en las que a día de hoy se decide el porvenir de nuestros compatriotas.

El eje de nuestra acción política se basa en una premisa clara: los intereses de los castellanos y los leoneses, primero.

Primero, su seguridad material y su bienestar. Desde hoy, los castellanos y los leoneses tienen un Gobierno que trabajará intensamente por garantizar empleos estables y salarios dignos. Un Gobierno austero con lo superfluo, con el bienestar de los políticos y generoso con las cosas verdaderamente necesarias (50.000 euros por no hacer nada). [Aplausos].

En segundo lugar, su soberanía... en segundo lugar, su soberanía y el respeto por su forma de vivir. Hoy los castellanos y leoneses tienen un Gobierno que defenderá sus intereses en el marco de la Unión Europea, para frenar esta deriva destructiva que nos lleva a la ruina. Un Gobierno que apuesta por la reindustrialización y por sacar el máximo provecho a los recursos naturales que tenemos.

En tercer lugar, sus servicios públicos y su derecho a permanecer. Hoy los castellanos y los leoneses tienen un Gobierno decidido a dotar de las infraestructuras necesarias a todas esas provincias abandonadas. Un Gobierno que respete y garantice el derecho a las raíces, a permanecer, de todos aquellos sorianos, segovianos, zamoranos que quieren seguir el camino marcado por sus padres o abuelos, que puedan desarrollar su proyecto vital, formar una familia, allí donde han nacido. Y nada de esto tiene sentido si no defendemos a la familia como columna vertebral de nuestra sociedad.

Estos son los ejes de nuestro Acuerdo de Gobierno, de nuestro compromiso con los castellanos y los leoneses.

Señorías, en el marco de este Gobierno de coalición, Vox va a tener la oportunidad directa de ofrecer una alternativa patriótica y social a los problemas acuciantes del campo, la industria, los trabajadores, la cultura, el turismo y el deporte en Castilla y León. Durante las últimas semanas hemos estado en la tarea de diseñar los Equipos de Gobierno para las tres Consejerías asignadas a Vox durante el proceso de negociación reanudado tras el Pacto de Legislatura. Ha sido un proceso intenso y difícil por la responsabilidad con la que afrontamos esta etapa y por la valía de los numerosos candidatos que hemos considerado para cada uno de los puestos. Algunos partidos políticos han aconsejado más rapidez; sin embargo, la importancia de la misión que nos ocupa exigía afrontarla con la debida prudencia que ha guiado toda nuestra actuación. A diferencia de lo que han hecho otros partidos políticos en el pasado, nuestra actuación ha estado guiada en todo momento por la meritocracia y la búsqueda de los mejores.

Cabe recordar a estos efectos lo que dijo Pericles a los atenienses: "Nosotros no imitamos a nadie, porque somos un modelo para los demás". Lo hemos demostrado y lo seguiremos haciendo: en Vox no imitamos a nadie, porque somos un modelo para los demás.

Queridos Gerardo, Mariano y Gonzalo, gracias por asumir la responsabilidad de liderar cada una de vuestras Consejerías en el primer Gobierno integrado por Vox. Sois un ejemplo de lo que debe ser un buen gobernante: hombres íntegros, con capacidad de dirección y agudo sentido del bien común y de la justicia social.

Querido Gerardo, con grandes renuncias has aparcado temporalmente una prometedora carrera profesional para servir a tu Nación. Solo este gesto te honra, eres un patriota. Desde la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, tenemos a partir de ahora la responsabilidad de afrontar los acuciantes problemas que asolan a los campos de Castilla y León, protegiendo a nuestros productos frente a la competencia desleal extranjera. Además, según lo pactado, aprobaremos una ley de desarrollo y competitividad rural, como muestra de nuestro compromiso con el mundo rural y con sus oportunidades de desarrollo.

Por otro lado... [aplausos] ... por otro lado, desde la Comisión de Simplificación Administrativa tenemos la oportunidad de eliminar ese laberinto burocrático que tantas veces dificulta los quehaceres diarios de las buenas gentes del campo. Asimismo, Vox entra a este Gobierno con la voluntad de acompañar a los ganaderos en su tarea, ayudándoles a cumplir con la normativa, no persiguiéndoles y sancionándoles a la mínima. Vox sella así su compromiso irrevocable con la defensa de los intereses de nuestro campo.

Querido Mariano, tu dilatada experiencia en la Consejería que vas a liderar te convertía en el mejor consejero de Industria, Empleo y Comercio que Vox podía tener. Contar contigo para esta tarea es un verdadero privilegio. Nadie mejor que tú conoce el camino que debemos seguir para evitar el desmantelamiento de nuestra industria y atraer nuevas inversiones a Castilla y León. Tenemos también por delante la responsabilidad de defender a nuestros autónomos y proteger a los comerciantes, todo ello sin olvidar la muy necesaria revisión del modelo de políticas activas de empleo -que se ha demostrado ineficaz- y de la reducción de las subvenciones a los sindicatos y a la patronal: diálogo social, sí; diálogo social ultrasubvencionado, no. [Aplausos]. Vox confirma así su voluntad firme de consolidar un modelo productivo útil para empleadores y empleados, en busca del bien común para toda la Nación.

Y por último, y no por ello menos importante, querido Gonzalo, tu irrupción en la primera línea política ha sido la última muestra de la estrategia del consenso progre contra Vox: mutilar nuestras biografías para después manipularlas con el fin último de deshumanizarnos y convertirnos en objeto de odio de los violentos. Quieren que nos rindamos, que demos un paso atrás. No lo van a conseguir. Nuestro amor a España y a Castilla y León está muy por encima de su odio contra nosotros. Aunque ya te lo he dicho en los últimos días, permíteme desobedecer tu petición: te agradezco públicamente tu generosidad, asumiendo el cargo de consejero de Cultura, Turismo y Deportes. El viaje que emprendiste hace más de cuarenta años, en los ochenta, desde las antípodas ideológicas de Vox hasta tu incorporación al primer Gobierno regional del partido, es un valioso símbolo de lo que queremos reivindicar: la reconciliación nacional, el abrazo, el perdón y la concordia que vamos a elevar a norma. [Aplausos]. Todo ello sin olvidar lo más importante, lo verdaderamente relevante: tu vasta experiencia en defensa de la lengua española y tu protección durante décadas de nuestra cultura y tradiciones.

Señor Tudanca, lávese la boca, cuente hasta cien y váyase usted al rincón de pensar antes de volver a difamar a don Gonzalo Santonja. [Aplausos].

Querido Gonzalo, en nuestras manos está ahora dar una proyección nacional a nuestra cultura y tradiciones locales, aprovechando además nuestra riqueza patrimonial y natural para potenciar el turismo. Debemos fomentar también el deporte en Castilla y León, ofreciendo oportunidades de desarrollo a esta tierra y a sus deportistas. Con todo ello, Vox ratifica así su firme intención de constituirse como una alternativa patriótica y social que haga de la batalla cultural una de sus prioridades.

Señor Fernández Mañueco, la siembra que nos ocupa será larga y difícil. La cosecha final y completa no se llevará a cabo en los primeros cien días, tampoco se logrará en los primeros mil días, ni en la vida de este Gobierno; pero tenemos que empezar, hay que sentar las bases del cambio de rumbo. Empecemos, señor Fernández Mañueco, como dijo San Pablo a los romanos: "Gozosos en la esperanza; pacientes en la tribulación". Los problemas a los que nos enfrentamos no se prestan a soluciones fáciles ni rápidas, el éxito de esta empresa exige perseverancia y visión a largo plazo.

Sin reservas, reitero el apoyo del Grupo Parlamentario Vox a la investidura como presidente del señor Fernández Mañueco. Me comprometo también a desempeñar con lealtad el cargo de vicepresidente de la Junta de Castilla y León, guardando y defendiendo la Constitución y el Estatuto de Autonomía -incluidos sus mecanismos de reforma-, empleando en ello el máximo de mis facultades, con la ayuda del excelente equipo de patriotas que me acompañarán en esta alta tarea. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor García-Gallardo. Para contestar, tiene la palabra el señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Muchas gracias, presidente. Muchas gracias, señor García-Gallardo. Gracias por su intervención. Creo que es favorable a mi investidura, cosa que le agradezco.

Pero más allá del voto en sí, quiero agradecerle el tono personal que siempre... el buen tono personal que siempre ha presidido nuestras conversaciones. Aunque, como en todas las negociaciones, hay momentos complicados y difíciles, hemos sido capaces de superarlo en todo momento. Y quiero empezar... agradecerle el tono personal, y se lo traslado a todos los compañeros del Partido Vox.

Mire, somos partidos diferentes, representamos, desde luego, programas diferentes, y vamos a discrepar a lo largo de la legislatura en cuestiones estoy convencido que importantes. Pero, por encima de eso, yo con lo que me quedo es con el acuerdo que el pasado diez de marzo firmamos el Partido Popular y el Partido Vox: un Acuerdo de Legislatura, un acuerdo que permitía un Gobierno fuerte y sólido, que era lo que nos reclamaban todas las personas de Castilla y León.

Los ejes y las acciones que componen ese acuerdo son toda una declaración de intenciones. Por encima de nuestras diferencias y nuestras discrepancias, este pacto lo que buscaba es aunar voluntades y esfuerzos para garantizar una estabilidad política perdida en los últimos tiempos en Castilla y León. Un pacto que inspira en aquello que nos une por encima de las diferencias, por encima de lo que nos separa, ya que, de lo contrario, no hubiera sido posible si no el acuerdo.

Yo creo que tolerar las ideas de los demás no demuestra la falta de compromiso con tus propias ideas. Aquí hemos visto cómo este pacto es precisamente eso: usted pues quiere una Constitución sin Comunidades Autónomas, y yo creo profundamente en el Estado de las Autonomías. Pero eso establece la propia Constitución y el Estatuto de Autonomía de Castilla y León unos mecanismos de reforma -se lo trasladaba antes al señor Santos- y lo reitero ahora: es un tercio para iniciar la reforma; dos tercios de la... para aprobar la reforma, de las Cortes de Castilla y León; y, luego, la aprobación, por ley orgánica, en el Parlamento Nacional.

Pero yo creo que lo que hemos hecho, por encima de cualquier consideración y de valoración, es un ejercicio de responsabilidad para buscar lo mejor para nuestra tierra, para afrontar esa incertidumbre en la que nos encontrábamos en estos momentos en Castilla y León y en España, pero en Europa y en el mundo entero. Con este... con este acuerdo desde luego se neutralizaba cualquier opción de Gobierno compuesto por otros intereses que prefiero no mencionar, pero que no beneficiarían a nuestra tierra.

Es tiempo de generar confianza y credibilidad de la mano de la experiencia, y, por otro lado, con el aval que supone el respaldo mayoritario de los ciudadanos. El pasado trece de febrero pues el voto de todas las personas de Castilla y León convirtió en la mejor prueba de lo que usted dice, de lo que solicita la mayoría de la población: más economía, más crecimiento, menos ideología.

¿Pero qué esperan de nosotros las personas de Castilla y León? ¿Qué esperan de su próximo Gobierno? ¿Qué se espera de todos nosotros? Pues se espera sobre todo que seamos un Gobierno responsable y serio; que seamos buenos gestores y eficaces al mismo tiempo; que seamos capaces de ir más allá de la recuperación económica en momentos difíciles como los que pasamos; un Gobierno comprometido, que impulse la competitividad y que logre proyectar nuestra economía y nuestro empleo. Creo que un Gobierno debe ser sin duda el impulsor del desarrollo económico y social. En definitiva, nuestro... nuestro compromiso es el bienestar de la gente. Y qué mejor manera de hacer eso desde políticas económicas que respondan a la realidad. Y hacerlo también desde principios políticos y sociales en los que en esta tierra nos sentimos profundamente identificados.

La igualdad es el primero de los principios: la igualdad de todos. No hay ciudadanos de primera o de segunda en Castilla y León. Hay hombres y mujeres que aman a su tierra, que quieren seguir aquí y para los que tenemos que trabajar cada día hasta el último aliento. No hay igualdad con distinciones. Es más, la igualdad es el alma de la libertad. De hecho, no hay libertad sin igualdad. Y de eso sabemos mucho en Castilla y León, porque tenemos la mejor red de consultorios en el medio rural de toda España; tenemos los mejores servicios sociales y la mejor educación de toda España; una de las mejores Comunidades Autónomas, con un desarrollo en transporte importantísimo.

Y si la igualdad de oportunidades de todos los castellanos y leoneses no hubiera presidido nuestras políticas a lo largo de las últimas décadas, desde luego no hubiera sido posible. Y, sin duda, todas estas cuestiones de las que estoy hablando, de servicios públicos, de... de la vivienda, de transporte, de... de apostar por internet, todo esto nos hace únicos, y ser únicos nos permite que en cada rincón de esta tierra pueda haber una oportunidad, porque hay voluntad y hay actitud.

Nosotros apostamos por la libertad, y, cuando digo nosotros, me refiero a las dos fuerzas políticas que van a sustentar el futuro Gobierno. No puede haber libertad sin igualdad, no puede haber igualdad sin solidaridad, tanto en Castilla y León como en España. Tenemos la responsabilidad también, desde Castilla y León, de garantizar la unidad de España, porque el peso de nuestra historia sin duda es algo muy importante. Decía Gustavo Bueno que un español no puede ser neutral cuando se habla de España. Pues es verdad, ni usted ni yo en eso somos neutrales. Y nuestro Gobierno, mi Gobierno, tampoco va a ser neutral ante esa situación, va a ser un Gobierno entregado a la cohesión territorial, al equilibrio, a la integridad de Castilla y León, pero también al equilibrio, a la integridad de nuestra patria, de España.

Señoría, Castilla y León es demasiado grande para que pensemos en pequeño. Y pensar en grande implica crecer. Y, para crecer, es necesario que la economía crezca; y la economía se basa en la confianza que podemos trasladar en los empresarios... a los empresarios, a los inversores y también a los trabajadores. Y este Acuerdo es la primera señal para generar esa confianza, que es fundamental. Porque los empresarios, donde ven certeza, donde ven seguridad, donde ven certidumbre, ahí es donde invierten. Y tenemos que hacer una apuesta también con incentivos y políticas económicas eficaces, que es como se crea empleo. Y el empleo fija población. Y si se fija población, se lucha contra la despoblación y se genera arraigo. Y el arraigo es el compromiso firme con esta tierra.

Pues esa debe ser nuestra actitud, y debe ser una actitud en todos y cada uno de los municipios de nuestra Comunidad Autónoma (2.248), en todas las provincias de nuestra Comunidad Autónoma (9), y en nuestra propia Comunidad Autónoma. Esa debe ser nuestra actitud, y ahí radicará la diferencia entre "estar" en Castilla y León o "trabajar por y para" Castilla y León.

El compromiso con esta tierra implica 24 horas al día y 7 días a la semana. No haga caso de la música de viento que a veces suena por estos lares. Esto es lo que ocurre. No se preocupe, señor García-Gallardo, saldremos adelante, con las condiciones necesarias para apostar por la modernidad, con la innovación, también con la digitalización. Es imposible progresar sin cambios y debemos liderar ese cambio que queremos en Castilla y León. Hablaba de digitalización, pero también de internacionalización, la industrialización y la reindustrialización de sectores emergentes -no voy a citar en aquello que el señor Fernández Santos no sabe, pero somos pioneros y punteros en muchas cosas-: estamos, desde luego, en una tierra que es privilegiada y, en este modelo que yo he explicado ahora y en el que coincidimos, esta es nuestra causa y con estos objetivos nos esperan.

Lo ha dicho usted: la expectación es alta, pero la fórmula es sencilla: trabajar de manera incansable por esta tierra. Pero que les quede a todos claro una cosa: hablaba usted de... de presiones; yo no he sido consciente de haber recibido grandes presiones, ni pequeñas presiones, ni presión alguna; lo que sí he sentido es la responsabilidad de la gente a la que tenemos que servir, los que han confiado en nosotros, pero también los que no han confiado en nosotros, porque esa es nuestra responsabilidad, y esa es nuestra tarea.

Y de lo que se trataba con el acuerdo entre Partido Popular y Vox, que culmina hoy en este Debate de Investidura, es un acuerdo "para" Castilla y León, "desde" Castilla y León. He escuchado a muchos políticos hablar de lo que tenía que ocurrir o no. Esto va de Castilla y León, única y exclusivamente. Es verdad que puede interpretarse como un modelo para otros lugares o para otras instituciones, pero hemos hablado única y exclusivamente de Castilla y León, de las políticas para Castilla y León, de qué es lo que tenemos que hacer "en" y "para" Castilla y León, "en" y "para" las personas de Castilla y León. Muchas gracias, señor García-Gallardo. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco. Recuerdo a los procuradores que al finalizar este debate se procederá a la votación. En representación del Grupo Parlamentario Popular, tiene la palabra don Raúl de la Hoz Quintano, por un tiempo de treinta minutos.


EL SEÑOR DE LA HOZ QUINTANO:

Muchas gracias. Presidente, señorías, candidato y presidente de la Junta de Castilla y León, me corresponde el extraordinario honor de representar a mi partido esta tarde para mostrar la posición favorable de los treinta y un componentes del Grupo Parlamentario Popular a la investidura de Alfonso Fernández Mañueco.

La verdad es que, después de lo que hemos escuchado esta tarde aquí, nos quedan algunas dudas o a alguno le podrían quedar algunas dudas sobre la razón que nos ha traído esta tarde aquí. Y es bastante sencillo de resumir: en primer lugar, porque nos vimos obligados a convocar elecciones; en segundo lugar, porque esas elecciones las ganó el Partido Popular; y, en tercer lugar, porque hemos querido dar estabilidad a Castilla y León. Ni más, ni menos. [Aplausos].

Efectivamente, este es un debate fruto de unas elecciones que nos hubiera gustado no tener que haber convocado, pero que resultó inevitable si lo que queríamos era preservar el derecho de los castellanos y los leoneses a que su futuro lo decidieran ellos mismos y no una colección de tránsfugas y desleales a esta tierra y a este Gobierno.

Y, ya ven, los castellanos y los leoneses tuvieron a bien decidir el pasado día trece de febrero que estas elecciones las ganara el Partido Popular y las perdiera el Partido Socialista, que estas elecciones las ganara Alfonso Fernández Mañueco y las perdiera el señor Luis Tudanca. Somos conscientes de que hubieran preferido que el Gobierno se decidiera de otra manera; de hecho, estuvieron trabajando duro para intentar conseguir una moción de censura nueva en esta tierra.

Pero, parafraseando a la ya ausente ideóloga socialista, señora Adriana Lastra, afortunadamente para los castellanos y los leoneses, a su pesar, hemos conseguido que la democracia se haya abierto paso, también en Castilla y León. Y esa democracia que se abre paso llevará dentro de unos minutos a Alfonso Fernández Mañueco a ser elegido presidente de Castilla y León, y a ustedes, esa misma democracia que se ha abierto paso, les llevará al lugar donde tan cómodos se encuentran desde hace ya treinta y cinco años: en la Oposición. [Aplausos]. Eso sí, cada vez más radicalizados, cada vez más exacerbados, cada vez más desquiciados, como hemos tenido la oportunidad de comprobar hoy.

Por ello, permítanle que comience... permítanme que comience pidiendo, ahora que ya han pasado las elecciones, ahora que ya hemos celebrado el Debate de Investidura y ahora que vamos a votar ya la Presidencia de Alfonso Fernández Mañueco, tengan, por favor, el respeto y la sensatez que hasta hoy no han demostrado en esta tierra y en esta Casa. Sí, respeto a esta Institución, respeto a quienes les representan, respeto a los legítimos representantes de los ciudadanos -a todos, a los que les gustan y a los que no les gustan-, respeto al Gobierno de Castilla y León y respeto, sobre todo, a los ciudadanos, a sus decisiones; respeto, en definitiva, a la democracia en Castilla y León. Un respeto que nosotros sí les tenemos y les vamos a tener siempre a ustedes, a todos ustedes, al resto de partidos políticos, por supuesto, porque los ciudadanos han querido que estén todos aquí representados, aunque sea de forma minoritaria. Un respeto que nace ni más ni menos que del acatamiento de la voluntad del millón doscientos mil ciudadanos que nos eligieron a los 81 que estamos hoy aquí para representarles y servir con orgullo a los ciudadanos de Castilla y León.

Fueron ellos los que quisieron que ganara el Partido Popular, como fueron ellos también los que quisieron que la política en esta tierra se continúe practicando, siempre y en todo caso, a través del diálogo y la negociación, pues eso y nada más que eso significa la ausencia de mayorías absolutas. Pero esa lógica que, como lo anterior, molesta solamente a quien perjudica, el Partido Popular como ganador de las elecciones -por cierto, cosa que el Partido Socialista fue incapaz de hacer cuando ganó las elecciones- abrió un proceso de diálogo con absolutamente todos los partidos políticos representados en esta Cámara; con todos, sin distinción alguna.

De algunos recibimos un respetuoso rechazo, de otros su indiferencia, otros ni siquiera se presentaron y otros aún se presentaron única y exclusivamente para insultarnos. Sin embargo, recibimos también de otros la voluntad de encontrarnos en forma distinta y con distinta intensidad. Nos hubiera gustado haber podido explorar antes de esta investidura otras formas de colaboración con otros grupos. Nos hubiera gustado escuchar sus propuestas, especialmente las de aquellos que han puesto hoy el grito en el cielo porque hayamos pactado con Vox.

Porque yo me pregunto: ¿qué es exactamente lo que ha hecho el Partido Socialista de Castilla y León para evitar este pacto? Absolutamente nada. ¿Cuál es la alternativa que ha ofrecido el Partido Socialista de Castilla y León a este pacto? Absolutamente ninguna. ¿Qué propuesta concreta nos han hecho para llegar a algún tipo de acuerdo en cualquier momento de la fase previa a este Debate de Investidura? Absolutamente ninguna. Estaban ustedes deseando que llegara este momento. Estaban ustedes deseando que pactáramos con Vox para, primero, intentar así blanquear sus pactos con terroristas y separatistas, tratando de ponernos a un falso igual nivel a todos. Pero, créanme, los ciudadanos, por mucho que se empeñe el Partido Socialista, son bastante más inteligentes de los que ello... de lo que ellos creen. Los ciudadanos en Castilla y León y en España tienen muy claro que no es lo mismo pactar con Vox que pactar con Bildu; que no es lo mismo sentarse en una mesa con Vox... [aplausos] ... que afirmar, como hemos tenido que escuchar en campaña, que debemos perdonar a los verdugos, mientras, eso sí, acercan presos al País Vasco y entregan las competencias de prisiones al Gobierno vasco. Estos ciudadanos saben perfectamente que no es lo mismo abrazar a una persona que estuvo quinientos y pico días en un zulo, como fue el señor Ortega Lara, que brindar con champán en Navidad con el señor Otegui. Lo tienen realmente claro. [Aplausos].

Y, por otro lado, estaban ustedes, señores del Partido Socialista, deseando este pacto para construir el absurdo discurso que hemos escuchado esta mañana al señor Tudanca de defensa de las libertades y así buscar algún argumento nuevo a su discurso de oposición. Porque no, el Partido Socialista no está pensando en el futuro de Castilla y León ni en lo que va a suceder en los próximos cuatro años; el Partido Socialista está única y exclusivamente pensando en cómo van a afrontar las próximas elecciones municipales, algo que algunos de su partido están... por lo que están realmente preocupados. Y en ese calvario que les queda a ustedes hasta las elecciones municipales, se les hace a ustedes, sin duda, más llevadero, más fácil, y por supuesto más cómodo, ubicarse en las trincheras en las que han decidido colocarse de esa imaginaria y absurda batalla ideológica, en vez de, como nos gustaría, como les gustaría a los castellanos y leoneses, estar sentados en la mesa de construcción del futuro de Castilla y León.

Por eso estaban deseando que pactáramos con Vox. Estaban ustedes deseando que además lo hiciéramos sacrificando algunos de los principios y valores que inspiran a esta Comunidad Autónoma. La mala noticia para ustedes ha sido que el acuerdo es impecable desde el punto de vista político y jurídico. Es absolutamente respetuoso con nuestra Constitución y con nuestro Estatuto de Autonomía. Por eso solo les queda ya apelar a los fantasmas de la realidad paralela que hemos escuchado esta mañana, de su discurso de antaño, el de los buenos, el de los malos, el de los rojos, el de los azules, el de los eslogan ridículas... ridículos de las manifestaciones de los años setenta. Les hubiera encantado que hubiéramos pactado abandonar la lucha contra la lacra de la violencia de género, pero, ya ven, hemos pactado no tocar la Ley de Violencia de Género. Por cierto, algunos se rasgan las vestiduras con eslogan feministas, defendiendo a las mujeres, acusándonos de machistas y no sé cuántas cosas más. Esta mañana... esta tarde, perdón, lo hemos vuelto a comprobar por parte del señor Tudanca.

Permítanme que les dé un dato que demuestra, más allá de las palabras grandilocuentes y la demagogia propia de la izquierda en esta Comunidad Autónoma, que en Castilla y León nos tomamos en serio la lucha contra la violencia de género. Les voy a dar los datos del Observatorio del Consejo General del Poder Judicial, Observatorio de Violencia de Género. Datos correspondientes al año dos mil veintiuno. ¿Saben ustedes cuál es la Comunidad Autónoma en la que menos denuncias hubo por violencia de género en relación con su población? Fue Castilla y León, fue Castilla y León. ¿Saben, por cierto, cuáles fueron las dos Comunidades Autónomas que lideran ese ranking, es decir, las dos Comunidades en las que más denuncias hubo por violencia de género en el año dos mil veintiuno? Casualmente dos Comunidades socialistas: Baleares y Valencia.

El Gobierno de Baleares tiene una Consejería llamada de Igualdad; una Consejería que, además de tapar el caso de las 14 niñas tuteladas por el Gobierno autonómico, que estaban siendo prostituidas con la anuencia, al menos, del Gobierno de la Comunidad, ya hemos visto que trabaja más bien poco por erradicar la violencia de género. Qué fácil es hablar y qué difícil es trabajar. [Aplausos].

Y qué decir... y qué decir de la Generalidad Valenciana. Mónica Oltra -la conocen-, consejera de Igualdad y Políticas Inclusivas. Qué nombre tan bonito para una Consejería que no ha evitado que en el año dos mil veintiuno, en la Comunidad Valenciana, se haya... se hayan presentado 22.000 denuncias por violencia de género. Como tampoco, por cierto, la señora Oltra ha evitado su imputación por encubrimiento en otro caso de abusos sexuales sobre una menor tutelada por la Generalitat; tampoco eso. Está muy bien... [aplausos] ... ponerse camisetas con mensajes impactantes, está muy bien gritar en las manifestaciones; pero, realmente -créanme- está mucho mejor y hacen más favor a las mujeres de nuestra Comunidad Autónoma si hacemos políticas serias, políticas responsables para que, sin demagogia, colaborar a hacer posible que Castilla y León -como le dije antes- haya sido la Comunidad Autónoma de España en la que menos denuncias por violencia de género haya habido en el año dos mil veintiuno. Ya ven, nosotros no nos dedicamos a gritar en las manifestaciones, nos dedicamos a trabajar para erradicar esta lacra.

Les hubiera gustado también que pactáramos prohibir la entrada de inmigrantes en Castilla y León; pero, ya ven, hemos pactado que la inmigración en Castilla y León sea legal y ordenada. ¡Qué barbaridad, ¿verdad?! Esta mañana, por ello... esta tarde -perdón-, por ello, el señor Tudanca nos ha acusado de racistas. Incluso se atrevió a decir: vamos a combatir con todas nuestras fuerzas a los fascistas; si algo necesita Castilla y León es ser tierra de acogida, no de odio, xenofobia y fascismo -dijo el señor Tudanca-. Todo ello porque hemos pactado nuestra voluntad de que la inmigración en Castilla y León sea legal y ordenada.

Miren, esto es el Programa de Gobierno [el orador muestra un documento] -lo de llamarlo "Programa de Gobierno" es una paradoja- del señor Tudanca, con el que concurrió a las elecciones. Página 183 del programa electoral del señor Tudanca: "Apostamos por una inmigración legal y ordenada". [Aplausos]. Pero si es lo mismo. Oiga, o sea, es decir, PP y Vox somos racistas y xenófobos por decir que la inmigración debe ser legal y ordenada, y el señor Tudanca y los señores del Partido Socialista están promoviendo que Castilla y León sea una tierra de acogida y no de odio y fascismo. Literal del señor Tudanca esta tarde. Esta es, y no otra, la hipocresía y la demagogia que hemos visto hoy, que hemos visto esta tarde y que, desgraciadamente, creo que vamos a vivir en esta Cámara en los próximos cuatro años.

Y ya les adelanto: ahí no nos van a encontrar, ahí no van a encontrar al Partido Popular. En nosotros sí podrán encontrar todos el entendimiento, la lealtad y la responsabilidad. Y con quienes nos ofrezcan la misma lealtad y la misma responsabilidad que nosotros ofrecemos hoy y ofreceremos los cuatro años de esta legislatura, estoy seguro que, pese a nuestras diferencias ideológicas, nos vamos a encontrar y podemos... podremos alcanzar acuerdos. Porque eso es, precisamente, y como les decía antes, lo que nos han transmitido a todos los ciudadanos de Castilla y León el pasado trece de febrero, también a ustedes: escuchar y dialogar, especialmente escuchar y dialogar con aquellos que no piensan igual que nosotros.

Sí, señorías, nunca en esta Cámara habían habido... habían estado representados tantos partidos políticos como lo están hoy. Con este escenario, el diálogo se convierte no en una exigencia política, sino en una absoluta necesidad para poder avanzar con firmeza. Con algunos -lo he señalado antes- estoy seguro que ese diálogo será fructífero; con otros, somos conscientes que rehúsan, como lo han hecho hoy, y rehusarán, el diálogo, porque prefieren el estancamiento, porque prefieren el bloqueo. De hecho, llevan trabajando bastante tiempo de forma muy dura para que Castilla y León quedara paralizada bajo esa estrategia desgraciada que vivimos la pasada legislatura del Partido Socialista de "cuanto peor, mejor".

Somos conscientes de que algunos no van a hacer nunca ni una propuesta ni una alternativa leal. Son los que ni están ni se les puede esperar, cuando de ayudar a Castilla y León se trata. Los que utilizan su poder en Madrid no para colaborar con el bienestar de los castellanos y leoneses, sino únicamente para castigarnos por no haber votado al Partido Socialista; son los mismos que siguen perjudicando fiscal y financieramente a Castilla y León, mientras -eso sí- se entregan en cuerpo y alma a otros territorios más afines o necesarios para su supervivencia política. Son los que nos hurtaron los 190 millones de euros del IVA, y que el Tribunal Supremo les ha obligado a pagarnos. Son los que siguen hurtándonos en el reparto de fondos europeos; de los fondos de la dependencia, también; de la cultura; y también, por cierto, de los fondos de lucha contra la violencia de género. De estos, muy poco podemos esperar. De los que quieren acabar con nuestro sistema educativo, muy poco podemos esperar. De los que castigan a nuestro medio rural, a nuestros agricultores, a nuestros mayores, hasta a nuestra lengua, de esos cabe esperar muy poco. De los que nos machacan a impuestos y de los que son incapaces de frenar la inflación en nuestro país, poco cabe esperar.

De estos, es difícil que recibamos la colaboración que necesita Castilla y León, que necesita nuestro proyecto para conseguir ese que se constituye como nuestro objetivo principal: hacer que Castilla y León siga avanzando, que siga creciendo, que siga creando empleo, que siga teniendo la mejor educación de este país, que siga teniendo los mejores servicios públicos de España y que consiga tener la mejor sanidad de nuestro país. Y todo ello con una fiscalidad justa y baja, que en este momento se sitúa como la segunda más baja de España, y seguimos, como anunciaba esta mañana el señor Fernández Mañueco.

Este sigue siendo nuestro objetivo, el objetivo del Partido Popular de Castilla y León, que no consiste ni más ni menos que en hacer posible que nos podamos sentir todos orgullosos de nuestros pueblos, orgullosos de nuestro medio ambiente, de nuestros mayores, de nuestros jóvenes. En definitiva, orgullosos de ser lo que somos. Orgullosos también de nuestra libertad, de nuestra historia y, por supuesto, muy orgullosos de nuestro futuro. Siempre, como dice el primer párrafo del Acuerdo de Legislatura que hemos suscrito con Vox -y leo textualmente-, "con pleno respeto al orden constitucional y al Estatuto de Autonomía, defendiendo la igualdad de todos los ciudadanos de Castilla y León, la igualdad social, laboral y de oportunidades". Y continúo leyendo textualmente: "La igualdad también entre hombres y mujeres". Que nadie espere otra cosa del Partido Popular, porque no lo va a encontrar; que nadie espere otra cosa del Partido Popular que no sea la defensa de Castilla y León y, por tanto y consecuentemente, la defensa de España, de la España de las Autonomías, de la España de la unidad, de la España de la diversidad y, por supuesto, también de la España de la solidaridad.

Pero también que nadie espere de nosotros que enfrentemos a nadie por cuestión de género. Nuestro objetivo es seguir avanzando... seguir haciendo avanzar a Castilla y León en igualdad, sin demagogia, sin utilizaciones partidistas interesadas, sin trampas y con respeto absolutamente a todos, y dialogando, por supuesto, con todos los que quieran dialogar con nosotros.

Y que nadie nos busque tampoco anclados en el pasado. Nosotros no estamos obsesionados, como otros, con revisar nuestra historia, ni mucho menos. Tampoco nos planteamos revisar ni juzgar nuestra historia de forma interesada, como hacen otros. Nosotros miramos al futuro, aprendiendo de lo mucho bueno que hemos hecho en el pasado y también, por supuesto, de aquello que hicimos mal. Pero no para reinterpretarlo interesadamente, sino, al revés, para aprender de ello y ser mejores de cara al futuro. Eso es lo que aprendimos en el setenta y ocho y eso es lo que nosotros denominamos "concordia en Castilla y León". [Aplausos].

Sí, así lo hemos hecho desde que empezáramos a gobernar en Castilla y León, allá por el año ochenta y siete, de la mano de José María Aznar en primer término, de Juan José Lucas después, de Jesús Posada, de Juan Vicente Herrera y ahora de la mano de Alfonso Fernández Mañueco, siempre mirando al futuro, sin complejos, diciendo la verdad y tratando a los castellanos y leoneses con el respeto que merecen de quienes -no lo olvidemos nunca- estamos aquí única y exclusivamente para servirlos.

El Partido Popular no está aquí para dividir, ni vamos tampoco a aceptar que nadie intente dividir a los castellanos y leoneses; estamos aquí para sumar, estamos aquí para multiplicar, estamos aquí para hacer crecer a Castilla y León, con voluntad integradora, constructiva, con lealtad y respeto, y sobre todo -repito, y no tengo problema en hacerlo- con diálogo, siempre con diálogo.

Vivimos tiempos difíciles, sin duda. La caótica situación política, social y económica que vive nuestro país, y que repercute notablemente en nuestra Comunidad, exigía de nosotros no parar la maquinaria pese a la convocatoria de elecciones. Y así lo hemos hecho.

Por cierto, para los que dicen que Castilla y León ha estado paralizada desde que se convocaran elecciones, 300 asuntos han sido aprobados por el Consejo de Gobierno, movilizando más de 2.500 millones de euros. Por cierto, también en el año dos mil uno... dos mil veintiuno, perdón, Castilla y León estuvo por encima de la media nacional en licitación de obra pública, y en lo que llevamos de este año, en el primer trimestre del año dos mil veintidós, también estamos por encima de la media nacional y, por supuesto, por encima del Gobierno de España en licitación de obra pública.

Y, en el ámbito sanitario, ¿recuerdan ustedes lo que tuvimos que escuchar de quienes, por cierto, presentaron una moción de censura en el peor momento de la crisis COVID, cuando nosotros convocamos las elecciones en Castilla y León, que si no nos... que si no nos preocupaban los enfermos, que si no nos preocupaba el COVID, que si adoptábamos... que si no adoptábamos medidas de protección por ganar votos? ¡Cuánto tuvimos que escuchar entonces! ¿Se acuerdan ustedes?

Pues bien, en diciembre, efectivamente, comenzamos a gestionar la sanidad sin el lastre que teníamos hasta ese momento. Y lo hicimos sin restricciones añadidas a las impuestas por el Gobierno de España. ¿Saben cuál fue el resultado de aquello? Castilla y León ha mantenido los niveles más bajos de ingreso y de uci de todas las oleadas que hemos sufrido. Y no solo eso, en este período resulta que en Castilla y León se ha... se ha incrementado la actividad asistencial, han aumentado, respecto del primer trimestre del año pasado, un 12 % las consultas hospitalarias y más de un 40 % las intervenciones quirúrgicas. Y en Atención Primaria han aumentado un 6 % el número de consultas, poniéndose en marcha un plan de consultas de tarde en el que han participado más de 300 profesionales.

Y fíjense, todo hecho... todo ello lo hemos hecho en un clima de diálogo constante y permanente con las organizaciones colegiales y sindicales de la sanidad pública de Castilla y León, recuperando, por cierto, un consenso que nunca debió de perderse en esta Comunidad Autónoma y que nunca va a perderse en esta Comunidad Autónoma en relación con la sanidad pública de Castilla y León. [Aplausos].

Pero bien, ya pasadas las elecciones, la situación especialmente económica que viven nuestras familias, asfixiadas por la descontrolada inflación que el Gobierno de España es incapaz de frenar ni tampoco, por cierto, de compensar como debiera, exige de nosotros que este nuevo Gobierno empiece a andar y lo haga de forma decidida. Tenemos la obligación de suplir la inacción, la indolencia del Gobierno de España ante la crisis económica. Tenemos la obligación de dar las certidumbres a los castellanos y leoneses que el Gobierno de España es incapaz de aportar. Y estamos dispuestos a hacerlo ya. De ahí la importancia de las medidas económicas que el presidente ha anunciado esta mañana. Actuaremos en ausencia del Gobierno de España, como ya estamos acostumbrados a hacerlo, y lo hemos hecho durante la pandemia.

Señorías, es evidente que este grupo, que me ha honrado dándome su representación en esta Cámara hoy, va a votar a favor de la investidura de Alfonso Fernández Mañueco dentro de unos minutos. Los castellanos y los leoneses han querido que así sea; los castellanos y los leoneses han sentenciado con su voto que esta tierra no la puede gobernar quien la desprecia, quien la humilla y quien la ataca, sino, única y exclusivamente, quien la siente, quien la defiende y quien la quiere. Ese es el mensaje que nos dieron el pasado trece. [Aplausos].

Los castellanos y los leoneses llevamos 35 años construyendo esta extraordinaria Comunidad en un modelo, sin duda, de éxito, que es fruto del esfuerzo principalmente de nuestros paisanos, pero también de las políticas que hemos puesto en marcha en el Partido Popular. Y ese modelo no les quepa la menor duda va a continuar. Nuestro modelo educativo, nuestro modelo social, nuestro modelo fiscal, nuestro modelo económico va a continuar como lo hizo la pasada legislatura, y lo hará ahora de la mano de otra formación política, que estamos absolutamente seguros será leal, como no lo fue el anterior partido con el que gobernamos en esta Comunidad Autónoma.

Tenemos un mandato claro, y tenemos claro el compromiso de cumplir ese mandato; y, además, hacerlo en la forma que los ciudadanos quieren que lo hagamos, y a eso nos vamos a dedicar en los próximos cuatro años: a dar soluciones, no a crear problemas; a pensar en los castellanos y en los leoneses y no en los intereses políticos de quienes aquí estamos representados.

Y concluyo. Concluyo con un... con dos agradecimientos. El primero, al Partido Popular, a todos sus cargos públicos, a sus alcaldes, a sus concejales, a sus diputados y senadores; gracias también por estar hoy aquí, por volcaros todos en la campaña electoral de Castilla y León; y gracias muy especialmente a todos los afiliados y simpatizantes del Partido Popular. Son ellos, sin lugar a dudas, los que dan sentido a este proyecto, los que con su trabajo desinteresado... [aplausos] ... nos han dado, nos dan y estoy seguro que nos darán la fuerza y el empuje diario para que, finalmente, hoy podamos estar aquí. Por eso les doy gracias, esperando que se sientan igual de orgullosos que nos sentimos los 30 procuradores del Grupo Popular que vamos a votar a Alfonso Fernández Mañueco a continuación.

Y el segundo agradecimiento, a todos los ciudadanos de Castilla y León, a los que votaron al Partido Popular y a los que no lo hicieron. Sinceramente les digo: trabajaremos duro para devolver la confianza que han depositado en nosotros, para dar cumplimiento al Programa de Gobierno que esta mañana ha presentado Alfonso Fernández Mañueco. Creo humildemente, como lo creen también la mayoría de los castellanos y leoneses, que no hay mejor persona que Alfonso Fernández Mañueco para liderar el futuro de Castilla y León, para asegurar su bienestar... [aplausos] ... y para seguir, en definitiva, construyendo Castilla y León. Sí, señorías, Castilla y León nos espera. El futuro nos espera. Y estoy absolutamente seguro que no vamos a defraudarle. Nada más. Y muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor De la Hoz Quintano. Tiene la palabra el candidato, señor Fernández Mañueco.


EL CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DE LA JUNTA (SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO):

Gracias, presidente. Sin intención de provocar una dúplica del señor De la Hoz, hacer unas breves reflexiones. Llevo toda mi vida afiliado al Partido Popular. Bueno, toda mi vida, no, pero dentro de unos días cumpliré 39 años afiliado al Partido Popular. Yo no concibo otro partido que no sea el Partido Popular, con respeto hacia todas las formaciones políticas. Es mi otra familia, la del Partido Popular. Mi madre fue la que me afilió; mi madre fue la que me llevó a los primeros mítines de la mano de Manuel Fraga, con 12 años. Yo afilié a mis hijas y también, bueno, pues les llevé a los mítines de Aznar y de Rajoy. Ahora ya van ellas cuando quieren.

Queridos procuradores del Partido Popular, con Raúl a la cabeza. Queridos miembros del Gobierno. Queridos cargos públicos del Partido Popular, con los presidentes del partido provincial a la cabeza; el secretario autonómico y todos los miembros de la Ejecutiva regional. Raúl, dirigiste con sabiduría, con inteligencia, la campaña electoral que nos llevó al triunfo, porque creo que el Partido Popular fue quien ganó las elecciones, a veces esta tarde he llegado a dudarlo.

Queridos miembros del Gobierno, muchas gracias, porque habéis estado a la altura en unas circunstancias muy... muy difíciles. Los que entrasteis desde el principio, el que se incorporó a mediados de diciembre. Hemos estado a la altura de estas circunstancias a la que la vida nos ha sometido a esta dura prueba.

Quiero decir también a los compañeros, miembros de... del Grupo Popular, a las personas que trabajan en la sede del partido, en... en el grupo, en todas las sedes del partido. Estáis aquí una muestra de todos los que empezamos en esta precampaña y en esta campaña electoral. Muchas gracias a todos por vuestro trabajo. Gracias también, especiales, a esas personas que con su sinceridad y con su consejo me guían. Gracias a los alcaldes y a los cargos públicos que defienden nuestras siglas en todos y cada uno de los 2.248 ayuntamientos que tiene nuestra Comunidad Autónoma.

Hoy comienza para mí una nueva etapa en mi vida política, y donde estará, como siempre, Castilla y León por encima de las siglas del Partido Popular.

A mi querida familia, quiero pediros comprensión y paciencia, serenidad y tranquilidad. Sé que cuento con los mejores aliados: con mis suegros -iba a decir mi suegra, pero, si no, se enfada mi suegro; con mis suegros-, que son los que me van a ayudar para llevar en casa mi tarea política de la mejor manera posible; bueno, en casa y fuera de casa.

Y también a mis amigos, que son un ejemplo de la pluralidad de... de este Gobierno de coalición. Gracias por estar ahí arriba, en la grada, arriba la nave.

Aquí he oído muchas cosas. Esta tarde se han oído de todo. Yo lo que quiero decir es que, cuando baje de este atril, las negativas las habré olvidado y las positivas las agradezco de corazón. En lo personal, respeto a todas y cada una de las personas que aquí están, que desempeñan su papel, que realizan su tarea; les respeto de verdad en lo personal. Y, por supuesto, pues en la política defendemos posturas distintas.

Y creo que es importante en este debate, para cerrarlo, insistir en que el Partido Popular es un partido fuerte, que hemos tenido el respaldo de las personas de Castilla y León en las urnas y que vamos a estar a la altura; vamos a hacer bien las cosas, todos vamos a hacer bien las cosas. Vamos a liderar el futuro de esta tierra, vamos a liderar el futuro que quieren la mayoría de las personas de Castilla y León; yo creo que eso es algo importante. Y poner por encima de cualquier cosa el interés general.

Hoy es once de abril; once de abril es el aniversario del nacimiento del poeta zamorano León Felipe, que -como saben todos ustedes- estuvo exiliado en México. Él mismo dijo: "... porque no es lo que importa llegar solo ni pronto, sino llegar con todos y a tiempo". Señorías, lleguemos todos y a tiempo por cada uno de los castellanos y por cada uno de los leoneses.

Y también parafraseando a Unamuno, que decía: "Procuremos más ser padres de nuestro futuro que hijos de nuestro pasado". Apostemos por ser padres del futuro de Castilla y León y de España. Muchas gracias. [Aplausos].


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

Muchas gracias, señor Fernández Mañueco. Señorías, concluido el debate, vamos a proceder en breves minutos a la votación, a los efectos del otorgamiento de la confianza por parte de la Cámara al candidato propuesto para la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

Tal y como establece el Artículo 26.3 del Estatuto de Autonomía de Castilla y León, la confianza se entenderá otorgada si el candidato obtiene el voto favorable de la mayoría absoluta de la Cámara.

La votación, en virtud de lo dispuesto en el Artículo 89.2 del Reglamento, será pública por llamamiento. El señor secretario nombrará a los señores procuradores, y estos responderán "sí", "no" o "abstención". El llamamiento se realizará por orden alfabético del primer apellido, comenzando por el procurador cuyo nombre sea sacado a suerte. Los miembros de la Junta de Castilla y León que sean procuradores y la Mesa de las Cortes votaremos al final.

Vamos a proceder al sorteo para determinar por qué procuradora o procurador comenzará la votación. [El secretario, Sr. Moreno Castrillo, procede a realizar el sorteo].

Señoras y señores procuradores, la votación se iniciará por el número 9, que corresponde a la procuradora Beatriz Coelho Luna. Comienza la votación, y a partir de este momento ruego que nadie entre o salga del salón de sesiones. Tiene la palabra el señor secretario Diego Moreno.

Votación SI/000001

[Los secretarios, Sr. Moreno Castrillo, Sra. Esteban Ayuso y Sra. Pinacho Fernández, proceden al llamamiento de los señores procuradores para que emitan su voto].


LA SEÑORA COELHO LUNA:

Sí.


LA SEÑORA CÓFRECES MARTÍN:

Sí.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ MENÉNDEZ:

Sí.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ SANTOS:

No.


LA SEÑORA FRUTOS RUBIO:

No.


LA SEÑORA GALLEGO GONZÁLEZ:

No.


EL SEÑOR GARCÍA FERNÁNDEZ:

No.


LA SEÑORA GARCÍA HERRERO:

Sí.


LA SEÑORA GARCÍA MACARRÓN:

No.


EL SEÑOR GARCÍA NIETO:

Sí.


LA SEÑORA GARCÍA RIOJA:

[No quedó registrado en la grabación].


LA SEÑORA GARCÍA SÁNCHEZ:

Sí.


EL SEÑOR GARCÍA-GALLARDO FRINGS:

Sí.


EL SEÑOR GAVILANES FERNÁNDEZ-LLAMAZARES:

Sí.


LA SEÑORA GÓMEZ URBÁN:

No.


EL SEÑOR GONZÁLEZ REGLERO:

No.


LA SEÑORA GONZALO RAMÍREZ:

No.


EL SEÑOR GUERRERO ARROYO:

No.


EL SEÑOR HERNÁNDEZ ALCOJOR:

No.


EL SEÑOR HERNÁNDEZ HERRERO:

Sí.


EL SEÑOR HERNÁNDEZ LÓPEZ:

Sí.


EL SEÑOR HERNÁNDEZ MARTÍNEZ:

No.


LA SEÑORA HERNANDO RUIZ:

Sí.


EL SEÑOR HIERRO SANTOS:

Sí.


EL SEÑOR DE LA HOZ QUINTANO:

Sí.


EL SEÑOR IGEA ARISQUETA:

No.


EL SEÑOR ILLERA REDÓN:

No.


LA SEÑORA JIMÉNEZ CAMPANO:

[No quedó registrado a la grabación].


EL SEÑOR MARTÍN BENITO:

No.


LA SECRETARIA (SEÑORA ESTEBAN AYUSO):

Repito el nombre, que no lo había dicho: Martín Benito, José Ignacio.


EL SEÑOR MARTÍN BENITO:

No.


EL SEÑOR MARTÍN MARTÍNEZ:

No.


EL SEÑOR MENÉNDEZ BLANCO:

Sí.


LA SEÑORA ORTEGA GÓMEZ:

Sí.


LA SEÑORA PABLOS LABAJO:

No.


EL SEÑOR PABLOS ROMO:

No.


EL SEÑOR PALOMAR SICILIA:

No.


EL SEÑOR PALOMO MARTÍN:

Sí.


LA SEÑORA PALOMO SEBASTIÁN:

No.


EL SEÑOR PASCUAL MUÑOZ:

No.


LA SEÑORA PELEGRINA CORTIJO:

No.


LA SEÑORA PRIETO SÁNCHEZ:

Sí.


EL SEÑOR PUENTE ALCARAZ:

No.


LA SEÑORA RANEDO GÓMEZ:

Sí.


EL SEÑOR REGUERA ACEVEDO:

Sí.


LA SEÑORA RODRÍGUEZ VIDAL:

Sí.


LA SEÑORA ROJO SAHAGÚN:

Sí.


LA SEÑORA RUBIO GARCÍA:

No.


LA SEÑORA RUBIO MARTÍN:

No.


EL SEÑOR RUIZ MEDRANO:

Sí.


LA SEÑORA SACRISTÁN RODRÍGUEZ:

No.


LA SEÑORA SÁNCHEZ BELLOTA:

Sí.


EL SEÑOR SÁNCHEZ MARTÍN:

Sí.


EL SEÑOR SANTOS REYERO:

No.


EL SEÑOR SANZ MERINO:

Sí.


EL SEÑOR SICILIA DOMÉNECH:

Sí.


EL SEÑOR SUÁREZ ARCA:

Sí.


LA SEÑORA SUÁREZ VILLAGRÁ:

Sí.


EL SEÑOR TUDANCA FERNÁNDEZ:

No.


LA SEÑORA VALLEJO QUEVEDO:

Sí.


EL SEÑOR VÁZQUEZ FERNÁNDEZ:

No.


EL SEÑOR BERZOSA PEÑA:

Sí.


LA SEÑORA BLÁZQUEZ DOMÍNGUEZ:

No.


EL SEÑOR BRIONES MARTÍNEZ:

No.


LA SEÑORA CALVO ENRÍQUEZ:

Sí.


EL SEÑOR CAMPOS DE LA FUENTE:

No.


EL SEÑOR CARRERA NORIEGA:

Sí.


EL SEÑOR CEÑA TUTOR:

No.


EL SEÑOR CEPA ÁLVAREZ:

No.


LA SEÑORA BLANCO LLAMAS:

Sí.


EL SEÑOR CARNERO GARCÍA:

Sí.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ CARRIEDO:

Sí.


EL SEÑOR IBÁÑEZ HERNANDO:

Sí.


LA SEÑORA LUCAS NAVAS:

Sí.


EL SEÑOR SUÁREZ-QUIÑONES FERNÁNDEZ:

Sí.


EL SEÑOR VÁZQUEZ RAMOS:

Sí.


EL SEÑOR FERNÁNDEZ MAÑUECO:

Sí.


LA SEÑORA PINACHO FERNÁNDEZ:

Sí.


LA SEÑORA ESTEBAN AYUSO:

Sí.


EL SEÑOR MORENO CASTRILLO:

No.


LA SEÑORA SÁNCHEZ HERNÁNDEZ:

No.


EL SEÑOR VÁZQUEZ REQUERO:

Sí.


EL SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ:

Sí.


EL PRESIDENTE (SEÑOR POLLÁN FERNÁNDEZ):

¿Algún procurador o procuradora no ha sido nombrado?

El resultado de la votación es el siguiente. Votos emitidos: ochenta y uno. Favorables a la propuesta: cuarenta y cuatro. En contra: treinta y siete. Abstenciones: cero.

Al haberse alcanzado el voto favorable de la mayoría absoluta de los miembros de las Cortes de Castilla y León, queda investido de la confianza de la Cámara don Alfonso Fernández Mañueco.

Esta Presidencia lo comunicará así a su majestad el rey, a efectos de su nombramiento como presidente de la Junta de Castilla y León, y al Gobierno de la Nación.

Señorías, se levanta la sesión. [Aplausos].

[Se levanta la sesión a las veintiuna horas treinta y cinco minutos].


CVE="DSPLN-11-000002"



Sede de las Cortes de Castilla y León